الريــم
01-10-2024, 05:57 PM
La noche del 23 de junio de 1858, en Bolonia, un ni?o de seis a?os llamado Edgardo Mortara fue secuestrado en la casa de sus padres, comerciantes jud?os, ante la mirada impotente de estos. Los captores no exigieron un rescate ni amenazaron con hacer da?o al cr?o; lo que pretend?an, en realidad, era salvarlo. ?De qué? Cuando ten?a solo 2 a?os, Edgardo hab?a ca?do gravemente enfermo y la sirvienta de la familia, cat?lica, lo hab?a hecho bautizar en secreto creyendo que iba a morir y que, de no ser convertido al cristianismo, su alma nunca descansar?a en paz. Y, dado que seg?n la ley de la Iglesia un ni?o cristiano no pod?a ser criado por jud?os, el papa P?o IX -l?der de los Estados Pontificios, de los que por entonces formaba parte casi todo el centro de la pen?nula it?lica-, orden? que el peque?o Mortara fuera separado de sus progenitores y enviado a Roma para ser educado como Dios manda.
Considerando la magnitud de las consecuencias sociales y pol?ticas derivadas de aquel suceso, no sorprende que Steven Spielberg (https://www.sport.es/es/temas/steven-spielberg-1839016) estuviera a punto de llevarlo al cine. “Poco después de interesarme por la historia de Edgardo me enteré de que él ya estaba preparando una pel?cula sobre ello, as? que inicialmente abandoné mi proyecto”, nos explica Marco Bellocchio acerca de su nuevo largometraje, ‘El rapto’, que este viernes se estrena en Espa?a y que por el momento es la ?nica recreaci?n cinematogr?fica que existe del caso Mortara. “Para m? fue una suerte que Spielberg no siguiera adelante con el suyo; yo creo que comprendi? que se trata de una historia completamente italiana, y que solo se le puede hacer justicia si es contada en italiano, por italianos”.
Existieron al menos dos planes para liberar a Edgardo y devolverlo al lado de sus padres, uno de ellos aprobado por el gran héroe de la liberaci?n de Italia, Giuseppe Garibaldi
Como cuenta la pel?cula, una vez en Roma Edgardo se convirti? en protegido del pont?fice, que lleg? a considerarlo como algo parecido a un hijo. Entretanto, los padres del peque?o recibieron un ultim?tum: si quer?an reunirse con su hijo, ellos también deber?an convertirse. “Para m? lo m?s llamativo de lo ocurrido no es la actitud de la iglesia, que al fin y al cabo estuvo de acuerdo con las leyes de los Estados Pontificios”, opina Bellocchio. “Lo que a m? me resulta incomprensible es que Edgardo no se rebelara en cuanto tuvo ocasi?n ni regresara con su familia, y que cuando fue ordenado sacerdote incluso se agregara el nombre P?o en honor al hombre que lo hab?a mandado secuestrar”.
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Escena de 'El Rapto'.
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Clérigo desde los 21 a?os, Mortara se dedic? a difundir por toda Europa la fe que le hab?an impuesto hasta que muri? en marzo de 1940, justo a tiempo de evitar la persecuci?n nazi. Antes de eso ejerci? de fraile durante un tiempo en el Pa?s Vasco. En uno e los ensayos recopilados en su libro ‘Contra esto y aquello’, Miguel de Unamuno cuenta que le oy? "un serm?n predicado en vascuence en Guernica", y también lo retrata recogiendo donativos en el balneario de Cestona (Guip?zcoa).
A mediados del siglo pasado, las conversiones forzosas de jud?os al catolicismo ya llevaban tiempo siendo comunes en Europa, muchas de ellas basadas en un art?culo de la Ley Can?nica -todav?a vigente en la actualidad, aunque el Vaticano ha renunciado oficialmente a su ejecuci?n- seg?n el que “un ni?o de padres cat?licos o no cat?licos puede ser bautizado legalmente si est? en peligro de muerte incluso en contra de la voluntad de sus padres”. Sin embargo, a diferencia de tantos casos similares previos, el secuestro de Edgardo provoc? un esc?ndalo internacional y una ola de protestas en todo Occidente a causa tanto de la resistencia cada vez m?s generalizada al poder pol?tico del Pont?fice como a la influencia creciente de la prensa; se sabe, adem?s, que existieron al menos dos planes para liberar a Edgardo y devolverlo al lado de sus padres, uno de ellos aprobado por el gran héroe de la liberaci?n de Italia, Giuseppe Garibaldi.
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El papa P?o IX orden? que el peque?o Edgardo Mortara fuera separado de sus progenitores y enviado a Roma.
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Nada de eso logr? torcerle el brazo a P?o IX, que hab?a accedido al papado gracias a su reputaci?n de liberal pero que, tras los movimientos revolucionarios que sacudieron Europa en 1848, se hab?a revelado como un l?der absolutista y reaccionario. “Y, a pesar de todo, fue beatificado por Juan Pablo II (https://www.sport.es/es/temas/juan-pablo-ii-1897634)”, recuerda Bellocchio. “Otra prueba m?s de las dificultades que la Iglesia siempre ha tenido a la hora de corregir sus errores”. Ir?nicamente, el caso Mortara contribuy? a acelerar el fin de los Estados Pontificios puesto que, en parte a causa de la reacci?n internacional generada por él, el emperador Napole?n III rompi? la alianza que Francia manten?a con el Papa y dio su apoyo a los nacionalistas italianos, cuya toma de Roma culmin? el proceso de unificaci?n de Italia.
Bellocchio: "Todas las religiones son intolerantes, porque imponen a los creyentes una serie de dogmas de los que es imposible desviarse. Esa actitud abre la puerta a las tragedias"
Bellocchio tiene 83 a?os y lleva 60 usando sus pel?culas para airear las vergüenzas de la sociedad italiana, ya sea hablando de la familia -en ‘Las manos en los bolsillos’ (1965)-, la burgues?a -La balia (1999)-, el fascismo -Vincere’ (2009)-, el terrorismo -’Buenos d?as, noche’ (2003)-, la mafia -‘El traidor’ (2019)- o, por supuesto, el peso de la religi?n. En ‘En el nombre del padre’ (1972), por ejemplo, el cineasta sald? cuentas con la educaci?n cat?lica que hab?a recibido de ni?o. “Mi rechazo de la Iglesia y mi pérdida de la fe tienen sus ra?ces en las estrictas reglas que la religi?n me impuso y que iban asociadas a la amenaza de la condena eterna”, comenta. “Me parece horrible que, todav?a en la actualidad, haya ni?os de 7 u 8 a?os a quienes se inculque el miedo a acabar ardiendo en el infierno”.
El estreno de ‘El rapto’ en Italia provoc? la ira de sectores tradicionalistas cat?licos, que llegaron a tacharla de propaganda anticrisitana. “No he hecho la pel?cula para exponer un punto de vista pol?tico ni para posicionarme contra el Vaticano en particular”, asegura Bellocchio al respecto. “Pero creo que siempre es importante recordar que todas las religiones son intolerantes, porque imponen a los creyentes una serie de dogmas de los que es imposible desviarse. Esa actitud abre la puerta a las tragedias”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/gente/rapto-historia-nino-judio-seis-96738929)
Considerando la magnitud de las consecuencias sociales y pol?ticas derivadas de aquel suceso, no sorprende que Steven Spielberg (https://www.sport.es/es/temas/steven-spielberg-1839016) estuviera a punto de llevarlo al cine. “Poco después de interesarme por la historia de Edgardo me enteré de que él ya estaba preparando una pel?cula sobre ello, as? que inicialmente abandoné mi proyecto”, nos explica Marco Bellocchio acerca de su nuevo largometraje, ‘El rapto’, que este viernes se estrena en Espa?a y que por el momento es la ?nica recreaci?n cinematogr?fica que existe del caso Mortara. “Para m? fue una suerte que Spielberg no siguiera adelante con el suyo; yo creo que comprendi? que se trata de una historia completamente italiana, y que solo se le puede hacer justicia si es contada en italiano, por italianos”.
Existieron al menos dos planes para liberar a Edgardo y devolverlo al lado de sus padres, uno de ellos aprobado por el gran héroe de la liberaci?n de Italia, Giuseppe Garibaldi
Como cuenta la pel?cula, una vez en Roma Edgardo se convirti? en protegido del pont?fice, que lleg? a considerarlo como algo parecido a un hijo. Entretanto, los padres del peque?o recibieron un ultim?tum: si quer?an reunirse con su hijo, ellos también deber?an convertirse. “Para m? lo m?s llamativo de lo ocurrido no es la actitud de la iglesia, que al fin y al cabo estuvo de acuerdo con las leyes de los Estados Pontificios”, opina Bellocchio. “Lo que a m? me resulta incomprensible es que Edgardo no se rebelara en cuanto tuvo ocasi?n ni regresara con su familia, y que cuando fue ordenado sacerdote incluso se agregara el nombre P?o en honor al hombre que lo hab?a mandado secuestrar”.
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Escena de 'El Rapto'.
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Clérigo desde los 21 a?os, Mortara se dedic? a difundir por toda Europa la fe que le hab?an impuesto hasta que muri? en marzo de 1940, justo a tiempo de evitar la persecuci?n nazi. Antes de eso ejerci? de fraile durante un tiempo en el Pa?s Vasco. En uno e los ensayos recopilados en su libro ‘Contra esto y aquello’, Miguel de Unamuno cuenta que le oy? "un serm?n predicado en vascuence en Guernica", y también lo retrata recogiendo donativos en el balneario de Cestona (Guip?zcoa).
A mediados del siglo pasado, las conversiones forzosas de jud?os al catolicismo ya llevaban tiempo siendo comunes en Europa, muchas de ellas basadas en un art?culo de la Ley Can?nica -todav?a vigente en la actualidad, aunque el Vaticano ha renunciado oficialmente a su ejecuci?n- seg?n el que “un ni?o de padres cat?licos o no cat?licos puede ser bautizado legalmente si est? en peligro de muerte incluso en contra de la voluntad de sus padres”. Sin embargo, a diferencia de tantos casos similares previos, el secuestro de Edgardo provoc? un esc?ndalo internacional y una ola de protestas en todo Occidente a causa tanto de la resistencia cada vez m?s generalizada al poder pol?tico del Pont?fice como a la influencia creciente de la prensa; se sabe, adem?s, que existieron al menos dos planes para liberar a Edgardo y devolverlo al lado de sus padres, uno de ellos aprobado por el gran héroe de la liberaci?n de Italia, Giuseppe Garibaldi.
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El papa P?o IX orden? que el peque?o Edgardo Mortara fuera separado de sus progenitores y enviado a Roma.
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Nada de eso logr? torcerle el brazo a P?o IX, que hab?a accedido al papado gracias a su reputaci?n de liberal pero que, tras los movimientos revolucionarios que sacudieron Europa en 1848, se hab?a revelado como un l?der absolutista y reaccionario. “Y, a pesar de todo, fue beatificado por Juan Pablo II (https://www.sport.es/es/temas/juan-pablo-ii-1897634)”, recuerda Bellocchio. “Otra prueba m?s de las dificultades que la Iglesia siempre ha tenido a la hora de corregir sus errores”. Ir?nicamente, el caso Mortara contribuy? a acelerar el fin de los Estados Pontificios puesto que, en parte a causa de la reacci?n internacional generada por él, el emperador Napole?n III rompi? la alianza que Francia manten?a con el Papa y dio su apoyo a los nacionalistas italianos, cuya toma de Roma culmin? el proceso de unificaci?n de Italia.
Bellocchio: "Todas las religiones son intolerantes, porque imponen a los creyentes una serie de dogmas de los que es imposible desviarse. Esa actitud abre la puerta a las tragedias"
Bellocchio tiene 83 a?os y lleva 60 usando sus pel?culas para airear las vergüenzas de la sociedad italiana, ya sea hablando de la familia -en ‘Las manos en los bolsillos’ (1965)-, la burgues?a -La balia (1999)-, el fascismo -Vincere’ (2009)-, el terrorismo -’Buenos d?as, noche’ (2003)-, la mafia -‘El traidor’ (2019)- o, por supuesto, el peso de la religi?n. En ‘En el nombre del padre’ (1972), por ejemplo, el cineasta sald? cuentas con la educaci?n cat?lica que hab?a recibido de ni?o. “Mi rechazo de la Iglesia y mi pérdida de la fe tienen sus ra?ces en las estrictas reglas que la religi?n me impuso y que iban asociadas a la amenaza de la condena eterna”, comenta. “Me parece horrible que, todav?a en la actualidad, haya ni?os de 7 u 8 a?os a quienes se inculque el miedo a acabar ardiendo en el infierno”.
El estreno de ‘El rapto’ en Italia provoc? la ira de sectores tradicionalistas cat?licos, que llegaron a tacharla de propaganda anticrisitana. “No he hecho la pel?cula para exponer un punto de vista pol?tico ni para posicionarme contra el Vaticano en particular”, asegura Bellocchio al respecto. “Pero creo que siempre es importante recordar que todas las religiones son intolerantes, porque imponen a los creyentes una serie de dogmas de los que es imposible desviarse. Esa actitud abre la puerta a las tragedias”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/gente/rapto-historia-nino-judio-seis-96738929)