الريــم
10-18-2022, 01:24 PM
Cerca de 22.000 euros fue lo que les cost? a Paula y Alberto, una joven pareja del Pa?s Vasco, ir a Estados Unidos y abortar all?. Para ello tuvieron que pedir un préstamo bancario. Ocurri? el pasado junio y, a d?a de hoy y durante los pr?ximos cinco a?os, siguen pagando el préstamo al banco. Todo porque un diagn?stico tard?o imposibilit? el aborto en Espa?a. "A la semana 28 del embarazo, me hicieron una ecograf?a y vieron algo raro en la cabeza. La gravedad no se sabr?a hasta que el bebé naciera: pod?a tener desde ceguera hasta par?lisis", relatan al otro lado del teléfono. El feto ten?a ausencia del septum pellucidum, que es el tabique que separa los dos hemisferios cerebrales. Ni el de Paula ni el de Alberto son nombres reales: desean contar su historia desde el anonimato, al igual que otras mujeres entrevistadas por EL PERI?DICO, del grupo Prensa Ibérica, que tuvieron que, como Paula, marcharse al extranjero para abortar al estar embarazadas de m?s de 22 semanas.
La ley del aborto de Espa?a, una de las m?s progresistas del mundo, permite la interrupci?n libre del embarazo hasta la semana 14. A partir de ah? y hasta la 22, la mujer, para abortar, necesita un informe médico que certifique que hay un grave riesgo para la vida o salud de la embarazada o anomal?as incompatibles con la vida.
Sin embargo, aunque no es frecuente, algunas anomal?as o malformaciones no son detectadas hasta el tercer trimestre. A partir de la semana 22, la mujer debe pasar por el comité cl?nico de un hospital, que dar? o no luz verde al aborto. Y solo lo har? si hay una malformaci?n del feto incompatible con la vida. Esta palabra, "incompatible", es la clave, pues, si la malformaci?n es grave pero compatible con la vida, la mujer no obtendr? el permiso para abortar. Los expertos advierten de lo confuso del término "compatible con la vida", dado que, en la actualidad, pr?cticamente todas las malformaciones, incluso las consideradas "grav?simas", lo son.
La reciente reforma de esta ley, que le ha conferido un cariz a?n m?s reformista (principalmente porque las menores de 16 a?os pueden poner fin al embarazo sin consentimiento paterno o materno), sigue sin amparar a aquellas mujeres que quieren abortar m?s all? de las 22 semanas. Aunque representan un porcentaje peque?o, en Espa?a hay quienes deben irse al extranjero para ello: Bélgica (donde abortan cada a?o unas 100 espa?olas, seg?n el Centro Hospitalario Universitario de Bruselas), Francia, Inglaterra o Estados Unidos son algunos de los destinos. Se desconoce cu?l es el total de espa?olas que abortan fuera del pa?s, porque solo se contabilizan los abortos aceptados a partir de las 22 semanas, no los rechazados.
Sin opciones en Espa?a
A Paula y Alberto, de 33 y 34 a?os y con una hija, les lleg? el diagn?stico del feto a la semana 28. "Los propios médicos nos dijeron que no hab?a opciones para abortar en Espa?a porque la anomal?a no era incompatible con la vida. Ten?a un 75% de posibilidades de tener alg?n problema y un 25% de que no. Para nosotros, ese 75% era suficiente para querer abortar; para los médicos, no", apunta Alberto. La pareja se puso a buscar por internet y dio con la Associaci? de Drets Sexuals i Reproductius de Barcelona.
La entidad les puso en contacto con hospitales de Bruselas y de Francia. Viajar all? hubiera sido mucho m?s barato, pues les bastaba con la tarjeta sanitaria europea y apenas les hubiera costado la gesti?n unos 150 euros. Pero los tr?mites se fueron retrasando. "Yo ten?a el agravante de que el parto de mi hija se hab?a adelantado un mes y ahora también hab?a riesgo de que se adelantara", cuenta Paula. Fue as? como decidieron mirar las opciones en Estados Unidos y encontraron la cl?nica Southwestern Women's Options, en Albuquerque.
"Desde el principio nos dijeron que lo har?an y nos dejaron bien claro cu?nto iba a costar: 18.000 d?lares. Pero nos consiguieron dos ayudas econ?micas gracias a asociaciones de mujeres de all? y baj? a 16.800 [unos 17.000 euros]", cuenta Alberto. Junto a los vuelos y la estancia, la pareja se dej? entre 20.000 y 22.000 euros. Un lunes de junio volaron a Albuquerque y un s?bado regresaron a Espa?a. "Tuvimos que pedir un préstamo al banco porque no ten?amos dinero para esto", dice Paula.
Ayuda psicol?gica
Como les ocurre a todas las mujeres que abortan con un embarazo tan adelantado, el suyo era un bebé deseado. Paula y Alberto decidieron abortar ante la incertidumbre de no saber qué tipo de vida le esperaba a su futuro hijo. Han necesitado, y todav?a la necesitan, ayuda psicol?gica. "Me sent? totalmente abandonada. Me hicieron sentir culpable, como si estuviera abortando por capricho", se lamenta Paula. "Nosotros abortamos porque quer?amos asegurarnos de que nuestro hijo tuviera una vida digna -prosigue Alberto-. [El Estado] no tiene en cuenta estos casos".
Su estado an?mico, aseguran ambos, "va por d?as". "Y el asunto econ?mico no ayuda porque sigue afectando a nuestra vida. No somos una familia particularmente pudiente y fue mucho dinero. El estrés, la ansiedad y las noches sin dormir siguen estando ah?", dice Paula.
Ambos aseguran que no est?n arrepentidos de la decisi?n tomada, pero no quieren que se sepa quiénes son. "Es algo tan duro, que no queremos a?adirle m?s dolor. No tenemos arrepentimiento, sabemos que hecho lo mejor para nuestro hijo. Pero no queremos que nos juzguen", concluyen.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/endeudarse-eeuu-abortar-obstaculos-interrumpir-77389363)
La ley del aborto de Espa?a, una de las m?s progresistas del mundo, permite la interrupci?n libre del embarazo hasta la semana 14. A partir de ah? y hasta la 22, la mujer, para abortar, necesita un informe médico que certifique que hay un grave riesgo para la vida o salud de la embarazada o anomal?as incompatibles con la vida.
Sin embargo, aunque no es frecuente, algunas anomal?as o malformaciones no son detectadas hasta el tercer trimestre. A partir de la semana 22, la mujer debe pasar por el comité cl?nico de un hospital, que dar? o no luz verde al aborto. Y solo lo har? si hay una malformaci?n del feto incompatible con la vida. Esta palabra, "incompatible", es la clave, pues, si la malformaci?n es grave pero compatible con la vida, la mujer no obtendr? el permiso para abortar. Los expertos advierten de lo confuso del término "compatible con la vida", dado que, en la actualidad, pr?cticamente todas las malformaciones, incluso las consideradas "grav?simas", lo son.
La reciente reforma de esta ley, que le ha conferido un cariz a?n m?s reformista (principalmente porque las menores de 16 a?os pueden poner fin al embarazo sin consentimiento paterno o materno), sigue sin amparar a aquellas mujeres que quieren abortar m?s all? de las 22 semanas. Aunque representan un porcentaje peque?o, en Espa?a hay quienes deben irse al extranjero para ello: Bélgica (donde abortan cada a?o unas 100 espa?olas, seg?n el Centro Hospitalario Universitario de Bruselas), Francia, Inglaterra o Estados Unidos son algunos de los destinos. Se desconoce cu?l es el total de espa?olas que abortan fuera del pa?s, porque solo se contabilizan los abortos aceptados a partir de las 22 semanas, no los rechazados.
Sin opciones en Espa?a
A Paula y Alberto, de 33 y 34 a?os y con una hija, les lleg? el diagn?stico del feto a la semana 28. "Los propios médicos nos dijeron que no hab?a opciones para abortar en Espa?a porque la anomal?a no era incompatible con la vida. Ten?a un 75% de posibilidades de tener alg?n problema y un 25% de que no. Para nosotros, ese 75% era suficiente para querer abortar; para los médicos, no", apunta Alberto. La pareja se puso a buscar por internet y dio con la Associaci? de Drets Sexuals i Reproductius de Barcelona.
La entidad les puso en contacto con hospitales de Bruselas y de Francia. Viajar all? hubiera sido mucho m?s barato, pues les bastaba con la tarjeta sanitaria europea y apenas les hubiera costado la gesti?n unos 150 euros. Pero los tr?mites se fueron retrasando. "Yo ten?a el agravante de que el parto de mi hija se hab?a adelantado un mes y ahora también hab?a riesgo de que se adelantara", cuenta Paula. Fue as? como decidieron mirar las opciones en Estados Unidos y encontraron la cl?nica Southwestern Women's Options, en Albuquerque.
"Desde el principio nos dijeron que lo har?an y nos dejaron bien claro cu?nto iba a costar: 18.000 d?lares. Pero nos consiguieron dos ayudas econ?micas gracias a asociaciones de mujeres de all? y baj? a 16.800 [unos 17.000 euros]", cuenta Alberto. Junto a los vuelos y la estancia, la pareja se dej? entre 20.000 y 22.000 euros. Un lunes de junio volaron a Albuquerque y un s?bado regresaron a Espa?a. "Tuvimos que pedir un préstamo al banco porque no ten?amos dinero para esto", dice Paula.
Ayuda psicol?gica
Como les ocurre a todas las mujeres que abortan con un embarazo tan adelantado, el suyo era un bebé deseado. Paula y Alberto decidieron abortar ante la incertidumbre de no saber qué tipo de vida le esperaba a su futuro hijo. Han necesitado, y todav?a la necesitan, ayuda psicol?gica. "Me sent? totalmente abandonada. Me hicieron sentir culpable, como si estuviera abortando por capricho", se lamenta Paula. "Nosotros abortamos porque quer?amos asegurarnos de que nuestro hijo tuviera una vida digna -prosigue Alberto-. [El Estado] no tiene en cuenta estos casos".
Su estado an?mico, aseguran ambos, "va por d?as". "Y el asunto econ?mico no ayuda porque sigue afectando a nuestra vida. No somos una familia particularmente pudiente y fue mucho dinero. El estrés, la ansiedad y las noches sin dormir siguen estando ah?", dice Paula.
Ambos aseguran que no est?n arrepentidos de la decisi?n tomada, pero no quieren que se sepa quiénes son. "Es algo tan duro, que no queremos a?adirle m?s dolor. No tenemos arrepentimiento, sabemos que hecho lo mejor para nuestro hijo. Pero no queremos que nos juzguen", concluyen.
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