El nerviosismo se ha instalado en el Camp Nou. La virtual eliminaci?n de la Champions y la dolorosa derrota en el cl?sico han hecho saltar las alarmas entre los m?s impacientes. Hay quien, incluso, se atreve a dudar (en privado, eso s?) de la capacidad de Xavi para liderar el nuevo proyecto. Las prisas por volver a ganar t?tulos en nombre de la sagrada resurrecci?n del Barça que anunci? Laporta han generado los primeros ataques de p?nico. Las emergencias son enormes. Y la valiente (o imprudente, seg?n se mire) apuesta por el ‘todo o nada’ est? empezando a pasar factura en el siempre sobreexcitado entorno blaugrana. Calma. Mucha calma. Este nuevo Barça necesita tiempo. Es imposible crear un equipo campe?n en solo trece partidos después de una revoluci?n tan grande como la vivida el pasado verano: hasta 26 movimientos entre fichajes y salidas.

El técnico tiene las ideas claras, pero necesita ese tiempo que le niegan para poder aplicarlas. Y, sobre todo, para conseguir que los futbolistas (los nuevos y los no tan nuevos) entiendan y ejecuten el modelo que pretende impulsar el entrenador. M?s all? de los errores individuales, m?s all? de los fallos arbitrales, el Barça tiene un problema de juego que solo se solucionar? con paciencia. Y, por supuesto, apostando por la meritocracia. La temporada es muy larga. Con un Mundial en medio que nadie sabe c?mo afectar? a los futbolistas. El gran problema del Barça radica en haber quedado fuera de la Copa de Europa a mediados de octubre. Y, también, en las excesivas expectativas generadas. Calma. Mucha calma. La Liga es posible (y la Copa, y la Supercopa de Espa?a y, por qué no, la Europa League) y el equipo tiene que empezar a demostrarlo esta misma noche ante el Villarreal.

Xavi pidi? al inicio de temporada unidad. Unidad para afrontar el reto de la reconstrucci?n de un Barça moribundo. Unidad para sumar esfuerzos y, sobre todo, para superar los malos momentos. Unidad en el entorno, pero también dentro del mismo club. El técnico es el primero que sabe que si no se ganan t?tulos su continuidad peligra: “Con el esfuerzo que ha hecho el club y la plantilla que tenemos, hay que competir por los t?tulos. Y si no se ganan, ya dijo el presidente que habr? consecuencias, empezando por m?. Si no se gana, vendr? otro entrenador. Lo voy a dar todo para que esto funcione”. Est? claro que Xavi conoce mejor que nadie qué es el Barça y qué significa. No necesita lecciones. Solo necesita paciencia.*



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