الريــم
10-21-2022, 08:08 PM
'The car'
Arctic Monkeys
Domino Records
Pop de c?mara
????
"M?s vale que haya una bola de espejos". Ya lo advert?an los Arctic Monkeys en el primer adelanto de su nuevo y séptimo disco, ‘The car’, que acaba de llegar a todas las tiendas y plataformas. Y vaya s? la hay: entre la invitaci?n a un baile (‘There’d better be a mirrorball’) y un beso de buenas noches (‘Perfect sense’, canci?n que cierra el disco), im?genes dispersas de mundos que se fragmentan como la luz que la bola de espejos devuelve a las paredes, centelleante, enso?adora, pero también ilusoria, fractal. Desde ese sublime wéstern que es ‘The car’ a la precios?sima balada orquestal ‘Body paint’, pasando por el funk de ‘I ain’t quite where I think I am’ o por esa soberbia ‘Sculptures of anything goes’ en la que la voz de Alex Turner emerge como una alucinaci?n entre los oscuros sintetizadores y que bien valdr?a como banda sonora de alguno de los lisérgicos 'horror-noir' de Panos Cosmatos. Un disco extremadamente cinem?tico, t?ctil, elegante.
Eso no quita que haya algunos patinazos (‘Mr. Schwartz’ es una especie de ‘Hotel California’ desacompasada, salvada eso s? con toques de Lee Hazlewood y la siempre impecable l?rica de Turner; ‘Jet skies on the moat’ no termina de funcionar en su fusi?n de funky 'arpeggiato') y, en general, se echa en falta algo de dinamismo en el disco en su conjunto, consecuencia de una interpretaci?n vocal por parte de Turner demasiado mon?tona –uno no se convierte en 'crooner' de la noche a la ma?ana– por muy aderezada con falsetes que esté.
De vuelta al Ritz
Puede que haya quién se sienta decepcionado con este nuevo disco: ?d?nde est? ese nervio de los primeros discos, esa voz entre nasal y raspada de Turner, las bater?as machaconas de Matt Helders? Sin embargo, en un momento cultural en el que impera la nostalgia, Alex Turner y los suyos van por libre y hacia adelante. ‘Tranquility Base Hotel & Casino’, su anterior disco, lleno de texturas 'space pop', no fue un experimento, sino una declaraci?n de intenciones. 'From The Ritz to the rubble' y, ahora, de vuelta al Ritz.
Puede que los Arctic ya no le canten aqu? a los suelos pegajosos de cerveza, a los besos t?midos con sabor a Dandelion & Burdock o a las noches solitarias en habitaciones llenas de gente pero, aun as?, esa sensaci?n de que la felicidad se escap? por apenas un segundo sigue latiendo con la misma fuerza. Como en el mejor Badalamenti, en ‘There’d better be a mirrorball’ basta tan solo una nota discordante para que el sue?o rom?ntico adquiera tintes extra?os e inquietantes. Ahora estamos en un universo de hoteles de lujo, whisky de importaci?n y sof?s de cuero, s?, pero uno en el que la pared de la lujosa habitaci?n esconde humedades, las cortinas del sal?n de baile est?n llenas de polvo, el champ?n est? caliente y, el aire, demasiado viciado. Patri Di Filippo
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/the-car-nuevo-disco-arctic-monkeys-77550940)
Arctic Monkeys
Domino Records
Pop de c?mara
????
"M?s vale que haya una bola de espejos". Ya lo advert?an los Arctic Monkeys en el primer adelanto de su nuevo y séptimo disco, ‘The car’, que acaba de llegar a todas las tiendas y plataformas. Y vaya s? la hay: entre la invitaci?n a un baile (‘There’d better be a mirrorball’) y un beso de buenas noches (‘Perfect sense’, canci?n que cierra el disco), im?genes dispersas de mundos que se fragmentan como la luz que la bola de espejos devuelve a las paredes, centelleante, enso?adora, pero también ilusoria, fractal. Desde ese sublime wéstern que es ‘The car’ a la precios?sima balada orquestal ‘Body paint’, pasando por el funk de ‘I ain’t quite where I think I am’ o por esa soberbia ‘Sculptures of anything goes’ en la que la voz de Alex Turner emerge como una alucinaci?n entre los oscuros sintetizadores y que bien valdr?a como banda sonora de alguno de los lisérgicos 'horror-noir' de Panos Cosmatos. Un disco extremadamente cinem?tico, t?ctil, elegante.
Eso no quita que haya algunos patinazos (‘Mr. Schwartz’ es una especie de ‘Hotel California’ desacompasada, salvada eso s? con toques de Lee Hazlewood y la siempre impecable l?rica de Turner; ‘Jet skies on the moat’ no termina de funcionar en su fusi?n de funky 'arpeggiato') y, en general, se echa en falta algo de dinamismo en el disco en su conjunto, consecuencia de una interpretaci?n vocal por parte de Turner demasiado mon?tona –uno no se convierte en 'crooner' de la noche a la ma?ana– por muy aderezada con falsetes que esté.
De vuelta al Ritz
Puede que haya quién se sienta decepcionado con este nuevo disco: ?d?nde est? ese nervio de los primeros discos, esa voz entre nasal y raspada de Turner, las bater?as machaconas de Matt Helders? Sin embargo, en un momento cultural en el que impera la nostalgia, Alex Turner y los suyos van por libre y hacia adelante. ‘Tranquility Base Hotel & Casino’, su anterior disco, lleno de texturas 'space pop', no fue un experimento, sino una declaraci?n de intenciones. 'From The Ritz to the rubble' y, ahora, de vuelta al Ritz.
Puede que los Arctic ya no le canten aqu? a los suelos pegajosos de cerveza, a los besos t?midos con sabor a Dandelion & Burdock o a las noches solitarias en habitaciones llenas de gente pero, aun as?, esa sensaci?n de que la felicidad se escap? por apenas un segundo sigue latiendo con la misma fuerza. Como en el mejor Badalamenti, en ‘There’d better be a mirrorball’ basta tan solo una nota discordante para que el sue?o rom?ntico adquiera tintes extra?os e inquietantes. Ahora estamos en un universo de hoteles de lujo, whisky de importaci?n y sof?s de cuero, s?, pero uno en el que la pared de la lujosa habitaci?n esconde humedades, las cortinas del sal?n de baile est?n llenas de polvo, el champ?n est? caliente y, el aire, demasiado viciado. Patri Di Filippo
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/the-car-nuevo-disco-arctic-monkeys-77550940)