الريــم
10-23-2023, 08:40 AM
A principios del pasado julio, la alcaldesa de Torrejoncillo del Rey, un peque?o pueblo de Cuenca de 345 habitantes censados, pero que en verano duplica o triplica su poblaci?n, hizo p?blico un bando que ning?n alcalde quiere tener que publicar. Y menos cuando se lleva pocos d?as en el cargo, como llevaba Piedad Balsalobre (PSOE). “Por la concentraci?n de nitratos, se pone en conocimiento de la ciudadan?a que se abstengan de beber agua suministrada por el servicio municipal de abastecimiento por no ser apta para el consumo humano”, rezaba el escrito, que se coloc? a las puertas del Ayuntamiento y de la farmacia.
El an?lisis de los nitratos del agua del pueblo estaba por encima de los par?metros establecidos por la normativa espa?ola. Seg?n el Real Decreto 140/2003, la concentraci?n m?xima permitida de nitratos en las aguas de consumo humano es de 50 mg/litro. En el caso de Torrejoncillos se estaba alrededor de los 80. “Es un problema grave que tenemos”, reconoce en su peque?o despacho del ayuntamiento Balsalobre, a la que suelen abordar por las calles del pueblo, bello a su manera manchega, de casas blancas y alguna que otra cuesta pronunciada, para saber cu?ndo “se arregla lo del agua”.
Balsalobre es s?lo uno m?s de los muchos pueblos afectados en Espa?a. Seg?n datos del Sistema de Informaci?n Nacional de Agua de Consumo (SINAC) suministrados a Greenpeace por el Ministerio de Sanidad, hasta 411 municipios no han podido beber agua por contaminaci?n de nitratos durante alg?n periodo de tiempo entre 2016 y 2021. Eso les ha obligado a buscar un suministro alternativo, ya sea reparto de agua con camiones cisternas, agua embotellada o aparatos desnitrificadores. En el caso de Torrejoncillo, fue el agua embotellada.
Su compra se dispar? de tal manera que la recogida de residuos de pl?stico no daba casi abasto este agosto. “Hab?a muchos contenedores llenos de garrafas de agua hasta arriba”, recuerda la alcaldesa. “Esto nos obliga a tener un gran gasto de agua; garrafas y garrafas”, cuentan Isidro y Feli, matrimonio, a las puertas del edificio municipal, cuya planta baja tiene una sala que es usada de peluquer?a para los m?s mayores en una de esas reinvenciones de la Espa?a vaciada para sobrevivir.
Fertilizantes
Los nitratos son nutrientes que se encuentran naturalmente en el medioambiente, no tienen color ni sabor y se pueden hallar tanto en el suelo como en las aguas o en las rocas. Son fundamentales para el ciclo de la vida, pero cuando su composici?n se altera por el uso de fertilizantes artificiales o el uso de excrementos de animales -purines- como fertilizantes, muy ricos en nitratos, pueden ser t?xicos y afectar a la salud humana. El principal causante de los nitratos contaminados, seg?n Greenpeace, es la ganader?a (en un 80%), principalmente la porcina, seguido por la agricultura intensiva y los fertilizantes sintéticos. También hay alta incidencia de nitratos potencialmente t?xicos donde no hay un buen tratamiento de los residuos humanos.
En Huerta de la Obispal?a, el municipio colindante a Torrejoncillo, funcionan cuatro macrogranjas de cerdos y dos de ovejas, grandes generadores de purines que se recogen, se trasladan en cisternas y son usados directamente como abono para las vastas zonas de cultivo de cereal de la zona, tanto en Huerta como en Torrejoncillo. De esos campos de secano, en esta época de un color marr?n intenso tras haberse labrado hace poco para la pr?xima campa?a, los nitratos estar?an pasando a los manantiales y pozos de los que se alimenta el pueblo. Nadie, ni en Torrejoncillo ni en ning?n sitio de Espa?a, vigila qué cantidad de purines se echa ni en qué zonas ni cu?nta concentraci?n de nitratos pasan a las tierras de cultivo. Los acuerdos privados son entre el agricultor y el ganadero. “Lo que hacen es convertir los terrenos de cultivo en vertederos”, concluyen los ecologistas.
“Nos est?n envenenando, llevan a?os haciéndolo. Yo llevo veinte a?os sin beber agua del grifo. Los manantiales est?n muy contaminados”, dice Mercedes, concejala del Ayuntamiento pero que dice hablar como vecina. “No le importamos a nadie, aqu? s?lo se preocupan de Madrid y Barcelona; somos el ?ltimo pedo que se tir? Mahoma”, protesta su marido Emilio, que cuenta que, aparte de problemas con el agua, hay malos olores y moscas. “Antes hab?a tres almazaras de aceite, pero ya nadie planta”, lamenta Emilio. “Ya no ves ni p?jaros cuando aqu? esto era una gozada por las ma?anas”, aprecia nost?lgica Mercedes, que apunta también a los otros dos males de la Espa?a vaciada que sufre también su pueblo: los molinos de viento y las placas solares.
“El agua con nitratos es un problema que afecta a toda Espa?a, aunque hay zonas m?s sobrecargadas que otras; el Gobierno de hecho reconoce que es uno de los grandes problemas de las masas de agua de nuestro pa?s”, asegura Luis Ferreirim, responsable de Agricultura y Ganader?a de Greenpeace Espa?a. De acuerdo a los ?ltimos datos disponible, de 2021, la comunidad donde ha habido m?s mediciones iguales o superiores a 50 mg/l ha sido la Comunidad Valenciana (180), seguida de Islas Baleares (174) -seguramente vinculado a que sus instalaciones de gesti?n de residuos no est?n del todo preparadas para absorber tanta poblaci?n en verano-, Castilla La-Mancha (140) y Castilla y Le?n (139).
900 millones de sacrificios al a?o
Los datos no son del todo concluyentes ya que hay comunidades, como Navarra, Murcia o Cantabria, que no reportan ning?n dato. De hecho, solo un 53% de los m?s de 8.100 municipios de Espa?a han reportado mediciones. Pero s? hay una cifra inapelable y preocupante: si en 2016 hab?a un 3,76% de an?lisis que daban por encima del l?mite legal, en 2020 la cifra se eleva al 5%. Tiene que ver con el aumento exponencial de las macrogranjas. Seg?n c?lculos de Greenpeace a través de datos oficiales, ya se sacrifican m?s de 900 millones de animales al a?o en nuestro pa?s: “Eso es una cifra mayor que las personas que hay en la UE; son muchos animales comiendo y cagando”.
En la zona de Banast?s, en Huesca, el agua contaminada es ya un problema endémico y recientemente la Diputaci?n ha realizado obras para enganchar a los municipios de la zona, que se alimentaba de los embalses subterr?neos, a la red de agua de Huesca. “En Arag?n ha crecido mucho la caba?a ganadera; hay ya nueve millones de cerdos censados”, dice Luis Ferreirim. En Castej?n de Alarba, en el ?rea de Daroca, los l?mites se han rebasado hasta siete veces y en uno de los an?lisis se lleg? a tener 295 mg/l. En Montamarta, un peque?o pueblo de Zamora, se declar? no apto el consumo hace unas semanas, por el también alto nivel de nitratos. "Parece que ya en el ?ltimo an?lisis estamos por debajo del l?mite, estamos esperando al laboratorio", explica Gregorio ?lvarez, el alcalde.
En Castilla y Le?n, con cada vez m?s macrogranjas, comienza a ser un problema muy serio que ha llegado a los tribunales. El pasado verano, por ejemplo, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y Le?n ratific? la legalidad de una macrogranja de 1.999 cerdos en Gumiel de Mercado (Burgos), al lado de las vi?as de Cuevas Jiménez, una bodega de la Denominaci?n de Origen Ribera del Duero. El tribunal entendi? que estaba en suelo r?stico, no necesitaba declaraci?n de impacto ambiental ya que no era de uso industrial -no se realizaba transformaci?n de producto- y pod?a funcionar solo con la licencia municipal.
Lo cierto es que la ley establece un marco general, como que las macrogranjas estén a al menos un kil?metro de distancia de los n?cleos urbanos, pero luego cada comunidad, cada consistorio y la respectiva confederaci?n hidrogr?fica -en el caso de que haya concesi?n de aguas- establece sus requisitos. Seg?n Greenpeace, las comunidades m?s laxas a la hora de imponer exigencias son las dos Castillas, Arag?n y Murcia.
Da?o al turismo
“Nosotros no estamos en contra de las macrogranjas, sino que se instalen donde no hay otra actividad econ?mica”, explica el director José Zapatero, director de la Bodega Cuevas, que junto con otras bodegas de la D.O. planean crear una plataforma para defenderse de la 'invasi?n' de estas megainstalaciones ganaderas. Y no es solo por el miedo a que los purines afecten a la calidad de los acu?feros, sino por los malos olores que se generan y que ahuyentan el turismo, algo que ocurre en otras zonas de Espa?a. “Ten?a pensado hacer un mirador muy chulo dentro de las rutas de enoturismo en una zona donde se ven muy los vi?edos y dos sierras pero, ?c?mo vas a llevar all? a la gente con lo mal que huele?”, se pregunta Zapatero, que recuerda que las macrogranjas no fijan poblaci?n, porque apenas generan empleo [con dos personas se puede llevar una].
La victoria de Bailén
En algunos casos, los movimientos vecinales han logrado parar las instalaciones, como en Bailén, donde una asociaci?n vigil? cada movimiento administrativo hasta el final para tratar de evitar los malos olores y la posible contaminaci?n a los olivos, principal industria de la zona tras reventar la burbuja del ladrillo. Rara vez es un problema que afecte a grandes ciudades. “Santiago de Compostela s? tuvo un problema puntual por vertido de purines, pero no es com?n. Estas actividades est?n en el campo, en la Espa?a vaciada, donde no hay un rechazo social tan grande para hacer resistencia”, afirma el responsable de Greenpeace, que pide a las administraciones una moratoria de nuevas licencias de ganader?a intensiva tanto de nueva instalaci?n como de ampliaciones. La Confederaci?n Hidrogr?fica del Ebro, por ejemplo, ha sido pionera al prohibir nuevas instalaciones en las zonas con alta concentraci?n de nitratos.
“En el pasado las administraciones han tenido una gran permisividad”, critica Ferreirim, que recuerda que la Comisi?n Europea ha advertido a Espa?a varias veces por esta alta concentraci?n de nitratos. La contaminaci?n del agua de consumo humano es el principal problema de los purines que generan las macrogranjas, pero las balsas de purines también son grandes generadoras de metano, que es uno de los grandes causantes del efecto invernadero, y de amoniaco. Adem?s, a gran cantidad de agua que requiere cada una de estas macrogranjas también supone un quebradero de cabeza en época de sequ?a.
En Torrejoncillo, tal como adelant? EL PERI?DICO DE ESPA?A (https://www.epe.es/es/reportajes/20231022/municipios-agua-no-apta-consumo-humano-contaminacion-nitratos-93541618), del grupo Prensa Ibérica, el Consistorio también emprendi? una batalla legal -que ha ganado- contra la ?ltima macrogranja que se mont?, de 7.200 cerdos. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha anul? el permiso ambiental de la Junta porque no se tuvo en cuenta la gran acumulaci?n de instalaciones ganaderas en la zona que suman decenas de miles de cabezas de ganado. “Ahora toca esperar a ver si se presentan recursos”, asegura la alcaldesa, aunque est? claro, dice, “que hay que tener m?s control sobre los vertidos de purines”. "La sentencia no va a servir de nada, ?van a cerrar? No lo creo", pronostica Mercedes.
En el pueblo, aun as?, hay quien defiende las macrogranjas, como Angelines, que lleva la ?nica tienda de alimentaci?n, y rezonga cuando le preguntamos si vende m?s agua desde que sali? el bando. “Vendo la misma”, afirma cortante. A la izquierda del mostrador de la entrada, sin embargo, se acumulan una veintena de garrafas grandes. “?Si a la Espa?a vaciada, la despoblada, le quitas la ganader?a y la agricultura, qué le queda? Yo, por ejemplo, tendr?a que cerrar. Esto del agua no viene de hoy. El agua lleva estando as? muchos a?os; mucha gente sigue bebiéndola, tiene aparatos en casa”, suelta la comerciante, a la que dan la raz?n los clientes, entre ellos ?ngel, de 83 a?os, el exalcalde, que al preguntarle pone cara de ‘no me metas en este marr?n’ tras a?os con el tema encima de su mesa de Alcald?a. “Mira, yo nunca bebo agua. Nunca. Si es que no es buena. T? echas una mosca a un vaso de agua y se muere; y la echas a uno de vino y sobrevive. Pues eso, que no es buena”, sonr?e p?caro.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/espana-beber-agua-grifo-alta-93676785)
El an?lisis de los nitratos del agua del pueblo estaba por encima de los par?metros establecidos por la normativa espa?ola. Seg?n el Real Decreto 140/2003, la concentraci?n m?xima permitida de nitratos en las aguas de consumo humano es de 50 mg/litro. En el caso de Torrejoncillos se estaba alrededor de los 80. “Es un problema grave que tenemos”, reconoce en su peque?o despacho del ayuntamiento Balsalobre, a la que suelen abordar por las calles del pueblo, bello a su manera manchega, de casas blancas y alguna que otra cuesta pronunciada, para saber cu?ndo “se arregla lo del agua”.
Balsalobre es s?lo uno m?s de los muchos pueblos afectados en Espa?a. Seg?n datos del Sistema de Informaci?n Nacional de Agua de Consumo (SINAC) suministrados a Greenpeace por el Ministerio de Sanidad, hasta 411 municipios no han podido beber agua por contaminaci?n de nitratos durante alg?n periodo de tiempo entre 2016 y 2021. Eso les ha obligado a buscar un suministro alternativo, ya sea reparto de agua con camiones cisternas, agua embotellada o aparatos desnitrificadores. En el caso de Torrejoncillo, fue el agua embotellada.
Su compra se dispar? de tal manera que la recogida de residuos de pl?stico no daba casi abasto este agosto. “Hab?a muchos contenedores llenos de garrafas de agua hasta arriba”, recuerda la alcaldesa. “Esto nos obliga a tener un gran gasto de agua; garrafas y garrafas”, cuentan Isidro y Feli, matrimonio, a las puertas del edificio municipal, cuya planta baja tiene una sala que es usada de peluquer?a para los m?s mayores en una de esas reinvenciones de la Espa?a vaciada para sobrevivir.
Fertilizantes
Los nitratos son nutrientes que se encuentran naturalmente en el medioambiente, no tienen color ni sabor y se pueden hallar tanto en el suelo como en las aguas o en las rocas. Son fundamentales para el ciclo de la vida, pero cuando su composici?n se altera por el uso de fertilizantes artificiales o el uso de excrementos de animales -purines- como fertilizantes, muy ricos en nitratos, pueden ser t?xicos y afectar a la salud humana. El principal causante de los nitratos contaminados, seg?n Greenpeace, es la ganader?a (en un 80%), principalmente la porcina, seguido por la agricultura intensiva y los fertilizantes sintéticos. También hay alta incidencia de nitratos potencialmente t?xicos donde no hay un buen tratamiento de los residuos humanos.
En Huerta de la Obispal?a, el municipio colindante a Torrejoncillo, funcionan cuatro macrogranjas de cerdos y dos de ovejas, grandes generadores de purines que se recogen, se trasladan en cisternas y son usados directamente como abono para las vastas zonas de cultivo de cereal de la zona, tanto en Huerta como en Torrejoncillo. De esos campos de secano, en esta época de un color marr?n intenso tras haberse labrado hace poco para la pr?xima campa?a, los nitratos estar?an pasando a los manantiales y pozos de los que se alimenta el pueblo. Nadie, ni en Torrejoncillo ni en ning?n sitio de Espa?a, vigila qué cantidad de purines se echa ni en qué zonas ni cu?nta concentraci?n de nitratos pasan a las tierras de cultivo. Los acuerdos privados son entre el agricultor y el ganadero. “Lo que hacen es convertir los terrenos de cultivo en vertederos”, concluyen los ecologistas.
“Nos est?n envenenando, llevan a?os haciéndolo. Yo llevo veinte a?os sin beber agua del grifo. Los manantiales est?n muy contaminados”, dice Mercedes, concejala del Ayuntamiento pero que dice hablar como vecina. “No le importamos a nadie, aqu? s?lo se preocupan de Madrid y Barcelona; somos el ?ltimo pedo que se tir? Mahoma”, protesta su marido Emilio, que cuenta que, aparte de problemas con el agua, hay malos olores y moscas. “Antes hab?a tres almazaras de aceite, pero ya nadie planta”, lamenta Emilio. “Ya no ves ni p?jaros cuando aqu? esto era una gozada por las ma?anas”, aprecia nost?lgica Mercedes, que apunta también a los otros dos males de la Espa?a vaciada que sufre también su pueblo: los molinos de viento y las placas solares.
“El agua con nitratos es un problema que afecta a toda Espa?a, aunque hay zonas m?s sobrecargadas que otras; el Gobierno de hecho reconoce que es uno de los grandes problemas de las masas de agua de nuestro pa?s”, asegura Luis Ferreirim, responsable de Agricultura y Ganader?a de Greenpeace Espa?a. De acuerdo a los ?ltimos datos disponible, de 2021, la comunidad donde ha habido m?s mediciones iguales o superiores a 50 mg/l ha sido la Comunidad Valenciana (180), seguida de Islas Baleares (174) -seguramente vinculado a que sus instalaciones de gesti?n de residuos no est?n del todo preparadas para absorber tanta poblaci?n en verano-, Castilla La-Mancha (140) y Castilla y Le?n (139).
900 millones de sacrificios al a?o
Los datos no son del todo concluyentes ya que hay comunidades, como Navarra, Murcia o Cantabria, que no reportan ning?n dato. De hecho, solo un 53% de los m?s de 8.100 municipios de Espa?a han reportado mediciones. Pero s? hay una cifra inapelable y preocupante: si en 2016 hab?a un 3,76% de an?lisis que daban por encima del l?mite legal, en 2020 la cifra se eleva al 5%. Tiene que ver con el aumento exponencial de las macrogranjas. Seg?n c?lculos de Greenpeace a través de datos oficiales, ya se sacrifican m?s de 900 millones de animales al a?o en nuestro pa?s: “Eso es una cifra mayor que las personas que hay en la UE; son muchos animales comiendo y cagando”.
En la zona de Banast?s, en Huesca, el agua contaminada es ya un problema endémico y recientemente la Diputaci?n ha realizado obras para enganchar a los municipios de la zona, que se alimentaba de los embalses subterr?neos, a la red de agua de Huesca. “En Arag?n ha crecido mucho la caba?a ganadera; hay ya nueve millones de cerdos censados”, dice Luis Ferreirim. En Castej?n de Alarba, en el ?rea de Daroca, los l?mites se han rebasado hasta siete veces y en uno de los an?lisis se lleg? a tener 295 mg/l. En Montamarta, un peque?o pueblo de Zamora, se declar? no apto el consumo hace unas semanas, por el también alto nivel de nitratos. "Parece que ya en el ?ltimo an?lisis estamos por debajo del l?mite, estamos esperando al laboratorio", explica Gregorio ?lvarez, el alcalde.
En Castilla y Le?n, con cada vez m?s macrogranjas, comienza a ser un problema muy serio que ha llegado a los tribunales. El pasado verano, por ejemplo, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y Le?n ratific? la legalidad de una macrogranja de 1.999 cerdos en Gumiel de Mercado (Burgos), al lado de las vi?as de Cuevas Jiménez, una bodega de la Denominaci?n de Origen Ribera del Duero. El tribunal entendi? que estaba en suelo r?stico, no necesitaba declaraci?n de impacto ambiental ya que no era de uso industrial -no se realizaba transformaci?n de producto- y pod?a funcionar solo con la licencia municipal.
Lo cierto es que la ley establece un marco general, como que las macrogranjas estén a al menos un kil?metro de distancia de los n?cleos urbanos, pero luego cada comunidad, cada consistorio y la respectiva confederaci?n hidrogr?fica -en el caso de que haya concesi?n de aguas- establece sus requisitos. Seg?n Greenpeace, las comunidades m?s laxas a la hora de imponer exigencias son las dos Castillas, Arag?n y Murcia.
Da?o al turismo
“Nosotros no estamos en contra de las macrogranjas, sino que se instalen donde no hay otra actividad econ?mica”, explica el director José Zapatero, director de la Bodega Cuevas, que junto con otras bodegas de la D.O. planean crear una plataforma para defenderse de la 'invasi?n' de estas megainstalaciones ganaderas. Y no es solo por el miedo a que los purines afecten a la calidad de los acu?feros, sino por los malos olores que se generan y que ahuyentan el turismo, algo que ocurre en otras zonas de Espa?a. “Ten?a pensado hacer un mirador muy chulo dentro de las rutas de enoturismo en una zona donde se ven muy los vi?edos y dos sierras pero, ?c?mo vas a llevar all? a la gente con lo mal que huele?”, se pregunta Zapatero, que recuerda que las macrogranjas no fijan poblaci?n, porque apenas generan empleo [con dos personas se puede llevar una].
La victoria de Bailén
En algunos casos, los movimientos vecinales han logrado parar las instalaciones, como en Bailén, donde una asociaci?n vigil? cada movimiento administrativo hasta el final para tratar de evitar los malos olores y la posible contaminaci?n a los olivos, principal industria de la zona tras reventar la burbuja del ladrillo. Rara vez es un problema que afecte a grandes ciudades. “Santiago de Compostela s? tuvo un problema puntual por vertido de purines, pero no es com?n. Estas actividades est?n en el campo, en la Espa?a vaciada, donde no hay un rechazo social tan grande para hacer resistencia”, afirma el responsable de Greenpeace, que pide a las administraciones una moratoria de nuevas licencias de ganader?a intensiva tanto de nueva instalaci?n como de ampliaciones. La Confederaci?n Hidrogr?fica del Ebro, por ejemplo, ha sido pionera al prohibir nuevas instalaciones en las zonas con alta concentraci?n de nitratos.
“En el pasado las administraciones han tenido una gran permisividad”, critica Ferreirim, que recuerda que la Comisi?n Europea ha advertido a Espa?a varias veces por esta alta concentraci?n de nitratos. La contaminaci?n del agua de consumo humano es el principal problema de los purines que generan las macrogranjas, pero las balsas de purines también son grandes generadoras de metano, que es uno de los grandes causantes del efecto invernadero, y de amoniaco. Adem?s, a gran cantidad de agua que requiere cada una de estas macrogranjas también supone un quebradero de cabeza en época de sequ?a.
En Torrejoncillo, tal como adelant? EL PERI?DICO DE ESPA?A (https://www.epe.es/es/reportajes/20231022/municipios-agua-no-apta-consumo-humano-contaminacion-nitratos-93541618), del grupo Prensa Ibérica, el Consistorio también emprendi? una batalla legal -que ha ganado- contra la ?ltima macrogranja que se mont?, de 7.200 cerdos. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha anul? el permiso ambiental de la Junta porque no se tuvo en cuenta la gran acumulaci?n de instalaciones ganaderas en la zona que suman decenas de miles de cabezas de ganado. “Ahora toca esperar a ver si se presentan recursos”, asegura la alcaldesa, aunque est? claro, dice, “que hay que tener m?s control sobre los vertidos de purines”. "La sentencia no va a servir de nada, ?van a cerrar? No lo creo", pronostica Mercedes.
En el pueblo, aun as?, hay quien defiende las macrogranjas, como Angelines, que lleva la ?nica tienda de alimentaci?n, y rezonga cuando le preguntamos si vende m?s agua desde que sali? el bando. “Vendo la misma”, afirma cortante. A la izquierda del mostrador de la entrada, sin embargo, se acumulan una veintena de garrafas grandes. “?Si a la Espa?a vaciada, la despoblada, le quitas la ganader?a y la agricultura, qué le queda? Yo, por ejemplo, tendr?a que cerrar. Esto del agua no viene de hoy. El agua lleva estando as? muchos a?os; mucha gente sigue bebiéndola, tiene aparatos en casa”, suelta la comerciante, a la que dan la raz?n los clientes, entre ellos ?ngel, de 83 a?os, el exalcalde, que al preguntarle pone cara de ‘no me metas en este marr?n’ tras a?os con el tema encima de su mesa de Alcald?a. “Mira, yo nunca bebo agua. Nunca. Si es que no es buena. T? echas una mosca a un vaso de agua y se muere; y la echas a uno de vino y sobrevive. Pues eso, que no es buena”, sonr?e p?caro.
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