الريــم
10-29-2022, 09:45 PM
Llevamos un tiempo oyendo que “la magia del directo” es insustituible y que nada podr? jam?s rivalizar con la emoci?n del concierto vivido ‘in situ’, con el estruendo del p?blico, la disposici?n a lo imprevisto y, quiz?, ese adorable suelo pegajoso de cerveza. Pero cada vez m?s son las se?ales que matizan tal enunciado, y no hay m?s que observar los 150 cines de toda Espa?a que este s?bado han transmitido uno de los conciertos que Coldplay ofrece estos d?as en el estadio del River Plate, en Buenos Aires.
?Un salto de escala en la peripecia del ‘streaming’ aplicado a la m?sica en vivo? Ha habido otros avisos: las 120 salas que, el pasado marzo, proyectaron el ‘show’ del grupo rey del k-pop, BTS. Tanto los brit?nicos como los coreanos ofrecieron su concierto en directo a todo el mundo, si bien el de Coldplay, en Europa, por la diferencia horaria, ha requerido otro formato, el ‘delayed live’. Pero la sala de cine no es la ?nica v?a: Amazon, con su nuevo canal Amazon Music Live, plantifica en el sal?n de tu casa eventos como, la semana pasada, el concierto de Kendrick Lamar en Par?s.
Experiencia sincronizada
Todo apunta a que s? hay algo que puede rivalizar con asistir a un concierto: atender a ese concierto desde cualquier otro lugar. Preferiblemente, en directo. Ah?, la pandemia ha precipitado el cambio. “El par?n hizo que artistas e industria comenzaran a buscar alternativas”, argumenta David Loscos, director general de la IMB International Music Business School. “Ha ganado cuerpo la idea de que el directo no solo consiste en estar en el mismo sitio en que el artista ofrece el concierto, sino en vivir la experiencia en el mismo momento, de modo sincronizado. Esa es la clave”.
Coldplay agot? todas las entradas de su gira mundial, incluidos los cuatro conciertos en el barcelonés Estadi Ol?mpic (mayo de 2023), pero “a?n as?, mucha gente se ha quedado sin localidad”, sigue Loscos. Ante lo cual, el ‘streaming’ “da soluciones alternativas y m?s econ?micas, manteniendo el directo y, por tanto, la magia”. Porque participas de un evento que tiene lugar en ese preciso momento, y desde un punto de vista privilegiado, con una realizaci?n sofisticada y acceso a ?ngulos seguramente imposibles cuando acudes a un concierto tradicional y te sientas en tu localidad.
La agenda verde
Para los autores de ‘Viva la vida’, el ‘streaming’ alimenta su aura de banda sostenible, al apostar por un modo de llegar al p?blico que no pasa por la terminal aérea. Los brit?nicos se presentan como grupo pionero en introducir la agenda verde en una din?mica de gira de estadios. Puede sonar estrafalario, pero est?n en marcha claves concretas: potenciaci?n de rutas por carretera, uso de bater?as alimentadas con aceites reciclados, suelos cinéticos que convierten en energ?a los saltos del p?blico… Ah?, el concierto consumible a distancia representa otra capa m?s en su narrativa de reducci?n de las emisiones de CO2.
Hablamos, en el caso de Coldplay y de BTS, del formato del ‘event cinema’, que resulta interesante para un sector, las salas de cine, que sufre un declive de espectadores. Se trata de eventos vivaces, que re?nen a fans motivados, dispuestos a hacer del visionado del concierto un ritual colectivo, razonan fuentes de Warner, la discogr?fica de Coldplay. “Es interesante para la banda y para los cines”.
Al margen de la promotora
El ‘worldwide live event’ de Chris Martin y compa??a lo negoci? el m?nager del grupo con una distribuidora cinematogr?fica global, Trafalgar, con experiencia en el campo cl?sico: gestiona las emisiones de la brit?nica Royal Opera House. Esta delega, en Espa?a, a Versi?n Digital, empresa con sede en Valencia. Todo ello, sin que medie en el proceso la promotora de los conciertos, Live Nation, que queda al margen.
Los dos pases del concierto de Coldplay de este s?bado en toda Espa?a convocaron a unos 16.000 espectadores (que pagaron entre 12,50 y 15,40 euros). Un tercio de los 150 cines estuvieron en Catalu?a, “donde hay mucha tradici?n musical, muchas salas bien equipadas, y el espectador suele responder muy bien”, indica Mar?a Cazorla, de Versi?n Digital, que resalta las ventajas del visionado a distancia y a tiempo real. “Nunca ser? igual que asistir al concierto, pero en algunos aspectos es mejor: con Coldplay, se utilizaron 25 c?maras, y se pod?a ver c?mo a Chris Martin se le hincha la vena del cuello al cantar”.
El paralelo, el ‘streaming’ avanza por otro carril, el de las plataformas digitales, que sustituyen el evento colectivo en el cine por el deleite en el sal?n de casa. El concierto del rapero ‘vip’ Kendrick Lamar en el Accor Arena de Par?s, capturado por 19 c?maras, marc? un punto de inflexi?n: Amazon lo transmiti? en vivo no solo en su cuenta en Twitch, sino en el flamante canal Amazon Music Live, que ya ha cogido carrerilla y el 4 de noviembre ofrecer? el ‘show’ de la estrella tejana Megan Thee Stallion (a las 4.55 de la madrugada hora espa?ola).
Con o sin p?blico
En el Accor Arena hab?a 20.000 personas, y conectarte representaba participar de un acto colectivo. Pero ah? no todo ha sido dicho: otros artistas optan por ofrecer en ‘streaming’ conciertos pensados para ese formato, sin p?blico o con auditorios reducidos. Caso de Nick Cave, acariciando el piano en la nave victoriana vac?a del londinense Alexandra Palace, o de Dua Lipa con su espect?culo ‘Studio 2054’, fantas?a flotante que convoc? a invitados como Elton John y Angèle.
“Que Amazon cree un canal para conciertos en ‘streaming’ es muy significativo. Puede ser el primer paso para que otras plataformas sigan ese camino”, estima David Loscos. ?Un Netflix Music Live? El uso y oportunidad de este tipo de producto depender? de cada artista: puede reservarse la carta para momentos como el inicio de una gira, para hacer salivar a los fans y tener m?s ganas de asistir al concierto. “Para eso, el artista debe estar muy seguro de que lo que ofrece es muy bueno”, desliza Loscos, que ve sentido al ‘streaming’ como experiencia ‘flash’, cazada al vuelo, no tanto como archivo. “La gracia es que se ofrezca en tiempo limitado. No puede convertirse en cat?logo”.
Una doble cadena
El concierto tradicional sigue siendo el punto de anclaje a partir del cual pivota toda la cadena. Y m?s que eso, se vislumbra su establecimiento como producto premium, con un ‘star system’ propenso a hinchar los precios de las entradas (y de los ‘packs’ exclusivos, ‘golden circle’ y similares), y a ofrecer, acaso a modo de compensaci?n, la opci?n del ‘streaming’ apta para todos los bolsillos.
Para las promotoras de conciertos, el directo de siempre es insustituible, pero admiten que se est?n abriendo otras ventanas. “Lo veo m?s como un complemento que como una alternativa”, apunta Nacho C?rdoba, ‘senior promoter’ de Live Nation Espa?a. “La magia del directo, sintiendo lo mismo que los que est?n a tu alrededor, es dif?cil que la capte el ‘streaming’, pero es v?lido para que la gente pueda ver a su artista favorito si no ha conseguido entradas”.
Pero, del mismo modo que las transmisiones deportivas nos dicen que no es imprescindible estar en el lugar de los hechos para disfrutar del espect?culo, la m?sica ensaya y desarrolla f?rmulas para sacar partido de su capital. Tratando de que, dos décadas después del inicio de la debacle discogr?fica a causa, precisamente, del advenimiento del paradigma digital, la tecnolog?a sea m?s una aliada que una fuente de angustias.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/coldplay-propulsa-auge-conciertos-streaming-77897831)
?Un salto de escala en la peripecia del ‘streaming’ aplicado a la m?sica en vivo? Ha habido otros avisos: las 120 salas que, el pasado marzo, proyectaron el ‘show’ del grupo rey del k-pop, BTS. Tanto los brit?nicos como los coreanos ofrecieron su concierto en directo a todo el mundo, si bien el de Coldplay, en Europa, por la diferencia horaria, ha requerido otro formato, el ‘delayed live’. Pero la sala de cine no es la ?nica v?a: Amazon, con su nuevo canal Amazon Music Live, plantifica en el sal?n de tu casa eventos como, la semana pasada, el concierto de Kendrick Lamar en Par?s.
Experiencia sincronizada
Todo apunta a que s? hay algo que puede rivalizar con asistir a un concierto: atender a ese concierto desde cualquier otro lugar. Preferiblemente, en directo. Ah?, la pandemia ha precipitado el cambio. “El par?n hizo que artistas e industria comenzaran a buscar alternativas”, argumenta David Loscos, director general de la IMB International Music Business School. “Ha ganado cuerpo la idea de que el directo no solo consiste en estar en el mismo sitio en que el artista ofrece el concierto, sino en vivir la experiencia en el mismo momento, de modo sincronizado. Esa es la clave”.
Coldplay agot? todas las entradas de su gira mundial, incluidos los cuatro conciertos en el barcelonés Estadi Ol?mpic (mayo de 2023), pero “a?n as?, mucha gente se ha quedado sin localidad”, sigue Loscos. Ante lo cual, el ‘streaming’ “da soluciones alternativas y m?s econ?micas, manteniendo el directo y, por tanto, la magia”. Porque participas de un evento que tiene lugar en ese preciso momento, y desde un punto de vista privilegiado, con una realizaci?n sofisticada y acceso a ?ngulos seguramente imposibles cuando acudes a un concierto tradicional y te sientas en tu localidad.
La agenda verde
Para los autores de ‘Viva la vida’, el ‘streaming’ alimenta su aura de banda sostenible, al apostar por un modo de llegar al p?blico que no pasa por la terminal aérea. Los brit?nicos se presentan como grupo pionero en introducir la agenda verde en una din?mica de gira de estadios. Puede sonar estrafalario, pero est?n en marcha claves concretas: potenciaci?n de rutas por carretera, uso de bater?as alimentadas con aceites reciclados, suelos cinéticos que convierten en energ?a los saltos del p?blico… Ah?, el concierto consumible a distancia representa otra capa m?s en su narrativa de reducci?n de las emisiones de CO2.
Hablamos, en el caso de Coldplay y de BTS, del formato del ‘event cinema’, que resulta interesante para un sector, las salas de cine, que sufre un declive de espectadores. Se trata de eventos vivaces, que re?nen a fans motivados, dispuestos a hacer del visionado del concierto un ritual colectivo, razonan fuentes de Warner, la discogr?fica de Coldplay. “Es interesante para la banda y para los cines”.
Al margen de la promotora
El ‘worldwide live event’ de Chris Martin y compa??a lo negoci? el m?nager del grupo con una distribuidora cinematogr?fica global, Trafalgar, con experiencia en el campo cl?sico: gestiona las emisiones de la brit?nica Royal Opera House. Esta delega, en Espa?a, a Versi?n Digital, empresa con sede en Valencia. Todo ello, sin que medie en el proceso la promotora de los conciertos, Live Nation, que queda al margen.
Los dos pases del concierto de Coldplay de este s?bado en toda Espa?a convocaron a unos 16.000 espectadores (que pagaron entre 12,50 y 15,40 euros). Un tercio de los 150 cines estuvieron en Catalu?a, “donde hay mucha tradici?n musical, muchas salas bien equipadas, y el espectador suele responder muy bien”, indica Mar?a Cazorla, de Versi?n Digital, que resalta las ventajas del visionado a distancia y a tiempo real. “Nunca ser? igual que asistir al concierto, pero en algunos aspectos es mejor: con Coldplay, se utilizaron 25 c?maras, y se pod?a ver c?mo a Chris Martin se le hincha la vena del cuello al cantar”.
El paralelo, el ‘streaming’ avanza por otro carril, el de las plataformas digitales, que sustituyen el evento colectivo en el cine por el deleite en el sal?n de casa. El concierto del rapero ‘vip’ Kendrick Lamar en el Accor Arena de Par?s, capturado por 19 c?maras, marc? un punto de inflexi?n: Amazon lo transmiti? en vivo no solo en su cuenta en Twitch, sino en el flamante canal Amazon Music Live, que ya ha cogido carrerilla y el 4 de noviembre ofrecer? el ‘show’ de la estrella tejana Megan Thee Stallion (a las 4.55 de la madrugada hora espa?ola).
Con o sin p?blico
En el Accor Arena hab?a 20.000 personas, y conectarte representaba participar de un acto colectivo. Pero ah? no todo ha sido dicho: otros artistas optan por ofrecer en ‘streaming’ conciertos pensados para ese formato, sin p?blico o con auditorios reducidos. Caso de Nick Cave, acariciando el piano en la nave victoriana vac?a del londinense Alexandra Palace, o de Dua Lipa con su espect?culo ‘Studio 2054’, fantas?a flotante que convoc? a invitados como Elton John y Angèle.
“Que Amazon cree un canal para conciertos en ‘streaming’ es muy significativo. Puede ser el primer paso para que otras plataformas sigan ese camino”, estima David Loscos. ?Un Netflix Music Live? El uso y oportunidad de este tipo de producto depender? de cada artista: puede reservarse la carta para momentos como el inicio de una gira, para hacer salivar a los fans y tener m?s ganas de asistir al concierto. “Para eso, el artista debe estar muy seguro de que lo que ofrece es muy bueno”, desliza Loscos, que ve sentido al ‘streaming’ como experiencia ‘flash’, cazada al vuelo, no tanto como archivo. “La gracia es que se ofrezca en tiempo limitado. No puede convertirse en cat?logo”.
Una doble cadena
El concierto tradicional sigue siendo el punto de anclaje a partir del cual pivota toda la cadena. Y m?s que eso, se vislumbra su establecimiento como producto premium, con un ‘star system’ propenso a hinchar los precios de las entradas (y de los ‘packs’ exclusivos, ‘golden circle’ y similares), y a ofrecer, acaso a modo de compensaci?n, la opci?n del ‘streaming’ apta para todos los bolsillos.
Para las promotoras de conciertos, el directo de siempre es insustituible, pero admiten que se est?n abriendo otras ventanas. “Lo veo m?s como un complemento que como una alternativa”, apunta Nacho C?rdoba, ‘senior promoter’ de Live Nation Espa?a. “La magia del directo, sintiendo lo mismo que los que est?n a tu alrededor, es dif?cil que la capte el ‘streaming’, pero es v?lido para que la gente pueda ver a su artista favorito si no ha conseguido entradas”.
Pero, del mismo modo que las transmisiones deportivas nos dicen que no es imprescindible estar en el lugar de los hechos para disfrutar del espect?culo, la m?sica ensaya y desarrolla f?rmulas para sacar partido de su capital. Tratando de que, dos décadas después del inicio de la debacle discogr?fica a causa, precisamente, del advenimiento del paradigma digital, la tecnolog?a sea m?s una aliada que una fuente de angustias.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/coldplay-propulsa-auge-conciertos-streaming-77897831)