الريــم
03-21-2024, 05:40 PM
Un equipo de investigadores ha desarrollado dos nuevas candidatas a vacuna (https://www.sport.es/es/temas/vacunas-1856677)contra el covid (https://www.sport.es/es/temas/coronavirus-43443)que han demostrado en fase precl?nica que aumentan la producci?n de inmun?geno en comparaci?n con las vacunas del mismo tipo ya comercializadas.
La investigaci?n, publicada en la revista cient?fica Nature Communications, la ha liderado el IrsiCaixa –centro impulsado conjuntamente por la Fundaci?n “la Caixa” y el Departamento de Salud de la Generalitat–, el Centro de Investigaci?n en Sanidad Animal del Instituto de Investigaci?n y Tecnolog?a Agroalimentarias (IRTA-CReSA) y el Barcelona Supercomputing Center –Centro Nacional de Supercomputaci?n (BSC-CNS), con financiaci?n de Grifols.
Las vacunas se basan en dos versiones mutadas de la prote?na de la esp?cula o prote?na S (de Spike en inglés) del SARS-CoV-2, llamadas S29 y V987H, que aumentan hasta cinco veces la producci?n de esta prote?na en comparaci?n con otras vacunas comercializadas.
La mayor?a de las vacunas comercializadas hasta el momento contra la COVID-19 se basan en la prote?na S por dos motivos: es una pieza esencial para el proceso de infecci?n y activa el sistema inmunitario contra el virus.
A pesar de estas ventajas, la prote?na S también representa un reto, ya que no es estable y cambia de conformaci?n.
Esto complica su producci?n e implica que ciertas conformaciones escondan la regi?n de la prote?na -llamada RBD- con mayor capacidad de activar el sistema inmunitario.
De ah? que la mayor?a de las vacunas centradas en este compuesto –como las de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca y Janssen– estabilicen la prote?na S con la incorporaci?n de dos mutaciones, dando lugar a la variante llamada 2P.
A pesar de los esfuerzos realizados hasta ahora, la prote?na se sigue produciendo a niveles bajos, por lo que los cient?ficos ven necesario encontrar mutaciones alternativas que incrementen su producci?n.
Mediante técnicas de supercomputaci?n, el equipo ha identificado diversas mutaciones que favorecen su estabilidad.
"Hemos utilizado herramientas inform?ticas para prever qué mutaciones consiguen reducir su movilidad y hemos escogido las que nos ofrec?an una versi?n m?s estable de la prote?na S, y con una mejor exposici?n del dominio RBD", ha apuntado por su parte el investigador del BSC-CNS V?ctor Guallar.
A partir de estas mutaciones, el equipo ha generado dos nuevas variantes de la prote?na S, la S-29 y la S-V987H, que han demostrado que consiguen mejorar la producci?n respecto a las vacunas actuales de la prote?na S.
"Multiplicamos de dos a cinco veces el nivel de producci?n de la prote?na en el laboratorio", ha indicado el investigador del IrsiCaixa Carlos ?vila.
Una aportaci?n a la futura generaci?n de vacunas
As?, los investigadores proponen el uso de estas nuevas variantes de la prote?na S en las pr?ximas generaciones de vacunas que utilicen la prote?na de la esp?cula para activar el sistema inmunitario.
"Hemos visto que en el modelo de enfermedad severa las vacunas protegen del progreso a infecci?n grave y que reducen la cantidad de virus presente en los tejidos en el modelo de enfermedad moderada", ha indicado la investigadora del IRTA-CReSA J?lia Vergara-Alert.
También se ha comprobado que tienen efectividad frente a las variantes ?micron, beta y D614G del SARS-CoV-2.
Pese al gran impacto de las vacunas de la COVID-19 en el control de la pandemia, el SARS-CoV-2 sigue presente y, a medida que va infectando y transmitiéndose, también va adoptando nuevas mutaciones que le confieren capacidades ventajosas, como una mejor transmisibilidad o evasi?n de la respuesta inmunitaria.
Por ello, la comunidad cient?fica sigue trabajando para desarrollar vacunas que se adapten a estas nuevas capacidades del SARS-CoV-2.
"Contar con estudios como este sirve para la creaci?n de las nuevas generaciones de vacunas e identifica nuevas modificaciones que podr?an optimizarlas", ha remarcado el investigador del IRTA-CReSA Joaquim Segalés.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/nuevas-vacunas-covid-19-mejoran-99778958)
La investigaci?n, publicada en la revista cient?fica Nature Communications, la ha liderado el IrsiCaixa –centro impulsado conjuntamente por la Fundaci?n “la Caixa” y el Departamento de Salud de la Generalitat–, el Centro de Investigaci?n en Sanidad Animal del Instituto de Investigaci?n y Tecnolog?a Agroalimentarias (IRTA-CReSA) y el Barcelona Supercomputing Center –Centro Nacional de Supercomputaci?n (BSC-CNS), con financiaci?n de Grifols.
Las vacunas se basan en dos versiones mutadas de la prote?na de la esp?cula o prote?na S (de Spike en inglés) del SARS-CoV-2, llamadas S29 y V987H, que aumentan hasta cinco veces la producci?n de esta prote?na en comparaci?n con otras vacunas comercializadas.
La mayor?a de las vacunas comercializadas hasta el momento contra la COVID-19 se basan en la prote?na S por dos motivos: es una pieza esencial para el proceso de infecci?n y activa el sistema inmunitario contra el virus.
A pesar de estas ventajas, la prote?na S también representa un reto, ya que no es estable y cambia de conformaci?n.
Esto complica su producci?n e implica que ciertas conformaciones escondan la regi?n de la prote?na -llamada RBD- con mayor capacidad de activar el sistema inmunitario.
De ah? que la mayor?a de las vacunas centradas en este compuesto –como las de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca y Janssen– estabilicen la prote?na S con la incorporaci?n de dos mutaciones, dando lugar a la variante llamada 2P.
A pesar de los esfuerzos realizados hasta ahora, la prote?na se sigue produciendo a niveles bajos, por lo que los cient?ficos ven necesario encontrar mutaciones alternativas que incrementen su producci?n.
Mediante técnicas de supercomputaci?n, el equipo ha identificado diversas mutaciones que favorecen su estabilidad.
"Hemos utilizado herramientas inform?ticas para prever qué mutaciones consiguen reducir su movilidad y hemos escogido las que nos ofrec?an una versi?n m?s estable de la prote?na S, y con una mejor exposici?n del dominio RBD", ha apuntado por su parte el investigador del BSC-CNS V?ctor Guallar.
A partir de estas mutaciones, el equipo ha generado dos nuevas variantes de la prote?na S, la S-29 y la S-V987H, que han demostrado que consiguen mejorar la producci?n respecto a las vacunas actuales de la prote?na S.
"Multiplicamos de dos a cinco veces el nivel de producci?n de la prote?na en el laboratorio", ha indicado el investigador del IrsiCaixa Carlos ?vila.
Una aportaci?n a la futura generaci?n de vacunas
As?, los investigadores proponen el uso de estas nuevas variantes de la prote?na S en las pr?ximas generaciones de vacunas que utilicen la prote?na de la esp?cula para activar el sistema inmunitario.
"Hemos visto que en el modelo de enfermedad severa las vacunas protegen del progreso a infecci?n grave y que reducen la cantidad de virus presente en los tejidos en el modelo de enfermedad moderada", ha indicado la investigadora del IRTA-CReSA J?lia Vergara-Alert.
También se ha comprobado que tienen efectividad frente a las variantes ?micron, beta y D614G del SARS-CoV-2.
Pese al gran impacto de las vacunas de la COVID-19 en el control de la pandemia, el SARS-CoV-2 sigue presente y, a medida que va infectando y transmitiéndose, también va adoptando nuevas mutaciones que le confieren capacidades ventajosas, como una mejor transmisibilidad o evasi?n de la respuesta inmunitaria.
Por ello, la comunidad cient?fica sigue trabajando para desarrollar vacunas que se adapten a estas nuevas capacidades del SARS-CoV-2.
"Contar con estudios como este sirve para la creaci?n de las nuevas generaciones de vacunas e identifica nuevas modificaciones que podr?an optimizarlas", ha remarcado el investigador del IRTA-CReSA Joaquim Segalés.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/nuevas-vacunas-covid-19-mejoran-99778958)