الريــم
11-24-2023, 12:10 PM
Carlos Sainz, el padre, s?, el grande, el bicampe?n del mundo de rallys (1990 y 1991, con Toyota), el tricampe?n del Dakar (2010, 2018 y 2020), uno de los tres mejores pilotos de rallys de la historia, ni se acordaba ayer de que hoy se cumplen 25 a?os (24 de noviembre de 1998) de la mayor desgracia (“una de las pocas, s?, una de las escasas”) de su carrera deportiva, que no fue otra que perder, a 700 metros de la meta del RAC de Inglaterra, que se disputaba en Pa?s de Gales, su tercer t?tulo mundial de la especialidad.
“Pues no, no recordaba que ma?ana (por hoy), se cumplen 25 a?os de aquella triste sorpresa, de aquella noticia tan cacareada”, cont? Sainz, desde la habitaci?n en uno de los lujosos hoteles de Abu Dabi, donde est? acompa?ando a su hijo (https://www.sport.es/es/temas/carlos-sainz-jr-43763), que este fin de semana da por cerrada una excelente campa?a con el equipo Ferrari en el Mundial de F-1. “No me acordaba, Emilio, y me hace ilusi?n que me lo recuerdes porque, ya ves, contrariamente a lo que puede estar pensando mucha gente, me provoca una sonrisa, pues, repito, aquella desgracia fue de las pocas que he sufrido a lo largo de mis 43 a?os como profesional".
Sainz, c?mo no, llevando en el ‘asiento del miedo’ a su inseparable Luis Moya, iniciaron, en un d?a primaveral, la recta final de 1.200 metros, campo a través, frente a un inmenso castillo en el que se encontraba la organizaci?n del rally, su camino hacia la gloria con su juguet?n y potente Toyota Corolla, heredero del deportivo Celica, con el que consiguieron sus dos t?tulos mundiales.
Qué manera de gritar
Les faltaban 700 metros para la tercera corona y el Corolla se detuvo, poco a poco, lentamente, fruto de una fuga de aceite. La imagen es hist?rica, s?, por eso la recordamos. Moya baj? del coche con un extintor en la mano, abri? el cap? delantero del coche, trat? de apagar la humareda que sal?a del motor mientras gritaba sus cinco legendarias frases, una detr?s de otra: “?Trata de arrancarlo!”, “?trata de arrancarlo, Carlos!”, “?trata de arrancarlo, por Dios!”, “?no arranca, Carlos?” y “?me cago en su puta madre!” Normal, acababan de perder su tercer t?tulo.
Juanjo Lacalle, manager de Sainz durante toda su carrera, recordaba ayer como vivi? aquellos minutos de angustia, en la meta del rally, a los pies del precioso castillo, junto a Reyes, esposa del piloto madrile?o. “Yo llevaba un ‘walkie-talkie’ en la mano y no paré de preguntarle a Carlos qué hab?a ocurrido. De pronto, o? la voz entrecortada de su ingeniero, casi muda, que me dec?a, ‘se ha roto el motor, Juanjo, se ha roto el motor’. Recuerdo que Reyes no pod?a creérselo y me dijo: ‘Déjame o?rlo, Juanjo, que t? no sabes inglés, no puede ser, no ha dicho eso’. Y, s?, s? lo hab?a dicho”.
“Yo no lo olvidaré en la vida”, explica Moya. “Pero, mira, hemos tenido tantos triunfos, cosechado tantos elogios, acaparado tantas victorias que uno siempre se queda con lo mejor. Y lo mejor fue ser el copiloto de uno de los m?s grandes, bueno, del m?s grande de todos los deportistas que he conocido. ?Carlos empez? a ganar a los 17 a?os, cuando se proclam? campe?n de Espa?a de squash! y, ahora, a los 61 a?os, a?n sigue ganando. No me importa haber convertido en hist?rico aquel grito, solo me importa haber formado parte de una hermosa historia en compa??a de Carlos”.
Aman Barfull, amigo personal de Sainz y Moya, el hombre que organizaba el m?tico Rally Catalunya-Costa Brava, puntuable para el Mundial, estaba all?. “Bueno, estaba all?, junto a ti, Emilio, junto a ti”. Cierto, también est?bamos a las puertas del castillo, de la gloria. “Yo fui como observador de la FIA, aunque hubiese ido igual, como aficionado. Y fue, s?, muy duro. Pero recuerdo que aquella misma noche, Carlos ya estaba pensando en seguir peleando, porque ese es el esp?ritu de los grandes deportistas, no darse por vencidos ni siquiera cuando pierden un t?tulo mundial a 700 metros de la gloria m?s absoluta”.
"A aquellos que hablan de mi mala suerte, les diré que ?ojal?! todos los deportistas espa?oles tuviesen la misma mala suerte que he tenido yo en mi carrera"
Carlos Sainz
Bicampe?n del mundo de rallys y poseedor de tres Dakar
Cuando le preguntas a Sainz qué opini?n le merece aquellos que se mofan de su mala suerte, contesta: “No merecen opini?n alguna. Lo ?nico que puedo decirles, tras 43 a?os como profesional, es que miren mi palmarés. Bueno, eso y pedir para todos los deportistas espa?oles, para todos, la misma mala suerte que he tenido yo a lo largo de mi brillante carrera deportiva y, por supuesto, la posibilidad de defender en la vida tan bien como me he defendido yo para sacar mi familia adelante”.
“?Mala suerte, Carlos?”, se pregunta Juanjo Lacalle. “Toda la mala suerte que ha tenido Carlos en su vida ha sido que hace poco se muri? su padre, con 97 a?os. ?Esa ha sido toda su mala suerte! Como dice él, para m? quisiera la mala suerte de Carlos” “Es de risa que hablen de mala suerte cuando la gente se pronuncia sobre la carrera de Carlos”, se?ala Moya, “alguien que a su inmenso talento ha a?adido una tremenda e inigualable capacidad de trabajo, sacrificio e inteligencia. El talento se le supone a millones de deportistas, la capacidad de trabajo, no”.
Sainz va recordando poco a poco aquella desgracia. “Fue duro, ?claro que fue duro! ?c?mo no va a ser duro perder un Mundial (https://www.sport.es/es/temas/rally-1889584) a 700 metros de la meta y por algo que no depende de ti! Cost? recuperarnos, pero seguimos peleando. Hasta hoy. Aquella desgracia nos hizo m?s fuertes y, luego, vinieron cosas muy, muy, bonitas. Siempre he pensado que estos tropiezos te hacen m?s fuerte, te endurecen y, sobre todo, te demuestran que la vida no se acaba ah?, sino que empieza de nuevo. O sigue”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/motor/trata-arrancarlo-carlos-dios-grito-95025388)
“Pues no, no recordaba que ma?ana (por hoy), se cumplen 25 a?os de aquella triste sorpresa, de aquella noticia tan cacareada”, cont? Sainz, desde la habitaci?n en uno de los lujosos hoteles de Abu Dabi, donde est? acompa?ando a su hijo (https://www.sport.es/es/temas/carlos-sainz-jr-43763), que este fin de semana da por cerrada una excelente campa?a con el equipo Ferrari en el Mundial de F-1. “No me acordaba, Emilio, y me hace ilusi?n que me lo recuerdes porque, ya ves, contrariamente a lo que puede estar pensando mucha gente, me provoca una sonrisa, pues, repito, aquella desgracia fue de las pocas que he sufrido a lo largo de mis 43 a?os como profesional".
Sainz, c?mo no, llevando en el ‘asiento del miedo’ a su inseparable Luis Moya, iniciaron, en un d?a primaveral, la recta final de 1.200 metros, campo a través, frente a un inmenso castillo en el que se encontraba la organizaci?n del rally, su camino hacia la gloria con su juguet?n y potente Toyota Corolla, heredero del deportivo Celica, con el que consiguieron sus dos t?tulos mundiales.
Qué manera de gritar
Les faltaban 700 metros para la tercera corona y el Corolla se detuvo, poco a poco, lentamente, fruto de una fuga de aceite. La imagen es hist?rica, s?, por eso la recordamos. Moya baj? del coche con un extintor en la mano, abri? el cap? delantero del coche, trat? de apagar la humareda que sal?a del motor mientras gritaba sus cinco legendarias frases, una detr?s de otra: “?Trata de arrancarlo!”, “?trata de arrancarlo, Carlos!”, “?trata de arrancarlo, por Dios!”, “?no arranca, Carlos?” y “?me cago en su puta madre!” Normal, acababan de perder su tercer t?tulo.
Juanjo Lacalle, manager de Sainz durante toda su carrera, recordaba ayer como vivi? aquellos minutos de angustia, en la meta del rally, a los pies del precioso castillo, junto a Reyes, esposa del piloto madrile?o. “Yo llevaba un ‘walkie-talkie’ en la mano y no paré de preguntarle a Carlos qué hab?a ocurrido. De pronto, o? la voz entrecortada de su ingeniero, casi muda, que me dec?a, ‘se ha roto el motor, Juanjo, se ha roto el motor’. Recuerdo que Reyes no pod?a creérselo y me dijo: ‘Déjame o?rlo, Juanjo, que t? no sabes inglés, no puede ser, no ha dicho eso’. Y, s?, s? lo hab?a dicho”.
“Yo no lo olvidaré en la vida”, explica Moya. “Pero, mira, hemos tenido tantos triunfos, cosechado tantos elogios, acaparado tantas victorias que uno siempre se queda con lo mejor. Y lo mejor fue ser el copiloto de uno de los m?s grandes, bueno, del m?s grande de todos los deportistas que he conocido. ?Carlos empez? a ganar a los 17 a?os, cuando se proclam? campe?n de Espa?a de squash! y, ahora, a los 61 a?os, a?n sigue ganando. No me importa haber convertido en hist?rico aquel grito, solo me importa haber formado parte de una hermosa historia en compa??a de Carlos”.
Aman Barfull, amigo personal de Sainz y Moya, el hombre que organizaba el m?tico Rally Catalunya-Costa Brava, puntuable para el Mundial, estaba all?. “Bueno, estaba all?, junto a ti, Emilio, junto a ti”. Cierto, también est?bamos a las puertas del castillo, de la gloria. “Yo fui como observador de la FIA, aunque hubiese ido igual, como aficionado. Y fue, s?, muy duro. Pero recuerdo que aquella misma noche, Carlos ya estaba pensando en seguir peleando, porque ese es el esp?ritu de los grandes deportistas, no darse por vencidos ni siquiera cuando pierden un t?tulo mundial a 700 metros de la gloria m?s absoluta”.
"A aquellos que hablan de mi mala suerte, les diré que ?ojal?! todos los deportistas espa?oles tuviesen la misma mala suerte que he tenido yo en mi carrera"
Carlos Sainz
Bicampe?n del mundo de rallys y poseedor de tres Dakar
Cuando le preguntas a Sainz qué opini?n le merece aquellos que se mofan de su mala suerte, contesta: “No merecen opini?n alguna. Lo ?nico que puedo decirles, tras 43 a?os como profesional, es que miren mi palmarés. Bueno, eso y pedir para todos los deportistas espa?oles, para todos, la misma mala suerte que he tenido yo a lo largo de mi brillante carrera deportiva y, por supuesto, la posibilidad de defender en la vida tan bien como me he defendido yo para sacar mi familia adelante”.
“?Mala suerte, Carlos?”, se pregunta Juanjo Lacalle. “Toda la mala suerte que ha tenido Carlos en su vida ha sido que hace poco se muri? su padre, con 97 a?os. ?Esa ha sido toda su mala suerte! Como dice él, para m? quisiera la mala suerte de Carlos” “Es de risa que hablen de mala suerte cuando la gente se pronuncia sobre la carrera de Carlos”, se?ala Moya, “alguien que a su inmenso talento ha a?adido una tremenda e inigualable capacidad de trabajo, sacrificio e inteligencia. El talento se le supone a millones de deportistas, la capacidad de trabajo, no”.
Sainz va recordando poco a poco aquella desgracia. “Fue duro, ?claro que fue duro! ?c?mo no va a ser duro perder un Mundial (https://www.sport.es/es/temas/rally-1889584) a 700 metros de la meta y por algo que no depende de ti! Cost? recuperarnos, pero seguimos peleando. Hasta hoy. Aquella desgracia nos hizo m?s fuertes y, luego, vinieron cosas muy, muy, bonitas. Siempre he pensado que estos tropiezos te hacen m?s fuerte, te endurecen y, sobre todo, te demuestran que la vida no se acaba ah?, sino que empieza de nuevo. O sigue”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/motor/trata-arrancarlo-carlos-dios-grito-95025388)