الريــم
09-01-2022, 08:40 AM
La ONU dijo hoy que, tras una larga investigaci?n independiente, ha concluido que China pudo cometer cr?menes contra la humanidad contra los uigures y otras minor?as étnicas musulmanas, al aplicar pol?ticas que han implicado su detenci?n arbitraria masiva y otros graves abusos en su contra.
En una hist?rica toma de posici?n frente a China, que fue difundida minutos antes de la medianoche (hora local) en que acababa el mandato de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, su organismo ha confirmado que la legislaci?n antiterrorista provoc? la "privaci?n de la libertad a gran escala" de esas minor?as, al menos entre 2017 y 2019. Desde entonces el patr?n parece haber variado y los centros de internamiento -denominados por el gobierno "centros de educaci?n vocacional"- se han reducido en tama?o y n?mero, pero las detenciones siguen ocurriendo mediante procesos penales que dan lugar al encarcelamiento sobre todo de uigures.
Para ello, el Gobierno chino sigue utilizando el mismo argumento: la lucha contra el terrorismo y el extremismo, con el que desde hace décadas la pol?tica oficial identifica a las minor?as musulmanas asentadas en Xinjiang, una de las cinco regiones aut?nomas de China, de gran extensi?n territorial y que es su acceso a Asia central.
Tipos de abusos
La Alta Comisar?a para los Derechos Humanos sostiene que considera cre?bles las denuncias de que en los centros de internamiento se practicaban torturas, que en algunos casos inclu?an tratamientos médicos forzados, aunque reconoce que no puede sacar conclusiones definitivas sobre la amplitud de estos abusos. La actitud del Gobierno central hacia los uigures se ha fundamentado en su percepci?n de que son una amenaza, lo que ha llevado a que se les restrinjan sus libertades y derechos. Entre ellos el derecho a la libertad de religi?n, de expresi?n, de movimiento y a la privacidad. Incluso "hay graves indicios de violaciones de los derechos reproductivos a través de la aplicaci?n forzada de programas de planificaci?n familiar y de control de nacimientos".
Las pol?ticas de Pek?n contra ésta y otras minor?as -como los kazajos- también incluye la separaci?n de familias y la interrupci?n de los contactos con otras personas.
Testimonios directos
Pese a las dificultades y a que China no autoriz? a los expertos de derechos humanos de la ONU visitar la regi?n para recabar informaci?n directamente, la Oficina de Bachelet pudo entrevistar a personas que estuvieron detenidas en los centros de internamiento y que explican que su calvario empez? con una detenci?n inicial en una comisaria. All? muchos contaron haber sido interrogados antes de ser enviados a los centros de internamiento, sin haber tenido acceso a una defensa legal o modo de oponerse a su traslado.
"Ninguno de los entrevistados dijo que pudo salir de las instalaciones o visitar su hogar", con tiempos de confinamiento que variaban de 2 hasta 18 meses. En ning?n caso se les inform? cuanto tiempo permanecer?an en esos lugares, que eran vigilados por personal armado. Todos fueron advertidos que una vez fuera deb?an hablar bien del centro y abstenerse de dar informaci?n sobre su naturaleza real. Esta situaci?n fue posible gracias a que la legislaci?n antiterrorista china es vaga y sus conceptos muy amplios, lo que permite a los funcionarios interpretarla a su discreci?n, seg?n el informe.
C?lculo de poblaci?n afectada
En esta investigaci?n, la ONU no ofrece cifras concretas del n?mero de personas que llegaron a estar en estos campos, donde en los ?ltimos a?os se ha afirmado que un mill?n de personas llegaron a estar internadas. No obstante el an?lisis de distintas fuentes de informaci?n -incluyendo de tipo oficial- le permite calcular que entre el 10% y el 20% de la poblaci?n adulta perteneciente a una minor?a étnica residente en varias comarcas y pueblos de Xinjiang pudo estar detenida entre 2017 y 2018.
Las razones para correr tal suerte eran tan amplias como absurdas: tener demasiados hijos, haber nacido en ciertos a?os, haber estado en la c?rcel, usar velo o tener barba, haber pedido un pasaporte y no haber salido del pa?s, haber viajado al extranjero o haberse descargado la aplicaci?n de mensajer?a WhatsApp.
Xinjiang ha sido durante décadas una regi?n china de clara mayor?a musulmana aunque el equilibro demogr?fico se ha modificado en los ?ltimos tiempos con incentivos dados a chinos de la etnia han (mayoritaria) para que se trasladen a vivir all?. Seg?n un informe de 2021 de la organizaci?n de derechos humanos Human Rights Watch, el 21% de arrestos registrados en toda China ocurr?an en Xinjiang, a pesar de tener menos del 2% de la poblaci?n nacional.
Como corolario, la Oficina de Bachelet pide que se libere a todos los detenidos arbitrariamente en Xinjiang, que se esclarezca el paradero de aquellos que son buscados por sus familias, que se revise la legislaci?n contra el terrorismo en su integridad y que se investiguen los casos de destrucci?n de mezquitas y cementerios musulmanes.
Después de m?s de un a?o trabajando en el informe, la Oficina de Bachelet retras? su publicaci?n hasta hoy tras la invitaci?n que China hizo a la alta comisionada para que visite el pa?s, el pasado mayo, lo que result? en una misi?n restringida justificada por las restricciones de la pandemia.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/onu-concluye-china-crimenes-humanidad-14392311)
En una hist?rica toma de posici?n frente a China, que fue difundida minutos antes de la medianoche (hora local) en que acababa el mandato de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, su organismo ha confirmado que la legislaci?n antiterrorista provoc? la "privaci?n de la libertad a gran escala" de esas minor?as, al menos entre 2017 y 2019. Desde entonces el patr?n parece haber variado y los centros de internamiento -denominados por el gobierno "centros de educaci?n vocacional"- se han reducido en tama?o y n?mero, pero las detenciones siguen ocurriendo mediante procesos penales que dan lugar al encarcelamiento sobre todo de uigures.
Para ello, el Gobierno chino sigue utilizando el mismo argumento: la lucha contra el terrorismo y el extremismo, con el que desde hace décadas la pol?tica oficial identifica a las minor?as musulmanas asentadas en Xinjiang, una de las cinco regiones aut?nomas de China, de gran extensi?n territorial y que es su acceso a Asia central.
Tipos de abusos
La Alta Comisar?a para los Derechos Humanos sostiene que considera cre?bles las denuncias de que en los centros de internamiento se practicaban torturas, que en algunos casos inclu?an tratamientos médicos forzados, aunque reconoce que no puede sacar conclusiones definitivas sobre la amplitud de estos abusos. La actitud del Gobierno central hacia los uigures se ha fundamentado en su percepci?n de que son una amenaza, lo que ha llevado a que se les restrinjan sus libertades y derechos. Entre ellos el derecho a la libertad de religi?n, de expresi?n, de movimiento y a la privacidad. Incluso "hay graves indicios de violaciones de los derechos reproductivos a través de la aplicaci?n forzada de programas de planificaci?n familiar y de control de nacimientos".
Las pol?ticas de Pek?n contra ésta y otras minor?as -como los kazajos- también incluye la separaci?n de familias y la interrupci?n de los contactos con otras personas.
Testimonios directos
Pese a las dificultades y a que China no autoriz? a los expertos de derechos humanos de la ONU visitar la regi?n para recabar informaci?n directamente, la Oficina de Bachelet pudo entrevistar a personas que estuvieron detenidas en los centros de internamiento y que explican que su calvario empez? con una detenci?n inicial en una comisaria. All? muchos contaron haber sido interrogados antes de ser enviados a los centros de internamiento, sin haber tenido acceso a una defensa legal o modo de oponerse a su traslado.
"Ninguno de los entrevistados dijo que pudo salir de las instalaciones o visitar su hogar", con tiempos de confinamiento que variaban de 2 hasta 18 meses. En ning?n caso se les inform? cuanto tiempo permanecer?an en esos lugares, que eran vigilados por personal armado. Todos fueron advertidos que una vez fuera deb?an hablar bien del centro y abstenerse de dar informaci?n sobre su naturaleza real. Esta situaci?n fue posible gracias a que la legislaci?n antiterrorista china es vaga y sus conceptos muy amplios, lo que permite a los funcionarios interpretarla a su discreci?n, seg?n el informe.
C?lculo de poblaci?n afectada
En esta investigaci?n, la ONU no ofrece cifras concretas del n?mero de personas que llegaron a estar en estos campos, donde en los ?ltimos a?os se ha afirmado que un mill?n de personas llegaron a estar internadas. No obstante el an?lisis de distintas fuentes de informaci?n -incluyendo de tipo oficial- le permite calcular que entre el 10% y el 20% de la poblaci?n adulta perteneciente a una minor?a étnica residente en varias comarcas y pueblos de Xinjiang pudo estar detenida entre 2017 y 2018.
Las razones para correr tal suerte eran tan amplias como absurdas: tener demasiados hijos, haber nacido en ciertos a?os, haber estado en la c?rcel, usar velo o tener barba, haber pedido un pasaporte y no haber salido del pa?s, haber viajado al extranjero o haberse descargado la aplicaci?n de mensajer?a WhatsApp.
Xinjiang ha sido durante décadas una regi?n china de clara mayor?a musulmana aunque el equilibro demogr?fico se ha modificado en los ?ltimos tiempos con incentivos dados a chinos de la etnia han (mayoritaria) para que se trasladen a vivir all?. Seg?n un informe de 2021 de la organizaci?n de derechos humanos Human Rights Watch, el 21% de arrestos registrados en toda China ocurr?an en Xinjiang, a pesar de tener menos del 2% de la poblaci?n nacional.
Como corolario, la Oficina de Bachelet pide que se libere a todos los detenidos arbitrariamente en Xinjiang, que se esclarezca el paradero de aquellos que son buscados por sus familias, que se revise la legislaci?n contra el terrorismo en su integridad y que se investiguen los casos de destrucci?n de mezquitas y cementerios musulmanes.
Después de m?s de un a?o trabajando en el informe, la Oficina de Bachelet retras? su publicaci?n hasta hoy tras la invitaci?n que China hizo a la alta comisionada para que visite el pa?s, el pasado mayo, lo que result? en una misi?n restringida justificada por las restricciones de la pandemia.
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