الريــم
10-15-2022, 08:13 AM
"Cogi? el coche de mi madre, la Citroën 15 y sali? de casa". Rota por el dolor, desgastada por la b?squeda y apretando los dientes para luchar, para salir adelante, Mayte Picazo echa la vista atr?s y retrocede a enero de 2021, d?as antes de que su hermana, Anabel - Ana Isabel Picazo- desapareciera. Deportista, excelente nadadora, profesora de inglés, maestra. Ha cumplido 41 a?os, aunque sali? de casa con 39. Se fue sin despedirse. Lo hizo en pleno toque de queda. No dijo adi?s. Cerr? la puerta y no han vuelto a verla.
https://uc-4u.com/clip/14388fcb-23c1-4ca7-a4b9-3d1b2c534848_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Cartel y titulares de prensa alertando de la desaparici?n de Anabel; una foto de la profesora. | CASO ABIERTO
Enero de 2021. Las cifras de contagios por coronavirus no ceden. Espa?a apunta a la normalidad, pero no llega. En Tarazona de la Mancha (Albacete) se instala el toque de queda: "queda decretado en toda la regi?n a las 22.00 horas", anunciaba el gobierno auton?mico d?as antes. Restring?a, adem?s, el movimiento entre municipios excepto para actividades estrictamente laborales, educativas y de servicios esenciales.
"Sali? de casa (en Tarazona de la Mancha, Albacete) aquel 28 de enero", arranca Mayte. Aquel d?a, el ?ltimo, "mi hermana se salt? el toque de queda. Se fue a las nueve de la noche y lleg? hasta Albacete. Estuvo en un hotel, que no pag?, solo unas horas. Cuando fueron a limpiar la habitaci?n saltaron las alarmas".
"Llevaba d?as encerrada"
La casa en la que Mayte, Anabel y la madre de ambas viv?an tiene dos plantas. "Mi padre falleci? un par de a?os antes, se quit? la vida. Ni mi hermana ni yo viv?amos ya en el pueblo, regresamos... luego lleg? la pandemia". Mayte y su madre viv?an en la planta baja, que hab?an preparado en tiempo récord cuando el hombre se rompi? la cadera, consiguiendo crear dos viviendas independientes. Anabel lo hac?a en la segunda planta, sola, "llevaba d?as encerrada, aislada".
"Normalmente", explica su hermana, "aunque las dos plantas son ya independientes, bajaba a comer a la planta baja". Estuvo d?as sin hacerlo, "no era alarmante, hab?a podido comprar algo y estar perfectamente en su casa", recuerda.
Tras varias comidas en las que Anabel se ausent?, "sub?, fui a su habitaci?n y le dije que llamara a mi madre, que estaba preocupada". Anabel cerr? la puerta. "Dijo que estaba haciendo una limpieza". Mayte no vio nada. "Ella cre?a en el esoterismo….". Fue la ?ltima vez que hablaron. Nunca m?s volvi? a verla.
https://uc-4u.com/clip/87135699-9aed-4858-b989-fd4e1a219640_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, en 2017, en los carnavales de Tarazona de la Mancha (Albacete) |
"Cuando la chica que limpia en el hotel accedi? al cuarto, todo estaba diferente: hab?a sal, romero, cosas movidas", relata la hermana de Anabel
Mayte y su madre, en la planta baja, reciben una llamada. Anabel ya no estaba. "El hotel de Albacete", recuerda. "Mi hermana hab?a salido de casa con el coche de mi madre. Una vez en el hotel, se fue sin pagar, por la puerta de atr?s. Le dijo al recepcionista que lo abonar?a luego, porque iba a venir un se?or a recogerla". "Cuando la chica que limpia en el hotel accede al cuarto, todo estaba diferente: hab?a sal, romero, cosas movidas. Estaba revuelta".
No hab?a nada de ella, solo su abrigo. "Mi hermana hab?a ido a la calle sin chaqueta. Era invierno, justo después del temporal Filomena, hab?a que llevar abrigo por narices", recuerda Mayte. "Nos asustamos, empezamos a llamar a su m?vil hasta que lo cogi? un se?or y nos dijo que el teléfono estaba en el hotel". No lo llevaba con ella.
Confinadas, sin poder buscarla
La pandemia dificult? todo. "No pod?amos salir del pueblo. No pod?amos buscar nosotras", recuerda con dolor. "No entend?amos nada, esperamos un par de d?as por si nos llamaba". Cuarenta y ocho horas después, no hab?a llamadas. Sin noticias, interpusieron la denuncia por desaparici?n.
"La pandemia, el fallecimiento de mi padre, regresar al pueblo donde ya no viv?a... a mi hermana le pudo la situaci?n. Le ocurri? algo"
Las pesquisas se estancaron desde el inicio: ?fuga voluntaria? Un par de semanas m?s tarde, tras un un sinf?n de hip?tesis varias, apareci? su coche: "estaba abierto, con las llaves puestas. Hab?a una bolsa con alimentos, se hab?a gastado 50 euros en comida que compr? en una gasolinera. Agua, tenedores… Solo se comi? un d?nut de chocolate y una lata de ensalada ya preparada", cuenta su hermana. Se mir? a fondo el veh?culo, "se encontr? su bolso con las llaves de casa, del almacén, de la huerta... Su documentaci?n, su tarjeta de crédito, su dinero… Encima no lleva nada".
https://uc-4u.com/clip/d7df2b41-c844-4dc3-8c24-91384bd24a08_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, instantes antes de desaparecer, comprando en la gasolinera. | CASO ABIERTO
El ticket en la bolsa apunt? a una gasolinera. La c?mara del establecimiento inmortaliz? la compra. El empleado del surtidor cont? que Anabel hab?a llegado andando y sola.
Ni tren ni autob?s
Sin noticias, sin rastro, la mirada se centr? en el coche. "Apareci? cerca de las estaciones de tren y autobuses", recuerda Mayte, "los investigadores dijeron que no se hab?a montado en ninguno". Se inspeccion? la zona, se miraron pozos, se batieron los alrededores. Sin respuesta.
La Guardia Civil registr? su vivienda. Volver?an meses después. "La primera inspecci?n fue superficial, en la segunda revisaron ordenador y se llevaron su teléfono". El patr?n de acceso del m?vil supuso un reto a los agentes. "No daban con ello...".
Después de un a?o, "les ped? que me lo devolvieran". Durante una semana Mayte prob? gestos a ciegas: "consegu? abrirlo", cuenta. "No sabemos si hay algo que sirva para encontrar a mi hermana, lo entregue a la polic?a judicial". Hasta la fecha.
https://uc-4u.com/clip/73285fb4-3e01-41cc-a23b-03efe1766ac1_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, en una foto compartida por su familia. | CASO ABIERTO
Albacete se empapel? con la cara de Anabel. "La pandemia, el fallecimiento de mi padre, regresar al pueblo, donde ya no viv?a... a mi hermana le pudo la situaci?n. Le ocurri? algo", lamenta.
Secta colombiana
La escena del hotel, la de casa, abri? las hip?tesis. "Lamentablemente... tenemos dos opciones: puede que mi hermana esté muerta. Otra es que esté en una secta".
La sospecha de los agentes no sorprendi? a su hermana. "Anabel era muy especial, diferente...". Hace unos a?os, "no sé cuantos, no recuerdo, estuvo metida en una especie de escisi?n de una secta colombiana, pero que era legal en Espa?a. En aquella época hasta se fue a Colombia, con billete de ida, no de vuelta, pero regres?. No nos quiso contar nada. Un amigo fue quien nos dijo que hab?a salido, pero que se hab?a metido en una secta".
Afectada por la muerte de su padre, antes de desaparecer, volvi? a encerrarse. "Regresar al pueblo... esa sensibilidad, ese sentirse diferente con el tiempo se agudiz?, imagino que los grupos sectarios se aprovechan de esas cosas".
Se investigaron sus redes, sus contactos. No se hall? nada, solo un ?ltimo post, dedicado a sus padres. "Le encantaba escribir", recuerda Mayte. No se desped?a, los homenajeaba, pero no volvi? a dar se?ales. Se indag? en Valencia -donde vivi? un tiempo-, y Barcelona, donde ten?a contactos. "Pudimos saber que empez? con la rama de la magia y espiritualidad m?s negra, mas fea. Empez? a conocer chamanes.. ese tipo de gente que te hacen cursos pagados de movidas espirituales". "Y si est? viva, pero en un grupo del que no puede salir. Quiz?, de ninguna manera vuelva", lamenta Mayte.
https://uc-4u.com/clip/f6748454-bdf2-4c4b-9997-87aa5b972814_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Profesora de infantil, hac?a tutoriales para ayudar a ni?os con dificultades. | CASO ABIERTO
"Mi madre est? devastada", lamenta. "Primero mi padre, ahora mi hermana... solo nos tenemos nosotras". Caminan juntas. Se han hecho una promesa: no rendirse, cuidarse, seguir adelante.
Trabajan de sol a sol, en el campo, con las gallinas, en la huerta. Una tiene 70 a?os y sigue subida al tractor; Mayte, soci?loga y trabajadora social, aprende a arar junto a ella. Necesitan que su d?a tenga m?s horas, "con 24 no llega". Al dolor de la ausencia se suman las dificultades legales.La falta de Anabel imposibilita acceder a la herencia del titular de todo, su padre; salir adelante, incluso vender propiedades.
Anabel, amante de su profesi?n, la ense?anza. Divertida y sensible, "con un coraz?n enorme", se fue haciendo peque?ita hasta que dejaron de verla. Madre y hermana la esperan. Solo desean que aparezca, que alguien les diga qué, cu?ndo, c?mo. Que regrese, que la pesadilla acabe.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/ana-isabel-primaria-profesora-desaparecida-albacete-77276958)
https://uc-4u.com/clip/14388fcb-23c1-4ca7-a4b9-3d1b2c534848_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Cartel y titulares de prensa alertando de la desaparici?n de Anabel; una foto de la profesora. | CASO ABIERTO
Enero de 2021. Las cifras de contagios por coronavirus no ceden. Espa?a apunta a la normalidad, pero no llega. En Tarazona de la Mancha (Albacete) se instala el toque de queda: "queda decretado en toda la regi?n a las 22.00 horas", anunciaba el gobierno auton?mico d?as antes. Restring?a, adem?s, el movimiento entre municipios excepto para actividades estrictamente laborales, educativas y de servicios esenciales.
"Sali? de casa (en Tarazona de la Mancha, Albacete) aquel 28 de enero", arranca Mayte. Aquel d?a, el ?ltimo, "mi hermana se salt? el toque de queda. Se fue a las nueve de la noche y lleg? hasta Albacete. Estuvo en un hotel, que no pag?, solo unas horas. Cuando fueron a limpiar la habitaci?n saltaron las alarmas".
"Llevaba d?as encerrada"
La casa en la que Mayte, Anabel y la madre de ambas viv?an tiene dos plantas. "Mi padre falleci? un par de a?os antes, se quit? la vida. Ni mi hermana ni yo viv?amos ya en el pueblo, regresamos... luego lleg? la pandemia". Mayte y su madre viv?an en la planta baja, que hab?an preparado en tiempo récord cuando el hombre se rompi? la cadera, consiguiendo crear dos viviendas independientes. Anabel lo hac?a en la segunda planta, sola, "llevaba d?as encerrada, aislada".
"Normalmente", explica su hermana, "aunque las dos plantas son ya independientes, bajaba a comer a la planta baja". Estuvo d?as sin hacerlo, "no era alarmante, hab?a podido comprar algo y estar perfectamente en su casa", recuerda.
Tras varias comidas en las que Anabel se ausent?, "sub?, fui a su habitaci?n y le dije que llamara a mi madre, que estaba preocupada". Anabel cerr? la puerta. "Dijo que estaba haciendo una limpieza". Mayte no vio nada. "Ella cre?a en el esoterismo….". Fue la ?ltima vez que hablaron. Nunca m?s volvi? a verla.
https://uc-4u.com/clip/87135699-9aed-4858-b989-fd4e1a219640_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, en 2017, en los carnavales de Tarazona de la Mancha (Albacete) |
"Cuando la chica que limpia en el hotel accedi? al cuarto, todo estaba diferente: hab?a sal, romero, cosas movidas", relata la hermana de Anabel
Mayte y su madre, en la planta baja, reciben una llamada. Anabel ya no estaba. "El hotel de Albacete", recuerda. "Mi hermana hab?a salido de casa con el coche de mi madre. Una vez en el hotel, se fue sin pagar, por la puerta de atr?s. Le dijo al recepcionista que lo abonar?a luego, porque iba a venir un se?or a recogerla". "Cuando la chica que limpia en el hotel accede al cuarto, todo estaba diferente: hab?a sal, romero, cosas movidas. Estaba revuelta".
No hab?a nada de ella, solo su abrigo. "Mi hermana hab?a ido a la calle sin chaqueta. Era invierno, justo después del temporal Filomena, hab?a que llevar abrigo por narices", recuerda Mayte. "Nos asustamos, empezamos a llamar a su m?vil hasta que lo cogi? un se?or y nos dijo que el teléfono estaba en el hotel". No lo llevaba con ella.
Confinadas, sin poder buscarla
La pandemia dificult? todo. "No pod?amos salir del pueblo. No pod?amos buscar nosotras", recuerda con dolor. "No entend?amos nada, esperamos un par de d?as por si nos llamaba". Cuarenta y ocho horas después, no hab?a llamadas. Sin noticias, interpusieron la denuncia por desaparici?n.
"La pandemia, el fallecimiento de mi padre, regresar al pueblo donde ya no viv?a... a mi hermana le pudo la situaci?n. Le ocurri? algo"
Las pesquisas se estancaron desde el inicio: ?fuga voluntaria? Un par de semanas m?s tarde, tras un un sinf?n de hip?tesis varias, apareci? su coche: "estaba abierto, con las llaves puestas. Hab?a una bolsa con alimentos, se hab?a gastado 50 euros en comida que compr? en una gasolinera. Agua, tenedores… Solo se comi? un d?nut de chocolate y una lata de ensalada ya preparada", cuenta su hermana. Se mir? a fondo el veh?culo, "se encontr? su bolso con las llaves de casa, del almacén, de la huerta... Su documentaci?n, su tarjeta de crédito, su dinero… Encima no lleva nada".
https://uc-4u.com/clip/d7df2b41-c844-4dc3-8c24-91384bd24a08_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, instantes antes de desaparecer, comprando en la gasolinera. | CASO ABIERTO
El ticket en la bolsa apunt? a una gasolinera. La c?mara del establecimiento inmortaliz? la compra. El empleado del surtidor cont? que Anabel hab?a llegado andando y sola.
Ni tren ni autob?s
Sin noticias, sin rastro, la mirada se centr? en el coche. "Apareci? cerca de las estaciones de tren y autobuses", recuerda Mayte, "los investigadores dijeron que no se hab?a montado en ninguno". Se inspeccion? la zona, se miraron pozos, se batieron los alrededores. Sin respuesta.
La Guardia Civil registr? su vivienda. Volver?an meses después. "La primera inspecci?n fue superficial, en la segunda revisaron ordenador y se llevaron su teléfono". El patr?n de acceso del m?vil supuso un reto a los agentes. "No daban con ello...".
Después de un a?o, "les ped? que me lo devolvieran". Durante una semana Mayte prob? gestos a ciegas: "consegu? abrirlo", cuenta. "No sabemos si hay algo que sirva para encontrar a mi hermana, lo entregue a la polic?a judicial". Hasta la fecha.
https://uc-4u.com/clip/73285fb4-3e01-41cc-a23b-03efe1766ac1_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Anabel, en una foto compartida por su familia. | CASO ABIERTO
Albacete se empapel? con la cara de Anabel. "La pandemia, el fallecimiento de mi padre, regresar al pueblo, donde ya no viv?a... a mi hermana le pudo la situaci?n. Le ocurri? algo", lamenta.
Secta colombiana
La escena del hotel, la de casa, abri? las hip?tesis. "Lamentablemente... tenemos dos opciones: puede que mi hermana esté muerta. Otra es que esté en una secta".
La sospecha de los agentes no sorprendi? a su hermana. "Anabel era muy especial, diferente...". Hace unos a?os, "no sé cuantos, no recuerdo, estuvo metida en una especie de escisi?n de una secta colombiana, pero que era legal en Espa?a. En aquella época hasta se fue a Colombia, con billete de ida, no de vuelta, pero regres?. No nos quiso contar nada. Un amigo fue quien nos dijo que hab?a salido, pero que se hab?a metido en una secta".
Afectada por la muerte de su padre, antes de desaparecer, volvi? a encerrarse. "Regresar al pueblo... esa sensibilidad, ese sentirse diferente con el tiempo se agudiz?, imagino que los grupos sectarios se aprovechan de esas cosas".
Se investigaron sus redes, sus contactos. No se hall? nada, solo un ?ltimo post, dedicado a sus padres. "Le encantaba escribir", recuerda Mayte. No se desped?a, los homenajeaba, pero no volvi? a dar se?ales. Se indag? en Valencia -donde vivi? un tiempo-, y Barcelona, donde ten?a contactos. "Pudimos saber que empez? con la rama de la magia y espiritualidad m?s negra, mas fea. Empez? a conocer chamanes.. ese tipo de gente que te hacen cursos pagados de movidas espirituales". "Y si est? viva, pero en un grupo del que no puede salir. Quiz?, de ninguna manera vuelva", lamenta Mayte.
https://uc-4u.com/clip/f6748454-bdf2-4c4b-9997-87aa5b972814_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Profesora de infantil, hac?a tutoriales para ayudar a ni?os con dificultades. | CASO ABIERTO
"Mi madre est? devastada", lamenta. "Primero mi padre, ahora mi hermana... solo nos tenemos nosotras". Caminan juntas. Se han hecho una promesa: no rendirse, cuidarse, seguir adelante.
Trabajan de sol a sol, en el campo, con las gallinas, en la huerta. Una tiene 70 a?os y sigue subida al tractor; Mayte, soci?loga y trabajadora social, aprende a arar junto a ella. Necesitan que su d?a tenga m?s horas, "con 24 no llega". Al dolor de la ausencia se suman las dificultades legales.La falta de Anabel imposibilita acceder a la herencia del titular de todo, su padre; salir adelante, incluso vender propiedades.
Anabel, amante de su profesi?n, la ense?anza. Divertida y sensible, "con un coraz?n enorme", se fue haciendo peque?ita hasta que dejaron de verla. Madre y hermana la esperan. Solo desean que aparezca, que alguien les diga qué, cu?ndo, c?mo. Que regrese, que la pesadilla acabe.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/ana-isabel-primaria-profesora-desaparecida-albacete-77276958)