La ANCconf?a en que el pulso con ERCmovilice en la Diada de Catalu?a el ala independentista m?s unilateralista para equiparar las cifras del a?o pasado (400.000 personas seg?n los organizadores, 108.000 seg?n la Guardia Urbana de Barcelona). La entidad llega a la manifestaci?n convocada para este domingo a las 17.14 horas en la avenida del Paral·lel de la capital catalana con la esperanza de que el choque pol?tico (y medi?tico) agite las calles tras el convulso oto?o de 2017 y el impacto de la pandemia de covid-19.

El 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès, no asistir? a la protesta porque alega que se convoca contra los partidos independentistas y las instituciones catalanas, y no contra el Estado. Su plante es definitivo, la situaci?n no se ha reconducido pese a las reuniones discretas entre la ANC y ERC a lo largo de la semana. El tono del conflicto se medir? en el discurso de la presidenta de la Assemblea, Dolors Feliu, que se estrena como dirigente en esta Diada, aunque fuentes de la entidad afirman que tratar? de esquivar la confrontaci?n para dar un mensaje "en positivo". La escuchar?n en vivo todos los 'consellers' de Junts, pero ninguno de ERC.

Los recelos de Aragonès con la ANC difieren de la confianza del 'president' en ?mnium Cultural. A las 12 horas, el presidente de la entidad Xavier Antich pronunciar? un discurso para recoser la unidad que contar? con la presencia de Borràs y el secretario general de Junts, Jordi Turull; mientras que por parte de ERC asistir? Oriol Junqueras y Marta Vilalta, y por parte de la CUP, Dolors Sabater y Carles Riera. Ser? el ?nico acto que consiga reunir las principales espadas del independentismo a lo largo de la jornada, en pro de los grandes 'consensos': la amnist?a y el referéndum.

Los dos frentes

Las relaciones entre las tres formaciones independentistas con representaci?n en el Parlament tampoco pasan por su mejor momento. Ni el el Govern, ni en la C?mara catalana. La divisi?n estratégica hacia la desconexi?n es absoluta, con la mesa de di?logo como ?nica propuesta encarrilada.

Junts espera sacar conclusiones del debate de pol?tica general que se celebrar? a partir del 27 de septiembre y conf?a en que Aragonès reconduzca tres asuntos conflictivos: que acepte la propuesta de alineaci?n de la posconvergencia en la mesa de di?logo, que avale la unidad en el Congreso de los Diputados y que impulse un nuevo ente de coordinaci?n para pilotar el 'procés'. ERC mantiene lo dicho: que el di?logo es entre gobiernos, que la unidad debe representar los 13 de ERC y los 4 de Junts, y que la direcci?n soberanista est? en manos del 'president'. As? que Aragonès se propone lanzar una amplia apuesta por la autodeterminaci?n, sin tener certezas de que sirva para evitar una ruptura.

La CUP ya est? en el chip de la oposici?n desde el flanco independentista. Lejos queda aquel apoyo a Aragonès para su investidura -previo al de Junts- y aquella negociaci?n presupuestaria, con intenciones de pactar, que termin? con un veto que permanece intacto para las cuentas de este pr?ximo a?o. Su objetivo no es otro que finiquitar la mesa de di?logo y elevar la presi?n para que se rompa la normalidad institucional.

De fondo, la interinidad en el Parlament, con Laura Borràs aferrada a un cargo que no puede ejercer al estar suspendida, a la que el PSC busca poner remedio usando el reglamento y con la esperanza de que aquellos que la ungieron, revoquen ahora la decisi?n. Este septiembre ser? clave para ver c?mo avanzan las conversaciones, lo que est? claro es que Junts opta por dejar la silla vac?a y que las funciones las asuma Alba Vergés (ERC) como vicepresidenta primera.



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