Los parti? un rayo cuando menos lo esperaban. O s?. Porque los dos ?ltimos partidos del Real Madrid no llegaron al aprobado y dejaron la sensaci?n de estar ante un equipo asténico. En la capital, r?pidos en se?alar a cualquiera que no viva en el palco, atribuyeron el desacierto y el des?nimo a los ausentes, léase Benzema, con el cuerpo y la mente puestos en el Mundial.

Quiz? el ?ltimo del francés. O pr?cticamente seguro. Esa misma inquietud del veterano puede trasladarse a los neonatos, como Vinicius, siempre nervioso y provocador, que hace semanas que busca confirmar su sitio en la selecci?n brasile?a. Los unos por los otros dejaron la casa sin barrer mientras el Rayo Vallecano escrib?a un cap?tulo para su historia y sumaba tres merecid?simos puntos que muy pocos atribuyeron a su buen hacer.

Llevamos d?as hablando de despedidas. Gerard Piqué visibiliz? la suya con un video emocional marca de la casa -la suya, léase Kosmos- que nada tuvo que ver con el que le dedic? el club, soso a m?s no poder y que parec?a elaborado a toda prisa y con pocas ganas.

El Camp Nou volvi? a regalar a los no asistentes una estampa maravillosa, con m?s de 92.000 personas, que supone una prueba m?s de la confianza de la afici?n en el proyecto y el orgullo de pertenencia, un valor perdido en los ?ltimos a?os. El central realiz? ayer su ?ltimo viaje como jugador profesional del FC Barcelona y estoy convencida que en su est?mago se mezclaban algunos nervios mezclados con la buena digesti?n de su adi?s.

Atr?s quedar? la convivencia con el vestuario, de la que ya estaba bastante agotado, y las visitas a estadios rivales en los que le recib?an con hostilidad. Algo se gan? con alguna metedura de pata y algo se perdi? debido a todo ello. Piqué ha guardado la maleta de jugador y hace tiempo que ya ha empezado a pasear la cartera de presidente. Este ?ltimo desplazamiento cierra una etapa en la que deja atr?s el linimento y la taquilla y abre otra en la que se quedar? con bastante de lo disfruatdo, mucho de lo que querr? rehacer y poco de lo experimentado cerca del final, m?s all? de su barcelonismo fuera de toda duda.

Mientras ‘Geri’ se sub?a al avi?n, a Dani Alves le daban pasaje para Qatar. El brasile?o, que se entrena en las instalaciones del Barça, se ha ahorrado lo de no meter la pierna y el desgaste del d?a a d?a. Ganada tiene su convocatoria porque pocos hay de sus caracter?sticas, tanto en el césped como fuera de él. ?l no ha necesitado refugiarse en la ‘fatiga muscular’ de Benzema o en las ‘peque?as molestias’ de Memphis. Le ha bastado con gestionar bien sus horas postreras y proyectar una imagen de perenne compromiso.



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