الريــم
09-27-2023, 10:40 PM
Los objetos cotidianos cuentan la historia de quienes los usan. Unos cestos de esparto del yacimiento de la Cueva de los Murciélagos de Albu?ol (Granada), que se han revelado como los m?s antiguos del sur de Europa, desvelan una complejidad no esperada en las sociedades de los ?ltimos cazadores-recolectores del Mesol?tico en Espa?a.
Ese conjunto de cester?a, en gran estado de conservaci?n y que se conserva en el Museo Arqueol?gico Nacional (MAN), ha sido sometido junto a otras piezas, a un nuevo proceso de dataci?n con técnicas actuales, que lo sit?an en 9.500 a?os antes del presente, unos 2.000 a?os antes de lo que se cre?a y de que la agricultura llegara a la pen?nsula ibérica.
Unos datos que “abren un poco la ventana hacia una nueva visi?n” de las ?ltimas sociedades de cazadores-recolectores, que eran “much?simo m?s complejas a nivel tecnol?gico, social y de rituales funerarios de lo que se pensaba”, dice a Efe, el autor principal del estudio, Francisco Mart?nez Sevilla, de la Universidad de Alcal? (Madrid).
La investigaci?n que publica Science Advances ha vuelto a analizar parte de un conjunto de objetos hechos con materiales org?nicos, cestos y sandalias, as? como dos utensilios de madera, depositados en el MAN y en el Museo Arqueol?gico y Etnogr?fico de Granada.
Hallados en la década del 1860, en el emplazamiento funerario prehist?rico de la Cueva de los Murciélagos, todos ellos fueron catalogados, en los a?os noventa del siglo XX, como neol?ticos.
Cestos decorados
El resultado del nuevo an?lisis sorprendi? al equipo, reconoce Mart?nez Sevilla, pues tres de los cestillos de esparto son del Mesol?tico (9.500 a?os) y el resto de piezas del Neol?tico Antiguo y Medio (7.200 y 56.000 a?os antes del presente), entre ambas dataciones existe un vac?o de objetos.
Los utensilios m?s antiguos fueron usados por cazadores-recolectores del Mesol?tico y los m?s recientes por los agricultores del Neol?tico, entre estos ?ltimos hay -agrega Mart?nez- sandalias de ni?os que son “espectaculares”.
Tanto o m?s, lo son los tres cestos, de entre 10 y 15 cent?metros, datados ahora en el Mesol?tico, los m?s antiguos y curiosamente los mejor conservados, tanto que en algunas partes se aprecian, a simple vista, decoraciones geométricas de varios colores, indica la conservadora del MAN, Ruth Maicas.
Esos tres cestos est?n expuestos en el MAN junto a otros tres que, por la técnica y caracter?sticas, se piensa que son de la misma época, agrega.
El equipo, formado por expertos de las universidades Aut?noma de Barcelona, de Cantabria, C?rdoba, Granada, Las Palmas de Gran Canaria, Salamanca, as? como del MAN, el CSIC y la Universidad de Durham (Reino Unido), estudi? 76 utensilios de ambos museos y estableci? 14 nuevas dataciones.
Ajuares de enterramientos
Todos los objetos forman parte de los ajuares que estas sociedades, tanto mesol?ticas como neol?ticas, hab?an dejado a los difuntos en la Cueva de los Murciélagos.
Dentro de alguno de los cestillos m?s antiguos se han hallado restos de cabello, “lo que nos hace pensar que formaban parte de un ritual funerario complejo que no podemos llegar a entender”, dice Mart?nez.
A un fallecido se le cort? el pelo para meterlo en el cestillo o los familiares cortaron el suyo para dejarlo como ofrenda. Es algo -agrega- que habla de la complejidad de los rituales funerarios de las sociedades de cazadores-recolectores de principios del Holoceno.
El equipo est? haciendo an?lisis de ADN de esos cabellos y también de paleoprote?mica para saber si en los cestos hay restos de alg?n elemento org?nico, como grasa de animal, para intentar establecer su uso.
La elaboraci?n de las piezas apunta también a la complejidad de la tecnolog?a. Las del Mesol?tico est?n hechas con una sola técnica y usan el esparto en bruto, aunque s? procesaron las fibras para colorearlas, aunque a?n no se sabe c?mo.
Sandalias infantiles
Los objetos del neol?tico, por su parte, se fabricaron con tres tipos de técnicas y aparece esparto procesado, dice Mart?nez, quien hace especial menci?n a las sandalias (6.000 a?os antes del presente), hechas con nudos y un n?cleo central de esparto o mediante una espiral cosida.
Adem?s de su buena conservaci?n, llama la atenci?n que todas pertenecen a individuos infantiles, “como de un 28 de pie”, y casi todas ser?an de enterramientos de ni?os, pero adem?s las habr?an usado en vida porque est?n desgastadas.
Mart?nez destaca que todo este conjunto de piezas es el mejor conservado hecho con materiales org?nicos en Eurasia y han realizado un estudio geol?gico de la Cueva para entender ese factor.
En la cueva, hay una sequedad extrema y no existe circulaci?n de agua, lo que unido al tipo de proceso de circulaci?n de aire, “muy probablemente ha favorecido que no aparezcan bacterias y se conserven los materiales”.
El Mesol?tico es un periodo del que se tiene poca informaci?n y la materia org?nica se conserva “muy dif?cilmente”, de ah? -dice Maicas- la importancia de estos cestos, que "permiten ver una tecnolog?a muy cuidada, con un cierto criterio estético” y que reconstruyen una parte muy importante de su conjunto de ?tiles diarios.
Estos utensilios, concluye Mart?nez Sevilla revelan que aquellas sociedades de cazadores-recolectores ten?an cestos, bolsas y otros objetos que usaban en su vida cotidiana, para recolectar alimentos o para cargar con sus enseres.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/encuentran-granada-cestos-antiguos-sur-92637382)
Ese conjunto de cester?a, en gran estado de conservaci?n y que se conserva en el Museo Arqueol?gico Nacional (MAN), ha sido sometido junto a otras piezas, a un nuevo proceso de dataci?n con técnicas actuales, que lo sit?an en 9.500 a?os antes del presente, unos 2.000 a?os antes de lo que se cre?a y de que la agricultura llegara a la pen?nsula ibérica.
Unos datos que “abren un poco la ventana hacia una nueva visi?n” de las ?ltimas sociedades de cazadores-recolectores, que eran “much?simo m?s complejas a nivel tecnol?gico, social y de rituales funerarios de lo que se pensaba”, dice a Efe, el autor principal del estudio, Francisco Mart?nez Sevilla, de la Universidad de Alcal? (Madrid).
La investigaci?n que publica Science Advances ha vuelto a analizar parte de un conjunto de objetos hechos con materiales org?nicos, cestos y sandalias, as? como dos utensilios de madera, depositados en el MAN y en el Museo Arqueol?gico y Etnogr?fico de Granada.
Hallados en la década del 1860, en el emplazamiento funerario prehist?rico de la Cueva de los Murciélagos, todos ellos fueron catalogados, en los a?os noventa del siglo XX, como neol?ticos.
Cestos decorados
El resultado del nuevo an?lisis sorprendi? al equipo, reconoce Mart?nez Sevilla, pues tres de los cestillos de esparto son del Mesol?tico (9.500 a?os) y el resto de piezas del Neol?tico Antiguo y Medio (7.200 y 56.000 a?os antes del presente), entre ambas dataciones existe un vac?o de objetos.
Los utensilios m?s antiguos fueron usados por cazadores-recolectores del Mesol?tico y los m?s recientes por los agricultores del Neol?tico, entre estos ?ltimos hay -agrega Mart?nez- sandalias de ni?os que son “espectaculares”.
Tanto o m?s, lo son los tres cestos, de entre 10 y 15 cent?metros, datados ahora en el Mesol?tico, los m?s antiguos y curiosamente los mejor conservados, tanto que en algunas partes se aprecian, a simple vista, decoraciones geométricas de varios colores, indica la conservadora del MAN, Ruth Maicas.
Esos tres cestos est?n expuestos en el MAN junto a otros tres que, por la técnica y caracter?sticas, se piensa que son de la misma época, agrega.
El equipo, formado por expertos de las universidades Aut?noma de Barcelona, de Cantabria, C?rdoba, Granada, Las Palmas de Gran Canaria, Salamanca, as? como del MAN, el CSIC y la Universidad de Durham (Reino Unido), estudi? 76 utensilios de ambos museos y estableci? 14 nuevas dataciones.
Ajuares de enterramientos
Todos los objetos forman parte de los ajuares que estas sociedades, tanto mesol?ticas como neol?ticas, hab?an dejado a los difuntos en la Cueva de los Murciélagos.
Dentro de alguno de los cestillos m?s antiguos se han hallado restos de cabello, “lo que nos hace pensar que formaban parte de un ritual funerario complejo que no podemos llegar a entender”, dice Mart?nez.
A un fallecido se le cort? el pelo para meterlo en el cestillo o los familiares cortaron el suyo para dejarlo como ofrenda. Es algo -agrega- que habla de la complejidad de los rituales funerarios de las sociedades de cazadores-recolectores de principios del Holoceno.
El equipo est? haciendo an?lisis de ADN de esos cabellos y también de paleoprote?mica para saber si en los cestos hay restos de alg?n elemento org?nico, como grasa de animal, para intentar establecer su uso.
La elaboraci?n de las piezas apunta también a la complejidad de la tecnolog?a. Las del Mesol?tico est?n hechas con una sola técnica y usan el esparto en bruto, aunque s? procesaron las fibras para colorearlas, aunque a?n no se sabe c?mo.
Sandalias infantiles
Los objetos del neol?tico, por su parte, se fabricaron con tres tipos de técnicas y aparece esparto procesado, dice Mart?nez, quien hace especial menci?n a las sandalias (6.000 a?os antes del presente), hechas con nudos y un n?cleo central de esparto o mediante una espiral cosida.
Adem?s de su buena conservaci?n, llama la atenci?n que todas pertenecen a individuos infantiles, “como de un 28 de pie”, y casi todas ser?an de enterramientos de ni?os, pero adem?s las habr?an usado en vida porque est?n desgastadas.
Mart?nez destaca que todo este conjunto de piezas es el mejor conservado hecho con materiales org?nicos en Eurasia y han realizado un estudio geol?gico de la Cueva para entender ese factor.
En la cueva, hay una sequedad extrema y no existe circulaci?n de agua, lo que unido al tipo de proceso de circulaci?n de aire, “muy probablemente ha favorecido que no aparezcan bacterias y se conserven los materiales”.
El Mesol?tico es un periodo del que se tiene poca informaci?n y la materia org?nica se conserva “muy dif?cilmente”, de ah? -dice Maicas- la importancia de estos cestos, que "permiten ver una tecnolog?a muy cuidada, con un cierto criterio estético” y que reconstruyen una parte muy importante de su conjunto de ?tiles diarios.
Estos utensilios, concluye Mart?nez Sevilla revelan que aquellas sociedades de cazadores-recolectores ten?an cestos, bolsas y otros objetos que usaban en su vida cotidiana, para recolectar alimentos o para cargar con sus enseres.
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