La antigua propietaria de un bar de sa Llonja que acumul? numerosas sanciones de la Polic?a Local de Palma reconoci? este viernes en el juicio del caso Cursach que su local no tuvo ninguna licencia durante 26 a?os. La testigo, que regent? durante décadas el local Bruixeries, sostuvo que la Patrulla Verde actuaba por la influencia de Cursach, al que acus? de haber "arruinado a muchos bares". Aunque asegur? al principio que no sab?a por qué los agentes actuaban tanto en su negocio, que "siempre" hab?a cumplido con la normativa y pod?a abrir hasta altas horas de la madrugada, acab? admitiendo que el suyo estuvo abierto de forma "clandestina" entre 1983 y 2009 y que nunca lleg? a tener licencia para poner m?sica.

Los abogados defensores de los polic?as acusados mostraron una bater?a de documentos a la testigo, como vienen haciendo con los due?os de los negocios supuestamente hostigados, para poner de manifiesto que las intervenciones de los agentes estaban justificadas por la falta de permisos y las denuncias vecinales. La mujer acab? admitiendo que nunca se preocup? por saber qué tipo de permiso ten?a exactamente su negocio.

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La testigo sali? del juicio con una multa bajo el brazo. Cuando se marchaba de la sala tras declarar lanz? un gesto despectivo a Cursach, haciendo los cuernos con la mano mientras le miraba. El tribunal la hizo entrar de nuevo para reprenderla. "Es una persona que me ha hecho mucho da?o y no lo puedo ni ver", aleg? la mujer. "Que les den por el culo a todos", dijo cuando volvi? a salir de la sala. La magistrada Samantha Romero, que fue informada de este nuevo incidente minutos después, anunci? que le impon?a una sanci?n de 500 euros por esa "falta de respeto al tribunal y a las partes". Y anunci? que si se repiten episodios similares durante la vista oral incrementar? la cuant?a de esta multas.

Otro testigo que regent? un establecimiento en la zona de Santa Catalina dijo haber recibido "muchas inspecciones" de la Patrulla Verde y admiti? también que "es posible" que incumpliera la legislaci?n. "La interpretaci?n de la normativa es un poco confusa", consider?.

Subir?n y los testigos

Los abogados defensores est?n centrando también parte de su estrategia en demostrar la supuesta influencia del ex fiscal Miguel ?ngel Subir?n en los testigos del caso. El tribunal ha aceptado ya como prueba tres conversaciones telef?nicas entre estos testimonios y Subir?n, que les llam? entre 2020 y 2021 para preguntarles si declararon coaccionados y aport? las charlas en la causa abierta contra él en el TSJB. Los tres testigos aludidos han negado en el juicio estas llamadas y las defensas les acusan de haber mentido. La sala considera que debe tener en cuenta estas conversaciones para «valorar la credibilidad» de los testigos, seg?n anunci? la presidenta, Samantha Romero.

En otro frente, los abogados defensores cuestionan las identificaciones que en su d?a hicieron los testigos de los polic?as acusados. El letrado Gaspar Oliver, que representa a dos de los procesados, evidenci? que en las im?genes que se mostraron en instrucci?n sus clientes eran los ?nicos miembros de la Patrulla Verde que figuraban.

Adem?s, el tribunal considera que algunas de estas identificaciones se han convertido en una "prueba diab?lica", ya que en el juicio los testigos no han reconocido a los acusados pero tampoco han desmentido sus reconocimientos en instrucci?n.

Primer testigo protegido

En la sesi?n del viernes declar? por un primera vez una persona con la condici?n de testigo protegido. Lo hizo desde otra sala y con la voz distorsionada para no ser reconocido, pese a las protestas de las defensas.

El hombre se desdijo de su declaraci?n en la fase de instrucci?n en 2016, en la que seg?n consta en la causa asegur? haber trabajado para Cursach e hizo un extenso relato de diversas pr?cticas ilegales de polic?as y tratos de favor al empresario. "Nunca he trabajado en locales de Cursach. Se comentaba que la Polic?a le avisaba de las inspecciones, pero no lo puedo acreditar", dijo en cambio en el juicio.



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