الريــم
10-18-2022, 09:03 AM
Este lunes, 17 de octubre, comenz? en la Secci?n VI de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife el juicio con Tribunal de Jurado por el asesinato de un taxista en un garaje comunitario de Granadilla de Abona en julio del 2019. Por primera vez, el abogado defensor del acusado plante? un supuesto m?vil de la muerte violenta. Dicha parte esgrime que el joven colombiano implicado acudi? a dicho edificio a vender un gramo de coca?na, pero que se confundi? de comprador.
Sin embargo, tanto la hija como la pareja sentimental de la v?ctima negaron que el var?n asesinado a golpes, Gabino, de 64 a?os, fuera consumidor de sustancias estupefacientes o alcohol. La mujer con la que conviv?a admiti? que unas pocas veces consumi? ansiol?ticos (diazepam) para poder dormir.
Los hechos ocurrieron cerca de las 3:30 horas de la madrugada del 3 de julio del 2019 en un garaje comunitario del edificio San Miguel, en la calle Los Gonz?lez, en el n?cleo de San Isidro.
El acusado, identificado como Jofre André Salda?a, que hoy tiene 21 a?os, se neg? a responder a las preguntas de la fiscal, Olga Méndez; de la abogada de la acusaci?n particular, Candelaria Vel?zquez, y del letrado defensor, Ginés Cabrera.
Si el Ministerio P?blico y la abogada que representa a la hija de la v?ctima solicitan para el presunto autor 25 a?os de prisi?n por un delito de asesinato con alevos?a y ensa?amiento (pues estiman que la v?ctima no tuvo opci?n de defensa y sufri? un dolor innecesario), el abogado defensor pide una pena de 10 a?os por homicidio, pues la muerte ocurri? en una pelea entre los dos hombres y Gabino muri? a los pocos segundos de recibir los primeros golpes; es decir, "que no sufri? en exceso".
Gabino trabajaba como taxista en el municipio de Adeje. Pero era natural del barrio de El Draguito, en Granadilla de Abona. A las 3:25 horas del 3 de julio accedi? al garaje comunitario del edificio San Miguel, al que se hab?a mudado apenas dos d?as antes. Accedi? con su Seat Panda Trans, que estaba cargado con bolsas para la citada mudanza, ya que hasta entonces hab?a residido en Llano del Camello, en Las Chafiras (San Miguel de Abona).
Pocos segundos después, al citado garaje entr? también el joven acusado. El individuo colombiano, que entonces ten?a 18 a?os, se neg? a declarar, por lo que su posible defensa se bas? en el escrito presentado por su abogado. Seg?n esta versi?n, el procesado estuvo en la casa de un familiar en San Isidro, donde consumi? alcohol y droga hasta la madrugada. Y después se dirigi? hasta el edificio de San Miguel, supuestamente con la intenci?n de vender un gramo de coca?na a un cliente. En base al planteamiento del citado letrado, Jofre André pens? err?namente que Gabino era el supuesto comprador.
La defensa esgrime que entre los dos varones se produjo una pelea y que la v?ctima muri? a causa de los golpes que el taxista sufri? en la zona de la laringe y en el encéfalo a los pocos segundos de recibirlos. Y, adem?s, apunt? que el joven "no pudo autocontrolarse" por el alcohol y la droga que hab?a consumido.
Dej? entrever que supuestamente el sexagenario no lleg? a sangrar y que tanto las ?ltimas lesiones como las quemaduras se registraron cuando el afectado ya hab?a muerto. Adem?s, expuso que el joven no ten?a un plan de huida.
Sin embargo, la Fiscal?a y la abogada de la hija de la v?ctima piensan todo lo contrario. Es decir, que Gabino no tuvo opci?n alguna de defenderse y que sufri? numerosos pu?etazos, patadas y pisotones, que le provocaron un dolor innecesario antes de perder la vida. Adem?s, presuntamente el acusado desnud? a la v?ctima y trat? de quemarla con la ayuda de productos t?xicos para borrar pruebas.
La fiscal manifest? a los miembros del Jurado que la respuesta real sobre por qué se produjo la paliza mortal a la v?ctima "es posible que nunca se las pueda dar". Y, adem?s, advirti? de que, en primer lugar, en la Justicia espa?ola no hay que probar el motivo de un hecho de este tipo y, en segundo, lo que se hizo "no tiene justificaci?n".
Frente al supuesto motivo esgrimido por el letrado de la defensa, la abogada de la hija afirm? que "no hay un solo documento que pruebe" que el acusado "estaba bajo la influencia" de bebidas alcoh?licas o alguna o varias sustancias estupefacientes.
Mar?a, la pareja de la v?ctima, afirm? que llevaba ocho a?os de relaci?n sentimental con Gabino cuando ocurrieron los hechos. Cuando el hombre trabajaba en el turno de noche, la hora normal de llegada al domicilio que ambos compart?an oscilaba entre las 5:00 y las 5:15 horas.
Aquella madrugada, la mujer se despert? a las 5:30 y se percat? de que Gabino no hab?a llegado todav?a. Y tampoco respondi? a sus insistentes llamadas de teléfono. Adem?s, no la hab?a avisado de que ten?a previsto retrasarse. Baj? en ascensor hasta el garaje comunitario y all? encontr? el cad?ver de su pareja.
Mar?a asegur? que el taxista se hallaba tendido "en el suelo, casi desnudo; muy blanco, sab?a que estaba muerto". Quiso llamar a las fuerzas de seguridad, pero en el garaje no hay cobertura. Y se?al? que poco después se encontr? con un vecino, que fue quien realiz? la primera llamada a los servicios de emergencia.
La pareja sentimental de Gabino explic? que este era una persona muy tranquila, a quien nunca vio protagonizar una pelea ni con un comportamiento violento. Apunt? que no sab?a que tuviera problemas con alguien. Adem?s, se?al? que no consum?a alcohol ni drogas, "ni pastillas para dormir". Sin embargo, después, a preguntas del abogado defensor, aclar? que una o dos veces si recurri? a ansiol?ticos para poder descansar.
Después de perder al hombre con quien compart?a su vida, decidi? volver a trabajar, "para no pensar m?s", pero la imagen de ver el cuerpo sin vida de Gabino no se le va a borrar. Aclar? que no vio ni una gota de sangre junto al cad?ver, pero que s? ten?a la cara hinchada.
La hija de la v?ctima estaba desayunando en el momento en que recibi? la llamada de la Guardia Civil, que la inform? de lo que hab?a ocurrido. Como no se cre?a lo que le contaban los agentes, decidi? colgar. Los profesionales del Instituto Armado volvieron a telefonear y esta vez fue su expareja quien recibi? la informaci?n y la advertencia de que ten?a que presentarse en el lugar de los hechos.
La joven defini? a su padre como "normal, trabajador, dedicado al taxi y que se preocup? por mi educaci?n". Asegur? que nunca lo vio protagonizar una pelea ni en un acto violento. Por ese motivo, no encuentra una explicaci?n razonable a lo que pas?. De hecho, ella ha tenido que recurrir a pedir apoyo psicol?gico.
Indic? que Gabino era un hombre de complexi?n normal, "ni delgado ni atlético". La ?ltima llamada que recibi? de su progenitor fue para preguntarle c?mo le hab?a ido en los ex?menes de su oposici?n a funcionaria. Esas pruebas las aprob?, pero su padre nunca lo lleg? a saber. Ella desconoc?a que Gabino tomara ansiol?ticos para dormir.
Uno de los vecinos fue avisado por su esposa de que en el garaje hab?a un hombre "arreglando un coche", pero que era muy raro, "porque estaba desnudo". Dicho testigo entr? en el aparcamiento y verific? que hab?a un hombre tendido en el suelo. No se acerc? y salud?, pero no obtuvo respuesta alguna. Por eso decidi? salir al exterior y llamar por teléfono al servicio de emergencias.
Después, habl? con otro residente en el edificio y ambos bajaron al garaje, donde se encontraron con la pareja del sexagenario fallecido. Manifest? que el inmueble de viviendas San Miguel "era y es un edificio tranquilo".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/matar-taxista-tenerife-confundio-comprador-droga-77374882)
Sin embargo, tanto la hija como la pareja sentimental de la v?ctima negaron que el var?n asesinado a golpes, Gabino, de 64 a?os, fuera consumidor de sustancias estupefacientes o alcohol. La mujer con la que conviv?a admiti? que unas pocas veces consumi? ansiol?ticos (diazepam) para poder dormir.
Los hechos ocurrieron cerca de las 3:30 horas de la madrugada del 3 de julio del 2019 en un garaje comunitario del edificio San Miguel, en la calle Los Gonz?lez, en el n?cleo de San Isidro.
El acusado, identificado como Jofre André Salda?a, que hoy tiene 21 a?os, se neg? a responder a las preguntas de la fiscal, Olga Méndez; de la abogada de la acusaci?n particular, Candelaria Vel?zquez, y del letrado defensor, Ginés Cabrera.
Si el Ministerio P?blico y la abogada que representa a la hija de la v?ctima solicitan para el presunto autor 25 a?os de prisi?n por un delito de asesinato con alevos?a y ensa?amiento (pues estiman que la v?ctima no tuvo opci?n de defensa y sufri? un dolor innecesario), el abogado defensor pide una pena de 10 a?os por homicidio, pues la muerte ocurri? en una pelea entre los dos hombres y Gabino muri? a los pocos segundos de recibir los primeros golpes; es decir, "que no sufri? en exceso".
Gabino trabajaba como taxista en el municipio de Adeje. Pero era natural del barrio de El Draguito, en Granadilla de Abona. A las 3:25 horas del 3 de julio accedi? al garaje comunitario del edificio San Miguel, al que se hab?a mudado apenas dos d?as antes. Accedi? con su Seat Panda Trans, que estaba cargado con bolsas para la citada mudanza, ya que hasta entonces hab?a residido en Llano del Camello, en Las Chafiras (San Miguel de Abona).
Pocos segundos después, al citado garaje entr? también el joven acusado. El individuo colombiano, que entonces ten?a 18 a?os, se neg? a declarar, por lo que su posible defensa se bas? en el escrito presentado por su abogado. Seg?n esta versi?n, el procesado estuvo en la casa de un familiar en San Isidro, donde consumi? alcohol y droga hasta la madrugada. Y después se dirigi? hasta el edificio de San Miguel, supuestamente con la intenci?n de vender un gramo de coca?na a un cliente. En base al planteamiento del citado letrado, Jofre André pens? err?namente que Gabino era el supuesto comprador.
La defensa esgrime que entre los dos varones se produjo una pelea y que la v?ctima muri? a causa de los golpes que el taxista sufri? en la zona de la laringe y en el encéfalo a los pocos segundos de recibirlos. Y, adem?s, apunt? que el joven "no pudo autocontrolarse" por el alcohol y la droga que hab?a consumido.
Dej? entrever que supuestamente el sexagenario no lleg? a sangrar y que tanto las ?ltimas lesiones como las quemaduras se registraron cuando el afectado ya hab?a muerto. Adem?s, expuso que el joven no ten?a un plan de huida.
Sin embargo, la Fiscal?a y la abogada de la hija de la v?ctima piensan todo lo contrario. Es decir, que Gabino no tuvo opci?n alguna de defenderse y que sufri? numerosos pu?etazos, patadas y pisotones, que le provocaron un dolor innecesario antes de perder la vida. Adem?s, presuntamente el acusado desnud? a la v?ctima y trat? de quemarla con la ayuda de productos t?xicos para borrar pruebas.
La fiscal manifest? a los miembros del Jurado que la respuesta real sobre por qué se produjo la paliza mortal a la v?ctima "es posible que nunca se las pueda dar". Y, adem?s, advirti? de que, en primer lugar, en la Justicia espa?ola no hay que probar el motivo de un hecho de este tipo y, en segundo, lo que se hizo "no tiene justificaci?n".
Frente al supuesto motivo esgrimido por el letrado de la defensa, la abogada de la hija afirm? que "no hay un solo documento que pruebe" que el acusado "estaba bajo la influencia" de bebidas alcoh?licas o alguna o varias sustancias estupefacientes.
Mar?a, la pareja de la v?ctima, afirm? que llevaba ocho a?os de relaci?n sentimental con Gabino cuando ocurrieron los hechos. Cuando el hombre trabajaba en el turno de noche, la hora normal de llegada al domicilio que ambos compart?an oscilaba entre las 5:00 y las 5:15 horas.
Aquella madrugada, la mujer se despert? a las 5:30 y se percat? de que Gabino no hab?a llegado todav?a. Y tampoco respondi? a sus insistentes llamadas de teléfono. Adem?s, no la hab?a avisado de que ten?a previsto retrasarse. Baj? en ascensor hasta el garaje comunitario y all? encontr? el cad?ver de su pareja.
Mar?a asegur? que el taxista se hallaba tendido "en el suelo, casi desnudo; muy blanco, sab?a que estaba muerto". Quiso llamar a las fuerzas de seguridad, pero en el garaje no hay cobertura. Y se?al? que poco después se encontr? con un vecino, que fue quien realiz? la primera llamada a los servicios de emergencia.
La pareja sentimental de Gabino explic? que este era una persona muy tranquila, a quien nunca vio protagonizar una pelea ni con un comportamiento violento. Apunt? que no sab?a que tuviera problemas con alguien. Adem?s, se?al? que no consum?a alcohol ni drogas, "ni pastillas para dormir". Sin embargo, después, a preguntas del abogado defensor, aclar? que una o dos veces si recurri? a ansiol?ticos para poder descansar.
Después de perder al hombre con quien compart?a su vida, decidi? volver a trabajar, "para no pensar m?s", pero la imagen de ver el cuerpo sin vida de Gabino no se le va a borrar. Aclar? que no vio ni una gota de sangre junto al cad?ver, pero que s? ten?a la cara hinchada.
La hija de la v?ctima estaba desayunando en el momento en que recibi? la llamada de la Guardia Civil, que la inform? de lo que hab?a ocurrido. Como no se cre?a lo que le contaban los agentes, decidi? colgar. Los profesionales del Instituto Armado volvieron a telefonear y esta vez fue su expareja quien recibi? la informaci?n y la advertencia de que ten?a que presentarse en el lugar de los hechos.
La joven defini? a su padre como "normal, trabajador, dedicado al taxi y que se preocup? por mi educaci?n". Asegur? que nunca lo vio protagonizar una pelea ni en un acto violento. Por ese motivo, no encuentra una explicaci?n razonable a lo que pas?. De hecho, ella ha tenido que recurrir a pedir apoyo psicol?gico.
Indic? que Gabino era un hombre de complexi?n normal, "ni delgado ni atlético". La ?ltima llamada que recibi? de su progenitor fue para preguntarle c?mo le hab?a ido en los ex?menes de su oposici?n a funcionaria. Esas pruebas las aprob?, pero su padre nunca lo lleg? a saber. Ella desconoc?a que Gabino tomara ansiol?ticos para dormir.
Uno de los vecinos fue avisado por su esposa de que en el garaje hab?a un hombre "arreglando un coche", pero que era muy raro, "porque estaba desnudo". Dicho testigo entr? en el aparcamiento y verific? que hab?a un hombre tendido en el suelo. No se acerc? y salud?, pero no obtuvo respuesta alguna. Por eso decidi? salir al exterior y llamar por teléfono al servicio de emergencias.
Después, habl? con otro residente en el edificio y ambos bajaron al garaje, donde se encontraron con la pareja del sexagenario fallecido. Manifest? que el inmueble de viviendas San Miguel "era y es un edificio tranquilo".
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