De infarto. Cualquiera de los dos conjuntos podr?a haberse llevado el duelo en el tiempo reglamentario. Pero, creo que fue justo que todo se decidiera en 5’ de inigualable tensi?n. Y aqu? apareci? un Brown que, todo y haber hecho un buen partido, dej? sus mejores argumentos para el final. Mientras que a Lituania le quemaba la pelota en las manos, Brown la quer?a para él solito.

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Un recital de 2x2 del jugador americano y, sobre todo, una personalidad espeluznante se confabularon para que la selecci?n espa?ola se metiera en los cuartos del europeo. Un triunfo inapelable ya que los de Scariolo fueron m?s valientes y creyeron en todo momento, hasta en los minutos m?s complejos, que pod?an llevarse el partido. Puede que, hombre por hombre, los lituanos tengan m?s calidad.

Pero la ambici?n y agresividad suma, y mucho, en situaciones l?mite. Y los de Scariolo emergieron y mostraron su mejor imagen en el momento de la verdad. Un éxito que debe dar mucha confianza y moral a la selecci?n.

LA DEFENSA FUE DETERMINANTE

Lituania es un equipo mucho m?s poderoso f?sicamente. Adem?s, si les dejas hacer sus jugadores son capaces de desarrollar un b?squet vistoso y efectivo. Ante esta te?rica superioridad, la selecci?n espa?ola se centr? en mantener una defensa muy agresiva sobre el bal?n, buscando también anticiparse a cualquier intent? de sus rivales de dar balones a sus hombres altos. La estad?stica lituana de 20 balones perdidos lo dice absolutamente todo. También cabe destacar las alternativas defensivas que plante? el técnico espa?ol.

A veces utiliz? la zona pero, en especial, hizo mucho da?o a los lituanos la defensa mixta contra alguno de sus tiradores. En ocasiones, sobre todo en el tramo final del partido, el colapso de los lituanos fue monumental.

Menci?n especial para los hermanos Hernang?mez, D?az, y un Garuba muy activo y vers?til, que volvi? locos a sus defensores, m?s grandes, pero menos r?pidos e intensos. Decepcionaron muchos jugadores lituanos. La pareja Jokubaitis-Lekavicius estuvieron bien durante muchos minutos, pero desaparecieron cuando sus compa?eros m?s los necesitaron. Una victoria colectiva de la selecci?n espa?ola.



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