El Gobierno extender? su marcaje a las “tesis negociacionistas” que Vox buscar?a “imponer” al PP en sus gobiernos de coalici?n tras el informe de la ONU contra los planes de concordia en Arag?n, Comunidad Valenciana y Castilla y Le?n. M?s all? de la derogaci?n de las leyes de memoria democr?tica, cuestionada por contravenir tratados internacionales, desde el Gobierno advierten que también pondr?n pie en pared ante posibles recortes en materia de derechos LGTBI o contra la violencia de género. De hecho, tildan de “discursos negacionistas” que los acuerdos de coalici?n firmados por PP y Vox eludan referirse al concepto de “violencia de género” para diluir esta realidad con otros términos como “violencia intrafamiliar”.

El Ejecutivo ya activ? una comisi?n bilateral con la Comunidad de Madrid para negociar que se reviertan algunos de los cambios introducidos el pasado mes de diciembre en la ley trans y contra la LGTBIfobia. De no haber acuerdo en el plazo de seis meses previsto por la ley, se recurrir? ante el Tribunal Constitucional. Por el momento, seg?n fuentes de los ministerios implicados, no se han producido avances. La misma hoja de ruta se seguir? con los planes de concordia, activando la pr?xima semana la comisi?n bilateral con el gobierno de Arag?n previa al recurso de inconstitucionalidad.

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La consigna del Ejecutivo en esta contraofensiva pasa por tomar todas las medidas necesarias para “defender los derechos y libertades” ante lo que consideran una “amenaza”. Con todo, se reconoce que no hay constancia en estos momentos de que en otras comunidades se planeen leyes para la “revisi?n de derechos”, en l?nea con la Comunidad de Madrid. “El PP deber?a reflexionar, est? pagando un precio de sumisi?n a la ultraderecha que va m?s all? de las leyes de memoria”, argumentaba este viernes el ministro de Pol?tica Territorial, ?ngel V?ctor Torres, para alertar sobre la “amenaza de que crezcan visiones sobre que el totalitarismo debe vencer a la democracia”. El informe de la ONU ha cargado al Gobierno de razones para incrementar la presi?n sobre los populares con el objetivo de que se desmarquen de sus socios de gobierno.

La batalla cultural frente al revisionismo hist?rico y los recortes de derechos se ampl?a a diferentes frentes agitando otras banderas como la de la antitauromaquia. Este mismo viernes, el ministerio de Cultura que lidera el dirigente de Sumar Ernest Urtasun anunci? que el Gobierno suprimir? los Premios Nacionales de Tauromaquia. Una medida frente a la que diferentes comunidades auton?micas, incluida Castilla-La Mancha, gobernada por el socialista Emiliano Garc?a-Page, han reaccionado proponiendo asumir su organizaci?n.

En pleno ciclo electoral, los socialistas retoman su estrategia de campa?a de las generales. Ahora ya no solo con una denuncia genérica de los pactos entre PP y Vox, sino se?alando las medidas m?s polémicas de sus gobiernos de coalici?n y entrando de lleno en la batalla cultural. Con el recurso a instancias internacionales para amplificar la denuncia y legitimar los siguientes pasos ante el Tribunal Constitucional.

Agenda de movilizaci?n

A todo ello se suma el nuevo frente abierto por Pedro S?nchez, tras su decisi?n de continuar al frente del Gobierno, para combatir la “m?quina del fango” en la que incluye tanto a los populares como a la ultraderecha. Un debate sobre la regeneraci?n democr?tica que se est? utilizando como palanca electoral y en busca de una movilizaci?n del electorado progresista que en las generales ya impidi?, contra el pron?stico de todas las encuestas, la suma de una mayor?a por parte de PP y Vox. Por ahora, S?nchez no solo ha neutralizado el arranque de la campa?a catalana acaparando todos los focos, sino empujado la agenda desde la discusi?n sobe la corrupci?n o los pactos con los independentistas hacia el debate sobre “una gran causa nacional” para que “la mayor?a social se movilice”.

En este contexto, desde el Gobierno se ha urgido a la renovaci?n del pacto de Estado contra la violencia de género. Un planteamiento con el que se busca retratar a los populares si no ponen pie en pared contra lo que denominan el “negacionismo” de los de Santiago Abascal. La propuesta de la subcomisi?n en el Congreso para abordar su renovaci?n fue firmada por todos los grupos parlamentarios menos Vox.

El objetivo es renovar este pacto de Estado después de siete a?os desde que fue aprobado. Entonces no solo fue avalado por los grupos parlamentarios, sino también por todas las comunidades aut?nomas. Es en la ratificaci?n de este aval por parte de los gobiernos regionales en lo que pondr?n la lupa desde el Ejecutivo.

Violencias machistas

S?nchez ya avanz? tras reunir el pleno extraordinario del Observatorio Estatal de Violencia sobre la Mujer el pasado mes de abrir que era “una prioridad absoluta en el corto plazo” su renovaci?n. Asimismo, se refiri? a la necesidad de que “todas las administraciones reconozcan la violencia ejercida contra las mujeres por el mero hecho de serlo”. También sobre el hecho de que “no haya espacios para la duda, ni margen para otras lecturas que aten?an o diluyen las violencias machistas y que remiten a un tiempo afortunadamente superado”, en una clara referencia a los socios de gobierno del PP.

Otro de los asuntos que se prevén poner sobre la mesa son los derechos LGTBI. El acuerdo de coalici?n con Sumar incluye el impulso de un pacto de Estado por las personas LGTBI y para la erradicaci?n de los discursos de odio y discriminaci?n. Ya durante su discurso de investidura, S?nchez defendi? que es m?s necesario que nunca por “el recorte de derechos y de libertades” de los que acus? a los ejecutivos de coalici?n de la derecha con la ultraderecha.



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