Hay dos detalles en el triunfo del Real Madrid ante el Celtaque explican la exuberancia y polivalencia de Eduardo Camavinga (Cabinda, ?ngola - 2002). El primero est? en la arrancada del primer gol de Asensio. Con apenas dos zancadas, devora el campo para iniciar la jugada triunfal. En la segunda parte anul? en un repliegue a Iago Aspas con una carrera y corte que levant? la ovaci?n del Bernabéu. El madridismo y Ancelotti est?n enamorados del mediocentro, ahora lateral izquierdo, pero que podr?a ser lo que se proponga, como "futbolista moderno que es", seg?n el italiano.

"Es un jugador con una calidad extraordinaria en las facetas f?sica y t?ctica. Puede jugar en cualquier sitio del campo: si lo pongo de mediapunta cumple, pero de central también. Tiene algo especial", explicaba Carletto tras el triunfo ante el Celta, donde el francés result? clave. El mapa de calor del internacional galo es un reguero rojo que se expande por toda la banda izquierda. Su despliegue fue gigantesco: realiz? 113 acciones y complet? seis de los siete regates que intent?.

113 - Eduardo Camavinga made 113 touches in the game against Celta Vigo, completing 6 of his 7 dribbles, both his most in a LaLiga game for @realmadriden. Intensity. pic.twitter.com/lqH1JWqvcJ

— OptaJose (@OptaJose) 22 de abril de 2023

Dupla letal con Vinicius

Camavinga tiene apenas 20 a?os, pero su nombre lleva resonando desde que ten?a 16, cuando debut? en el Rennes. En 2021, el Real Madrid acab? haciéndose con sus servicios, en otra operaci?n exitosa de captaci?n de talento joven. La f?rmula es de sobra conocida, como se ve en el campo cada partido, con la preponderancia de Vinicius o el acceso continuado al gol de Rodrygo. Pero el itinerario de Camavinga hacia la consolidaci?n es el relato de la consistencia en todas las facetas del juego.

Los reiterados problemas f?sicos de Ferland Mendy le abrieron una puerta por la banda y él la aprovech? consciente del overbooking que se genera en el centro del campo madridista. Con la acelerada respuesta que pide el Real Madrid, se le exigi? el m?ximo desde el principio y se mir? con lupa alguno de sus errores de concepto en una posici?n que ya tiene naturalizada. Junto a Vinicius, ha convertido el carril zurdo en un constante viaje de ida y vuelta que tendr? su gran examen ante el Manchester City en la Champions.

F?sicamente, Camavinga tiene actualmente pocos rivales que le puedan hacer frente. Su evoluci?n, en este sentido, ha sido brutal, tal y como evidencian algunas de sus ?ltimas im?genes publicadas en sesiones de trabajo. Este alto nivel de autoexigencia es el que le ha hecho pasar de suplente de lujo en el ciclo triunfal de remontadas en Champions de la pasada temporada a la primera fila de una batalla que requerir? al galo, adem?s, la mayor inteligencia t?ctica.

Eduardo Camavinga, en una veloz carrera durante el partido que enfrent? al Real Madrid y al Celta. | EUROPA PRESS
Un yudoca reconvertido al f?tbol

Camavinga es ya una apuesta de presente que se ha convertido en uno de los protegidos de Carletto. Cuando fich? por el Real Madrid le pidi? que aprendiese r?pido castellano y lo hizo. Todo esto a pesar de llegar al final del mercado, lo que siempre implica una mayor dificultad de adaptaci?n. Pero los antecedentes de su biograf?a le brindan una resiliencia que aplica en un par de pasos. Nacido en un campo de refugiados en Angola, a donde sus padres huyeron por la guerra del Congo, acab? creciendo en Lille (Francia).

Su vocaci?n temprana fue otra. "En mis inicios prefer?a hacer judo. Mi hermano lo practicaba. Me gustaba luchar, no en el colegio, pero s? lo hac?a en casa", reconoci? cuando bati? todos los récords de precocidad del Rennes. Sus padres, Celestino y Sof?a, le protegieron de ni?o, cuando vivi? un incidente que se ha transformado en una profec?a autocumplida. En 2013, un incendio asol? la modesta casa que ten?a la familia Camavinga y que ellos mismos hab?an levantado.

El incendio que marc? su vida

Lo perdieron todo, hasta documentos que le impidieron tramitar con facilidad su nacionalidad francesa. "Me acuerdo del incendio como si fuese ayer. Estaba en el colegio y por la ventana ve?a a los bomberos pasar. Al final de la clase, los profesores se acercaron a m? y me lo contaron. Nos vino a buscar mi padre y nos llev? hasta all?: todo estaba destruido", rememor? el jugador en una entrevista con el diario bret?n Ouest France.

En plena desgracia, su padre le dijo: "No te preocupes, vas a ser un gran futbolista y levantar?s esta casa". Una profec?a que con el tiempo se ha vuelto autocumplida. "Al principio me hizo gracia, pero con el paso de los a?os y tras record?rmelo varias veces, comprend? que aquello iba en serio", sentenci? un jugador diferente, convertido a ?dolo pop tras desfilar con Balenciaga, aunque sobre todo a mito revolucionario del madridismo moderno gracias a su entrega y versatilidad.



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