Maniatados con bridas a la espalda, cinta americana en la boca para que no pudieran gritar pidiendo ayuda y después de haber sido amedrentados a golpes. En esas condiciones y temiendo por su vida, Juanfran y Rosario, el matrimonio asaltado en su chalet de San Antonio de Benagéber, se armaron de valor e hicieron frente a sus atracadores, dos encapuchados que iban armados con pistola y rev?lver – un tercero les esperaba fuera en un veh?culo listo para huir tan pronto como se hicieran con el bot?n-. “Los noté muy nerviosos y pensé que si no hac?a algo nos iban a matar”, confiesa a Levante-EMV este hombre de 47 a?os.

Juanfran relata que se abalanz? sobre uno de los asaltantes tras romper las bridas, al ver que ambos atracadores hab?an dejado las armas de fuego (en ese momento no sab?an que eran simuladas) encima de la mesa. “No me lo pensé, me hab?an dado una paliza y no sab?a que era lo siguiente”, explica, “si iba a acabar en el hospital que fuera defendiéndome”.

Mientras él derribaba e inmovilizaba al m?s grande, “ca? encima de él y le fracturé el fémur”, su mujer arremeti? con un cazo que ten?a a mano contra el otro, menos corpulento. Acto seguido la mujer cogi? una sartén y a sartenazo limpio logr? que el que estaba forcejeando con su marido depusiera su actitud y ambos huyeran con el rabo entre las piernas tras no lograr su prop?sito.

De hecho, tan solo se llevaron como bot?n 400 euros, dinero que portaba encima Juanfran, que les entreg? inmediatamente tras recibir un golpe con la culata de la pistola en la cabeza tan pronto como irrumpieron en la casa. “Le dije que no hab?a m?s dinero en la casa pero amenazaron con matarnos y me pusieron la pistola en la boca”, recuerda el asaltado.

El equipo de polic?a judicial de la Guardia Civil de Riba-roja ha detenido a seis personas por su presunto implicaci?n en este robo con violencia ocurrido el pasado 4 de marzo, como inform? este peri?dico. Entre los detenidos, cuatro hombres y dos mujeres, de entre 19 y 42 a?os, est?n tanto los dos atracadores que entraron encapuchados en la vivienda, como el tercero que les esperaba fuera y los inductores y colaboradores del asalto.

Enga?ados por una amiga

Al matrimonio lo que m?s le ha dolido, m?s incluso que los golpes y el miedo que pasaron, es enterarse que una amiga a la que conocen desde hace m?s de 18 a?os, que estaba en la casa junto a su hija de cuatro a?os cuando se produjo el asalto, es una de las detenidas por haber participado activamente en el robo, dando informaci?n a los asaltantes y asegur?ndose que iban a pillar a sus v?ctimas totalmente desprevenidos. “Nos dijo que ven?a a contarnos un problema y que ten?amos que estar los dos”, apunta Juanfran.

Durante el asalto a ella no le hicieron nada, lo cual ya les hizo sospechar, as? como el hecho de que hasta pasados diez d?as no volvieron a saber nada de ella.

En los poco m?s de diez minutos que estuvieron dentro de la casa, los atracadores también amenazaron con disparar al perro si no lo encerraban en una habitaci?n. Aunque portaban la cara tapada con pasamonta?as, durante el forcejeo Juanfran logr? arrebatarle a uno la capucha y verle el rostro, lo cual ha servido para identificarlo sin género de dudas.

Uno de los presuntos atracadores, que tuvo que recibir asistencia hospitalaria por fractura de fémur, ya se encuentra en prisi?n provisional por estos hechos tras ser detenido por la Guardia Civil en Toledo.



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