M?xima tensi?n en Oliva, una ciudad de unos 25.000 habitantes entre Valencia y Denia -m?s cerca de la segunda-, hasta pasada la medianoche. En un complejo de cuatro estrellas cerca de la playa se produjo una reuni?n que podr?a -verbo en condicional al cierre de esta edici?n- cambiar la historia del f?tbol espa?ol. Las mejores jugadoras del pa?s con el CSD, y la Federaci?n de por medio.

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Empez? todo por la ma?ana. Aconsejadas por sus entornos, clubes y abogados -algunas mejor que otras-, veintid?s de las veintitrés futbolistas citadas -solo cay? Esther Gonz?lez por lesi?n, que ser? sustituida si nada cambia por la sevillista Cristina Mart?n-Prieto- decidieron acudir a la concentraci?n con la selecci?n. Pues entend?an que a pesar de que la convocatoria no se hab?a realizado en tiempo y forma seg?n la normativa de la FIFA, se expon?an a un elevado riesgo de sanci?n -retirada de la ficha federativa y multa econ?mica- si acababa prevaleciendo la Ley del Deporte. Ir para manifestar que no quer?an estar ah?, era la idea. Y as? lo hicieron.

Un grupo desde Madrid -que se concentr? por la ma?ana en el Hotel Madrid Alameda-, formado por las futbolistas que juegan en la capital y el cuerpo técnico encabezado por Montse Tomé, parti? hacia Valencia y luego a Oliva. Y el resto, desde Barcelona, Sevilla, San Sebasti?n y Manchester, se fueron directamente a la Ciudad del Turia, para unirse a la expedici?n en el Hotel.

También acudi? V?ctor Francos, presidente del Consejo Superior de Deportes, uno de los grandes protagonistas de la cumbre. A su llegada al Aeropuerto de Valencia fue claro: “Lo que pas? ayer fue inaceptable, as? se lo he transmitido a la Federaci?n. Sent?a que mi obligaci?n era estar a lado de las jugadoras para escucharlas y buscar soluciones”. Y se mostr? optimista, porque “sin optimismo, las cosas no salen bien”.

Arranc? el c?nclave pasadas las nueve de la noche, cuando llegaron las ocho futbolistas del FC Barcelona -las ?ltimas en hacerlo por un imprevisto en el vuelo-. Empez? con el propio V?ctor Francos, todas las jugadoras y el personal de la Federaci?n, entre los que estaban la seleccionadora Montse Tomé, Ana ?lvarez (directora de f?tbol femenino) y Rafa del Amo (vicepresidente de la RFEF). Después, el presidente del CSD quiso quedarse a solas con las futbolistas y Amanda Gutiérrez, la presidenta de FUTPRO, sindicato mayoritario.

Toma y daca, fue la t?nica de la reuni?n. Un pulso en toda regla. Las jugadoras ya llegaron con la intenci?n de irse, pero muchas -que no todas- quer?an di?logo. Algunas, de hecho, lleg? a querer abandonar la cumbre, a pesar de las m?s que probables consecuencias. Pero negociaron -seg?n apunt? Relevo- un seguro “claro y por escrito” de que no iban a ser sancionadas si abandonaban la concentraci?n, para seguir firmes con su premisa de no volver hasta que se encuentren con un “lugar seguro”. La idea en un principio era ir todas a una. Si una se iba, todas se iban. Si una se quedaba, todas se quedaban.

Pero el CSD quiso calmar las aguas y tratar de convencerlas. Amenaz? con adelantar las elecciones en la Federaci?n si no se produc?an cambios inmediatos y ésta, por su parte y ya viéndose contra las cuerdas, empez? a meditar despidos inminentes para salvar la convocatoria. El primero de la lista era Andreu Camps, secretario general de la RFEF y mano derecha de Luis Rubiales Pero podr?an haber m?s. La idea era que cayese el n?cleo m?s af?n al ya expresidente de la Federaci?n.*

La cumbre dur? m?s de tres horas y fue de las m?s tensas que se han vivido en los ?ltimos meses. Mucho en juego y poco tiempo. Alguien acabar? ganando el pulso.



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