Fue un partido at?pico. Un percance ocurrido en la grada, el infarto grave de un espectador, obligo a suspender el partido durante m?s de media hora mientras era asistido por los médicos. Faltaban nueve minutos de juego y reglamento en mano se ten?an que jugar. El par?n sirvi? para que el aficionado gaditano,*después de minutos de angustia y temor, salvara la vida y se lo llevaran en ambulancia al hospital. *

El Barça parti? como gran favorito frente a un C?diz que sumaba cuatro derrotas sin haber conseguido marcar ning?n gol. Ten?an que ganar y ganaron. Otra cosa es que el juego de la primera parte quedara en evidencia. Sumaron tres puntos necesarios con profesionalidad y trabajo pero sin brillantez hasta que salieron los auténticos titulares. El Barça jug? condicionado por su partido de Champions del pr?ximo martes contra el Bayern, con excesivas rotaciones y un equipo de circunstancias.

La primera conclusi?n que podemos sacar de lo visto en la primera parte es que el equipo B no da la talla. Al Barça no se sientan bien las rotaciones. Lewandowski, Pedri y Dembélé son, hoy por hoy, imprescindibles. Marcan tanta diferencia que sus sustitutos quedan retratados. El once inicial se pareci? demasiado al equipo de la pasada temporada. Sin remate ni centro de campo mostraron un juego espeso y sin chispa. Era un Barça reconocible pero cojo en efectividad. Ferran Torres no aprovech? la oportunidad. Memphis confirm? mas voluntad que acierto. Fue tan plano y previsible el juego barcelonista, que nos llegamos a cuestionar si en el mes de septiembre son necesarias tantas rotaciones ante un partido europeo que es importante pero no decisivo.

Después de visto lo sucedido anoche en C?diz, Xavi puede hacer una reflexi?n. De cara al futuro y en este tipo de partidos en v?speras de Champions, quiz?s es m?s pr?ctico salir con los mejores, sentenciar pronto el partido y hacer cinco cambios en la segunda parte. Es una forma de sufrir menos y asegurar antes el resultado. Es la conclusi?n que se puede sacar después de que Lewandowksi marcara un gol y diera una asistencia en bandeja a Ansu Fati, que Dembélé volviera a demostrar su potencial con un gol de autor y que Pedri pusiera orden en el centro del campo. Est? claro que las rotaciones no son una soluci?n, con un recurso de limitadas *garant?as.

La lectura positiva es que el Barça acude a M?nich el martes con la moral a tope, una confianza notable en su juego y la ambici?n recuperada. Cuatro victorias seguidas en Liga por goleada y el buen debut ante el Vitoria Pilsen deben permitir al equipo de Xavi jugar sin complejos ni temores frente a los alemanes. Lewandowski ahora es de los nuestros.



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