الريــم
11-23-2023, 12:50 PM
"Los fumadores de tabaco tradicional que se pasan a los cigarrillos electr?nicos son capaces de deshacerse del h?bito con un porcentaje muy similar o incluso algo superior de los que est?n tomando medicaci?n". As? lo afirma el nefr?logo Javier Nieto Iglesias, presidente de la Sociedad Castellano-Manchega de Hipertensi?n y Riesgo Vascular y jefe de la Unidad de Hipertensi?n del Hospital General Universitario de Ciudad Real.
El especialista estar? este jueves en Murcia participando en el ‘Encuentro de Riesgo Cardiovascular’, organizado por la Sociedad Murciana de Hipertensi?n Arterial y Riesgo Cardiovascular y que se celebrar? a partir de las 16.45 horas en la sede del Colegio de Médicos de Murcia.
En concreto, Nieto Iglesias participar? en una mesa redonda dedicada al tabaquismo y dar? las claves sobre las estrategias que se deben seguir para reducir el h?bito tab?quico.
En m?s de una ocasi?n usted ha asegurado que "el fumador es un enfermo cr?nico con trastorno adictivo". ?A qué se refiere?
Al fumador hay que considerarlo como un paciente con una enfermedad cr?nica que va a mantener mientras siga con el h?bito del tabaco o no consiga dejarlo. La adicci?n viene determinada por la nicotina, la sustancia que genera una serie de ‘recompensas’ a nivel cerebral que hace que, en el momento que se deja de fumar, se pierda esa ‘recompensa’ en los receptores del cerebro. Eso es lo que sistem?ticamente hace que el fumador esté enganchado al tabaco, pero hay que decir que en lo que realmente est? enganchado es a la nicotina.
?Qué se puede hacer ahora mismo en la lucha contra el tabaquismo?
Lo principal, de entrada, es que la gente deje de fumar. En Espa?a se estima que puede haber entre 4 y 5 millones de personas que no quieren dejar de fumar, no lo han intentado o directamente no se lo plantean.
?Qué medidas cree que ser?an efectivas para frenar esta situaci?n?
Entre otras cosas, a través de campa?as institucionales que, la verdad, ?ltimamente est?n un poco paradas. Esto ha provocado que la pendiente descendente de fumadores que hab?a hace unos a?os ahora se haya estabilizado. Tenemos en el pa?s un porcentaje de fumadores en personas entre 15 y 75 a?os que ronda el 33%, un tercio del total. En este sentido, hay que apostar también por que el tabaco deje de ser atractivo: hacer que los empaquetados tengan m?s advertencias sobre los peligros que representan para la salud y que cada vez haya m?s espacios sin humo. También se podr?a contemplar la posibilidad de aumentar los impuestos del tabaco para que su precio se encarezca y sea m?s dif?cil su acceso a la poblaci?n al aumentar su coste econ?mico.
?Para las personas que sufren hipertensi?n arterial (https://www.sport.es/es/temas/hipertension-arterial-1865760), ?qué consecuencias pueden conllevar el consumo del tabaco?
Sin duda, supone un riesgo adicional para todos los pacientes con problemas cardiovasculares. La exposici?n al humo del tabaco convencional puede provocar deficiencias de ox?geno que pueden desembocar en otros problemas m?s graves como trombosis, cardiopat?as isquémicas, arritmias, muertes s?bitas o ictus. A esto hay que a?adirle que el 70% de los fumadores puede acabar sufriendo también la enfermedad pulmonar obstructiva cr?nica (EPOC), provocada por los t?xicos que se inhalan del tabaco convencional.
En cuanto a las alternativas al tabaco tradicional, ?es igual de adictivo, por ejemplo, el consumo de cigarrillos electr?nicos?
Evidentemente, hay sistemas o dispositivos que reducen la cantidad de t?xicos que tiene el tradicional. Aqu? entran los vapeadores, los cigarrillos electr?nicos o el tabaco calentado. Hay otros casos, como el consumo del snus en Suecia, que no son m?s que bolsitas de tabaco con nicotina y que a veces pueden llevar incluso mezclados algunos edulcorantes. Lo cierto es que con estas nuevas alternativas se ha demostrado que puede llegar a reducirse el da?o cardiovascular o el c?ncer de pulm?n.
Que ya de por s? es bastante importante...
Aqu? lo que se trata es de conseguir que realmente se reduzca el da?o que pueden causar estas sustancias t?xicas en una persona. Si esto lo hacemos extensivo para que los fumadores cambien el tabaco convencional por otros dispositivos y conseguimos un grupo bastante grande e importante, estaremos incidiendo en el da?o que podemos evitar sobre esta poblaci?n. As?, a través de los ‘modelos de simulaci?n’ que utilizamos, se podr?a estimar que el impacto sobre esta poblaci?n que ha cambiado el sistema de fumar a otro es menos da?ino. De esa manera, podr?amos decir que, a lo mejor, estas personas han sido capaces de ‘salvar’ a?os de vida siempre y cuando cambien completamente el sistema que no depende del humo de tabaco convencional.
?Y estos dispositivos pueden contribuir a ayudar a la deshabituaci?n de los fumadores?
Lo que se sabe es que, por un lado, disminuyen el da?o; y, por otro, que incluso los fumadores de tabaco tradicional que pasan a fumar cigarrillos electr?nicos son capaces de deshacerse del h?bito con un porcentaje muy similar o incluso algo superior de lo que est?n tomando medicaci?n aprobada por el Ministerio para sustituir a la nicotina a nivel cerebral.
El problema quiz? est? en que estos cigarrillos electr?nicos pueden abrir la puerta a consumidores cada vez m?s j?venes e incluso menores de edad, quienes se ven atra?dos por los sabores y los olores de los cigarrillos electr?nicos...
Efectivamente. Hay que tratar de hacer m?s dif?cil el acceso que tiene la gente joven a estos dispositivos y a la gran cantidad de distintos sabores que se ofrecen. Adem?s, no deben hacer atractivo el empaquetado para ellos porque hay de distintos colores e, incluso, de distintos dibujos animados. Por ejemplo, en Estados Unidos han prohibido m?s de cuatrocientos dispositivos con numerosos sabores y para el futuro se pretende que solo haya sabor a tabaco o, como mucho, a mentol. Pero, igualmente, yo creo que puede coexistir el hecho de intentar que los j?venes no se introduzcan en este h?bito y que, adem?s, el uso de estos dispositivos pueda venir bien a la gente fumadora para cambiar definitivamente el h?bito tab?quico y reducirlo.
Ahora la mayor?a de adolescentes y j?venes comienzan fumando con estos cigarrillos electr?nicos...
S?, se ha visto que los j?venes que se iniciaron con cigarrillos electr?nicos tienen m?s facilidad para que en un futuro pasen a fumar un cigarrillo convencional. Lo cierto es que los menores de 18 a?os suelen empezar con el consumo de cigarrillos electr?nicos y, en el futuro, cuando sean m?s mayores, pueden pasar al tabaco tradicional. Pero, por contra, lo que también se ha visto recientemente este mismo a?o a través de la publicaci?n de un estudio americano es que con estos chicos que entre los 12 y 17 a?os comenzaban a fumar cigarrillos electr?nicos es que cuando pasaban a un cigarro normal no se manten?an durante los siguientes dos o tres a?os fumando tabaco tradicional.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/javier-nieto-iglesias-nefrologo-fumadores-cigarros-electronicos-94985829)
El especialista estar? este jueves en Murcia participando en el ‘Encuentro de Riesgo Cardiovascular’, organizado por la Sociedad Murciana de Hipertensi?n Arterial y Riesgo Cardiovascular y que se celebrar? a partir de las 16.45 horas en la sede del Colegio de Médicos de Murcia.
En concreto, Nieto Iglesias participar? en una mesa redonda dedicada al tabaquismo y dar? las claves sobre las estrategias que se deben seguir para reducir el h?bito tab?quico.
En m?s de una ocasi?n usted ha asegurado que "el fumador es un enfermo cr?nico con trastorno adictivo". ?A qué se refiere?
Al fumador hay que considerarlo como un paciente con una enfermedad cr?nica que va a mantener mientras siga con el h?bito del tabaco o no consiga dejarlo. La adicci?n viene determinada por la nicotina, la sustancia que genera una serie de ‘recompensas’ a nivel cerebral que hace que, en el momento que se deja de fumar, se pierda esa ‘recompensa’ en los receptores del cerebro. Eso es lo que sistem?ticamente hace que el fumador esté enganchado al tabaco, pero hay que decir que en lo que realmente est? enganchado es a la nicotina.
?Qué se puede hacer ahora mismo en la lucha contra el tabaquismo?
Lo principal, de entrada, es que la gente deje de fumar. En Espa?a se estima que puede haber entre 4 y 5 millones de personas que no quieren dejar de fumar, no lo han intentado o directamente no se lo plantean.
?Qué medidas cree que ser?an efectivas para frenar esta situaci?n?
Entre otras cosas, a través de campa?as institucionales que, la verdad, ?ltimamente est?n un poco paradas. Esto ha provocado que la pendiente descendente de fumadores que hab?a hace unos a?os ahora se haya estabilizado. Tenemos en el pa?s un porcentaje de fumadores en personas entre 15 y 75 a?os que ronda el 33%, un tercio del total. En este sentido, hay que apostar también por que el tabaco deje de ser atractivo: hacer que los empaquetados tengan m?s advertencias sobre los peligros que representan para la salud y que cada vez haya m?s espacios sin humo. También se podr?a contemplar la posibilidad de aumentar los impuestos del tabaco para que su precio se encarezca y sea m?s dif?cil su acceso a la poblaci?n al aumentar su coste econ?mico.
?Para las personas que sufren hipertensi?n arterial (https://www.sport.es/es/temas/hipertension-arterial-1865760), ?qué consecuencias pueden conllevar el consumo del tabaco?
Sin duda, supone un riesgo adicional para todos los pacientes con problemas cardiovasculares. La exposici?n al humo del tabaco convencional puede provocar deficiencias de ox?geno que pueden desembocar en otros problemas m?s graves como trombosis, cardiopat?as isquémicas, arritmias, muertes s?bitas o ictus. A esto hay que a?adirle que el 70% de los fumadores puede acabar sufriendo también la enfermedad pulmonar obstructiva cr?nica (EPOC), provocada por los t?xicos que se inhalan del tabaco convencional.
En cuanto a las alternativas al tabaco tradicional, ?es igual de adictivo, por ejemplo, el consumo de cigarrillos electr?nicos?
Evidentemente, hay sistemas o dispositivos que reducen la cantidad de t?xicos que tiene el tradicional. Aqu? entran los vapeadores, los cigarrillos electr?nicos o el tabaco calentado. Hay otros casos, como el consumo del snus en Suecia, que no son m?s que bolsitas de tabaco con nicotina y que a veces pueden llevar incluso mezclados algunos edulcorantes. Lo cierto es que con estas nuevas alternativas se ha demostrado que puede llegar a reducirse el da?o cardiovascular o el c?ncer de pulm?n.
Que ya de por s? es bastante importante...
Aqu? lo que se trata es de conseguir que realmente se reduzca el da?o que pueden causar estas sustancias t?xicas en una persona. Si esto lo hacemos extensivo para que los fumadores cambien el tabaco convencional por otros dispositivos y conseguimos un grupo bastante grande e importante, estaremos incidiendo en el da?o que podemos evitar sobre esta poblaci?n. As?, a través de los ‘modelos de simulaci?n’ que utilizamos, se podr?a estimar que el impacto sobre esta poblaci?n que ha cambiado el sistema de fumar a otro es menos da?ino. De esa manera, podr?amos decir que, a lo mejor, estas personas han sido capaces de ‘salvar’ a?os de vida siempre y cuando cambien completamente el sistema que no depende del humo de tabaco convencional.
?Y estos dispositivos pueden contribuir a ayudar a la deshabituaci?n de los fumadores?
Lo que se sabe es que, por un lado, disminuyen el da?o; y, por otro, que incluso los fumadores de tabaco tradicional que pasan a fumar cigarrillos electr?nicos son capaces de deshacerse del h?bito con un porcentaje muy similar o incluso algo superior de lo que est?n tomando medicaci?n aprobada por el Ministerio para sustituir a la nicotina a nivel cerebral.
El problema quiz? est? en que estos cigarrillos electr?nicos pueden abrir la puerta a consumidores cada vez m?s j?venes e incluso menores de edad, quienes se ven atra?dos por los sabores y los olores de los cigarrillos electr?nicos...
Efectivamente. Hay que tratar de hacer m?s dif?cil el acceso que tiene la gente joven a estos dispositivos y a la gran cantidad de distintos sabores que se ofrecen. Adem?s, no deben hacer atractivo el empaquetado para ellos porque hay de distintos colores e, incluso, de distintos dibujos animados. Por ejemplo, en Estados Unidos han prohibido m?s de cuatrocientos dispositivos con numerosos sabores y para el futuro se pretende que solo haya sabor a tabaco o, como mucho, a mentol. Pero, igualmente, yo creo que puede coexistir el hecho de intentar que los j?venes no se introduzcan en este h?bito y que, adem?s, el uso de estos dispositivos pueda venir bien a la gente fumadora para cambiar definitivamente el h?bito tab?quico y reducirlo.
Ahora la mayor?a de adolescentes y j?venes comienzan fumando con estos cigarrillos electr?nicos...
S?, se ha visto que los j?venes que se iniciaron con cigarrillos electr?nicos tienen m?s facilidad para que en un futuro pasen a fumar un cigarrillo convencional. Lo cierto es que los menores de 18 a?os suelen empezar con el consumo de cigarrillos electr?nicos y, en el futuro, cuando sean m?s mayores, pueden pasar al tabaco tradicional. Pero, por contra, lo que también se ha visto recientemente este mismo a?o a través de la publicaci?n de un estudio americano es que con estos chicos que entre los 12 y 17 a?os comenzaban a fumar cigarrillos electr?nicos es que cuando pasaban a un cigarro normal no se manten?an durante los siguientes dos o tres a?os fumando tabaco tradicional.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/javier-nieto-iglesias-nefrologo-fumadores-cigarros-electronicos-94985829)