الريــم
10-31-2022, 02:01 PM
La mano tendida del PSC al Govern para aprobar los presupuestos, hasta ahora irreductible, al menos, en el terreno verbal, a pesar de la colecci?n de rechazos por parte de ERC, no es incondicional ni imperecedera. De hecho, solo ser? v?lida si el 'president' Pere Aragonès acepta una negociaci?n de las cuentas "en bloque". Es decir, si la apuesta del Executiu tras la ruptura con Junts acaba siendo ir a una pr?rroga para no tener que contar con el apoyo de los socialistas, la respuesta del jefe de la oposici?n, Salvador Illa, ser? que no cuente con él para tirar adelante con modificaciones presupuestarias para incorporar nuevos recursos. De momento, lo ?nico en firme que ha arrancado el jefe de la oposici?n tras hora y media de reuni?n el viernes en el Palau de la Generalitat es que el PSC estar? incluido en la ronda de contactos que Aragonès inaugurar? la semana que viene para explicar el marco presupuestario.
La salida de los posconvergentes ha convertido la pol?tica catalana en un gran tablero de ajedrez. Para evitar que cundiera la sensaci?n de que el éxodo de Junts dejaba a los republicanos a merced del PSC, Esquerra, por boca de su l?der, Oriol Junqueras, se afan? a obturar esa v?a de agua al grito de "Esquerra no pactar? con quien se hace carne viva en las manos aplaudiendo el encarcelamiento de independentistas".
El 'president' Pere Aragonès también se movi? en el tablero, y a?n se halla en esa fase, para subrayar, en todos los foros en los que tiene ocasi?n, que no tiene ning?n sentido que Junts vete unos presupuestos que uno de los suyos, el 'exconseller' Jaume Gir?, ha preparado. La intenci?n, en este caso, es que la opini?n p?blica, y la publicada, no pasaran tan r?pido de pantalla y tratar de que el foco se centre en los posconvergentes, para afearles su 'partidismo' en un momento grave econ?mico y socialmente. En resumen, que Junts no se vaya de rositas.
El 'dopaje' a las cuentas vigentes
Los movimientos de Junqueras y Aragonès conducen a un ?nico escenario final, la pr?rroga presupuestaria. Un mecanismo que el 'president' considera funesto para Catalu?a, habida cuenta de que la inflaci?n de dos d?gitos han convertido en inservibles las cuentas actuales y que, ahora, talmente parec?a un tecnicismo sin m?s.
La forma de prorrogar los presupuestos solo pasa por 'doparlos' con las nuevas partidas que se generen. Por ejemplo el decidido por el Consejo de Pol?tica Fiscal y Financiera, en julio, a cuenta de la liquidaci?n del sistema de financiaci?n. Se trata de 3.100 millones que, en caso de pr?rroga, no pueden ser incluidos en las cuentas. Y la ?nica soluci?n es parchear los presupuestos de 2022 con partidas complementarias.
Es decir, que el Govern aprobara por decreto insuflar una determinada cuant?a a cualquier servicio p?blico, por ejemplo. Esta decisi?n deber?a ser convalidada por el Parlament y antes de 30 d?as desde su pl?cet en el Consell Executiu. Y en este punto es donde act?a el ?ltimo movimiento, el de Illa. Decir que ello, el apoyo ciego por tratarse de mejoras sociales, no pasar? porque, en el fondo, es una treta. Y es que cuentan los republicanos con que, en una situaci?n de crisis, ning?n grupo parlamentario vetar?a ese 'doping' por "responsabilidad".
El Govern, como si se tratara de una probatura aprob?, el martes, un suplemento de 375 millones, precisamente, para la sanidad. Es una partida que nace del mejor rendimiento de lo esperado de los tributos propios y que, en las pr?ximas semanas, pasar? por el hemiciclo. Como la situaci?n no tiene nada que ver con la que se generar?a con una pr?rroga por no querer negociar con uno de los grupos clave del Parlament, no se esperan mayores sorpresas.
'No' en diferido
O una negociaci?n "cl?sica y transparente" o unas cuentas "en diferido, no", transmiten desde la c?pula socialista. Un todo o nada que el propio Illa ha transmitido también a Aragonès, con quien se reuni? el viernes en el Palau de la Generalitat. Y es que el PSC teme que ERC opte por una pr?rroga para evitar una fotograf?a que le resulta inc?moda ahora que sus exsocios la acusan de haber cambiado el objetivo de la independencia por una alianza con Pedro S?nchez para, después, buscar el apoyo fraccionado de sus 33 diputados a planes de choque o medidas anticrisis.
Para el PSC, una pr?rroga de los presupuestos supondr?a entrar en una "nueva fase" de un Govern que considera "colapsado". Hasta ahora y en paralelo a la negociaci?n con ERC en el Congreso para que prosperen las cuentas estatales, Illa transita en una suerte de equilibrio entre ofrecer ayuda a Aragonès y, al mismo tiempo, ejercer un rol de oposici?n que le permita visibilizarse como la alternativa. No es balad? que, a pesar de tener encuestas a su favor, descarte presentar una moci?n de censura o no pida elecciones. Pero ir a una pr?rroga, insisten, ser?a cruzar el Rubic?n y escalar los decibelios contra un Executiu al que se?alan d?a s? y d?a también por no tener ni un solo aliado en el Parlament.
Illa no ha entrado a valorar p?blicamente por qué considera que los republicanos lo vetan, pero entre bambalinas los socialistas esgrimen que ser?a irresponsable y una temeridad si lo que est? pesando son "c?lculos partidistas y electoralistas" para no perder fuerza negociadora en Madrid.
En términos estrictamente numéricos de cara a una eventual negociaci?n, el PSC ha planteado al Govern un plan de choque de 848 millones de euros -destacan que es casi el triple de los 300 millones propuestos por el 'president' por ahora- que podr?an cubrirse con los 3.000 millones adicionales que recibir? la Generalitat si aprueba los presupuestos gracias al aumento del techo de gasto. Los socialistas suelen utilizar el argumento que, sin cuentas nuevas, esos recursos de m?s se quedar?n en el camino.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/psc-cierra-via-prorroga-presupuestos-77955822)
La salida de los posconvergentes ha convertido la pol?tica catalana en un gran tablero de ajedrez. Para evitar que cundiera la sensaci?n de que el éxodo de Junts dejaba a los republicanos a merced del PSC, Esquerra, por boca de su l?der, Oriol Junqueras, se afan? a obturar esa v?a de agua al grito de "Esquerra no pactar? con quien se hace carne viva en las manos aplaudiendo el encarcelamiento de independentistas".
El 'president' Pere Aragonès también se movi? en el tablero, y a?n se halla en esa fase, para subrayar, en todos los foros en los que tiene ocasi?n, que no tiene ning?n sentido que Junts vete unos presupuestos que uno de los suyos, el 'exconseller' Jaume Gir?, ha preparado. La intenci?n, en este caso, es que la opini?n p?blica, y la publicada, no pasaran tan r?pido de pantalla y tratar de que el foco se centre en los posconvergentes, para afearles su 'partidismo' en un momento grave econ?mico y socialmente. En resumen, que Junts no se vaya de rositas.
El 'dopaje' a las cuentas vigentes
Los movimientos de Junqueras y Aragonès conducen a un ?nico escenario final, la pr?rroga presupuestaria. Un mecanismo que el 'president' considera funesto para Catalu?a, habida cuenta de que la inflaci?n de dos d?gitos han convertido en inservibles las cuentas actuales y que, ahora, talmente parec?a un tecnicismo sin m?s.
La forma de prorrogar los presupuestos solo pasa por 'doparlos' con las nuevas partidas que se generen. Por ejemplo el decidido por el Consejo de Pol?tica Fiscal y Financiera, en julio, a cuenta de la liquidaci?n del sistema de financiaci?n. Se trata de 3.100 millones que, en caso de pr?rroga, no pueden ser incluidos en las cuentas. Y la ?nica soluci?n es parchear los presupuestos de 2022 con partidas complementarias.
Es decir, que el Govern aprobara por decreto insuflar una determinada cuant?a a cualquier servicio p?blico, por ejemplo. Esta decisi?n deber?a ser convalidada por el Parlament y antes de 30 d?as desde su pl?cet en el Consell Executiu. Y en este punto es donde act?a el ?ltimo movimiento, el de Illa. Decir que ello, el apoyo ciego por tratarse de mejoras sociales, no pasar? porque, en el fondo, es una treta. Y es que cuentan los republicanos con que, en una situaci?n de crisis, ning?n grupo parlamentario vetar?a ese 'doping' por "responsabilidad".
El Govern, como si se tratara de una probatura aprob?, el martes, un suplemento de 375 millones, precisamente, para la sanidad. Es una partida que nace del mejor rendimiento de lo esperado de los tributos propios y que, en las pr?ximas semanas, pasar? por el hemiciclo. Como la situaci?n no tiene nada que ver con la que se generar?a con una pr?rroga por no querer negociar con uno de los grupos clave del Parlament, no se esperan mayores sorpresas.
'No' en diferido
O una negociaci?n "cl?sica y transparente" o unas cuentas "en diferido, no", transmiten desde la c?pula socialista. Un todo o nada que el propio Illa ha transmitido también a Aragonès, con quien se reuni? el viernes en el Palau de la Generalitat. Y es que el PSC teme que ERC opte por una pr?rroga para evitar una fotograf?a que le resulta inc?moda ahora que sus exsocios la acusan de haber cambiado el objetivo de la independencia por una alianza con Pedro S?nchez para, después, buscar el apoyo fraccionado de sus 33 diputados a planes de choque o medidas anticrisis.
Para el PSC, una pr?rroga de los presupuestos supondr?a entrar en una "nueva fase" de un Govern que considera "colapsado". Hasta ahora y en paralelo a la negociaci?n con ERC en el Congreso para que prosperen las cuentas estatales, Illa transita en una suerte de equilibrio entre ofrecer ayuda a Aragonès y, al mismo tiempo, ejercer un rol de oposici?n que le permita visibilizarse como la alternativa. No es balad? que, a pesar de tener encuestas a su favor, descarte presentar una moci?n de censura o no pida elecciones. Pero ir a una pr?rroga, insisten, ser?a cruzar el Rubic?n y escalar los decibelios contra un Executiu al que se?alan d?a s? y d?a también por no tener ni un solo aliado en el Parlament.
Illa no ha entrado a valorar p?blicamente por qué considera que los republicanos lo vetan, pero entre bambalinas los socialistas esgrimen que ser?a irresponsable y una temeridad si lo que est? pesando son "c?lculos partidistas y electoralistas" para no perder fuerza negociadora en Madrid.
En términos estrictamente numéricos de cara a una eventual negociaci?n, el PSC ha planteado al Govern un plan de choque de 848 millones de euros -destacan que es casi el triple de los 300 millones propuestos por el 'president' por ahora- que podr?an cubrirse con los 3.000 millones adicionales que recibir? la Generalitat si aprueba los presupuestos gracias al aumento del techo de gasto. Los socialistas suelen utilizar el argumento que, sin cuentas nuevas, esos recursos de m?s se quedar?n en el camino.
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