الريــم
02-26-2024, 10:22 AM
El todav?a reciente vertido de pellets en la costa cant?brica removi? las conciencias. Y también las memorias. Porque las im?genes de voluntarios limpiando playas gallegas no resultan extra?as. Solo hay que sustituir esas bolitas de pl?stico por una masa negra, densa y opaca para que a m?s de uno se le erice la piel. Pese a que no hay una f?rmula matem?tica para medir la magnitud de la cat?strofe, nadie duda de que el macrovertido que caus? el naufragio del ‘Prestige (https://www.sport.es/es/noticias/medio-ambiente/20-anos-prestige-cronologia-7-78463936)’ es uno de los mayores dramas medioambientales de los ?ltimos 50 a?os en Espa?a. Uno de los mayores, pero no el ?nico. Los dem?s tienen nombre propio: A Coru?a, Aznalc?llar y la Sierra de la Culebra sobreviven con cicatrices. Do?ana (https://www.sport.es/es/noticias/medio-ambiente/extraccion-agua-subterranea-asfixia-donana-98089215) y el Mar Menor permanecen en la UCI.
Desastre del ‘Urquiola’ (1976)
Nadie en A Coru?a olvida esos d?as de mayo. Cuando entraba a la r?a del Burgo, el petrolero ‘Urquiola’ roz? el fondo contra una aguja rocosa no se?alada en las cartas de navegaci?n y qued? encallado. No se reportaron da?os mayores, por lo que el capit?n pidi? continuar la maniobra. La Comandancia Marina se neg? y orden? alejar la embarcaci?n 200 millas de la costa. Con la marea m?s baja, los desperfectos se multiplicaron y el barco qued? herido de muerte. El crudo flu?a sin oposici?n. Durante las maniobras de rescate, se incendi? y explot?.
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98637732
El Urquiola, ya semihundido
Pinterest
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618
400
Las consecuencias fueron catastr?ficas: 100.000 toneladas de petr?leo anegaron el litoral de Betanzos, Ferrol y Ares. La pesca de toda la temporada fue arruinada y los damnificados no cobraron las indemnizaciones hasta 1989. La administraci?n culp? al capit?n, fallecido durante las labores de rescate, pero su viuda y la tripulaci?n defendieron que todo se desencaden? por errores formales. La sentencia dio la raz?n a los segundos.
Vertido de Aznalc?llar (1998)
La sombra persigue a Do?ana. En abril de 1998 vivi? uno de sus momentos m?s cr?ticos, cuando la rotura del muro de contenci?n de una balsa minera de la empresa sueca Boliden provoc? un vertido de 6 millones de metros c?bicos de aguas ?cidas y lodos t?xicos. Aneg? 4.600 hect?reas. Empez? en el municipio sevillano de Aznalc?llar y se fren? a las puertas del Parque Nacional. El CSIC estima que su impacto fue cien veces mayor que el del Prestige.
Image ID:
98637414
R?o Guadiamar, anegado por el vertido t?xico de Aznalc?llar
Héctor Garrido/EBD-CSIC
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1600
1060
Ecologistas en Acci?n estim? en 30 las toneladas de animales muertos recogidas. Los acu?feros resultaron tremendamente contaminados y se hallaron muestras de arsénico, cobalto, cromo, cobre, mercurio o manganeso. Y la huella persiste. Hace unos a?os, cient?ficos de las universidades de Granada y Almer?a tomaron muestras y demostraron que a?n hay niveles elevados de acidez y metales pesados. Boliden solo se hizo cargo de la limpieza de los terrenos pr?ximos a la presa (el 10% de la superficie afectada). En 2001, las administraciones iniciaron los tr?mites para reclamarle 133 millones de euros. Pero, justo antes de la apertura del procedimiento, la compa??a hizo las maletas, cerr? su sucursal en Espa?a y clausur? la mina.
La huella del ‘Prestige’ (2002)
Pocos desastres perviven en la memoria de manera tan n?tida como la crisis del ‘Prestige’. En noviembre de 2002, las playas de la cornisa cant?brica se cubrieron de fuel -chapapote-, murieron miles de aves y peces y el impacto econ?mico en la zona, muy dependiente de la pesca y el turismo, fue millonario. Las Rias Baixas, de gran riqueza ecol?gica, fueron las m?s golpeadas, pero la mancha se extendi? hasta Portugal y Francia.
Image ID:
98637525
Voluntarios recogiendo fuel del Prestige
Efe
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1352
1920
El hundimiento del petrolero provoc? que 65.000 toneladas de fuel se extendieran por el Cant?brico. Todo se ti?? de negro, un color que contrastaba con el blanco del traje de los voluntarios que intentaban limpiar la costa. El lema ‘Nunca mais’ fue transversal y mostr? el descontento de una sociedad que se sinti? desamparada. Su aliento no pudo salvar a m?s de 200.000 ejemplares de aves de 90 especies distintas. Tampoco estaba en su mano evitar que la contaminaci?n invadiese toda la cadena tr?fica. Pescadores y mariscadores lloraron por su futuro. A?n no lo han perdonado.
Incendios de Zamora (2022)
Cada verano, Espa?a arde de norte a sur. La ‘tormenta perfecta’ que provoca el cambio clim?tico no ha hecho m?s que aumentar la superficie que termina arrasada por el fuego.*En 2022, Zamora sufri? el que se considera uno de los incendios forestales m?s voraces de la historia reciente: las llamas redujeron a cenizas m?s de 57.000 hect?reas en varios episodios casi simult?neos. Siete grandes incendios se sucedieron en una interminable temporada estival. Sumados a otros muchos focos menores, dejaron en la provincia un rastro de devastaci?n. Y se cobraron cuatro vidas humanas. La zona cero fue la Sierra de la Culebra, que ardi? de forma casi ininterrumpida desde el 15 de junio hasta el 14 de agosto.
Image ID:
98637573
Incendio de Zamora
La Opini?n de Zamora
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1200
675
Las autoridades diferenciaron dos ‘megaincendios’, los mayores de la historia de la comunidad, que se colocan también en lo m?s alto de la lista de los m?s destructivos en Espa?a.
El Mar Menor se ahoga
Nadie sabe a ciencia cierta cu?ntas décadas atr?s comenz? la agon?a del Mar Menor, pero s? est? en los registros el punto de inflexi?n. En 2016, las entonces cristalinas aguas mutaron en un l?quido turbio, viscoso, una ‘sopa verde’. Los nutrientes -nitr?geno y f?sforo- hab?an llegado a tal nivel de concentraci?n que las algas crec?an sin control, tanto que acabaron con el ox?geno del agua. Para encontrar el origen habr?a que mirar a la agricultura industrial (el 85% de los contaminantes proceder?a de ella), al crecimiento urban?stico masivo y a la miner?a. Desde ese momento se produjeron otros dos episodios de mortandad masiva de peces, tan grandes que los cad?veres cubr?an enteramente la superficie de este antiguo tesoro natural.
Image ID:
98637609
El Mar Menor, una de las ?ltimas cat?strofes ecol?gicas de Espa?a
Efe
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1600
900
Miguel ?ngel Esteve, catedr?tico de Ecolog?a de la Universidad de Murcia, traz? en un art?culo para The Conversation las l?neas a seguir para salvar este paraje, entre las que destacan reducir la superficie agraria intensiva, rebajar los nitratos y fosfatos por unidad de cultivo o renaturalizar el Campo de Cartagena.
Do?ana, ?un desierto?
Como Parque Nacional, su protecci?n deber?a estar enteramente garantizada. Pero la realidad es bien distinta. Las 50.000 hect?reas que conforman Do?ana se mueren de sed debido a un fen?meno que tiene dos caras: una natural y otra pol?tica. La sequ?a que azota esta joya de la biodiversidad es su mayor amenaza, un mal que se agudiza en los despachos. Una ley impulsada por la Junta de Andaluc?a (y finalmente archivada) iba a legitimar el uso indebido de la poca agua que queda en cultivos de regad?o. Es decir, dar?a respaldo a los pozos ilegales que proliferan en toda su extensi?n. La soluci?n es simple, seg?n los expertos: hay que quitar presi?n al acu?fero del que se alimenta todo el humedal.
Image ID:
98637688
Antes y después de una de las lagunas de Do?ana
CSIC
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1246
830
Seg?n datos del CSIC, hoy en d?a el 59% de las lagunas est?n secas. Las mismas que son el hogar de especies como el lince ibérico o el ?guila imperial, actualmente en peligro de extinci?n. También sirve de refugio a aves africanas y europeas en periodos de migraci?n, pero las poblaciones de aves caen en picado, algo impensable en uno de los mayores humedales de Europa.
...............
ENTREVISTA. Antonio Figueras, investigador del CSIC
«El ‘Prestige’ requiere una monitorizaci?n que nadie ha hecho»
Bi?logo y profesor del CSIC, Antonio Figueras vivi? en sus carnes c?mo fue la gesti?n inicial de la crisis del ‘Prestige’. M?s de dos décadas después, recuerda el desaf?o que supuso hacer entender que Galicia enfrentaba una situaci?n grave.
Image ID:
98637105
Antonio Figueras
CSIC
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1280
548
-?C?mo fueron esos primeros d?as tras el desastre?
-En aquel momento era el director del Instituto de Investigaciones Marinas y por eso me incluyeron en el comité asesor. Después me empe?é en mantener el tema abierto. En Galicia estamos tan acostumbrados a que haya accidentes (cada d?a pasan por su costa unos 40 barcos) que hab?a que mostrar que esto era serio. Inmediatamente, mandé a un grupo de mis investigadores a la zona de Mux?a para ver si pod?an recoger alguna muestra. Recuerdo una fotograf?a impactante: un cubo lleno de fuel con un palo de fregona clavado. No se mov?a, era muy denso, y estaba llegando a la costa. Hab?a que intervenir ya. As? empez? todo.
-?Por qué no se ha vuelto a bajar al barco?
-Se baj? una vez, en 2008. Lo autorizaron a rega?adientes. Entonces se dijo que el ‘Prestige’ segu?a contaminando, pero poco. Aun as?, requiere una monitorizaci?n que nadie ha hecho. No siempre ocurre as?: décadas después del desastre del petrolero ‘Exxon Valdez’en Alaska, los expertos siguen trabajando en la zona. Aqu?, la financiaci?n solo dur? tres a?os. Nadie se plantea ahora bajar al pecio. Lo mismo que ocurri? en Aznalc?llar, donde hubo un programa de seguimiento en su d?a y ya nadie sabe en qué estado se encuentra, pese a que el vertido fue monumental.
-Los fondos marinos no se recuperan r?pido.
-Lo cierto es que no lo sabemos, porque en los proyectos de investigaci?n no existe una continuaci?n en el tiempo. De hecho, falta la base, la referencia. Asumiendo que la costa se ha normalizado, podr?amos trazar una l?nea sobre c?mo est?n los ecosistemas, la densidad de las poblaciones… Para que, si hay otras cat?strofes, podamos comparar el antes y el después. Me llama mucho la atenci?n el desprecio sistem?tico que hay hacia el conocimiento. Somos una especie que est? condenada a vivir en este planeta que llamamos Tierra, pero es agua. Todo lo que ocurre depende de lo que pasa en el mar.
-?Hemos aprendido algo?
-Algo conseguimos, pero la vida real y los despachos funcionan a un ritmo muy distinto. Nos falta ser m?s profesionales. Estamos en una pen?nsula, rodeados de agua, con un tr?fico de mercanc?as monumental, y debemos estar preparados para actuar sin pensar. Mejor prevenir que tener que curar.
-En estas ocasiones, ?pesa m?s la pol?tica que la ciencia?
-Es evidente. Solo hay que ver el caso de los pellets. La playa de La Pineda, en Tarragona, lleva décadas llena de ellos y nadie ha hecho nada. Que en Galicia, porque hay unas elecciones auton?micas, se mueva todo el mundo para*rascar votos me parece indecente.
..............
Contacto de la secci?n de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/medio-ambiente/grandes-catastrofes-ecologicas-espana-ultimo-98663547)
Desastre del ‘Urquiola’ (1976)
Nadie en A Coru?a olvida esos d?as de mayo. Cuando entraba a la r?a del Burgo, el petrolero ‘Urquiola’ roz? el fondo contra una aguja rocosa no se?alada en las cartas de navegaci?n y qued? encallado. No se reportaron da?os mayores, por lo que el capit?n pidi? continuar la maniobra. La Comandancia Marina se neg? y orden? alejar la embarcaci?n 200 millas de la costa. Con la marea m?s baja, los desperfectos se multiplicaron y el barco qued? herido de muerte. El crudo flu?a sin oposici?n. Durante las maniobras de rescate, se incendi? y explot?.
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El Urquiola, ya semihundido
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618
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Las consecuencias fueron catastr?ficas: 100.000 toneladas de petr?leo anegaron el litoral de Betanzos, Ferrol y Ares. La pesca de toda la temporada fue arruinada y los damnificados no cobraron las indemnizaciones hasta 1989. La administraci?n culp? al capit?n, fallecido durante las labores de rescate, pero su viuda y la tripulaci?n defendieron que todo se desencaden? por errores formales. La sentencia dio la raz?n a los segundos.
Vertido de Aznalc?llar (1998)
La sombra persigue a Do?ana. En abril de 1998 vivi? uno de sus momentos m?s cr?ticos, cuando la rotura del muro de contenci?n de una balsa minera de la empresa sueca Boliden provoc? un vertido de 6 millones de metros c?bicos de aguas ?cidas y lodos t?xicos. Aneg? 4.600 hect?reas. Empez? en el municipio sevillano de Aznalc?llar y se fren? a las puertas del Parque Nacional. El CSIC estima que su impacto fue cien veces mayor que el del Prestige.
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R?o Guadiamar, anegado por el vertido t?xico de Aznalc?llar
Héctor Garrido/EBD-CSIC
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Ecologistas en Acci?n estim? en 30 las toneladas de animales muertos recogidas. Los acu?feros resultaron tremendamente contaminados y se hallaron muestras de arsénico, cobalto, cromo, cobre, mercurio o manganeso. Y la huella persiste. Hace unos a?os, cient?ficos de las universidades de Granada y Almer?a tomaron muestras y demostraron que a?n hay niveles elevados de acidez y metales pesados. Boliden solo se hizo cargo de la limpieza de los terrenos pr?ximos a la presa (el 10% de la superficie afectada). En 2001, las administraciones iniciaron los tr?mites para reclamarle 133 millones de euros. Pero, justo antes de la apertura del procedimiento, la compa??a hizo las maletas, cerr? su sucursal en Espa?a y clausur? la mina.
La huella del ‘Prestige’ (2002)
Pocos desastres perviven en la memoria de manera tan n?tida como la crisis del ‘Prestige’. En noviembre de 2002, las playas de la cornisa cant?brica se cubrieron de fuel -chapapote-, murieron miles de aves y peces y el impacto econ?mico en la zona, muy dependiente de la pesca y el turismo, fue millonario. Las Rias Baixas, de gran riqueza ecol?gica, fueron las m?s golpeadas, pero la mancha se extendi? hasta Portugal y Francia.
Image ID:
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Voluntarios recogiendo fuel del Prestige
Efe
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El hundimiento del petrolero provoc? que 65.000 toneladas de fuel se extendieran por el Cant?brico. Todo se ti?? de negro, un color que contrastaba con el blanco del traje de los voluntarios que intentaban limpiar la costa. El lema ‘Nunca mais’ fue transversal y mostr? el descontento de una sociedad que se sinti? desamparada. Su aliento no pudo salvar a m?s de 200.000 ejemplares de aves de 90 especies distintas. Tampoco estaba en su mano evitar que la contaminaci?n invadiese toda la cadena tr?fica. Pescadores y mariscadores lloraron por su futuro. A?n no lo han perdonado.
Incendios de Zamora (2022)
Cada verano, Espa?a arde de norte a sur. La ‘tormenta perfecta’ que provoca el cambio clim?tico no ha hecho m?s que aumentar la superficie que termina arrasada por el fuego.*En 2022, Zamora sufri? el que se considera uno de los incendios forestales m?s voraces de la historia reciente: las llamas redujeron a cenizas m?s de 57.000 hect?reas en varios episodios casi simult?neos. Siete grandes incendios se sucedieron en una interminable temporada estival. Sumados a otros muchos focos menores, dejaron en la provincia un rastro de devastaci?n. Y se cobraron cuatro vidas humanas. La zona cero fue la Sierra de la Culebra, que ardi? de forma casi ininterrumpida desde el 15 de junio hasta el 14 de agosto.
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Incendio de Zamora
La Opini?n de Zamora
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Las autoridades diferenciaron dos ‘megaincendios’, los mayores de la historia de la comunidad, que se colocan también en lo m?s alto de la lista de los m?s destructivos en Espa?a.
El Mar Menor se ahoga
Nadie sabe a ciencia cierta cu?ntas décadas atr?s comenz? la agon?a del Mar Menor, pero s? est? en los registros el punto de inflexi?n. En 2016, las entonces cristalinas aguas mutaron en un l?quido turbio, viscoso, una ‘sopa verde’. Los nutrientes -nitr?geno y f?sforo- hab?an llegado a tal nivel de concentraci?n que las algas crec?an sin control, tanto que acabaron con el ox?geno del agua. Para encontrar el origen habr?a que mirar a la agricultura industrial (el 85% de los contaminantes proceder?a de ella), al crecimiento urban?stico masivo y a la miner?a. Desde ese momento se produjeron otros dos episodios de mortandad masiva de peces, tan grandes que los cad?veres cubr?an enteramente la superficie de este antiguo tesoro natural.
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El Mar Menor, una de las ?ltimas cat?strofes ecol?gicas de Espa?a
Efe
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Miguel ?ngel Esteve, catedr?tico de Ecolog?a de la Universidad de Murcia, traz? en un art?culo para The Conversation las l?neas a seguir para salvar este paraje, entre las que destacan reducir la superficie agraria intensiva, rebajar los nitratos y fosfatos por unidad de cultivo o renaturalizar el Campo de Cartagena.
Do?ana, ?un desierto?
Como Parque Nacional, su protecci?n deber?a estar enteramente garantizada. Pero la realidad es bien distinta. Las 50.000 hect?reas que conforman Do?ana se mueren de sed debido a un fen?meno que tiene dos caras: una natural y otra pol?tica. La sequ?a que azota esta joya de la biodiversidad es su mayor amenaza, un mal que se agudiza en los despachos. Una ley impulsada por la Junta de Andaluc?a (y finalmente archivada) iba a legitimar el uso indebido de la poca agua que queda en cultivos de regad?o. Es decir, dar?a respaldo a los pozos ilegales que proliferan en toda su extensi?n. La soluci?n es simple, seg?n los expertos: hay que quitar presi?n al acu?fero del que se alimenta todo el humedal.
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Antes y después de una de las lagunas de Do?ana
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Seg?n datos del CSIC, hoy en d?a el 59% de las lagunas est?n secas. Las mismas que son el hogar de especies como el lince ibérico o el ?guila imperial, actualmente en peligro de extinci?n. También sirve de refugio a aves africanas y europeas en periodos de migraci?n, pero las poblaciones de aves caen en picado, algo impensable en uno de los mayores humedales de Europa.
...............
ENTREVISTA. Antonio Figueras, investigador del CSIC
«El ‘Prestige’ requiere una monitorizaci?n que nadie ha hecho»
Bi?logo y profesor del CSIC, Antonio Figueras vivi? en sus carnes c?mo fue la gesti?n inicial de la crisis del ‘Prestige’. M?s de dos décadas después, recuerda el desaf?o que supuso hacer entender que Galicia enfrentaba una situaci?n grave.
Image ID:
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Antonio Figueras
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-?C?mo fueron esos primeros d?as tras el desastre?
-En aquel momento era el director del Instituto de Investigaciones Marinas y por eso me incluyeron en el comité asesor. Después me empe?é en mantener el tema abierto. En Galicia estamos tan acostumbrados a que haya accidentes (cada d?a pasan por su costa unos 40 barcos) que hab?a que mostrar que esto era serio. Inmediatamente, mandé a un grupo de mis investigadores a la zona de Mux?a para ver si pod?an recoger alguna muestra. Recuerdo una fotograf?a impactante: un cubo lleno de fuel con un palo de fregona clavado. No se mov?a, era muy denso, y estaba llegando a la costa. Hab?a que intervenir ya. As? empez? todo.
-?Por qué no se ha vuelto a bajar al barco?
-Se baj? una vez, en 2008. Lo autorizaron a rega?adientes. Entonces se dijo que el ‘Prestige’ segu?a contaminando, pero poco. Aun as?, requiere una monitorizaci?n que nadie ha hecho. No siempre ocurre as?: décadas después del desastre del petrolero ‘Exxon Valdez’en Alaska, los expertos siguen trabajando en la zona. Aqu?, la financiaci?n solo dur? tres a?os. Nadie se plantea ahora bajar al pecio. Lo mismo que ocurri? en Aznalc?llar, donde hubo un programa de seguimiento en su d?a y ya nadie sabe en qué estado se encuentra, pese a que el vertido fue monumental.
-Los fondos marinos no se recuperan r?pido.
-Lo cierto es que no lo sabemos, porque en los proyectos de investigaci?n no existe una continuaci?n en el tiempo. De hecho, falta la base, la referencia. Asumiendo que la costa se ha normalizado, podr?amos trazar una l?nea sobre c?mo est?n los ecosistemas, la densidad de las poblaciones… Para que, si hay otras cat?strofes, podamos comparar el antes y el después. Me llama mucho la atenci?n el desprecio sistem?tico que hay hacia el conocimiento. Somos una especie que est? condenada a vivir en este planeta que llamamos Tierra, pero es agua. Todo lo que ocurre depende de lo que pasa en el mar.
-?Hemos aprendido algo?
-Algo conseguimos, pero la vida real y los despachos funcionan a un ritmo muy distinto. Nos falta ser m?s profesionales. Estamos en una pen?nsula, rodeados de agua, con un tr?fico de mercanc?as monumental, y debemos estar preparados para actuar sin pensar. Mejor prevenir que tener que curar.
-En estas ocasiones, ?pesa m?s la pol?tica que la ciencia?
-Es evidente. Solo hay que ver el caso de los pellets. La playa de La Pineda, en Tarragona, lleva décadas llena de ellos y nadie ha hecho nada. Que en Galicia, porque hay unas elecciones auton?micas, se mueva todo el mundo para*rascar votos me parece indecente.
..............
Contacto de la secci?n de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/medio-ambiente/grandes-catastrofes-ecologicas-espana-ultimo-98663547)