الريــم
09-17-2022, 11:11 AM
Hasta hace poco, en Espa?a, Giorgia Meloni (Roma, 45 a?os), la presidenta del partido de extrema derecha populista Hermanos de Italia, era pr?cticamente una desconocida; y, sin embargo, su nombre es hoy imposible de ignorar. Esto vale no solo para Italia, sino para todos los pa?ses europeos. Porque la c?spide de la carrera de Meloni coincide con un escenario que pone los pelos de punta a las capitales de los principales pa?ses occidentales y democr?ticos: la posibilidad, muy concreta seg?n las encuestas, de que esta pol?tica, nacida al calor de los reminiscencias del posfascismo, gane las elecciones el 25 de septiembre en Italia, un pa?s fundador de la Uni?n Europea (UE).
Semejante realidad resulta asombrosa teniendo en cuenta ya no s?lo el molde ideol?gico radical de Meloni, sino el vertiginoso ascenso de Hermanos de Italia. Un partido fundado en 2012 que, en las elecciones europeas de 2014, alcanz? un decepcionante 3,67% de los votos, y que, en las generales italianas de hace cuatro a?os, obtuvo a duras penas el 4,35%; esto es, alrededor 20 puntos menos que la intenci?n de voto se?alada actualmente por diversas empresas de sondeos.
Crecimiento récord
Hay un hecho que los analistas suelen repetir para dar una respuesta al c?mo Meloni ha llegado hasta aqu?: que en dos ocasiones renunciara, en momentos dif?ciles para Italia, a integrar Ejecutivos que le hab?an abierto la puerta. Ocurri? cuando en 2018 el populista Movimiento 5 Estrellas (M5E) se ali? con la también derechista Liga de Matteo Salvini. Y pas? de nuevo con el nombramiento en 2021 como primer ministro del exbanquero Mario Draghi, quien hab?a pedido un Gobierno de unidad nacional. Las turbulencias ocasionadas por las cat?strofes de estos a?os —primero la pandemia y luego la guerra en Ucrania—, y su impacto en la poblaci?n, han coincidido con el crecimiento récord de Hermanos de Italia.
Sin embargo, este acelerado éxito no ha sido fruto de la improvisaci?n; Meloni, desde tiempo no es una novata de la pol?tica. Por el contrario, sus or?genes pol?ticos y su v?nculo con la derecha posfascista, tienen ra?ces profundas, que remiten a su propia situaci?n familiar. Una historia que inicia en una familia humilde, con un abuelo siciliano que emigra a Roma para garantizarse un puesto de funcionario p?blico, y una madre soltera abandonada por un padre de la Roma rica, que prefer?a navegar por el mundo a pasar tiempo con sus hijas. Un agravio que da?? su relaci?n con su progenitor desde los 11 a?os, después de una discusi?n en la isla de La Gomera (Canarias), a la que Meloni hab?a viajado en m?s de una ocasi?n hasta ese momento y donde aprendi? a hablar en espa?ol.
Es en este contexto en el que Meloni lleg? a afiliarse, con apenas 15 a?os y durante los tempestuosos a?os de los esc?ndalos de corrupci?n, al movimiento juvenil del posfascista Movimiento Social Italiano (MSI) de Garbatella, entonces uno de los barrios m?s pobres y de izquierdas de Roma. "No pensé que llamando a la puerta blindada del Frente de la Juventud encontrar?a mi segunda familia. Una familia sin duda m?s numerosa que la m?a de origen", relata Meloni en su gruesa autobiograf?a.
Meloni no teme llevar la contraria y defender a una derecha dura, con un bagaje ideol?gico conservador y cat?lico, nacionalista y centralista
En efecto, como ella misma cuenta, los ?ltimos a?os de la secundaria son también su primera escuela pol?tica. Son a?os dif?ciles en Roma, los viejos sistemas del siglo XX se est?n desmoronando, y Meloni no teme llevar la contraria y defender a una derecha dura, con un bagaje ideol?gico conservador y cat?lico (admira a Juan Pablo II y a Benedicto XVI), nacionalista y centralista. Y lo hace incluso en los c?rculos m?s hostiles a su forma de ver el mundo, algo que llama la atenci?n. "La ech?bamos de las reuniones estudiantiles pero ella volv?a una y otra vez", confiesa un antiguo militante de izquierda.
Carrera pol?tica
As? llegan los primeros resultados. Con tan solo 21 a?os, logra obtener un esca?o como consejera en la diputaci?n de Roma, representando a Alianza Nacional (AN), el partido entonces heredero directo del MSI, y forja también una s?lida amistad con Francesco Lollobrigida, nieto de la famosa actriz Gina, marido de la hermana de Meloni, Arianna, y considerado hoy uno de los ‘coroneles’ de Hermanos de Italia. El ascenso de la pol?tica empieza entonces a ser imparable. En 2006, tiene solo 29 a?os, pero a?n as? Gianfranco Fini, entonces l?der de AN, le pide ser vicepresidenta del Congreso. Dos a?os después, con una exposici?n medi?tica ya bastante elevada, la eligen ministra de Juventud, un cargo que ocupa de 2008 a 2011.
Es otro momento trascendental de su trayectoria. Tras la abrupta ca?da del Gobierno de Silvio Berlusconi, junto con un grupo disidente del Pueblo de las Libertades (partido fundado en 2007 de la fusi?n de Forza Italia y AN), Meloni critica que Berlusconi dé su apoyo al Gobierno del tecn?crata Mario Monti, y crea a Hermanos de Italia. El grito al cielo ya entonces va al coraz?n de la UE, a la ella que responsabiliza por la crisis, en tanto nace el v?nculo con Santiago Abascal, el l?der de Vox, y el entonces gur? de Donald Trump, Stephen Bannon. Con la UE, "estoy enfadada (…) por aquellos que la convirtieron en un parque de diversi?n de tecn?cratas y banqueros", dir? después. De ah? también el miedo que provoca.
Romper con la UE
Nadie tiene certezas sobre el camino que emprender? Italia después del 25 de septiembre, d?a de los comicios en el pa?s. Durante la campa?a electoral, la ultraderechista a menudo ha repetido que no quiere romper con la Uni?n Europea ni salir del euro. Pero también ha insistido en que su intenci?n es defender la primac?a del interés nacional italiano, y ha hecho propuestas que suponen potenciales conflictos futuros con otros pa?ses del club europeo y con Bruselas. “?Le preocupa a Europa que Meloni esté en el Gobierno? Se acab? la diversi?n, defenderemos a Italia”, ha dicho en m?ltiples ocasiones.
Otro asunto es el proyecto de transformar la Rep?blica Italiana en un sistema presidencialista, lo que la izquierda teme pues considera que podr?a llevar el pa?s a una deriva autoritaria. De igual modo, también han suscitado preocupaci?n sus posturas sobre la familia y el aborto, que Meloni dice no querer abolir aunque, en las regiones italianas en las que gobierna su partido (Las Marcas, por ejemplo), asociaciones que defienden que las mujeres puedan interrumpir sus embarazos denuncian grandes obst?culos para ejercer este derecho. No en vano uno de los lemas que (desde siempre) la pol?tica romana reitera orgullosamente es “Dios, patria, familia”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/giorgia-meloni-mujer-temblar-italia-75548500)
Semejante realidad resulta asombrosa teniendo en cuenta ya no s?lo el molde ideol?gico radical de Meloni, sino el vertiginoso ascenso de Hermanos de Italia. Un partido fundado en 2012 que, en las elecciones europeas de 2014, alcanz? un decepcionante 3,67% de los votos, y que, en las generales italianas de hace cuatro a?os, obtuvo a duras penas el 4,35%; esto es, alrededor 20 puntos menos que la intenci?n de voto se?alada actualmente por diversas empresas de sondeos.
Crecimiento récord
Hay un hecho que los analistas suelen repetir para dar una respuesta al c?mo Meloni ha llegado hasta aqu?: que en dos ocasiones renunciara, en momentos dif?ciles para Italia, a integrar Ejecutivos que le hab?an abierto la puerta. Ocurri? cuando en 2018 el populista Movimiento 5 Estrellas (M5E) se ali? con la también derechista Liga de Matteo Salvini. Y pas? de nuevo con el nombramiento en 2021 como primer ministro del exbanquero Mario Draghi, quien hab?a pedido un Gobierno de unidad nacional. Las turbulencias ocasionadas por las cat?strofes de estos a?os —primero la pandemia y luego la guerra en Ucrania—, y su impacto en la poblaci?n, han coincidido con el crecimiento récord de Hermanos de Italia.
Sin embargo, este acelerado éxito no ha sido fruto de la improvisaci?n; Meloni, desde tiempo no es una novata de la pol?tica. Por el contrario, sus or?genes pol?ticos y su v?nculo con la derecha posfascista, tienen ra?ces profundas, que remiten a su propia situaci?n familiar. Una historia que inicia en una familia humilde, con un abuelo siciliano que emigra a Roma para garantizarse un puesto de funcionario p?blico, y una madre soltera abandonada por un padre de la Roma rica, que prefer?a navegar por el mundo a pasar tiempo con sus hijas. Un agravio que da?? su relaci?n con su progenitor desde los 11 a?os, después de una discusi?n en la isla de La Gomera (Canarias), a la que Meloni hab?a viajado en m?s de una ocasi?n hasta ese momento y donde aprendi? a hablar en espa?ol.
Es en este contexto en el que Meloni lleg? a afiliarse, con apenas 15 a?os y durante los tempestuosos a?os de los esc?ndalos de corrupci?n, al movimiento juvenil del posfascista Movimiento Social Italiano (MSI) de Garbatella, entonces uno de los barrios m?s pobres y de izquierdas de Roma. "No pensé que llamando a la puerta blindada del Frente de la Juventud encontrar?a mi segunda familia. Una familia sin duda m?s numerosa que la m?a de origen", relata Meloni en su gruesa autobiograf?a.
Meloni no teme llevar la contraria y defender a una derecha dura, con un bagaje ideol?gico conservador y cat?lico, nacionalista y centralista
En efecto, como ella misma cuenta, los ?ltimos a?os de la secundaria son también su primera escuela pol?tica. Son a?os dif?ciles en Roma, los viejos sistemas del siglo XX se est?n desmoronando, y Meloni no teme llevar la contraria y defender a una derecha dura, con un bagaje ideol?gico conservador y cat?lico (admira a Juan Pablo II y a Benedicto XVI), nacionalista y centralista. Y lo hace incluso en los c?rculos m?s hostiles a su forma de ver el mundo, algo que llama la atenci?n. "La ech?bamos de las reuniones estudiantiles pero ella volv?a una y otra vez", confiesa un antiguo militante de izquierda.
Carrera pol?tica
As? llegan los primeros resultados. Con tan solo 21 a?os, logra obtener un esca?o como consejera en la diputaci?n de Roma, representando a Alianza Nacional (AN), el partido entonces heredero directo del MSI, y forja también una s?lida amistad con Francesco Lollobrigida, nieto de la famosa actriz Gina, marido de la hermana de Meloni, Arianna, y considerado hoy uno de los ‘coroneles’ de Hermanos de Italia. El ascenso de la pol?tica empieza entonces a ser imparable. En 2006, tiene solo 29 a?os, pero a?n as? Gianfranco Fini, entonces l?der de AN, le pide ser vicepresidenta del Congreso. Dos a?os después, con una exposici?n medi?tica ya bastante elevada, la eligen ministra de Juventud, un cargo que ocupa de 2008 a 2011.
Es otro momento trascendental de su trayectoria. Tras la abrupta ca?da del Gobierno de Silvio Berlusconi, junto con un grupo disidente del Pueblo de las Libertades (partido fundado en 2007 de la fusi?n de Forza Italia y AN), Meloni critica que Berlusconi dé su apoyo al Gobierno del tecn?crata Mario Monti, y crea a Hermanos de Italia. El grito al cielo ya entonces va al coraz?n de la UE, a la ella que responsabiliza por la crisis, en tanto nace el v?nculo con Santiago Abascal, el l?der de Vox, y el entonces gur? de Donald Trump, Stephen Bannon. Con la UE, "estoy enfadada (…) por aquellos que la convirtieron en un parque de diversi?n de tecn?cratas y banqueros", dir? después. De ah? también el miedo que provoca.
Romper con la UE
Nadie tiene certezas sobre el camino que emprender? Italia después del 25 de septiembre, d?a de los comicios en el pa?s. Durante la campa?a electoral, la ultraderechista a menudo ha repetido que no quiere romper con la Uni?n Europea ni salir del euro. Pero también ha insistido en que su intenci?n es defender la primac?a del interés nacional italiano, y ha hecho propuestas que suponen potenciales conflictos futuros con otros pa?ses del club europeo y con Bruselas. “?Le preocupa a Europa que Meloni esté en el Gobierno? Se acab? la diversi?n, defenderemos a Italia”, ha dicho en m?ltiples ocasiones.
Otro asunto es el proyecto de transformar la Rep?blica Italiana en un sistema presidencialista, lo que la izquierda teme pues considera que podr?a llevar el pa?s a una deriva autoritaria. De igual modo, también han suscitado preocupaci?n sus posturas sobre la familia y el aborto, que Meloni dice no querer abolir aunque, en las regiones italianas en las que gobierna su partido (Las Marcas, por ejemplo), asociaciones que defienden que las mujeres puedan interrumpir sus embarazos denuncian grandes obst?culos para ejercer este derecho. No en vano uno de los lemas que (desde siempre) la pol?tica romana reitera orgullosamente es “Dios, patria, familia”.
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