الريــم
09-18-2022, 02:52 PM
El Ministerio de Hacienda sigue embastando los Presupuestos de 2023 para presentarlos a finales de septiembre o primeros de octubre, en funci?n de cu?nto cueste cerrar un acuerdo interno con los socios de Gobierno. Las negociaciones con Unidas Podemos prosiguen aunque por ahora con muy pocos avances.
Mientras, el Gobierno ya ha mantenido contactos con dos de sus principales apoyos parlamentarios, el PNV y ERC, y sabe que ambos est?n abiertos a mantener conversaciones. No significa que den un "cheque en blanco", explican desde el Ejecutivo, porque "nunca lo hacen. Pero su disposici?n ofrece garant?as para creer que las cuentas de 2023 contar? con votos suficientes, una vez que logre el pacto previo con Unidas Podemos.
ERC vuelve a estar en el centro de la ecuaci?n, después de que Moncloa logr? taponar la profunda herida que supuso conocer que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) hab?a espiado a cargos independentistas. En el Ejecutivo llegaron a calcular que tendr?an que aprobar los presupuestos sin ERC, con el apoyo activo de EH Bildu y los partidos peque?os, que el pasado abril ya les vali? para sacar adelante la bonificaci?n de la gasolina. Pero, primero la defenestraci?n de la directora del CNI, Paz Esteban, y después, la reuni?n de Pedro S?nchez y Pere Aragonès, consiguieron recomponer la interlocuci?n.
Ahora la desestabilizaci?n viene directamente de Catalu?a, con la amenaza de Junts de abandonar el Govern. Un peligro que no todo el mundo acaba de ver. En Moncloa se muestran muy cautos y expresan su "respeto a los debates internos que tenga cualquier gobierno". "La relaci?n con la Generalitat es buena", aseguran. "Hay una colaboraci?n leal en el d?a a d?a y esperamos que as? siga siendo".
Esta es la lectura puramente institucional pero a nivel pol?tico el an?lisis no ofrece muchas diferencias. No hay temor a que esto empa?e la estrecha convivencia con ERC, a pesar de que precisamente, el apoyo que esta formaci?n da al Gobierno y su intento de resolver la crisis catalana con una mesa de di?logo entre el Estado y la Generalitat, son objeto de continuas cr?ticas por parte de Junts.
"No afecta" al Govern
"Son asuntos distintos, no influye", en la comunicaci?n que se produce en Madrid, explican desde el PSC. "No afecta", corroboran fuentes del Ejecutivo, que s? reconocen que "la situaci?n catalana es inestable e impredecible". Aunque, a?aden, "creemos que la apuesta de ERC por un di?logo fluido con el Gobierno es firme".
Pero el equilibrio para el Gobierno no es f?cil. El partido que se podr?a ver m?s beneficiado por la salida de Junts del Govern es el PSC, cuyo respaldo ser?a vital para que Aragonès pudiera aprobar los pr?ximos Presupuestos. O tal vez no, porque en términos electorales, lo que m?s conviene a los socialistas catalanes es la pelea constante en el seno del independentismo. Si algo no cambia en Catalu?a es la mala relaci?n entre ERC y Junts, que sigue provocando inestabilidad, apuntaban hace tiempo en la Moncloa. En el Ejecutivo son muy conscientes de que en un futuro no muy lejano, si alguien puede obtener réditos de esa pugna, es Salvador Illa.
En todo caso, también en Madrid, todo son conjeturas sobre qué decisi?n tomar? finalmente Junts, que vive su propia pelea interna entre quienes todav?a forman parte del naufragio de Convergència y los grup?sculos del independentismo de base. Una fuente de esta formaci?n apunta a que a ocho meses de las elecciones municipales la presi?n de los alcaldes y del candidato 'in pectore' a la Alcald?a de Barcelona, Xavier Trias, ser? m?xima para que Junts no deje el Govern. Pero en el Gobierno, ninguno de los dos socios de coalici?n se atreve a hacer pron?sticos. "Nada es descartable", afirma un dirigente socialista. En caso de hacerlo, apunta otro, "no creo que fuese antes del debate de pol?tica general" de finales de mes.
Desestabilizaci?n
Fuentes de ERC sostienen que ahora "a nadie le interesa la desestabilizaci?n de Catalu?a" pero admiten que la actitud de Junts contra Aragonès, su perenne reivindicaci?n de que solo ellos son los "auténticos independentistas" y sus cr?ticas a la mesa de di?logo "sin ofrecer ninguna alternativa", lo que hace es "regalarle votos a Illa".
La salida de Junts de la Generalitat dejar?a a Aragonès a merced del PSC y eso, simplificando la situaci?n, podr?a ayudar a la Moncloa a reducir su dependencia de ERC. Ambos gobiernos estar?an necesitados del otro partido. Esto para Pedro S?nchez podr?a ser id?lico. Pero otras fuentes del Ejecutivo aportan una visi?n menos entusiasta. ERC, sostienen, gestiona mal las situaciones de crisis y resulta impredecible. "Si la prensa independentista le presiona puede optar por mandar a paseo al PSOE".
La amenaza de escisi?n del Govern llega en mal momento, cuando la negociaci?n de los Presupuestos encara unas semanas vitales, aunque el Ejecutivo siga contando con el respaldo de ERC. Con el pacto con Unidas Podemos para alumbrar las cuentas de 2023 a?n sin cerrar y dos leyes muy importantes -la de Vivienda y la ley Mordaza-, vitales para los socios parlamentarios del Gobierno, pendientes también de acuerdo.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/moncloa-apoyo-erc-presupuestos-tension-govern-75587800)
Mientras, el Gobierno ya ha mantenido contactos con dos de sus principales apoyos parlamentarios, el PNV y ERC, y sabe que ambos est?n abiertos a mantener conversaciones. No significa que den un "cheque en blanco", explican desde el Ejecutivo, porque "nunca lo hacen. Pero su disposici?n ofrece garant?as para creer que las cuentas de 2023 contar? con votos suficientes, una vez que logre el pacto previo con Unidas Podemos.
ERC vuelve a estar en el centro de la ecuaci?n, después de que Moncloa logr? taponar la profunda herida que supuso conocer que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) hab?a espiado a cargos independentistas. En el Ejecutivo llegaron a calcular que tendr?an que aprobar los presupuestos sin ERC, con el apoyo activo de EH Bildu y los partidos peque?os, que el pasado abril ya les vali? para sacar adelante la bonificaci?n de la gasolina. Pero, primero la defenestraci?n de la directora del CNI, Paz Esteban, y después, la reuni?n de Pedro S?nchez y Pere Aragonès, consiguieron recomponer la interlocuci?n.
Ahora la desestabilizaci?n viene directamente de Catalu?a, con la amenaza de Junts de abandonar el Govern. Un peligro que no todo el mundo acaba de ver. En Moncloa se muestran muy cautos y expresan su "respeto a los debates internos que tenga cualquier gobierno". "La relaci?n con la Generalitat es buena", aseguran. "Hay una colaboraci?n leal en el d?a a d?a y esperamos que as? siga siendo".
Esta es la lectura puramente institucional pero a nivel pol?tico el an?lisis no ofrece muchas diferencias. No hay temor a que esto empa?e la estrecha convivencia con ERC, a pesar de que precisamente, el apoyo que esta formaci?n da al Gobierno y su intento de resolver la crisis catalana con una mesa de di?logo entre el Estado y la Generalitat, son objeto de continuas cr?ticas por parte de Junts.
"No afecta" al Govern
"Son asuntos distintos, no influye", en la comunicaci?n que se produce en Madrid, explican desde el PSC. "No afecta", corroboran fuentes del Ejecutivo, que s? reconocen que "la situaci?n catalana es inestable e impredecible". Aunque, a?aden, "creemos que la apuesta de ERC por un di?logo fluido con el Gobierno es firme".
Pero el equilibrio para el Gobierno no es f?cil. El partido que se podr?a ver m?s beneficiado por la salida de Junts del Govern es el PSC, cuyo respaldo ser?a vital para que Aragonès pudiera aprobar los pr?ximos Presupuestos. O tal vez no, porque en términos electorales, lo que m?s conviene a los socialistas catalanes es la pelea constante en el seno del independentismo. Si algo no cambia en Catalu?a es la mala relaci?n entre ERC y Junts, que sigue provocando inestabilidad, apuntaban hace tiempo en la Moncloa. En el Ejecutivo son muy conscientes de que en un futuro no muy lejano, si alguien puede obtener réditos de esa pugna, es Salvador Illa.
En todo caso, también en Madrid, todo son conjeturas sobre qué decisi?n tomar? finalmente Junts, que vive su propia pelea interna entre quienes todav?a forman parte del naufragio de Convergència y los grup?sculos del independentismo de base. Una fuente de esta formaci?n apunta a que a ocho meses de las elecciones municipales la presi?n de los alcaldes y del candidato 'in pectore' a la Alcald?a de Barcelona, Xavier Trias, ser? m?xima para que Junts no deje el Govern. Pero en el Gobierno, ninguno de los dos socios de coalici?n se atreve a hacer pron?sticos. "Nada es descartable", afirma un dirigente socialista. En caso de hacerlo, apunta otro, "no creo que fuese antes del debate de pol?tica general" de finales de mes.
Desestabilizaci?n
Fuentes de ERC sostienen que ahora "a nadie le interesa la desestabilizaci?n de Catalu?a" pero admiten que la actitud de Junts contra Aragonès, su perenne reivindicaci?n de que solo ellos son los "auténticos independentistas" y sus cr?ticas a la mesa de di?logo "sin ofrecer ninguna alternativa", lo que hace es "regalarle votos a Illa".
La salida de Junts de la Generalitat dejar?a a Aragonès a merced del PSC y eso, simplificando la situaci?n, podr?a ayudar a la Moncloa a reducir su dependencia de ERC. Ambos gobiernos estar?an necesitados del otro partido. Esto para Pedro S?nchez podr?a ser id?lico. Pero otras fuentes del Ejecutivo aportan una visi?n menos entusiasta. ERC, sostienen, gestiona mal las situaciones de crisis y resulta impredecible. "Si la prensa independentista le presiona puede optar por mandar a paseo al PSOE".
La amenaza de escisi?n del Govern llega en mal momento, cuando la negociaci?n de los Presupuestos encara unas semanas vitales, aunque el Ejecutivo siga contando con el respaldo de ERC. Con el pacto con Unidas Podemos para alumbrar las cuentas de 2023 a?n sin cerrar y dos leyes muy importantes -la de Vivienda y la ley Mordaza-, vitales para los socios parlamentarios del Gobierno, pendientes también de acuerdo.
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