الريــم
11-29-2023, 05:10 PM
Nada m?s abrir su libro (Universal concreto, Taurus), Javier Gom?, bilba?no nacido en 1965, fil?sofo, autor de una tetralog?a que lo ha hecho imprescindible en la filosof?a contempor?nea, declara que siempre se ha visto “como hombre de una sola idea”. Sin embargo, en este volumen de letra apretada, de cerca de trescientas p?ginas, no cesa de proporcionar ideas para alertar contra la vulgaridad (https://www.epe.es/es/cultura/20231126/javier-goma-filosofo-actualidad-odio-nuevo-libro-95061181) presente en la cultura (y no tan solo), sobre la ansiedad que domina la sociedad contempor?nea y, por ejemplo, acerca del odio que percibe y que muchas veces nos llena a los humanos de desprecio por el ser o el pensamiento de los otros.
Su tetralog?a (Imitaci?n y experiencia, Aquiles en el gineceo, Necesario pero imposible y Ejemplaridad p?blica) avala su pensamiento y ahonda en la influencia que ahora ejerce sobre lectores que esperan sus libros, como este mismo, para hacerse m?s de una idea de lo que pasa y, sobre todo, de lo que nos pasa. Hablamos en su editorial; él tiene los ojos pendientes de lo que dice, y el periodista lo mira pensar, y ese momento en que se concentra es el instante de la filosof?a.
Aqu? dice usted que se ve como hombre de una sola idea
Considero que la filosof?a es literatura, literatura conceptual, que se contrapone a otros géneros, como el narrativo, el dram?tico o el poético… Nace de la vocaci?n, que activa la inteligencia y expresa el apetito por una sola idea, fundamentalmente, como ocurre en el enamoramiento. Como esa idea no siempre se realiza deviene en angustia. Me pas? en mi primer enamoramiento. Esa idea no se realizaba, y ese era un nudo complicado. Desde entonces quise que la idea se plasmara en libro, y tardé veinte a?os en lograrlo, por lo tanto fueron tiempos de mucha ansiedad, hasta que pude combinar vocaci?n, visi?n y misi?n. La consecuencia fue este concepto de filosof?a que es también literatura y que est? presente desde siempre en mis libros. Enseguida supe que mi pasi?n era literaria, pero no sab?a c?mo llevar a cabo su consecuencia, as? que esbocé novelas, cuentos, ensayos, hasta que romp? a escribir filosof?a y de ah? vinieron sucesivamente los libros que constituyen la tetralog?a. Ese conjunto era mi idea inicial, para la que me consideraba impotente o inepto o negligente en un primer momento. Ahora que han salido tantos libros que ya se han verbalizado, a mis 58 a?os, puedo decir que este en concreto es el libro de mi vida, escrito con la serenidad con la que ahora vivo. Mi vida es consecuencia, pues, de una adaptaci?n, que es el presente estado de mi ?nimo.
?Y no le da vértigo sentirse adaptado?
No, es que ya lo estoy… Se trata de sentir ahora a lo grande, no aceptar nada por debajo de lo primero que hay que desear: pensar y sentir a lo grande. Mantener un elemento que es inherente al ser humano: la insumisi?n a la injusticia, al mal moral, al mal f?sico, al mal estético, a la mala suerte, y también una cierta reconciliaci?n con la imperfecci?n a través del humor, del juego, de la deportividad, del arte de vivir… Para m? lo que se impone es como un c?ctel de dos bebidas, por una parte la insumisi?n y, por otra, la reconciliaci?n con la imperfecci?n. Formar parte de la armon?a que, con esfuerzo, llega a tener el mundo que vivimos.
Image ID:
95246673
Javier Gom?
José Luis Roca
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2000
1333
Muy pronto ha incluido usted en las palabras de su ensayo el término ansiedad, que suena como un trallazo. ?C?mo la ha superado?
Si me hubieras conocido a los 23 a?os habr?as percibido qué ha significado para m? esa palabra. Hubiera dicho cosas exageradas, hubiera expresado patochadas… No lo parec?a, quiz?, pero era un ser inadaptado, que quer?a lo absoluto. Ahora hay un deseo de combinar la tendencia a quererlo todo con la evidencia de que ya he ido haciendo una obra que me reconcilia con la literatura y conmigo mismo. La doble especializaci?n que nos produce crear una casa y elegir un oficio con el que te ganas la vida me ha aportado calma, me ha dado paz, me ha convertido en un ser socializado y ha hecho de mi individualidad algo m?s sereno.
?Qué le ha aportado ese apaciguamiento?
Podr?a ser algo as? como la felicidad absoluta, que podr?a tener que ver con la vida familiar, pero que también se dar?a en otras circunstancias, como en el trabajo, cuando eres capaz, como escritor, de poner una palabra tras otra. La felicidad de escribir un p?rrafo del que no tienes que cambiar nada… Escribir es acci?n, la literatura es acci?n, no es ser pasivo, es combinar ideas y palabras y terminar creando un puzle en el que ya se distingue lo que has querido dibujar con verbos, con letras, con escritura. De pronto lo que antes era un estado de conciencia se convierte en un texto fijo, disponible para siempre, para ti y para los dem?s. Cuando lo acabas sientes que hoy, cuando sea, has contribuido con un p?rrafo al devenir, al fluir. Ese es de los grandes placeres que nos han sido dados.
Lo que realmente distingue a unas personas de otras es la intensidad del sentimiento. Me atrevo a competir con cualquiera, y perd?name la jactancia, en intensidad de sentimiento. Si t? tienes intensidad de sentimiento puedes llegar a la mayor concentraci?n"
Pensar es el asunto que m?s atenci?n merece en su libro. ?Qué pensar?
Lo importante no es pensar, lo importante es sentir. Lo que realmente distingue a unas personas de otras es la intensidad del sentimiento. Me atrevo a competir con cualquiera, y perd?name la jactancia, en intensidad de sentimiento. Si t? tienes intensidad de sentimiento puedes llegar a la mayor concentraci?n. Si no lo logras, y eres escritor, terminas siendo tan solo alguien que rellena espacios en blanco, alguien que no tiene vocaci?n. Lo primero es amar y después razonar.
Su libro est? lleno de preguntas… Aqu? est?n estas dos: ?Qué hay en el mundo? ?Qué hacer con lo que hay?
Esas preguntas son el coraz?n de mi libro. Presumo de ser un fil?sofo mundano, alguien que siente que no hay verdad que no se pueda transmitir tomando un café con un amigo. Si no se puede hacer as?, la verdad no es cierta, es un sofisma. Esas dos preguntas que enuncio son las dos grandes cuestiones de la filosof?a. Habr?s o?do muchas veces que lo importante no son las respuestas, sino las preguntas, pues todos los hombres y todas las mujeres del mundo son nativamente fil?sofos. All? donde haya un hombre o una mujer habr? un fil?sofo, como lo hay ahora o como lo hubo hace siglos, mirando todos a la misma b?veda celeste y viendo lo mismo siempre aunque con otras consecuencias. Lo ?nico que cambia es la interpretaci?n.
En los ?ltimos veinte o treinta a?os vivimos en un estado de vulgaridad rampante que se caracteriza porque la igualdad nos lleva a todos a ir vestidos o a comportarnos como nos dé la gana, no teniendo por ello que ser m?s o menos dignos que los otros"
Usted se refiere a la vulgaridad como el estado de la cultura.
Es el estado del que parte la cultura, no es el punto de llegada, es el punto de salida. En lo pol?tico hemos llegado al final del proceso, pero en lo cultural estamos todav?a pendientes de reforma. En los ?ltimos veinte o treinta a?os vivimos en un estado de vulgaridad rampante que se caracteriza porque la igualdad nos lleva a todos a ir vestidos o a comportarnos como nos dé la gana, no teniendo por ello que ser m?s o menos dignos que los otros. Pero, ya digo, la vulgaridad a la que me refiero no es el punto de llegada sino el punto de salida. Me idea es la ejemplaridad igualitaria, todos somos ejemplos para todos, todos estamos llamados a la reforma de nuestra propia vulgaridad. Y si un d?a, a través de las costumbres generales, se producen unas reformas que se generalizan en el todo social, llegaremos al ideal de una mayor?a selecta, que es una vulgaridad reformada… Vivimos en un mundo sumido en la actualidad y la actualidad muchas veces te llena de odio, de rencillas que en ?ltimo término duran hasta el d?a siguiente, son rencillas de las que se quiere triunfar dialécticamente pero sin resolver el problema.
Insiste usted en que la filosof?a es literatura. ?Lo que cuentan los fil?sofos, pues, es literatura?
En la filosof?a ha habido siempre dos almas, una cient?fica y otra literaria. A mi juicio, siempre que la filosof?a ha intentado ser cient?fica ha desvirtuado su auténtica sencillez. Porque la ciencia es un modo de conocimiento acumulativo, donde lo que importa es lo ?ltimo, mientras que en la literatura lo importante no es lo ?ltimo, sino lo que importa, lo que perdura… Lo interesante en Plat?n es lo literario, el Banquete, el Fed?n… Kant es un poeta y se nota que tiene vocaci?n literaria, visi?n, enamoramiento y ansiedad por convertirlo en obra literaria. Pero ten?a un problema: que quer?a ser Newton. Esa es la parte m?s aburrida e inservible de Kant.
Termina usted su libro de esta manera: “Ya est? todo dicho, filos?fico lector: ahora cierra el libro y acuérdate de ser”.
Eso tiene algo de desgarrado. Yo defino la vocaci?n como respuesta a la pregunta ´?por qué has dedicado tantas horas, tantos d?as, tantos a?os, los mejores de tu vida, a pensar, a hacer algo que nadie te pide?` Busco respuestas a las dos grandes preguntas que se incluyen en lo universal concreto, a las personas reales de carne y hueso que viven, envejecen y mueren. Mi pensamiento busca llegar a las respuestas a través del concepto, con lo cual se produce un desgarramiento interior que busca percibir lo concreto yendo hacia la ejemplaridad. As? que un libro no es un fin en s? mismo, es algo as? como un env?o a la realidad del ser, y a eso es a lo que apelo, a que el lector se acuerde de ser.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/javier-goma-filosofo-veces-actualidad-95247190)
Su tetralog?a (Imitaci?n y experiencia, Aquiles en el gineceo, Necesario pero imposible y Ejemplaridad p?blica) avala su pensamiento y ahonda en la influencia que ahora ejerce sobre lectores que esperan sus libros, como este mismo, para hacerse m?s de una idea de lo que pasa y, sobre todo, de lo que nos pasa. Hablamos en su editorial; él tiene los ojos pendientes de lo que dice, y el periodista lo mira pensar, y ese momento en que se concentra es el instante de la filosof?a.
Aqu? dice usted que se ve como hombre de una sola idea
Considero que la filosof?a es literatura, literatura conceptual, que se contrapone a otros géneros, como el narrativo, el dram?tico o el poético… Nace de la vocaci?n, que activa la inteligencia y expresa el apetito por una sola idea, fundamentalmente, como ocurre en el enamoramiento. Como esa idea no siempre se realiza deviene en angustia. Me pas? en mi primer enamoramiento. Esa idea no se realizaba, y ese era un nudo complicado. Desde entonces quise que la idea se plasmara en libro, y tardé veinte a?os en lograrlo, por lo tanto fueron tiempos de mucha ansiedad, hasta que pude combinar vocaci?n, visi?n y misi?n. La consecuencia fue este concepto de filosof?a que es también literatura y que est? presente desde siempre en mis libros. Enseguida supe que mi pasi?n era literaria, pero no sab?a c?mo llevar a cabo su consecuencia, as? que esbocé novelas, cuentos, ensayos, hasta que romp? a escribir filosof?a y de ah? vinieron sucesivamente los libros que constituyen la tetralog?a. Ese conjunto era mi idea inicial, para la que me consideraba impotente o inepto o negligente en un primer momento. Ahora que han salido tantos libros que ya se han verbalizado, a mis 58 a?os, puedo decir que este en concreto es el libro de mi vida, escrito con la serenidad con la que ahora vivo. Mi vida es consecuencia, pues, de una adaptaci?n, que es el presente estado de mi ?nimo.
?Y no le da vértigo sentirse adaptado?
No, es que ya lo estoy… Se trata de sentir ahora a lo grande, no aceptar nada por debajo de lo primero que hay que desear: pensar y sentir a lo grande. Mantener un elemento que es inherente al ser humano: la insumisi?n a la injusticia, al mal moral, al mal f?sico, al mal estético, a la mala suerte, y también una cierta reconciliaci?n con la imperfecci?n a través del humor, del juego, de la deportividad, del arte de vivir… Para m? lo que se impone es como un c?ctel de dos bebidas, por una parte la insumisi?n y, por otra, la reconciliaci?n con la imperfecci?n. Formar parte de la armon?a que, con esfuerzo, llega a tener el mundo que vivimos.
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Javier Gom?
José Luis Roca
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2000
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Muy pronto ha incluido usted en las palabras de su ensayo el término ansiedad, que suena como un trallazo. ?C?mo la ha superado?
Si me hubieras conocido a los 23 a?os habr?as percibido qué ha significado para m? esa palabra. Hubiera dicho cosas exageradas, hubiera expresado patochadas… No lo parec?a, quiz?, pero era un ser inadaptado, que quer?a lo absoluto. Ahora hay un deseo de combinar la tendencia a quererlo todo con la evidencia de que ya he ido haciendo una obra que me reconcilia con la literatura y conmigo mismo. La doble especializaci?n que nos produce crear una casa y elegir un oficio con el que te ganas la vida me ha aportado calma, me ha dado paz, me ha convertido en un ser socializado y ha hecho de mi individualidad algo m?s sereno.
?Qué le ha aportado ese apaciguamiento?
Podr?a ser algo as? como la felicidad absoluta, que podr?a tener que ver con la vida familiar, pero que también se dar?a en otras circunstancias, como en el trabajo, cuando eres capaz, como escritor, de poner una palabra tras otra. La felicidad de escribir un p?rrafo del que no tienes que cambiar nada… Escribir es acci?n, la literatura es acci?n, no es ser pasivo, es combinar ideas y palabras y terminar creando un puzle en el que ya se distingue lo que has querido dibujar con verbos, con letras, con escritura. De pronto lo que antes era un estado de conciencia se convierte en un texto fijo, disponible para siempre, para ti y para los dem?s. Cuando lo acabas sientes que hoy, cuando sea, has contribuido con un p?rrafo al devenir, al fluir. Ese es de los grandes placeres que nos han sido dados.
Lo que realmente distingue a unas personas de otras es la intensidad del sentimiento. Me atrevo a competir con cualquiera, y perd?name la jactancia, en intensidad de sentimiento. Si t? tienes intensidad de sentimiento puedes llegar a la mayor concentraci?n"
Pensar es el asunto que m?s atenci?n merece en su libro. ?Qué pensar?
Lo importante no es pensar, lo importante es sentir. Lo que realmente distingue a unas personas de otras es la intensidad del sentimiento. Me atrevo a competir con cualquiera, y perd?name la jactancia, en intensidad de sentimiento. Si t? tienes intensidad de sentimiento puedes llegar a la mayor concentraci?n. Si no lo logras, y eres escritor, terminas siendo tan solo alguien que rellena espacios en blanco, alguien que no tiene vocaci?n. Lo primero es amar y después razonar.
Su libro est? lleno de preguntas… Aqu? est?n estas dos: ?Qué hay en el mundo? ?Qué hacer con lo que hay?
Esas preguntas son el coraz?n de mi libro. Presumo de ser un fil?sofo mundano, alguien que siente que no hay verdad que no se pueda transmitir tomando un café con un amigo. Si no se puede hacer as?, la verdad no es cierta, es un sofisma. Esas dos preguntas que enuncio son las dos grandes cuestiones de la filosof?a. Habr?s o?do muchas veces que lo importante no son las respuestas, sino las preguntas, pues todos los hombres y todas las mujeres del mundo son nativamente fil?sofos. All? donde haya un hombre o una mujer habr? un fil?sofo, como lo hay ahora o como lo hubo hace siglos, mirando todos a la misma b?veda celeste y viendo lo mismo siempre aunque con otras consecuencias. Lo ?nico que cambia es la interpretaci?n.
En los ?ltimos veinte o treinta a?os vivimos en un estado de vulgaridad rampante que se caracteriza porque la igualdad nos lleva a todos a ir vestidos o a comportarnos como nos dé la gana, no teniendo por ello que ser m?s o menos dignos que los otros"
Usted se refiere a la vulgaridad como el estado de la cultura.
Es el estado del que parte la cultura, no es el punto de llegada, es el punto de salida. En lo pol?tico hemos llegado al final del proceso, pero en lo cultural estamos todav?a pendientes de reforma. En los ?ltimos veinte o treinta a?os vivimos en un estado de vulgaridad rampante que se caracteriza porque la igualdad nos lleva a todos a ir vestidos o a comportarnos como nos dé la gana, no teniendo por ello que ser m?s o menos dignos que los otros. Pero, ya digo, la vulgaridad a la que me refiero no es el punto de llegada sino el punto de salida. Me idea es la ejemplaridad igualitaria, todos somos ejemplos para todos, todos estamos llamados a la reforma de nuestra propia vulgaridad. Y si un d?a, a través de las costumbres generales, se producen unas reformas que se generalizan en el todo social, llegaremos al ideal de una mayor?a selecta, que es una vulgaridad reformada… Vivimos en un mundo sumido en la actualidad y la actualidad muchas veces te llena de odio, de rencillas que en ?ltimo término duran hasta el d?a siguiente, son rencillas de las que se quiere triunfar dialécticamente pero sin resolver el problema.
Insiste usted en que la filosof?a es literatura. ?Lo que cuentan los fil?sofos, pues, es literatura?
En la filosof?a ha habido siempre dos almas, una cient?fica y otra literaria. A mi juicio, siempre que la filosof?a ha intentado ser cient?fica ha desvirtuado su auténtica sencillez. Porque la ciencia es un modo de conocimiento acumulativo, donde lo que importa es lo ?ltimo, mientras que en la literatura lo importante no es lo ?ltimo, sino lo que importa, lo que perdura… Lo interesante en Plat?n es lo literario, el Banquete, el Fed?n… Kant es un poeta y se nota que tiene vocaci?n literaria, visi?n, enamoramiento y ansiedad por convertirlo en obra literaria. Pero ten?a un problema: que quer?a ser Newton. Esa es la parte m?s aburrida e inservible de Kant.
Termina usted su libro de esta manera: “Ya est? todo dicho, filos?fico lector: ahora cierra el libro y acuérdate de ser”.
Eso tiene algo de desgarrado. Yo defino la vocaci?n como respuesta a la pregunta ´?por qué has dedicado tantas horas, tantos d?as, tantos a?os, los mejores de tu vida, a pensar, a hacer algo que nadie te pide?` Busco respuestas a las dos grandes preguntas que se incluyen en lo universal concreto, a las personas reales de carne y hueso que viven, envejecen y mueren. Mi pensamiento busca llegar a las respuestas a través del concepto, con lo cual se produce un desgarramiento interior que busca percibir lo concreto yendo hacia la ejemplaridad. As? que un libro no es un fin en s? mismo, es algo as? como un env?o a la realidad del ser, y a eso es a lo que apelo, a que el lector se acuerde de ser.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/javier-goma-filosofo-veces-actualidad-95247190)