الريــم
12-02-2023, 09:30 AM
Esquivar al tiempo no es tarea f?cil. Aceptar su paso, tampoco. Hay quién ve en la*cirug?a estética su soluci?n. Otros simplemente acatan y acarician con mimo sus arrugas. La ventaja es que los humanos somos conscientes de ello y podemos tomar una decisi?n u otra.*Los cuadros no. Envejecen y algunos lo hacen bien y otros, no tanto. Es ah?, en este segundo supuesto cuando se abre la ventana a una segunda oportunidad. Es ah?, cuando entran en juego los*equipos de restauraci?n de los museos.
Entrar en el el*Departamento de Restauraci?n del*Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid*es visitar una m?quina del tiempo. Saltar del siglo XIII hasta el XX sin moverte de una sala en la que el arte se respira en cada rinc?n, y en la que los detalles s? importan. Por eso, cuando a Ubaldo Sedano, director del equipo, le preguntamos c?mo es una jornada de trabajo no sabe ni por d?nde empezar. Lo que s? tiene claro son los valores que le acompa?an desde que, hace ahora 30 a?os empezara a trabajar en el museo: "Las obras de arte son insustituibles.*Son nuestro patrimonio y memoria.*Tenemos que cuidarlas*y mantenerlas para que llegue en el mejor estado posible a las generaciones futuras".
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95331488
El equipo del restauraci?n del museo trabajando
ALBA VIGARAY
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2000
1243
As? que cada d?a se ponen manos a la obra. Pinceles, pinturas de todas las tonalidades, pan de oro y guantes se mezclan con m?quinas de rayos X, microscopios, esc?ners y todo tipo de artilugios que*te llevan a pensar que en vez de estar en una galer?a de arte te encuentras en un centro médico. "Funcionamos como un hospital, tanto que uno de nuestros componentes m?s importantes es el laboratorio donde se toman muestras de las obras para analizarlo absolutamente todo", explica Ubaldo. Al frente de él est? Andrés S?nchez Ledesma, encargado de informar en qué estado se halla obra desde la superficie hacia el interior y c?mo puede reaccionar ante los tratamientos que los técnicos le van a hacer. "El objetivo es que se realice siempre sobre una base cient?fica", se?ala a El Peri?dico de Espa?a (https://www.epe.es/es/madrid/20231201/restaurar-cuadros-esculturas-museo-thyssen-madrid-93400443)
Funcionamos como un hospital, tanto que uno de nuestros componentes m?s importantes es el laboratorio"
Licenciado en Bioqu?mica en la Universidad de La Habana (Cuba) lleg? a Espa?a en 1980 gracias a una beca de la UNESCO y, unos a?os m?s tarde el destino, le brind? la oportunidad de trabajar en el Thyssen. "Siempre me hab?a interesado el arte y, después de*30 a?os en el departamento sigo aprendiendo todos los d?as. Cada obra es un mundo, incluso las de un mismo pintor son muy diferentes", a?ade. Otra de sus funciones es la de*investigar sobre nuevos materiales:*"A d?a de hoy todav?a no existen empresas que se dediquen expresamente a fabricar materias para la restauraci?n y esto es muy importante, ya que todos los procesos tienen que ser reversibles. Para ello, resulta imprescindible que se utilicen elementos que no provoquen cambios en las obras", explica.
Después del informe de Andrés es el turno de los técnicos. Ellos*son los encargados de dar una nueva vida a las*pinturas. Un trabajo en el que la paciencia y el cuidado minucioso de los detalles son la base y en el que la presi?n y la responsabilidad de que el resultado sea el esperado también.*"Al fin y al cabo est?s tocando un objeto que es insustituible y toda intervenci?n conlleva un riesgo", cuenta Susana Pérez, responsable del departamento.
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Detalle de algunos de los instrumentos con los que trabajan
ALBA VIGARAY
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1333
Ella lleva trabajando aqu? 23 a?os y a lo largo de todo este tiempo*ha experimentado con cientos de cuadros y esculturas:*"Una de las m?s dif?ciles que recuerdo es una escayola realizada por un artista del grupo de los realistas de Madrid. Era la primera vez que manipulaba una obra cuyo autor estaba vivo, ya que en la mayor?a de los casos son tan antiguas que ya han fallecido. Por ello, impresiona mucho restaurar una pieza que sab?a que iba a ver su creador".
Para ella,*la magia del arte de la restauraci?n reside en algo tan b?sico y a la vez tan dif?cil como la concentraci?n. De ah? que, sea curioso verla trabajar sobre la obra que reina en la sala principal del departamento. Se trata de*'La Virgen y el Ni?o con las santas Margarita y Catalina', de Michael Pacher, artista de la Escuela de los Alpes. Llama la atenci?n no solo porsu dimensi?n, sino por la historia que hay detr?s de ella, "all? es uno de los iconos", cuenta Susana. Esta no es la primera vez que se somete a una intervenci?n y,*precisamente, el fin en esta ocasi?n es devolverla a su estado natural. "Antes las restauraciones era m?s pict?ricas, se usaba m?s material del debido, as? que ahora lo que estamos haciendo es ir retirando la pintura de la primera intervenci?n y recuperar las capas originales", a?ade.
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Componentes del equipo de restauraci?n trabajando
ALBA VIGARAY
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La tecnolog?a ha llegado para quedarse
En esta carrera a contrarreloj contra el tiempo hay un elemento que est? siendo clave:*la tecnolog?a. Lejos de ser una competidora, es m?s bien una aliada. "Lo ha cambiado todo. Ahora tenemos una seguridad que hace unos a?os era impensable porque antes trabaj?bamos m?s con prueba y error, pero hoy es una maravilla poder disponer de estos avances", explica Ubaldo. Pero*?podr?a la inteligencia artificial sustituir este trabajo?*Cuesta creerlo, sobre todo por la importancia que adquiere el criterio humano en cada una de las intervenciones. "El respeto y rigor cient?fico es lo ?nico que no puede cambiar:*el de la m?nima intervenci?n, que todos los materiales que usemos sean reversibles, y ah? somos indispensables", a?ade Susana.
Lo que s? ha cambiado es la forma de hacer llegar los museos a la poblaci?n, donde*las redes sociales juegan un papel muy importante. Cada vez son m?s las instituciones de este tipo que han encontrado en plataformas como Instagram o TikTok una oportunidad para conectar con el p?blico m?s joven. "Las nuevas tecnolog?as lo han invadido todo y m?s a las nuevas generaciones porque han nacido y crecido con ellas. Pero eso no quiere decir que a ellas no les interese el arte", cuenta Ubaldo. De hecho, el Museo Thyssen cuenta con m?s de 20.000 seguidores en TikTok y*el Museo del Prado se ha convertido en la galer?a m?s potente de la plataforma asi?tica con medio mill?n de fans.
“El criterio de respeto y rigor cient?fico es lo ?nico que no puede cambiar"
Otro de los aspectos que también ha evolucionado a mejor es la profesionalizaci?n del sector. "Antes era mucho m?s complicado formarte para esto. Ahora, sin embargo,*vemos como cada vez los estudiantes que vienen a realizar pr?cticas o becas con nosotros est?n m?s preparados", dice Ubaldo. Pero, al igual que en la mayor?a de las carreras universitarias, falta conexi?n con el mundo laboral: "No tienen la experiencia, pero es normal, no es lo mismo cuando tienes delante una obra y puedes tocarla y olerla".
Implicaci?n de la sociedad
Lo que no ha cambiado es la concepci?n de estos departamentos como*la parte m?s desconocida para la sociedad.*"Falta esa implicaci?n por parte de los ciudadanos porque muchos de ellos no son conscientes del trabajo que hay detr?s para que una obra tenga el estado adecuado", se?ala Andrés. Es por esta raz?n por la que*desde hace unos a?os buscan la participaci?n de la poblaci?n a través del*'crowdfunding', es decir, una campa?a de micromecenazgo en la que todo aquel que lo desee pueda ayudar al cuidado y conservaci?n de las obras maestras de la colecci?n permanente.
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Detalle de la restauraci?n
ALBA VIGARAY
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2000
1311
El ?ltimo cuadro en unirse es el*'El puente de Waterloo'*de André Derain, que necesita una limpieza para recuperar sus colores originales y un estudio técnico que permita conocer m?s a fondo todos sus secretos. Para ello, han instalado una*tablet*al lado del cuadro para que quienes quieran puedan hacer su aportaciones.
La meta, tal y como explica Susana, es*“que la gente sienta que colabora y que forma parte de él y de esta manera también hacer una cultura sostenible". Esta es la tercera vez que se apuesta por este formato: primero se hizo con*'La plaza de San Marcos en Venecia', de Canaletto; y después con*'Porcelana china' con flores, de Jacques Linard.
Diversidad de criterios
La pregunta que nos podemos hacer llegados a este punto es si todas las obras necesitar?n una revisi?n peri?dica. La respuesta es sencilla: no. Tal y como explica el director del departamento,*los criterios son muchos y muy diversos. "Hay algunas que sufren el paso de los a?os, por lo hacemos una selecci?n de las que son m?s urgentes. También tenemos en cuenta si tienen que viajar o no, ya que si han sido solicitadas por alg?n museo, les damos prioridad porque nos tenemos que asegurar de que est? estable y lo suficientemente bien para soportar el traslado", cuenta.
En una carrera donde*el tiempo es el mayor enemigo o el aliado*(seg?n se quiera ver) es importante pararse a pensar si hay un periodo estimado para cada restauraci?n. No existe un manual, es decir, cada una tiene unas necesidades diferentes: "En este caso, es lo que menos nos importa, suele ser de unos cinco o seis meses, incluso nos solemos poner en contacto con otras pinacotecas que tienen obras parecidas y compartir los hallazgos y contrastar”.
Cuando sales del reciento tienes la sensaci?n de que el reloj se ha detenido. Que pasado, presente y futuro confluyen en una ?nica l?nea del tiempo en el*Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, mientras el ruido de la ciudad nos recuerda que a diferencia, de los cuadros y esculturas, nosotros s? tenemos que seguir el calendario.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/rayos-x-microscopios-tecnologia-carrera-95373078)
Entrar en el el*Departamento de Restauraci?n del*Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid*es visitar una m?quina del tiempo. Saltar del siglo XIII hasta el XX sin moverte de una sala en la que el arte se respira en cada rinc?n, y en la que los detalles s? importan. Por eso, cuando a Ubaldo Sedano, director del equipo, le preguntamos c?mo es una jornada de trabajo no sabe ni por d?nde empezar. Lo que s? tiene claro son los valores que le acompa?an desde que, hace ahora 30 a?os empezara a trabajar en el museo: "Las obras de arte son insustituibles.*Son nuestro patrimonio y memoria.*Tenemos que cuidarlas*y mantenerlas para que llegue en el mejor estado posible a las generaciones futuras".
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El equipo del restauraci?n del museo trabajando
ALBA VIGARAY
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As? que cada d?a se ponen manos a la obra. Pinceles, pinturas de todas las tonalidades, pan de oro y guantes se mezclan con m?quinas de rayos X, microscopios, esc?ners y todo tipo de artilugios que*te llevan a pensar que en vez de estar en una galer?a de arte te encuentras en un centro médico. "Funcionamos como un hospital, tanto que uno de nuestros componentes m?s importantes es el laboratorio donde se toman muestras de las obras para analizarlo absolutamente todo", explica Ubaldo. Al frente de él est? Andrés S?nchez Ledesma, encargado de informar en qué estado se halla obra desde la superficie hacia el interior y c?mo puede reaccionar ante los tratamientos que los técnicos le van a hacer. "El objetivo es que se realice siempre sobre una base cient?fica", se?ala a El Peri?dico de Espa?a (https://www.epe.es/es/madrid/20231201/restaurar-cuadros-esculturas-museo-thyssen-madrid-93400443)
Funcionamos como un hospital, tanto que uno de nuestros componentes m?s importantes es el laboratorio"
Licenciado en Bioqu?mica en la Universidad de La Habana (Cuba) lleg? a Espa?a en 1980 gracias a una beca de la UNESCO y, unos a?os m?s tarde el destino, le brind? la oportunidad de trabajar en el Thyssen. "Siempre me hab?a interesado el arte y, después de*30 a?os en el departamento sigo aprendiendo todos los d?as. Cada obra es un mundo, incluso las de un mismo pintor son muy diferentes", a?ade. Otra de sus funciones es la de*investigar sobre nuevos materiales:*"A d?a de hoy todav?a no existen empresas que se dediquen expresamente a fabricar materias para la restauraci?n y esto es muy importante, ya que todos los procesos tienen que ser reversibles. Para ello, resulta imprescindible que se utilicen elementos que no provoquen cambios en las obras", explica.
Después del informe de Andrés es el turno de los técnicos. Ellos*son los encargados de dar una nueva vida a las*pinturas. Un trabajo en el que la paciencia y el cuidado minucioso de los detalles son la base y en el que la presi?n y la responsabilidad de que el resultado sea el esperado también.*"Al fin y al cabo est?s tocando un objeto que es insustituible y toda intervenci?n conlleva un riesgo", cuenta Susana Pérez, responsable del departamento.
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Detalle de algunos de los instrumentos con los que trabajan
ALBA VIGARAY
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Ella lleva trabajando aqu? 23 a?os y a lo largo de todo este tiempo*ha experimentado con cientos de cuadros y esculturas:*"Una de las m?s dif?ciles que recuerdo es una escayola realizada por un artista del grupo de los realistas de Madrid. Era la primera vez que manipulaba una obra cuyo autor estaba vivo, ya que en la mayor?a de los casos son tan antiguas que ya han fallecido. Por ello, impresiona mucho restaurar una pieza que sab?a que iba a ver su creador".
Para ella,*la magia del arte de la restauraci?n reside en algo tan b?sico y a la vez tan dif?cil como la concentraci?n. De ah? que, sea curioso verla trabajar sobre la obra que reina en la sala principal del departamento. Se trata de*'La Virgen y el Ni?o con las santas Margarita y Catalina', de Michael Pacher, artista de la Escuela de los Alpes. Llama la atenci?n no solo porsu dimensi?n, sino por la historia que hay detr?s de ella, "all? es uno de los iconos", cuenta Susana. Esta no es la primera vez que se somete a una intervenci?n y,*precisamente, el fin en esta ocasi?n es devolverla a su estado natural. "Antes las restauraciones era m?s pict?ricas, se usaba m?s material del debido, as? que ahora lo que estamos haciendo es ir retirando la pintura de la primera intervenci?n y recuperar las capas originales", a?ade.
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Componentes del equipo de restauraci?n trabajando
ALBA VIGARAY
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La tecnolog?a ha llegado para quedarse
En esta carrera a contrarreloj contra el tiempo hay un elemento que est? siendo clave:*la tecnolog?a. Lejos de ser una competidora, es m?s bien una aliada. "Lo ha cambiado todo. Ahora tenemos una seguridad que hace unos a?os era impensable porque antes trabaj?bamos m?s con prueba y error, pero hoy es una maravilla poder disponer de estos avances", explica Ubaldo. Pero*?podr?a la inteligencia artificial sustituir este trabajo?*Cuesta creerlo, sobre todo por la importancia que adquiere el criterio humano en cada una de las intervenciones. "El respeto y rigor cient?fico es lo ?nico que no puede cambiar:*el de la m?nima intervenci?n, que todos los materiales que usemos sean reversibles, y ah? somos indispensables", a?ade Susana.
Lo que s? ha cambiado es la forma de hacer llegar los museos a la poblaci?n, donde*las redes sociales juegan un papel muy importante. Cada vez son m?s las instituciones de este tipo que han encontrado en plataformas como Instagram o TikTok una oportunidad para conectar con el p?blico m?s joven. "Las nuevas tecnolog?as lo han invadido todo y m?s a las nuevas generaciones porque han nacido y crecido con ellas. Pero eso no quiere decir que a ellas no les interese el arte", cuenta Ubaldo. De hecho, el Museo Thyssen cuenta con m?s de 20.000 seguidores en TikTok y*el Museo del Prado se ha convertido en la galer?a m?s potente de la plataforma asi?tica con medio mill?n de fans.
“El criterio de respeto y rigor cient?fico es lo ?nico que no puede cambiar"
Otro de los aspectos que también ha evolucionado a mejor es la profesionalizaci?n del sector. "Antes era mucho m?s complicado formarte para esto. Ahora, sin embargo,*vemos como cada vez los estudiantes que vienen a realizar pr?cticas o becas con nosotros est?n m?s preparados", dice Ubaldo. Pero, al igual que en la mayor?a de las carreras universitarias, falta conexi?n con el mundo laboral: "No tienen la experiencia, pero es normal, no es lo mismo cuando tienes delante una obra y puedes tocarla y olerla".
Implicaci?n de la sociedad
Lo que no ha cambiado es la concepci?n de estos departamentos como*la parte m?s desconocida para la sociedad.*"Falta esa implicaci?n por parte de los ciudadanos porque muchos de ellos no son conscientes del trabajo que hay detr?s para que una obra tenga el estado adecuado", se?ala Andrés. Es por esta raz?n por la que*desde hace unos a?os buscan la participaci?n de la poblaci?n a través del*'crowdfunding', es decir, una campa?a de micromecenazgo en la que todo aquel que lo desee pueda ayudar al cuidado y conservaci?n de las obras maestras de la colecci?n permanente.
Image ID:
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Detalle de la restauraci?n
ALBA VIGARAY
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El ?ltimo cuadro en unirse es el*'El puente de Waterloo'*de André Derain, que necesita una limpieza para recuperar sus colores originales y un estudio técnico que permita conocer m?s a fondo todos sus secretos. Para ello, han instalado una*tablet*al lado del cuadro para que quienes quieran puedan hacer su aportaciones.
La meta, tal y como explica Susana, es*“que la gente sienta que colabora y que forma parte de él y de esta manera también hacer una cultura sostenible". Esta es la tercera vez que se apuesta por este formato: primero se hizo con*'La plaza de San Marcos en Venecia', de Canaletto; y después con*'Porcelana china' con flores, de Jacques Linard.
Diversidad de criterios
La pregunta que nos podemos hacer llegados a este punto es si todas las obras necesitar?n una revisi?n peri?dica. La respuesta es sencilla: no. Tal y como explica el director del departamento,*los criterios son muchos y muy diversos. "Hay algunas que sufren el paso de los a?os, por lo hacemos una selecci?n de las que son m?s urgentes. También tenemos en cuenta si tienen que viajar o no, ya que si han sido solicitadas por alg?n museo, les damos prioridad porque nos tenemos que asegurar de que est? estable y lo suficientemente bien para soportar el traslado", cuenta.
En una carrera donde*el tiempo es el mayor enemigo o el aliado*(seg?n se quiera ver) es importante pararse a pensar si hay un periodo estimado para cada restauraci?n. No existe un manual, es decir, cada una tiene unas necesidades diferentes: "En este caso, es lo que menos nos importa, suele ser de unos cinco o seis meses, incluso nos solemos poner en contacto con otras pinacotecas que tienen obras parecidas y compartir los hallazgos y contrastar”.
Cuando sales del reciento tienes la sensaci?n de que el reloj se ha detenido. Que pasado, presente y futuro confluyen en una ?nica l?nea del tiempo en el*Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, mientras el ruido de la ciudad nos recuerda que a diferencia, de los cuadros y esculturas, nosotros s? tenemos que seguir el calendario.
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