الريــم
12-25-2023, 05:30 PM
Alan Touring, el padre de la inform?tica, fue el primero que plante? la existencia de m?quinas inteligentes desde un punto de vista cient?fico, en la década del 1950. En 2023, la denominada Inteligencia Artificial generativa --los nuevos sistemas de generaci?n de contenido-- ya ha llegado a los despachos de abogados en Espa?a (https://www.epe.es/es/investigacion/20231225/abogados-inteligencia-artificial-herramienta-minoritaria-necesita-supervision-96183447).
Los expertos coinciden en que se trata de una herramienta cuyo uso es a?n minoritario pero "inevitable", y alertan de que precisa supervisi?n, por lo que creen que nunca llegar?n a sustituir a un profesional. Por el momento, ayudan a corregir errores y preparar contratos o borradores de demandas genéricos, ahorrando a los trabajadores de los bufetes sus cometidos m?s mec?nicos. Sus aplicaciones futuras son, en todo caso, una inc?gnita.
Mabel Klimt, responsable de Innovaci?n y Tecnolog?a del Ilustre Colegio de la Abogac?a de Madrid, apunta a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, un reciente estudio realizado entre los m?s de 76.000 miembros del mayor colegio de Europa, que revela que solo el 3% de los profesionales usa ahora mismo esa tecnolog?a.
Por encima de esa media, se sit?an los grandes despachos (en un 11%), despachos medianos (8%) y abogac?a de empresa (7%). No obstante, desde esta instituci?n consideran que "el proceso de incorporaci?n de esta tecnolog?a ser? totalmente exponencial en el corto plazo, con lo que es de esperar que se vaya acelerando en los pr?ximos meses, seg?n se vayan diversificando y popularizando las distintas soluciones" existentes en el mercado.
Estas tecnolog?as generan contenido de alta calidad, tanto texto como im?genes o audio, aunque a?n no est?n exentas de errores, alerta Elen Iraz?bal, colaboradora del Consejo General de la Abogac?a Espa?ola, y profesora de Inteligencia Artificial para abogados. Que esos contenidos “nuevos” sean originales o no, ya es otra discusi?n.
En todo caso, la IA no puede saber m?s que aquello que ha aprendido, y en el mundo jur?dico s?lo es ?til la informaci?n que es "legalmente fiable y precisa", advierte Klimt, por lo que debe asegurarse una actualizaci?n constante de los contenidos. Otro aspecto a tener muy en cuenta es el cumplimiento de los requisitos legales vigentes, como la protecci?n de datos y la propiedad intelectual.
Jurimetr?a y redacci?n de contratos
Una de las aplicaciones en las que la IA est? logrando una mayor inserci?n es la redacci?n de contratos y documentos legales. También facilita y acelera el asesoramiento basado en an?lisis de datos a través de la denominada jurimetr?a, una herramienta de an?lisis jurisprudencial que, al estudiar datos hist?ricos de casos y decisiones judiciales de diferentes juzgados, permite brindar asesoramiento fundamentado sobre la conveniencia de someter litigios al juicio de un magistrado y sus posibles sesgos.
La supervisi?n del profesional es, en todo caso, imprescindible. "El ChatGPT comete errores que son de l?gica pura, que un humano no cometer?a", reconoce la profesora Iraz?bal, que a?ade que una herramienta de procesamiento de datos "no tiene la intuici?n ni el sentido com?n de los seres humanos".
Las expertas consultadas por este diario auguran que su uso se generalizar? r?pidamente, pues si en un despacho se pueden dar instrucciones a un abogado junior para que elabore una demanda, lo mismo se puede hacer con la herramienta tecnol?gica.
Por el momento, se circunscribe a la automatizaci?n de procesos de tipo mec?nico, control de errores, preparaci?n de borradores de base para documentos etc., que son justo esas tareas que no nos gusta hacer por repetitivas. "Es algo que en el caso de mi despacho, Elzaburu, llevamos tiempo haciendo, por ejemplo", tercia Klimt, que asegura que su bufete ya dispone de un peque?o equipo de trabajo que valora y analiza de manera permanente nuestros procesos y va planteando sobre la marcha peque?as posibilidades de mejora.
?Conocen su uso los clientes?
?Y los clientes? ?Conocen este uso? Para Iraz?bal esta posibilidad tampoco es relevante, ya que a d?a de hoy se trata de una herramienta m?s, cuya utilizacion no tiene por qué verse como negativa si, a la postre, permite ahorras costes y ofrecer un servicio de mayor calidad. Seg?n Klimt, independientemente de las herramientas que usen los abogados para ayudar de la mejor manera posible a sus clientes, "quienes responden del trabajo legal que se desarrolla son los profesionales".
A juicio de esta experta, los problemas de utilizaci?n de la IA no son tanto de la confianza de los clientes, que esa se la aporta la parte ‘humana’ (el abogado), sino los intr?nsecos al empleo de la propia tecnolog?a. Se debe asegurar la transparencia de estas herramientas, poder conocer de qué fuentes beben, c?mo funcionan los algoritmos de entrenamiento, o su "neutralidad tecnol?gica", es decir, que el uso de estas tecnolog?as no responda a sesgos para que no existan efectos contrarios a la deontolog?a profesional y a los derechos de defensa de la ciudadan?a.
"Y dos cuestiones claves adicionales ser?n la propiedad intelectual y la normativa en materia de protecci?n de datos de car?cter personal en relaci?n los materiales utilizados para el entrenamiento de estos modelos, sus productos derivados, etc", alerta la abogada.
En todo caso, el principal problema que enfrenta hoy el sector jur?dico respecto a la IA es que los profesionales a?n no la conocen, aunque ninguna de las expertas consultadas cree que avance tan r?pido para que podamos en breve con abogados o jueces robot. "En eso, estemos tranquilos. Estamos en los albores de una nueva revoluci?n, como la que caus? la invenci?n de la imprenta o la m?quina de vapor, llena de desaf?os, pero también de oportunidades", concluye Klimt.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/abogados-inteligencia-artificial-herramienta-minoritaria-96243033)
Los expertos coinciden en que se trata de una herramienta cuyo uso es a?n minoritario pero "inevitable", y alertan de que precisa supervisi?n, por lo que creen que nunca llegar?n a sustituir a un profesional. Por el momento, ayudan a corregir errores y preparar contratos o borradores de demandas genéricos, ahorrando a los trabajadores de los bufetes sus cometidos m?s mec?nicos. Sus aplicaciones futuras son, en todo caso, una inc?gnita.
Mabel Klimt, responsable de Innovaci?n y Tecnolog?a del Ilustre Colegio de la Abogac?a de Madrid, apunta a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, un reciente estudio realizado entre los m?s de 76.000 miembros del mayor colegio de Europa, que revela que solo el 3% de los profesionales usa ahora mismo esa tecnolog?a.
Por encima de esa media, se sit?an los grandes despachos (en un 11%), despachos medianos (8%) y abogac?a de empresa (7%). No obstante, desde esta instituci?n consideran que "el proceso de incorporaci?n de esta tecnolog?a ser? totalmente exponencial en el corto plazo, con lo que es de esperar que se vaya acelerando en los pr?ximos meses, seg?n se vayan diversificando y popularizando las distintas soluciones" existentes en el mercado.
Estas tecnolog?as generan contenido de alta calidad, tanto texto como im?genes o audio, aunque a?n no est?n exentas de errores, alerta Elen Iraz?bal, colaboradora del Consejo General de la Abogac?a Espa?ola, y profesora de Inteligencia Artificial para abogados. Que esos contenidos “nuevos” sean originales o no, ya es otra discusi?n.
En todo caso, la IA no puede saber m?s que aquello que ha aprendido, y en el mundo jur?dico s?lo es ?til la informaci?n que es "legalmente fiable y precisa", advierte Klimt, por lo que debe asegurarse una actualizaci?n constante de los contenidos. Otro aspecto a tener muy en cuenta es el cumplimiento de los requisitos legales vigentes, como la protecci?n de datos y la propiedad intelectual.
Jurimetr?a y redacci?n de contratos
Una de las aplicaciones en las que la IA est? logrando una mayor inserci?n es la redacci?n de contratos y documentos legales. También facilita y acelera el asesoramiento basado en an?lisis de datos a través de la denominada jurimetr?a, una herramienta de an?lisis jurisprudencial que, al estudiar datos hist?ricos de casos y decisiones judiciales de diferentes juzgados, permite brindar asesoramiento fundamentado sobre la conveniencia de someter litigios al juicio de un magistrado y sus posibles sesgos.
La supervisi?n del profesional es, en todo caso, imprescindible. "El ChatGPT comete errores que son de l?gica pura, que un humano no cometer?a", reconoce la profesora Iraz?bal, que a?ade que una herramienta de procesamiento de datos "no tiene la intuici?n ni el sentido com?n de los seres humanos".
Las expertas consultadas por este diario auguran que su uso se generalizar? r?pidamente, pues si en un despacho se pueden dar instrucciones a un abogado junior para que elabore una demanda, lo mismo se puede hacer con la herramienta tecnol?gica.
Por el momento, se circunscribe a la automatizaci?n de procesos de tipo mec?nico, control de errores, preparaci?n de borradores de base para documentos etc., que son justo esas tareas que no nos gusta hacer por repetitivas. "Es algo que en el caso de mi despacho, Elzaburu, llevamos tiempo haciendo, por ejemplo", tercia Klimt, que asegura que su bufete ya dispone de un peque?o equipo de trabajo que valora y analiza de manera permanente nuestros procesos y va planteando sobre la marcha peque?as posibilidades de mejora.
?Conocen su uso los clientes?
?Y los clientes? ?Conocen este uso? Para Iraz?bal esta posibilidad tampoco es relevante, ya que a d?a de hoy se trata de una herramienta m?s, cuya utilizacion no tiene por qué verse como negativa si, a la postre, permite ahorras costes y ofrecer un servicio de mayor calidad. Seg?n Klimt, independientemente de las herramientas que usen los abogados para ayudar de la mejor manera posible a sus clientes, "quienes responden del trabajo legal que se desarrolla son los profesionales".
A juicio de esta experta, los problemas de utilizaci?n de la IA no son tanto de la confianza de los clientes, que esa se la aporta la parte ‘humana’ (el abogado), sino los intr?nsecos al empleo de la propia tecnolog?a. Se debe asegurar la transparencia de estas herramientas, poder conocer de qué fuentes beben, c?mo funcionan los algoritmos de entrenamiento, o su "neutralidad tecnol?gica", es decir, que el uso de estas tecnolog?as no responda a sesgos para que no existan efectos contrarios a la deontolog?a profesional y a los derechos de defensa de la ciudadan?a.
"Y dos cuestiones claves adicionales ser?n la propiedad intelectual y la normativa en materia de protecci?n de datos de car?cter personal en relaci?n los materiales utilizados para el entrenamiento de estos modelos, sus productos derivados, etc", alerta la abogada.
En todo caso, el principal problema que enfrenta hoy el sector jur?dico respecto a la IA es que los profesionales a?n no la conocen, aunque ninguna de las expertas consultadas cree que avance tan r?pido para que podamos en breve con abogados o jueces robot. "En eso, estemos tranquilos. Estamos en los albores de una nueva revoluci?n, como la que caus? la invenci?n de la imprenta o la m?quina de vapor, llena de desaf?os, pero también de oportunidades", concluye Klimt.
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