La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, recibir? este miércoles al presidente del Gobierno, Pedro S?nchez, en el palacio Chigi de Roma. Esta es la primera reuni?n bilateral que mantienen los dos dirigentes, representantes de dos grandes pa?ses del sur de Europa, tras las elecciones que pusieron fin al mandato del banquero Mario Draghi y condujeron al poder al Gobierno m?s derechista de Italia desde la Segunda Guerra Mundial, ahora hace seis meses. Desde entonces, los dos no han tenido graves enfrentamientos p?blicos —como s? la ultra italiana tuvo, por ejemplo, con el presidente francés Emmanuel Macron, por su pol?tica migratoria—, pero tampoco han dado muestras de mantener una sinton?a particular, reflejo también de su pertenencia a familias pol?ticas que est?n en polos opuestos.

Por el contrario, hasta la fecha, la de Meloni y S?nchez ha sido m?s bien una 'no historia', en la que ambos se han mirado de reojo, con frialdad y manteniendo las distancias. El espa?ol y la italiana "apenas" se han tratado, recordaban esta semana fuentes de la Moncloa, al a?adir que, cuando se han visto en alg?n Consejo Europeo, el trato ha sido "cordial", sin m?s.*

As? ha sido desde el inicio del mandato de Meloni. Tanto que, en el oto?o del a?o pasado, S?nchez tard? casi dos semanas en felicitarla por su victoria electoral, lo que no pas? inadvertido para la prensa italiana, sobre todo por la mediatizada relaci?n entre la italiana y el l?der de Vox, el ultraderechista Santiago Abascal. De hecho, Abascal ley? el resultado de esos comicios en clave espa?ola, y puso a Meloni como ejemplo del “camino” que, seg?n él, partidos como el suyo deber?an seguir.

Elogios para sus rivales

En el frente contrario, durante la campa?a electoral italiana, S?nchez se decant? abiertamente a favor del Partido Democr?tico (PD), rival del partido de Meloni, Hermanos de Italia. Tanto es as? que S?nchez incluso le dedic? un videomensaje de ?nimo al entonces jefe del partido, el democristiano Enrico Letta.*

Con Draghi las cosas fueron parecidas. “Europa necesita l?deres como Mario”, lleg? a escribir S?nchez sobre el banquero cuando, en plena crisis de Gobierno en Italia, Draghi se tambaleaba. “Sus reflexiones inteligentes, creativas y constructivas contribuyen siempre a que consigamos buenos resultados en un buen ambiente de consenso, tan necesario en estos tiempos de crisis”, a?ad?o el presidente espa?ol.

Con esto como punto de partida, la relaci?n con Meloni ha sido m?s distante. Tampoco ayud?, por supuesto, que la ultraderechista cancelara en diciembre, supuestamente a causa de gripe y fiebre (pero después de que el Ejecutivo espa?ol se negara a firmar un documento contra las oenegés que rescatan migrantes en el mar), su participaci?n en la cumbre Euromediterr?nea de Alicante. A?n as?, ambos han mantenido durante estos meses conversaciones telef?nicas sobre asuntos de pol?tica europea e internacional, como el sostén a Ucrania, sobre el cual la posici?n es m?s cercana.

Pr?ximos pese a todo

El asunto es que nada de esto ha enturbiado significativamente las relaciones comerciales y econ?micas entre los dos pa?ses. Por el contrario, Italia y Espa?a siguen teniendo un v?nculo bastante estrecho, que se asienta también en su cercan?a geogr?fica. Prueba de ello es que tan solo la semana pasada se celebrara la 19 edici?n del Foro de Di?logo Italia-Espa?a, con la presencia en Roma de la vicepresidenta y la ministra de Transici?n Ecol?gica, Teresa Ribera, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, junto al ministro de Exteriores transalpino, Antonio Tajani.*

El saldo de los intercambios comerciales, adem?s, es positivo para Espa?a. Por ejemplo, en 2021, las exportaciones espa?olas a Italia equivalieron a 26.560 millones de euros, mientras que las importaciones a Espa?a de productos italianos sumaron unos 22.600 millones de euros.*Situaci?n algo m?s asimétrica es, en cambio, la de las inversiones espa?olas en Italia que apenas alcanzan los 231 millones, mientras que las inversiones italianas en Espa?a suman unos 723 millones de euros.



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