El joven coru?és Diego Bello fue abatido a tiros en las puertas de su casa en la isla filipina de Siargao el 8 de enero de 2020. Este 11 de octubre, 45 meses después de su muerte, el Juzgado n?mero 1 de la Corte Regional de Manila, la capital del pa?s asi?tico, empezar? el juicio contra los tres polic?as responsables de la muerte, sobre los que pesan los cargos de asesinato y manipulaci?n de la escena del crimen. Seg?n su versi?n, Bello era un narcotraficante y lo mataron en defensa propia, después de que les disparara; pero las investigaciones de otras agencias del Estado filipino consideran que los agentes lo mataron y después dejaron droga y un arma junto a su cuerpo.

De acuerdo con la familia del fallecido, que “celebra” el inicio del juicio, en la primera jornada “est? previsto que la acusaci?n presente pruebas contra los polic?as, y llame a declarar a los primeros testigos”. El t?o de Bello, Francisco Lafuente, se?ala que “después de tres a?os y medio de lucha para conseguir justicia para nuestro querido Diego, vemos m?s pr?ximo conseguirlo”, y agradeci? el trabajo de “mucha gente”, desde su “familia y amigos” a la embajada, grupos pol?ticos, medios y equipos deportivos.

En un primer momento estaba previsto que el juicio se desarrollase en un tribunal regional, pero la familia reclam? que se cambiase la sede a la capital del pa?s para evitar presiones y garantizar la seguridad de los testigos. También argument? que el cambio de sede supone “una mayor celeridad en el proceso judicial al contar con m?s medios los juzgados de la capital y una mayor facilidad para el seguimiento del juicio”.

Los tres acusados de la muerte se opusieron al traslado, afirmando que no exist?a “ninguna raz?n convincente” para que hubiese un juicio imparcial en el juzgado de origen, y que hay ninguna “manifestaci?n concreta de amenazas”. Antes de entregarse en febrero de este a?o, los tres imputados estuvieron diez meses en busca y captura. La familia recuerda que su entrega “fue objeto de una numerosa rueda de prensa del ministro de Justicia filipino, Jes?s C. Remulla, con la ins?lita presencia en la misma de los tres polic?as acusados”.



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