الريــم
10-11-2022, 09:20 PM
Los vocales conservadores del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) anunciaron a sus colegas progresistas este martes, dia 11 de octubre, en la calle del Marqués de la Ensenada, sede madrile?a del Poder Judicial, que la renovaci?n del ?rgano de gobierno de los jueces, bloqueada desde noviembre de 2018 por el Partido Popular ser? en un abrir y cerrar de ojos, seg?n sus contactos con c?rculos pr?ximos al presidente Alberto N??ez Feij?o.
?Qué ha llevado a esta renovaci?n que se anuncia fulminante -"ya", seg?n medios conservadores- en medio de la crisis constitucional y judicial derivada del estado de coma del Tribunal Constitucional y el estado vegetativo del CGPJ?
Pues la rentabilidad pol?tica y medi?tica de una renovaci?n que deja para después, sin fecha, la cobertura de los cuatro mandatos caducados en el TC (Pedro Gonz?lez-Trevijano y Antonio Narv?ez, por parte del Gobierno; y Juan Antonio Xiol y Santiago Mart?nez-Vares, por parte del CGPJ) y coloca en primer lugar la del CGPJ.
Pero eso de dejar para una fase posterior los nombramientos del TC tiene una excepci?n. Y es la que, hablando en plata, conviene al PP. En la negociaci?n, el Gobierno ha aceptado que con la renovaci?n del CGPJ se sustituya a un magistrado del TC que renunci? por razones de enfermedad en julio pasado: Alfredo Montoya. Su mandato venc?a en 2026, pero después de estar m?s de un a?o sin participar en el tribunal de garant?as dimiti? finalmente el verano pasado.
N??ez Feij?o ha puesto sobre la mesa esta sustituci?n por una raz?n fundamental. Su nombramiento lo hace el Senado. Y aqu? quien manda es el PSOE. En rom?n paladino: el candidato del PP que le va a sustituir necesita los votos socialistas.
Es decir que, parad?jicamente, a corto plazo, al quedar los cuatro magistrados con sus mandatos vencidos, el PP aumenta transitoriamente su poder?o en el tribunal de garant?as, pasando de seis magistrados (Gonz?lez-Trevijano, Mart?nez-Vares, Narv?ez, Ricardo Enr?quez, Enrique Arnaldo y Concepci?n Espejel) a siete con el magistrado que entrar? en lugar de Montoya, frente a los cinco del sector progresista (Juan Antonio Xiol, C?ndido Conde-Pumpido, Mar?a Luisa Balaguer, Ram?n S?ez, Inmaculada Montalb?n).
Si se hubieran realizado los dos nombramientos en regla que tocaba hacer al Gobierno y uno de los dos del CGPJ, arrojaba el resultado de una mayor?a de progresistas, que pasaban a ser siete magistrados contra cinco del sector conservador (incluyendo al sustituto de Montoya).
El lloriqueo por la presunta mayor?a abrumadora del sector progresista en el futuro TC, argumento esgrimido por el PP, pues, ha dado resultado. El Gobierno, que pod?a hacerlo, renuncia a realizar sus dos nombramientos. De inmediato, el PP se ha asegurado que Montoya ser? sustituido inmediatamente junto con la renovaci?n del CGPJ, mientras que las otras cuatro plazas vencidas ser? una tarea del nuevo CGPJ. El nombre de Montoya ha entrado junto con el de la renovaci?n del CGPJ porque, se ha acordado un nombramiento parlamentario -como el de los vocales del Consejo- concretamente del Senado.
Por otra parte, el sector progresista ya hab?a sufrido el rodillo conservador cuando dicho grupo logr? “cooptar” a uno de los aparentemente progresistas, Encarnaci?n Roca, en 2017 a cambio de hacerla vicepresidenta, lo que dejo al sector con cuatro magistrados.
No es renovaci?n
En todo caso, no es cierto, como ha dicho N??ez Feij?o, que el PP “ha conseguido la renovaci?n conjunta del CGPJ y del Tribunal Constitucional”. Ha logrado asegurarse con los votos del PSOE en el Senado la plaza de Montoya. Y esto no es renovaci?n -que debe hacerse en plazo y en este caso los mandatos est?n vencidos desde el 12 de junio pasado- sino sustituci?n de un magistrado enfermo. No son pocos los casos en que el TC no ha nombrado sustitutos en casos como este. Sin ir m?s lejos, el magistrado Fernando Valdés, por ejemplo, no fue reemplazado.
El Gobierno, pues, acepta que se incumpla la nueva ley de 20 de julio que autorizaba a este CGPJ a nombrar a los dos magistrados del TC. Una norma que el PP consider? una l?nea roja que deb?a ser retirada. Y el Gobierno se compromete a hacer por su cuenta los nombramientos a que ten?a derecho y legitimidad (sentencia del TC aprobada por unanimidad en 2016 sobre renovaci?n parcial).
Otro argumento planteado por el PP en su ?ltima propuesta de julio es objeto de negociaci?n. Y es la que propon?a que el nuevo Consejo proceda a crea una comisi?n que en el plazo de seis meses proponga un nuevo sistema de elecci?n del Poder Judicial.
En la pr?ctica es un gesto meramente simb?lico. Porque cuando ese nuevo sistema se proponga, las elecciones generales estar?n a la vuelta de la esquina y cada partido har? lo que le parezca cuando llegue al Gobierno.
El parto del nuevo CGPJ en realidad lleva cuatro a?os y diez meses de retraso, cuando se frustr? la renovaci?n. Est? listo desde noviembre de 2018 con los candidatos a vocales examinados por las c?maras y no se prevén variaciones de importancia.
La cobertura de los cuatro magistrados del TC, en cambio, queda aplazada 'sine die'. Porque a partir del nombramiento de los vocales estos deber?n elegir al presidente y vicepresidente del TS y nuevo CGPJ.
En estos momentos, la magistrada de la Sala Tercera del Tribunal Supremo, Pilar Teso, es una de las pocas que podr?a concitar el consenso de los dos grandes partidos. Pero puede llevar su tiempo, sus tiras y aflojes. Y una vez superada esta fase, la nueva presidenta o presidente deber? incluir en el orden del d?a los nombramientos de los dos magistrados del TC. A continuaci?n, el Gobierno anunciar? los suyos.
La sucesi?n de Lesmes
De momento, ese punto s? est? en el orden del d?a que curs? el presidente dimitido, Carlos Lesmes, el jueves de la semana pasada. El primer punto es la sucesi?n de Lesmes, a saber, la presidencia del magistrado Francisco Mar?n Cast?n, presidente de la Sala Primera (de lo Civil) del Tribunal Supremo. El sector progresista pidi? a Lesmes que este fuese el primer punto y as? consta. Este sector propone un documento de rechazo a la sucesi?n dise?ada por el dedo del presidente dimitido y la propuesta de que se aplique el método seguido cuando Lesmes se ausentaba. Quien presid?a la Comisi?n Permanente era el vocal de mayor edad. Ello recae en Rafael Mozo. Ya este jueves, Mozo presidir? el Pleno convocado por Lesmes y en ausencia del ya expresidente ser? el quien lo presida. As? est?, por otra parte, establecido por ley.
El sector conservador apoyar?a a Mozo siempre y cuando se establezca con claridad que es el vocal de mayor edad y no el presidente como tal, vamos, que act?a en sustituci?n del presidente dimitido o en funciones, y por vacante del puesto de vicepresidente (?ngel Juanes se jubil? en 2019 y no fue sustituido), pero no tiene los poderes de los que gozaba Lesmes. Es decir, dirigir? la transici?n, que ser? breve, sometiéndose a la Comisi?n Permanente y al Pleno.
Por lo que se refiere al magistrado Mar?n Cast?n fuentes judiciales se?alan que, de momento, ante la dimisi?n de Lesmes como presidente del Supremo, es él quien ha asumido ese cargo al tiempo que ha dejado saber su intenci?n de respetar a los vocales del CGPJ y darles tiempo para que debata la situaci?n creada y evitar enfrentamientos.
Moraleja: cuando el PP logr? en 2018 la presidencia para el magistrado Manuel Marchena firm? con ambas manos la aprobaci?n de los vocales -que son los que ir?n ahora al CGPJ-, operaci?n que se frustr? y origin? un retraso “sin precedentes en la experiencia constitucional de Espa?a, un desastre institucional”, seg?n el comunicado difundido por la Sala de Gobierno del Supremo el pasado lunes 10. Ahora que ha obtenido a Montoya inmediatamente y posponer la pérdida de la mayor?a progresista en el TC, ha levantado su veto. Y ya no dir? cuando llegue el momento, en unos meses, que sigue sin encontrar a un magistrado para el TC. Mira por d?nde, para sustituir a Montoya, ya tiene candidato.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/renovacion-fulminante-cgpj-contada-ernesto-77136701)
?Qué ha llevado a esta renovaci?n que se anuncia fulminante -"ya", seg?n medios conservadores- en medio de la crisis constitucional y judicial derivada del estado de coma del Tribunal Constitucional y el estado vegetativo del CGPJ?
Pues la rentabilidad pol?tica y medi?tica de una renovaci?n que deja para después, sin fecha, la cobertura de los cuatro mandatos caducados en el TC (Pedro Gonz?lez-Trevijano y Antonio Narv?ez, por parte del Gobierno; y Juan Antonio Xiol y Santiago Mart?nez-Vares, por parte del CGPJ) y coloca en primer lugar la del CGPJ.
Pero eso de dejar para una fase posterior los nombramientos del TC tiene una excepci?n. Y es la que, hablando en plata, conviene al PP. En la negociaci?n, el Gobierno ha aceptado que con la renovaci?n del CGPJ se sustituya a un magistrado del TC que renunci? por razones de enfermedad en julio pasado: Alfredo Montoya. Su mandato venc?a en 2026, pero después de estar m?s de un a?o sin participar en el tribunal de garant?as dimiti? finalmente el verano pasado.
N??ez Feij?o ha puesto sobre la mesa esta sustituci?n por una raz?n fundamental. Su nombramiento lo hace el Senado. Y aqu? quien manda es el PSOE. En rom?n paladino: el candidato del PP que le va a sustituir necesita los votos socialistas.
Es decir que, parad?jicamente, a corto plazo, al quedar los cuatro magistrados con sus mandatos vencidos, el PP aumenta transitoriamente su poder?o en el tribunal de garant?as, pasando de seis magistrados (Gonz?lez-Trevijano, Mart?nez-Vares, Narv?ez, Ricardo Enr?quez, Enrique Arnaldo y Concepci?n Espejel) a siete con el magistrado que entrar? en lugar de Montoya, frente a los cinco del sector progresista (Juan Antonio Xiol, C?ndido Conde-Pumpido, Mar?a Luisa Balaguer, Ram?n S?ez, Inmaculada Montalb?n).
Si se hubieran realizado los dos nombramientos en regla que tocaba hacer al Gobierno y uno de los dos del CGPJ, arrojaba el resultado de una mayor?a de progresistas, que pasaban a ser siete magistrados contra cinco del sector conservador (incluyendo al sustituto de Montoya).
El lloriqueo por la presunta mayor?a abrumadora del sector progresista en el futuro TC, argumento esgrimido por el PP, pues, ha dado resultado. El Gobierno, que pod?a hacerlo, renuncia a realizar sus dos nombramientos. De inmediato, el PP se ha asegurado que Montoya ser? sustituido inmediatamente junto con la renovaci?n del CGPJ, mientras que las otras cuatro plazas vencidas ser? una tarea del nuevo CGPJ. El nombre de Montoya ha entrado junto con el de la renovaci?n del CGPJ porque, se ha acordado un nombramiento parlamentario -como el de los vocales del Consejo- concretamente del Senado.
Por otra parte, el sector progresista ya hab?a sufrido el rodillo conservador cuando dicho grupo logr? “cooptar” a uno de los aparentemente progresistas, Encarnaci?n Roca, en 2017 a cambio de hacerla vicepresidenta, lo que dejo al sector con cuatro magistrados.
No es renovaci?n
En todo caso, no es cierto, como ha dicho N??ez Feij?o, que el PP “ha conseguido la renovaci?n conjunta del CGPJ y del Tribunal Constitucional”. Ha logrado asegurarse con los votos del PSOE en el Senado la plaza de Montoya. Y esto no es renovaci?n -que debe hacerse en plazo y en este caso los mandatos est?n vencidos desde el 12 de junio pasado- sino sustituci?n de un magistrado enfermo. No son pocos los casos en que el TC no ha nombrado sustitutos en casos como este. Sin ir m?s lejos, el magistrado Fernando Valdés, por ejemplo, no fue reemplazado.
El Gobierno, pues, acepta que se incumpla la nueva ley de 20 de julio que autorizaba a este CGPJ a nombrar a los dos magistrados del TC. Una norma que el PP consider? una l?nea roja que deb?a ser retirada. Y el Gobierno se compromete a hacer por su cuenta los nombramientos a que ten?a derecho y legitimidad (sentencia del TC aprobada por unanimidad en 2016 sobre renovaci?n parcial).
Otro argumento planteado por el PP en su ?ltima propuesta de julio es objeto de negociaci?n. Y es la que propon?a que el nuevo Consejo proceda a crea una comisi?n que en el plazo de seis meses proponga un nuevo sistema de elecci?n del Poder Judicial.
En la pr?ctica es un gesto meramente simb?lico. Porque cuando ese nuevo sistema se proponga, las elecciones generales estar?n a la vuelta de la esquina y cada partido har? lo que le parezca cuando llegue al Gobierno.
El parto del nuevo CGPJ en realidad lleva cuatro a?os y diez meses de retraso, cuando se frustr? la renovaci?n. Est? listo desde noviembre de 2018 con los candidatos a vocales examinados por las c?maras y no se prevén variaciones de importancia.
La cobertura de los cuatro magistrados del TC, en cambio, queda aplazada 'sine die'. Porque a partir del nombramiento de los vocales estos deber?n elegir al presidente y vicepresidente del TS y nuevo CGPJ.
En estos momentos, la magistrada de la Sala Tercera del Tribunal Supremo, Pilar Teso, es una de las pocas que podr?a concitar el consenso de los dos grandes partidos. Pero puede llevar su tiempo, sus tiras y aflojes. Y una vez superada esta fase, la nueva presidenta o presidente deber? incluir en el orden del d?a los nombramientos de los dos magistrados del TC. A continuaci?n, el Gobierno anunciar? los suyos.
La sucesi?n de Lesmes
De momento, ese punto s? est? en el orden del d?a que curs? el presidente dimitido, Carlos Lesmes, el jueves de la semana pasada. El primer punto es la sucesi?n de Lesmes, a saber, la presidencia del magistrado Francisco Mar?n Cast?n, presidente de la Sala Primera (de lo Civil) del Tribunal Supremo. El sector progresista pidi? a Lesmes que este fuese el primer punto y as? consta. Este sector propone un documento de rechazo a la sucesi?n dise?ada por el dedo del presidente dimitido y la propuesta de que se aplique el método seguido cuando Lesmes se ausentaba. Quien presid?a la Comisi?n Permanente era el vocal de mayor edad. Ello recae en Rafael Mozo. Ya este jueves, Mozo presidir? el Pleno convocado por Lesmes y en ausencia del ya expresidente ser? el quien lo presida. As? est?, por otra parte, establecido por ley.
El sector conservador apoyar?a a Mozo siempre y cuando se establezca con claridad que es el vocal de mayor edad y no el presidente como tal, vamos, que act?a en sustituci?n del presidente dimitido o en funciones, y por vacante del puesto de vicepresidente (?ngel Juanes se jubil? en 2019 y no fue sustituido), pero no tiene los poderes de los que gozaba Lesmes. Es decir, dirigir? la transici?n, que ser? breve, sometiéndose a la Comisi?n Permanente y al Pleno.
Por lo que se refiere al magistrado Mar?n Cast?n fuentes judiciales se?alan que, de momento, ante la dimisi?n de Lesmes como presidente del Supremo, es él quien ha asumido ese cargo al tiempo que ha dejado saber su intenci?n de respetar a los vocales del CGPJ y darles tiempo para que debata la situaci?n creada y evitar enfrentamientos.
Moraleja: cuando el PP logr? en 2018 la presidencia para el magistrado Manuel Marchena firm? con ambas manos la aprobaci?n de los vocales -que son los que ir?n ahora al CGPJ-, operaci?n que se frustr? y origin? un retraso “sin precedentes en la experiencia constitucional de Espa?a, un desastre institucional”, seg?n el comunicado difundido por la Sala de Gobierno del Supremo el pasado lunes 10. Ahora que ha obtenido a Montoya inmediatamente y posponer la pérdida de la mayor?a progresista en el TC, ha levantado su veto. Y ya no dir? cuando llegue el momento, en unos meses, que sigue sin encontrar a un magistrado para el TC. Mira por d?nde, para sustituir a Montoya, ya tiene candidato.
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