الريــم
11-15-2023, 12:11 PM
El debate de investidura arranca este miércoles (https://www.epe.es/es/politica/20231115/investidura-sanchez-abre-legislatura-llena-inestabilidad-94620016) con un candidato que ha logrado reunir el apoyo de 179 diputados. Los de PSOE, Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV, BNG y Coalici?n Canaria frente a los 171 de PP, Vox y UPN. La previsi?n es que Pedro S?nchez salga investido en primera votaci?n, con mayor?a absoluta, el jueves. Tendr? doce votos m?s que en 2019. Un mayor respaldo que, sin embargo, no es sin?nimo de estabilidad. La ruptura de puentes con el principal partido de la oposici?n aleja los consensos necesarios para reformar el sistema de financiaci?n auton?mica o renovar el Consejo General del Poder Judicial con las actuales reglas.
Adem?s, el forzado encaje de Junts en el bloque de investidura, tras a?os de confrontaci?n, dificulta la gobernabilidad. Sus siete votos, al igual que los del resto de socios de investidura, son imprescindibles para aprobar cada ley. La aritmética parlamentaria salida de las urnas solo permite el margen de la abstenci?n de uno de los socios siempre que se sume CC. Un heterogéneo bloque de nacionalistas e independentistas, tanto de izquierdas como de derechas, con partidos que compiten electoralmente entre s?, como han demostrado Junts y ERC en las negociaciones de investidura.
A esta inestabilidad parlamentaria se suma la creciente tensi?n social en las calles con protestas en contra de la amnist?a. Movilizaciones que tanto PP como Vox pretenden sostener en el tiempo, dando por hecho que habr? muchos momentos de tensi?n. Los populares elevan su diagn?stico y consideran que la legislatura, m?s que inestable, ser? directamente “convulsa”.
Alberto N??ez Feij?o se prepara para liderar una “oposici?n dura” que cuando dio el salto a la pol?tica nacional nunca consider?. Primero, porque siempre crey? que llegar?a a la Moncloa. Y, segundo, reconocen en Génova, porque este ciclo pol?tico se abre de la mano de una ley de amnist?a que consideran inconstitucional y que dar? paso a “chantajes constantes”.
En el PP dise?an una estrategia de ataque constante al PSOE y, al mismo tiempo, de desestabilizar en la medida de lo posible el bloque que sostiene a S?nchez. La decisi?n de acercar posturas con los nacionalistas la tom? Feij?o hace tiempo: sin eso, dicen en su equipo, es muy dif?cil volver a gobernar. En el PP reconocen que cada votaci?n y cada negociaci?n puede ser “una tortura” para el socialista. Y en ese intento de complicarle la vida al Ejecutivo también jugar? un rol fundamental la mayor?a absoluta en el Senado.
Se vio claro este martes con la aprobaci?n del cambio en el reglamento de la C?mara con el ?nico objetivo de dilatar los plazos de la ley que perdona los delitos del procés. “En cada ocasi?n, utilizaremos todos los instrumentos que tengamos”, resumen en el PP. El poder territorial es el otro arma con el que cuentan. La mayor?a de comunidades aut?nomas est?n gobernadas por el PP y las opciones para forzar conferencias de presidentes o debates sectoriales se llevar?n al l?mite también.
Presupuestos y fondos, otra prueba
Los Presupuestos determinar?n la duraci?n de la legislatura, con los socios capacitados para hacerlos descarrilar si no ven colmadas sus expectativas. Si bien las primeras cuentas, que todos los socios consideran que saldr?n adelante, se pueden prorrogar, el Ejecutivo deber? seguir haciendo equilibrios para aprobar las medidas pendientes del plan de recuperaci?n. Si no lo hace en tiempo y forma, seg?n lo comprometido con Bruselas, los fondos de la UE dejar?n de fluir.
Dentro del Consejo de Ministros, tanto PSOE como Sumar presagian un mejor entendimiento que en la pasada legislatura. Una relaci?n m?s estable por convicci?n, estrategia y la confianza cultivada durante los ?ltimos a?os entre Pedro S?nchez y Yolanda D?az. Menos “ruido” dentro de la coalici?n, pero a base de orillar a Podemos que reclamar? m?s autonom?a parlamentaria. Los cinco diputados morados no pretenden plegarse a la disciplina del grupo parlamentario y negociar con el Gobierno como un actor pol?tico m?s, sin garantizar de antemano su apoyo.
Desde el PSOE han querido extender los acuerdos de investidura a pactos de legislatura, pero a excepci?n del PNV todos han rechazado esta optimista lectura. Principalmente sus dos socios catalanes. Para Junts y ERC, la estabilidad del futuro Gobierno se vincula al avance y cumplimiento de lo firmado.
En el caso de los republicanos, se plasma en el pacto que “las diputadas y diputados de ERC apoyar?n la investidura de Pedro S?nchez y, en paralelo al cumplimiento de los compromisos adquiridos en este acuerdo, dar?n estabilidad a la legislatura a través de una negociaci?n”. El de Junts especifica en su ?ltimo punto que ambas partes acuerdan "la estabilidad de la legislatura, sujeta a los avances y cumplimiento de los pactos que resulten de las negociaciones".
Los objetivos marcados por los independentistas no dejan de ser similares, y la pugna a la hora de capitalizar las reivindicaciones obligar? a los socialistas a hacer un dif?cil equilibrio para contentar a ambos socios. Repartir banderas y protagonismo. Un equilibrismo que se har? m?s dif?cil a medida que se acerquen las elecciones catalanas, previstas para principios de 2025.
La batalla europea del PP
Y en mitad de este panorama nacional, siempre con el foco puesto en la necesidad de cumplir con las reformas y las condiciones de la Uni?n Europea para seguir recibiendo los fondos, entra en juego la carta con la que el PP espera dar el primer susto al Gobierno a cuenta de la ley de amnist?a.
Aunque evitan concreciones, los conservadores est?n preparando una respuesta pol?tica y jur?dica en el terreno comunitario, convencidos de que el Ejecutivo se ha asegurado de contar con el aval del Tribunal Constitucional en la norma pactada con los independentistas. La desconfianza que el PP tiene del TC es una prueba m?s del deterioro de relaciones entre los dos grandes partidos, con acusaciones muy duras de estar colonizando las instituciones y con la imposibilidad de resolver cuestiones de Estado pendientes como la renovaci?n del CGPJ. Europa también lo exige.
En todo caso, el PP cree que la visi?n europea puede frenar, al menos en parte, las pretensiones del Gobierno. El propio ministro de la Presidencia, Félix Bola?os, tom? la iniciativa pidiendo una reuni?n del m?s alto nivel para poder explicar la ley de amnist?a directamente. Hace unos d?as el comisario europeo de Justicia ya pidi? explicaciones a Moncloa. En el PP también reconocen gestiones al respecto, "que no se ven", pero "que est?n llevando mucho trabajo".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/investidura-pedro-sanchez-abre-legislatura-94634596)
Adem?s, el forzado encaje de Junts en el bloque de investidura, tras a?os de confrontaci?n, dificulta la gobernabilidad. Sus siete votos, al igual que los del resto de socios de investidura, son imprescindibles para aprobar cada ley. La aritmética parlamentaria salida de las urnas solo permite el margen de la abstenci?n de uno de los socios siempre que se sume CC. Un heterogéneo bloque de nacionalistas e independentistas, tanto de izquierdas como de derechas, con partidos que compiten electoralmente entre s?, como han demostrado Junts y ERC en las negociaciones de investidura.
A esta inestabilidad parlamentaria se suma la creciente tensi?n social en las calles con protestas en contra de la amnist?a. Movilizaciones que tanto PP como Vox pretenden sostener en el tiempo, dando por hecho que habr? muchos momentos de tensi?n. Los populares elevan su diagn?stico y consideran que la legislatura, m?s que inestable, ser? directamente “convulsa”.
Alberto N??ez Feij?o se prepara para liderar una “oposici?n dura” que cuando dio el salto a la pol?tica nacional nunca consider?. Primero, porque siempre crey? que llegar?a a la Moncloa. Y, segundo, reconocen en Génova, porque este ciclo pol?tico se abre de la mano de una ley de amnist?a que consideran inconstitucional y que dar? paso a “chantajes constantes”.
En el PP dise?an una estrategia de ataque constante al PSOE y, al mismo tiempo, de desestabilizar en la medida de lo posible el bloque que sostiene a S?nchez. La decisi?n de acercar posturas con los nacionalistas la tom? Feij?o hace tiempo: sin eso, dicen en su equipo, es muy dif?cil volver a gobernar. En el PP reconocen que cada votaci?n y cada negociaci?n puede ser “una tortura” para el socialista. Y en ese intento de complicarle la vida al Ejecutivo también jugar? un rol fundamental la mayor?a absoluta en el Senado.
Se vio claro este martes con la aprobaci?n del cambio en el reglamento de la C?mara con el ?nico objetivo de dilatar los plazos de la ley que perdona los delitos del procés. “En cada ocasi?n, utilizaremos todos los instrumentos que tengamos”, resumen en el PP. El poder territorial es el otro arma con el que cuentan. La mayor?a de comunidades aut?nomas est?n gobernadas por el PP y las opciones para forzar conferencias de presidentes o debates sectoriales se llevar?n al l?mite también.
Presupuestos y fondos, otra prueba
Los Presupuestos determinar?n la duraci?n de la legislatura, con los socios capacitados para hacerlos descarrilar si no ven colmadas sus expectativas. Si bien las primeras cuentas, que todos los socios consideran que saldr?n adelante, se pueden prorrogar, el Ejecutivo deber? seguir haciendo equilibrios para aprobar las medidas pendientes del plan de recuperaci?n. Si no lo hace en tiempo y forma, seg?n lo comprometido con Bruselas, los fondos de la UE dejar?n de fluir.
Dentro del Consejo de Ministros, tanto PSOE como Sumar presagian un mejor entendimiento que en la pasada legislatura. Una relaci?n m?s estable por convicci?n, estrategia y la confianza cultivada durante los ?ltimos a?os entre Pedro S?nchez y Yolanda D?az. Menos “ruido” dentro de la coalici?n, pero a base de orillar a Podemos que reclamar? m?s autonom?a parlamentaria. Los cinco diputados morados no pretenden plegarse a la disciplina del grupo parlamentario y negociar con el Gobierno como un actor pol?tico m?s, sin garantizar de antemano su apoyo.
Desde el PSOE han querido extender los acuerdos de investidura a pactos de legislatura, pero a excepci?n del PNV todos han rechazado esta optimista lectura. Principalmente sus dos socios catalanes. Para Junts y ERC, la estabilidad del futuro Gobierno se vincula al avance y cumplimiento de lo firmado.
En el caso de los republicanos, se plasma en el pacto que “las diputadas y diputados de ERC apoyar?n la investidura de Pedro S?nchez y, en paralelo al cumplimiento de los compromisos adquiridos en este acuerdo, dar?n estabilidad a la legislatura a través de una negociaci?n”. El de Junts especifica en su ?ltimo punto que ambas partes acuerdan "la estabilidad de la legislatura, sujeta a los avances y cumplimiento de los pactos que resulten de las negociaciones".
Los objetivos marcados por los independentistas no dejan de ser similares, y la pugna a la hora de capitalizar las reivindicaciones obligar? a los socialistas a hacer un dif?cil equilibrio para contentar a ambos socios. Repartir banderas y protagonismo. Un equilibrismo que se har? m?s dif?cil a medida que se acerquen las elecciones catalanas, previstas para principios de 2025.
La batalla europea del PP
Y en mitad de este panorama nacional, siempre con el foco puesto en la necesidad de cumplir con las reformas y las condiciones de la Uni?n Europea para seguir recibiendo los fondos, entra en juego la carta con la que el PP espera dar el primer susto al Gobierno a cuenta de la ley de amnist?a.
Aunque evitan concreciones, los conservadores est?n preparando una respuesta pol?tica y jur?dica en el terreno comunitario, convencidos de que el Ejecutivo se ha asegurado de contar con el aval del Tribunal Constitucional en la norma pactada con los independentistas. La desconfianza que el PP tiene del TC es una prueba m?s del deterioro de relaciones entre los dos grandes partidos, con acusaciones muy duras de estar colonizando las instituciones y con la imposibilidad de resolver cuestiones de Estado pendientes como la renovaci?n del CGPJ. Europa también lo exige.
En todo caso, el PP cree que la visi?n europea puede frenar, al menos en parte, las pretensiones del Gobierno. El propio ministro de la Presidencia, Félix Bola?os, tom? la iniciativa pidiendo una reuni?n del m?s alto nivel para poder explicar la ley de amnist?a directamente. Hace unos d?as el comisario europeo de Justicia ya pidi? explicaciones a Moncloa. En el PP también reconocen gestiones al respecto, "que no se ven", pero "que est?n llevando mucho trabajo".
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