La justicia tiene recodos insondables. Hemos sido testigos en los ?ltimos tiempos de lo que son capaces de hacer los que manejan los hilos de las llamadas ‘cloacas del Estado’. Haberlas haylas. Han contado con algunos resortes de la justicia para poder llevar a cabo sus maquiavélicos planes. Ya saben: “Podemos hablar con la Fiscal?a para que nos afine el tema”, lleg? a decir un Ministro.

En esa cruzada contra Catalunya se llevaron por delante a Sandro Rosell, que de no haber sido presidente del FC Barcelona no habr?a vivido una de las mayores injusticias de este pa?s.

La jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela le mantuvo casi dos a?os en prisi?n y le deneg? trece veces la libertad provisional a Rosell por unos delitos que después se demostr? que no hab?a cometido.

Sandro fue detenido en mayo de 2017. En septiembre de 2016, también fue la Audiencia Nacional (la secci?n cuarta de la Sala de lo Penal) la que revoc? el auto del juez José de la Mata de archivar la querella de la empresa brasile?a DIS contra Neymar, sus padres, el FC Barcelona, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. ?Casualidad? No. Después de ver lo que hemos visto, no podemos ser tan naïf. En ciertos sectores judiciales de Madrid se dio la orden de atacar al FC Barcelona porque era una forma, también, de hacer da?o a Catalunya.

No vale la pena entrar a analizar ahora las consecuencias que tuvo que el contrato de Neymar acabara en la Audiencia Nacional. Ya est?. Lo que s? se puede poner en tela de juicio es lo que se viene juzgando en la Audiencia Provincial de Barcelona, donde la gran conclusi?n est? siendo que un futbolista acaba jugando donde él quiere. ?Hac?a falta tanto ruido e invertir tantos recursos para eso?

La gran paradoja de este caso es que se juzga un delito, corrupci?n entre particulares, que no existe en Brasil, donde se firmaron los contratos y se llev? a cabo la operaci?n. ?C?mo es posible que haya terminado en Barcelona? ?Por qué?

Y otra m?s. El papel de DIS en el caso Neymar (que compr? el 40% de los derechos del jugador) hoy ser?a ilegal, porque la FIFA no permite que fondos de inversi?n, que solo buscan el dinero f?cil, compren jugadores.

Si DIS se ha sentido enga?ado es al Santos a quien deber?a pedir da?os y perjuicios, no al Barça. Y en Brasil, no en Espa?a. Adem?s, pedir a?os de c?rcel para Neymar, sus padres, Rosell y Bartomeu, como si fueran vulgares traficantes de drogas, es una aberraci?n y una desproporci?n. Aun y as?, a ver qué sentencia dicta el juez José Manuel del Amo.



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