الريــم
09-28-2022, 12:28 PM
El Ministerio de Hacienda y Funci?n P?blica inicia este miércoles la negociaci?n con los sindicatos sobre c?mo deben subir los salarios entre los empleados p?blicos. A diferencia de otros a?os, las conversaciones entre el equipo de Mar?a Jes?s Montero y las centrales prometen tener trascendencia m?s all? de los 3,4 millones de trabajadores de las distintas administraciones y empresas p?blicas, seg?n datos del INE. Y es que desde el sector privado, tanto patronal como sindicatos aguardan a la referencia que les planteen desde el sector p?blico, dentro del per?metro de ese difuso pacto de rentas que, de momento, no ha conseguido armar el Gobierno.
Los empresarios esperan contenci?n desde el Ejecutivo para evitar un precedente inc?modo de cara a los miles de convenios colectivos pendientes de renovar. Y las centrales, en un dif?cil equilibrio entre una cifra que no provoque una honda pérdida de poder adquisitivo entre los empleados p?blicos, pero conscientes de que cu?ntos m?s recursos aboque el Estado a ese incremento, menos le quedar?n para otro tipo de pol?ticas de cara a los m?s vulnerables.
La partida del tan repetido como poco concretado pacto de rentas comienza su primer asalto este miércoles. Patronal y sindicatos no han conseguido ponerse de acuerdo sobre c?mo repartirse en el sector privado los costes de la inflaci?n, mientras ambos agentes sociales –desde sus respectivas perspectivas- critican que el Gobierno no ha puesto suficiente de su parte para facilitar dicho consenso. Ahora, a las puertas de la confecci?n del anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado, el Ejecutivo deber? mostrar una de sus cartas de cara a ese pacto de rentas y pronunciarse sobre, con un IPC a doble d?gito, cu?nto cree que deben (y est? dispuesto) subir los salarios en la funci?n p?blica.
Este a?o el sueldo de los empleados p?blicos subi? el 2%, después de que Hacienda no lograr? un acuerdo con ninguna de las tres centrales con la que debe negociar (CCOO, UGT y Csif). Las tres rechazaron aceptar una cifra por debajo del IPC medio del 2021, que cerr? en el 3,2%, pues no quer?an avalar una pérdida de poder adquisitivo de los funcionarios. Si bien entonces la escalada inflacionaria se percib?a mayoritariamente como algo transitorio, actualmente la duraci?n de la misma es incierta y la idea de que el Gobierno no negociar? cifras al nivel de la actual inflaci?n est? asumida por todas las partes.
Para diluir la presumible pérdida de poder de compra de este a?o, las centrales aspiran a cerrar un acuerdo plurianual que permita compensar en los a?os venideros parte del déficit de este a?o. Fuentes conocedoras de las conversaciones preliminares que ha habido entre Hacienda y las centrales apuntan a que el incremento que Montero puede poner encima de la mesa rondar? el 10% a tres a?os. Una cifra negativa de cara a este ejercicio, pero que asegurar?a incrementos superiores a los habitualmente pactados para los pr?ximos dos.
A la espera de "referencias"
"Ser?a una referencia", fue la respuesta que dio el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, este verano en relaci?n al salario de los funcionarios y su encaje en el pacto de rentas. De hecho, ese 10% que podr?a barajar Montero para los empleados p?blicos no dista mucho de las cifras que se est?n barajando en la negociaci?n de algunos convenios colectivos actualmente en liza. Si bien la negociaci?n colectiva est? eminentemente bloqueada.
El ?ltimo gran pliego que se ha cerrado en las ?ltimas semanas es el de la hosteler?a de Catalu?a, que cubre a unos 300.000 trabajadores y se ha renovado con un incremento del 9% hasta 2024 (4%+3%+2%). Aqu? no hubo unidad sindical y UGT firm?, mientras CCOO acab? desmarc?ndose. Los primeros pusieron por delante el poder adquisitivo perdido en los ?ltimos a?os y la premisa de “es mejor esto que seguir con el convenio bloqueado”, en un sector especialmente castigado por los ertes y la parada pandémica. Y los segundos consideraron los avances insuficientes, en un contexto de competencia sindical.
La ausencia de una cl?usula de revisi?n salarial, que compense la diferencia entre el aumento pactado para este a?o y la cifra final del IPC, ha sido un ‘sapo’ que las centrales han tenido que manejar, en contra de los criterios que han recibido desde sus m?ximos ?rganos de direcci?n. Y es que este es el principal escollo en el sector privado. CCOO y UGT llaman a los suyos a no firmar ning?n convenio sin cl?usula de revisi?n salarial, independientemente de los incrementos que plantee la patronal. Y desde CEOE rechazan asumir dichas cl?usulas, en aras de que las empresas tengan que reabrir cuentas a final de a?o para subir sustancialmente sueldos.
La ausencia de dicha cl?usula es el escollo principal, por ejemplo, en la negociaci?n del convenio de oficinas y despachos. Otro de los que afectan a m?s trabajadores en Catalunya, unas 120.000 personas. Ah? la patronal ofrece una subida a tres a?os del 8,75% (3,75%+2,5%+2,5%) y los sindicatos reclaman un 11,5% (5,5%+3%+3%), aunque estos ?ltimos con cl?usula salarial. "No est? ni cerca el acuerdo", afirman fuentes sindicales consultadas. Una l?nea roja que en este y muchos otros convenios est? bloqueando las conversaciones. Por ejemplo, el del metal de Barcelona, que cubre a 170.000 personas y es de referencia para casi toda Espa?a, ten?a cl?usula y ahora la patronal no quiere renovarlo si esta se mantiene. Son excepciones contadas aquellos pliegos que se renuevan con este concepto, como es el caso de Seat, donde las centrales s? han logrado renovarla por tres a?os m?s.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/economia/negociacion-salarial-funcionarios-subidas-sector-privado-75969762)
Los empresarios esperan contenci?n desde el Ejecutivo para evitar un precedente inc?modo de cara a los miles de convenios colectivos pendientes de renovar. Y las centrales, en un dif?cil equilibrio entre una cifra que no provoque una honda pérdida de poder adquisitivo entre los empleados p?blicos, pero conscientes de que cu?ntos m?s recursos aboque el Estado a ese incremento, menos le quedar?n para otro tipo de pol?ticas de cara a los m?s vulnerables.
La partida del tan repetido como poco concretado pacto de rentas comienza su primer asalto este miércoles. Patronal y sindicatos no han conseguido ponerse de acuerdo sobre c?mo repartirse en el sector privado los costes de la inflaci?n, mientras ambos agentes sociales –desde sus respectivas perspectivas- critican que el Gobierno no ha puesto suficiente de su parte para facilitar dicho consenso. Ahora, a las puertas de la confecci?n del anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado, el Ejecutivo deber? mostrar una de sus cartas de cara a ese pacto de rentas y pronunciarse sobre, con un IPC a doble d?gito, cu?nto cree que deben (y est? dispuesto) subir los salarios en la funci?n p?blica.
Este a?o el sueldo de los empleados p?blicos subi? el 2%, después de que Hacienda no lograr? un acuerdo con ninguna de las tres centrales con la que debe negociar (CCOO, UGT y Csif). Las tres rechazaron aceptar una cifra por debajo del IPC medio del 2021, que cerr? en el 3,2%, pues no quer?an avalar una pérdida de poder adquisitivo de los funcionarios. Si bien entonces la escalada inflacionaria se percib?a mayoritariamente como algo transitorio, actualmente la duraci?n de la misma es incierta y la idea de que el Gobierno no negociar? cifras al nivel de la actual inflaci?n est? asumida por todas las partes.
Para diluir la presumible pérdida de poder de compra de este a?o, las centrales aspiran a cerrar un acuerdo plurianual que permita compensar en los a?os venideros parte del déficit de este a?o. Fuentes conocedoras de las conversaciones preliminares que ha habido entre Hacienda y las centrales apuntan a que el incremento que Montero puede poner encima de la mesa rondar? el 10% a tres a?os. Una cifra negativa de cara a este ejercicio, pero que asegurar?a incrementos superiores a los habitualmente pactados para los pr?ximos dos.
A la espera de "referencias"
"Ser?a una referencia", fue la respuesta que dio el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, este verano en relaci?n al salario de los funcionarios y su encaje en el pacto de rentas. De hecho, ese 10% que podr?a barajar Montero para los empleados p?blicos no dista mucho de las cifras que se est?n barajando en la negociaci?n de algunos convenios colectivos actualmente en liza. Si bien la negociaci?n colectiva est? eminentemente bloqueada.
El ?ltimo gran pliego que se ha cerrado en las ?ltimas semanas es el de la hosteler?a de Catalu?a, que cubre a unos 300.000 trabajadores y se ha renovado con un incremento del 9% hasta 2024 (4%+3%+2%). Aqu? no hubo unidad sindical y UGT firm?, mientras CCOO acab? desmarc?ndose. Los primeros pusieron por delante el poder adquisitivo perdido en los ?ltimos a?os y la premisa de “es mejor esto que seguir con el convenio bloqueado”, en un sector especialmente castigado por los ertes y la parada pandémica. Y los segundos consideraron los avances insuficientes, en un contexto de competencia sindical.
La ausencia de una cl?usula de revisi?n salarial, que compense la diferencia entre el aumento pactado para este a?o y la cifra final del IPC, ha sido un ‘sapo’ que las centrales han tenido que manejar, en contra de los criterios que han recibido desde sus m?ximos ?rganos de direcci?n. Y es que este es el principal escollo en el sector privado. CCOO y UGT llaman a los suyos a no firmar ning?n convenio sin cl?usula de revisi?n salarial, independientemente de los incrementos que plantee la patronal. Y desde CEOE rechazan asumir dichas cl?usulas, en aras de que las empresas tengan que reabrir cuentas a final de a?o para subir sustancialmente sueldos.
La ausencia de dicha cl?usula es el escollo principal, por ejemplo, en la negociaci?n del convenio de oficinas y despachos. Otro de los que afectan a m?s trabajadores en Catalunya, unas 120.000 personas. Ah? la patronal ofrece una subida a tres a?os del 8,75% (3,75%+2,5%+2,5%) y los sindicatos reclaman un 11,5% (5,5%+3%+3%), aunque estos ?ltimos con cl?usula salarial. "No est? ni cerca el acuerdo", afirman fuentes sindicales consultadas. Una l?nea roja que en este y muchos otros convenios est? bloqueando las conversaciones. Por ejemplo, el del metal de Barcelona, que cubre a 170.000 personas y es de referencia para casi toda Espa?a, ten?a cl?usula y ahora la patronal no quiere renovarlo si esta se mantiene. Son excepciones contadas aquellos pliegos que se renuevan con este concepto, como es el caso de Seat, donde las centrales s? han logrado renovarla por tres a?os m?s.
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