El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de cuatro a?os y nueve meses de prisi?n a un exdelegado de Dragados por estafar unos 450.000 euros a la empresa, facturando obras inexistentes en el Parlamento de Andaluc?a y el Hip?dromo de Dos Hermanas y desviando material de una obra a su propio chalet.

La Sala de lo Penal del alto tribunal ha dictado una sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, que rechaza el recurso de casaci?n presentado por J.M.B.B. contra la resoluci?n de la Audiencia de Sevilla que le conden? por un delito continuado de falsedad en concurso medial con un delito continuado de estafa agravada.

El Supremo confirma, adem?s, las penas de entre uno y cuatro meses de c?rcel para dos jefes de obra y otros dos subcontratistas.

Asimismo, la Sala ratifica que el exdirectivo deber? indemnizar a Dragados con 453.481 euros junto a otros condenados, si bien reduce la cuant?a que deber? abonar solidariamente uno de ellos, de manera que la pr?ctica totalidad del pago la asumir? el exdelegado.

El Supremo considera probado que el exdelegado aprovechando su "alto rango", "ide? y puso en marcha" un plan para que Dragados "realizara importantes desembolsos por obras en verdad inexistentes", que justific? con "contratos y facturas de suficiente solidez" que "superaron los mecanismos internos de control y fiscalizaci?n".

As? ocurri? con el Hospital de las Cinco Llagas, sede del Parlamento andaluz, cuya obra concluy? en 2004. Entre 2008 y 2009, el exdelegado "decidi? simular la necesidad de reparaciones urgentes" por "filtraciones en el s?tano" y otros problemas en los patios o los alcantarillados, unos trabajos "en verdad inexistentes" por los que Dragados pag? 220.889 euros y 54.362 a dos subcontratas.

El proceso se repiti? con el Gran Hip?dromo de Andaluc?a, en Dos Hermanas, también acabado en 2004. En este caso, en 2009 "simul? la existencia de desperfectos en los ba?os" para justificar unas obras que costaron 147.138 euros.

Otro enga?o consisti? en comprar en nombre de la empresa "suministros que se aparentaban como destinados a una obra" pero que "eran desviados hacia una obra particular", en concreto a una promoci?n de viviendas en San Roque (C?diz) cuya edificaci?n coincidi? con la época en que él y su mujer estaban construyéndose un chalet en Roche, en Conil de la Frontera.

"Con ?nimo de enriquecerse" carg? 31.092 euros en material de ba?o a Dragados después de que uno de los condenados, que era jefe de obra en San Roque, preparase "el soporte necesario para que los materiales figuraran como servidos en dicha promoci?n".

La sentencia admite que uno de los subcontratistas comunic? por escrito a Dragados "hasta en cuatro ocasiones" que "estaba firmando contratos que no se correspond?an con los trabajos que hac?a" y que el exdelegado le advirti? de que "en algunas facturas deb?a incrementar el 62 % de su importe".



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