الريــم
12-06-2023, 11:28 AM
Vivir al l?mite supone tener una capacidad de aguante, mental y f?sico, fuera de lo normal. Que se lo digan a los socios y socias que tuvieron a bien subir al Estadi Llu?s Companys, con un fr?o h?medo que calaba los huesos, sabiendo que aquella noche era ‘la noche’.
M?s informaci?n (Auto)
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95476482
Como la de Champions ante el Oporto. Como tantos d?as que son ‘el d?a D’ y se les convoca como si no hubiera un ma?ana. Al que “no se’l pot enganyar’ siempre est?, a pesar de sentirse muchas veces un cero a la izquierda para las grandes decisiones y un n?mero de euros a multiplicar cuando toca pagar.
Menos mal que los de Xavi regalaron al respetable en cuerpo presente uno de aquellos partidos de los que sales orgulloso y con la sensaci?n de que los que cobran han hecho felices a los que pagan.
A la masa social blaugrana hay que hacerle un monumento. A la que se desplaza f?sicamente a Montjuïc, a la que se queda en casa y a la que aguanta lo que Joan Laporta defini? como ‘madrisimo sociol?gico’, que es toda. El ‘affaire Negreira’, del que he escrito ampliamente en esta contraportada, est? bien alimentado por quien corresponde y tiene calor?as y preparaci?n suficiente para resistir tres maratones consecutivas.
Desde que se dio el disparo de salida de esta temporada, no hay jornada en la que el FC Barcelona no esté en el centro del hurac?n. Perjudicado, casi siempre. Pero tras conocerse los pagos al vicepresidente del CTA -éticamente muy reprobables pero de los que no se ha demostrado su incidencia en los resultados-, el club blaugrana ya no puede quejarse de nada. Insisto: de nada.
Hay errores que claman al cielo, que han sido denunciados aqu? y all?, que se ha demostrado por activa y por pasiva que el colegiado o el VAR han fallado y, autom?ticamente, aparece el apellido Negreira para atajar cualquier demanda de revisi?n. O lo que es lo mismo: que el Barça parece no tener derecho a justicia y s? a ser juzgado.
El triunfo ante el Atleti fue merecido, luchado, aplaudido y mal arbitrado. Hay indignaci?n en el vestuario, en el palco y en la grada. Un penalti claro a Joao Félix no fue se?alado. Una tarjeta roja a Azpilicueta no fue mostrada.
Pero, para m?, eso no fue lo peor. Tuve la sensaci?n de que Simeone, a sabiendas de que los colegiados se sienten presionados por el ‘caso Negreira’ y miran con lupa a los azulgranas, dio las ?rdenes precisas para frenar el juego local contundentemente.
Lea entre l?neas lo que yo no puedo escribir, lector, se lo ruego. Y tome buena nota de lo que s? hizo el asistente 1, Ra?l Caba?ero, qued?ndose con la oreja pegada en la puerta del vestuario barcelonista en el descanso y también al final del encuentro.
La intenci?n no era otra que saber de primera mano qué opinaban de la actuaci?n arbitral los jugadores y los miembros del cuerpo técnico. Edu Polo, integrante del staff de Xavi Hern?ndez, le pregunt? el porqué de su presencia all?.
El linier dio buena cuenta de ello al trencilla, S?nchez Mart?nez, al que le falt? tiempo para exigir identidades y detallarlo en su informe. Fuera y dentro del campo, presi?n arbitral. Cual ‘vieja del visillo’, observan y esp?an. Y se esconden tras la cortina los m?s poderosos. Los que incitan. Los que castigan desde la sombra. Los de siempre.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/opinion/vieja-visillo-95510524)
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Menos mal que los de Xavi regalaron al respetable en cuerpo presente uno de aquellos partidos de los que sales orgulloso y con la sensaci?n de que los que cobran han hecho felices a los que pagan.
A la masa social blaugrana hay que hacerle un monumento. A la que se desplaza f?sicamente a Montjuïc, a la que se queda en casa y a la que aguanta lo que Joan Laporta defini? como ‘madrisimo sociol?gico’, que es toda. El ‘affaire Negreira’, del que he escrito ampliamente en esta contraportada, est? bien alimentado por quien corresponde y tiene calor?as y preparaci?n suficiente para resistir tres maratones consecutivas.
Desde que se dio el disparo de salida de esta temporada, no hay jornada en la que el FC Barcelona no esté en el centro del hurac?n. Perjudicado, casi siempre. Pero tras conocerse los pagos al vicepresidente del CTA -éticamente muy reprobables pero de los que no se ha demostrado su incidencia en los resultados-, el club blaugrana ya no puede quejarse de nada. Insisto: de nada.
Hay errores que claman al cielo, que han sido denunciados aqu? y all?, que se ha demostrado por activa y por pasiva que el colegiado o el VAR han fallado y, autom?ticamente, aparece el apellido Negreira para atajar cualquier demanda de revisi?n. O lo que es lo mismo: que el Barça parece no tener derecho a justicia y s? a ser juzgado.
El triunfo ante el Atleti fue merecido, luchado, aplaudido y mal arbitrado. Hay indignaci?n en el vestuario, en el palco y en la grada. Un penalti claro a Joao Félix no fue se?alado. Una tarjeta roja a Azpilicueta no fue mostrada.
Pero, para m?, eso no fue lo peor. Tuve la sensaci?n de que Simeone, a sabiendas de que los colegiados se sienten presionados por el ‘caso Negreira’ y miran con lupa a los azulgranas, dio las ?rdenes precisas para frenar el juego local contundentemente.
Lea entre l?neas lo que yo no puedo escribir, lector, se lo ruego. Y tome buena nota de lo que s? hizo el asistente 1, Ra?l Caba?ero, qued?ndose con la oreja pegada en la puerta del vestuario barcelonista en el descanso y también al final del encuentro.
La intenci?n no era otra que saber de primera mano qué opinaban de la actuaci?n arbitral los jugadores y los miembros del cuerpo técnico. Edu Polo, integrante del staff de Xavi Hern?ndez, le pregunt? el porqué de su presencia all?.
El linier dio buena cuenta de ello al trencilla, S?nchez Mart?nez, al que le falt? tiempo para exigir identidades y detallarlo en su informe. Fuera y dentro del campo, presi?n arbitral. Cual ‘vieja del visillo’, observan y esp?an. Y se esconden tras la cortina los m?s poderosos. Los que incitan. Los que castigan desde la sombra. Los de siempre.
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