الريــم
09-27-2022, 09:00 PM
La mayor?a de mandos de los Mossos d’Esquadra apoyan al comisario jefe, Josep Maria Estela, en el pulso que este mantiene con su n?mero dos, el comisario Eduard Sallent. Seg?n las fuentes consultadas por EL PERI?DICO, diario que pertenece al grupo Prensa Ibérica al igual que este medio, casi todos los comisarios perciben a Sallent como el hombre del director general de la polic?a catalana, Pere Ferrer. Y dan respaldo al plant?n de Estela, que ha dicho que no seguir? si Sallent no abandona la prefectura de los Mossos, porque juzgan que el hartazgo del jefe policial tiene que ver, sobre todo, con la voluntad de poner coto a las injerencias pol?ticas de la 'conselleria' de Joan Ignasi Elena. Motivos que no son nuevos, apuntan: son los mismos que, a su juicio, impulsaron la destituci?n del 'major', Josep Llu?s Trapero.
Desde la 'conselleria' de Interior admiten que Estela y Sallent no han encajado, tal como avanz? El Pa?s, pero niegan injerencias pol?ticas. "Una polic?a democr?tica debe aceptar criterios pol?ticos en temas como gesti?n de manifestaciones o desahucios" o a la hora de "establecer prioridades" para el cuerpo, como lo es actualmente "la violencia sexual", remarcan. La 'conselleria' no se inmiscuye "en cuestiones operativas" o "investigaciones" en marcha, aclaran. "Estela y Sallent fueron escogidos para trabajar en equipo y deben aceptarlo. Intentaremos que encajen", pero sin echar "pulsos con el Govern", zanjan.
La prefectura coral
Oficialmente, el Govern defendi? la destituci?n de Trapero, 13 meses después de ser restituido, asegurando que quer?a abrir una nueva etapa en el cuerpo policial, apostar por una jefatura m?s coral y m?s femenina. También fueron esos los argumentos que esgrimi? la propia c?pula –integrada por Estela, Sallent y la intendente Rosa Bosch– para explicar c?mo funcionar?a la forma de proceder de la nueva prefectura: "m?s basada en el trabajo en equipo" y en lograr decisiones "m?s consensuadas". Pero no ha durado mucho.
La desconfianza de Estela hacia Sallent ha llegado al extremo de excluir a su n?mero dos del tribunal que, en breve, debe escoger a seis nuevos comisarios. O de entregar a comisarios ajenos a la prefectura la batuta del cuerpo durante sus vacaciones en lugar de d?rsela a Sallent, una decisi?n sorprendente. De hecho, la relaci?n entre Sallent y Estela est? casi rota desde hace meses y el plant?n de Estela frente a los responsables de Interior a quienes exige que aparten a Sallent tampoco es reciente: ocurri? a principios de junio, cuando transmiti? que deb?an alejarlo de la prefectura o, en su defecto, prescindir de él.
Acercamiento a Trapero
Estela, un comisario arraigado en el territorio, pero menos bregado en los pasillos del poder, no tard? en darse cuenta de que la prefectura "coral" significaba que Sallent estaba tomando decisiones sin su aval porque las hab?a pactado previamente a sus espaldas con Ferrer y con el jefe de gabinete del 'conseller' Elena, Raül Murcia, remarcan los mandos policiales consultados. A Estela no le ayud? a revertir la situaci?n, seg?n subrayan, que apostara por limar asperezas con Trapero tras tomar posesi?n de su cargo.
En un encuentro privado, Estela le transmiti? a Trapero, que desempe?a actualmente funciones de evaluaci?n y an?lisis y se encuentra apartado de la operativa policial, que contaba con él. Pero a los pocos meses, con la llegada de las galas de las Esquadres –la celebraci?n oficial de la polic?a– Estela descubri? que, a pesar de que él hab?a dispuesto que Trapero formara parte de la l?nea de saludo oficial que da la bienvenida a las autoridades, Trapero hab?a sido borrado de la lista sin su consentimiento. Fue una prueba m?s de que, a pesar de ser el jefe de los Mossos, mandaba menos de lo que indicaba su cargo.
Cinco jefes en cinco a?os
La que se present? en diciembre de 2021 como la primera prefectura coral y paritaria de los Mossos –a Estela, Sallent y Bosch hab?a que a?adir la figura de Montse Escudé, en funciones de portavoz– no ha terminado cristalizando en ninguna de las dos cosas. El poder que acumulan Bosch y Escudé es insignificante en comparaci?n con el de Estela y, sobre todo, con el de Sallent. Seg?n las fuentes consultadas, en realidad, la nueva estructura fue m?s bien el artefacto que ERC dise?? para restituir a Sallent de forma velada.
Sallent fue jefe de los Mossos hasta que Trapero fue absuelto por la Audiencia Nacional. Durante su jefatura, Sallent se gan? la confianza del director Ferrer. Y ambos, a su vez, cuentan con el apoyo de Murcia, un hombre de la confianza de Oriol Junqueras en la 'conselleria', y también del 'conseller' Elena. Por eso Ferrer sigui? al frente de la polic?a catalana a pesar de ser ungido en ese cargo por Junts. Y, tras destituir a Trapero, apostaron por recuperar Sallent, a quien ven como un comisario m?s receptivo.
Esquerra no se ve?a capaz de intervenir en la gesti?n de los Mossos mientras siguiera en manos de Trapero o de comisarios refractarios a las instrucciones pol?ticas. As? que lo apartaron y, después del 'major', arrinconaron también a mandos como el intendente Toni Rodr?guez, o el comisario Carles Anfruns. El primero se negaba a compartir informaci?n sobre las investigaciones criminales –muchas de las cuales afectaban al propio Govern– y el segundo no toleraba que se cuestionara por criterios pol?ticos un operativo policial. Ni Rodr?guez ni Anfruns ten?an problema alguno con Estela, pero s? lo ten?a con Sallent, el primero, y con la 'conselleria, el segundo.
Vergüenza
La palabra m?s repetida por los comisarios con los que ha contactado este diario es "vergüenza". Porque esta nueva crisis, que puede acabar con la destituci?n o la dimisi?n de Estela, significar?a cambiar de jefe por sexta vez en cinco a?os y porque lamentan la pobre imagen que los jefes est?n transmitiendo a los agentes del cuerpo.
Desde el sindicato Fepol, que representa tanto a agentes como mandos, se muestran "estupefactos con la situaci?n". "La nueva c?pula no ha cumplido todav?a un a?o, es prioritario que, de una vez, haya estabilidad y centrarnos en la nueva Ley de Mossos", subrayan.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/mandos-mossos-apoyan-comisario-jefe-75969856)
Desde la 'conselleria' de Interior admiten que Estela y Sallent no han encajado, tal como avanz? El Pa?s, pero niegan injerencias pol?ticas. "Una polic?a democr?tica debe aceptar criterios pol?ticos en temas como gesti?n de manifestaciones o desahucios" o a la hora de "establecer prioridades" para el cuerpo, como lo es actualmente "la violencia sexual", remarcan. La 'conselleria' no se inmiscuye "en cuestiones operativas" o "investigaciones" en marcha, aclaran. "Estela y Sallent fueron escogidos para trabajar en equipo y deben aceptarlo. Intentaremos que encajen", pero sin echar "pulsos con el Govern", zanjan.
La prefectura coral
Oficialmente, el Govern defendi? la destituci?n de Trapero, 13 meses después de ser restituido, asegurando que quer?a abrir una nueva etapa en el cuerpo policial, apostar por una jefatura m?s coral y m?s femenina. También fueron esos los argumentos que esgrimi? la propia c?pula –integrada por Estela, Sallent y la intendente Rosa Bosch– para explicar c?mo funcionar?a la forma de proceder de la nueva prefectura: "m?s basada en el trabajo en equipo" y en lograr decisiones "m?s consensuadas". Pero no ha durado mucho.
La desconfianza de Estela hacia Sallent ha llegado al extremo de excluir a su n?mero dos del tribunal que, en breve, debe escoger a seis nuevos comisarios. O de entregar a comisarios ajenos a la prefectura la batuta del cuerpo durante sus vacaciones en lugar de d?rsela a Sallent, una decisi?n sorprendente. De hecho, la relaci?n entre Sallent y Estela est? casi rota desde hace meses y el plant?n de Estela frente a los responsables de Interior a quienes exige que aparten a Sallent tampoco es reciente: ocurri? a principios de junio, cuando transmiti? que deb?an alejarlo de la prefectura o, en su defecto, prescindir de él.
Acercamiento a Trapero
Estela, un comisario arraigado en el territorio, pero menos bregado en los pasillos del poder, no tard? en darse cuenta de que la prefectura "coral" significaba que Sallent estaba tomando decisiones sin su aval porque las hab?a pactado previamente a sus espaldas con Ferrer y con el jefe de gabinete del 'conseller' Elena, Raül Murcia, remarcan los mandos policiales consultados. A Estela no le ayud? a revertir la situaci?n, seg?n subrayan, que apostara por limar asperezas con Trapero tras tomar posesi?n de su cargo.
En un encuentro privado, Estela le transmiti? a Trapero, que desempe?a actualmente funciones de evaluaci?n y an?lisis y se encuentra apartado de la operativa policial, que contaba con él. Pero a los pocos meses, con la llegada de las galas de las Esquadres –la celebraci?n oficial de la polic?a– Estela descubri? que, a pesar de que él hab?a dispuesto que Trapero formara parte de la l?nea de saludo oficial que da la bienvenida a las autoridades, Trapero hab?a sido borrado de la lista sin su consentimiento. Fue una prueba m?s de que, a pesar de ser el jefe de los Mossos, mandaba menos de lo que indicaba su cargo.
Cinco jefes en cinco a?os
La que se present? en diciembre de 2021 como la primera prefectura coral y paritaria de los Mossos –a Estela, Sallent y Bosch hab?a que a?adir la figura de Montse Escudé, en funciones de portavoz– no ha terminado cristalizando en ninguna de las dos cosas. El poder que acumulan Bosch y Escudé es insignificante en comparaci?n con el de Estela y, sobre todo, con el de Sallent. Seg?n las fuentes consultadas, en realidad, la nueva estructura fue m?s bien el artefacto que ERC dise?? para restituir a Sallent de forma velada.
Sallent fue jefe de los Mossos hasta que Trapero fue absuelto por la Audiencia Nacional. Durante su jefatura, Sallent se gan? la confianza del director Ferrer. Y ambos, a su vez, cuentan con el apoyo de Murcia, un hombre de la confianza de Oriol Junqueras en la 'conselleria', y también del 'conseller' Elena. Por eso Ferrer sigui? al frente de la polic?a catalana a pesar de ser ungido en ese cargo por Junts. Y, tras destituir a Trapero, apostaron por recuperar Sallent, a quien ven como un comisario m?s receptivo.
Esquerra no se ve?a capaz de intervenir en la gesti?n de los Mossos mientras siguiera en manos de Trapero o de comisarios refractarios a las instrucciones pol?ticas. As? que lo apartaron y, después del 'major', arrinconaron también a mandos como el intendente Toni Rodr?guez, o el comisario Carles Anfruns. El primero se negaba a compartir informaci?n sobre las investigaciones criminales –muchas de las cuales afectaban al propio Govern– y el segundo no toleraba que se cuestionara por criterios pol?ticos un operativo policial. Ni Rodr?guez ni Anfruns ten?an problema alguno con Estela, pero s? lo ten?a con Sallent, el primero, y con la 'conselleria, el segundo.
Vergüenza
La palabra m?s repetida por los comisarios con los que ha contactado este diario es "vergüenza". Porque esta nueva crisis, que puede acabar con la destituci?n o la dimisi?n de Estela, significar?a cambiar de jefe por sexta vez en cinco a?os y porque lamentan la pobre imagen que los jefes est?n transmitiendo a los agentes del cuerpo.
Desde el sindicato Fepol, que representa tanto a agentes como mandos, se muestran "estupefactos con la situaci?n". "La nueva c?pula no ha cumplido todav?a un a?o, es prioritario que, de una vez, haya estabilidad y centrarnos en la nueva Ley de Mossos", subrayan.
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