الريــم
09-17-2023, 04:30 PM
Es falso, es mentira, es una auténtica patra?a, eso de que cuando alguien fallece hay que sentir pena por él. ?Y una mierda! Hay que sentir pena por los que nos quedamos sin ?L, s?, con may?sculas. Hay que sentir dolor por los que seguimos en este mundo, no por el que se va.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
En este caso, en el caso del*monstruo Pepe Domingo Casta?o, también es una falacia eso de que*LA RADIO, s?, también con letras enormes, pues es el medio del instante, del momento, de la rapidez y la fluidez, de o?rla sin m?s, pierda a un gran profesional, a un genio, a uno de esos que salen dos cada 50 a?os.
Y es una falacia lamentarse por LA RADIO, porque las ondas sobrevivir?n de una u otra manera, lo que no est? claro es c?mo sobreviviremos los amigos de Pepe. Ese es el mayor problema que plantea, de pronto, la muerte de un amigo, pero de un amigo de verdad. Insisto, no sé lo que pierde la radio, ni siquiera sé lo que pierde la publicidad que se invent? Pepe, la manera de comunicar que ide? Pepe, lo que s? sé es lo que perdemos los amigos. Ese s? es un vac?o irremplazable.
Pepe puede ser visto como gallego, como gallego enorme, que chuleaba de ser gallego. ?Co?o! del mismo Padr?n, donde recientemente ?qué bien que pudo disfrutarlo! le pusieron una plaza. “No, no, yo no quiero una calle, si queréis ponerle nombre a algo, ponérselo a la plaza donde jugaba a f?tbol de ni?o”. Y se la pusieron. Ese era el Pepe gallego, ?nico.
El mejor cantante
Pepe puede ser recordado como cantante ?menudo cantante! Pepe fue Disco de Oro, en México, con la canci?n 'Motivos'. Pepe fue cantante, vocalista se dec?a en mi pueblo, de Los Ibéricos y de Blue Sky. Pepe fue ?ntimo amigo de Julio Iglesias, con eso casi lo digo todo. Pero un d?a Pepe descubri? la radio, m?s que el periodismo, y decidi? (1964) irse a Radio Galicia, de la Ser, y empezar la carrera que le convirti? en el n?mero 1 en todo, todo, lo que hizo. “Yo solo canto para los amigos”, dec?a cuando los que sab?an de m?sica, de canto, trataron de impedir que dejase de cantar.
Pepe puede ser, debe ser, recordado como el tipo, el pillo, el listo, el inteligent?simo autor que ide?, que invent?, una manera de hacer publicidad, de difundir la publicidad, de encantar con la publicidad, de lograr que la gente se enganchase a sus anuncios, los disfrutase, los cantase o, como poco, los tararease. Fue un puto genio en esa manera de venderte lo que otros ni siquiera sab?an c?mo vender.
Fue cantante y de los buenos, hasta gan? un Disco de Oro en México, con 'Motivos'
Pepe puede ser recordado como poeta, s?, s?, tal cual, porque lo era ?vaya si lo era! Miren, no es f?cil, hay que ser muy, muy, genio y tener una cabeza privilegiada, como la que ten?a nuestro Pepe, para, mientras los dem?s, el resto, los parlanchines, nos pas?bamos dos horas hablando frente al micr?fono, charlando de mil temas, mantenerse en un rinc?n, casi oculto, del estudio o del escenario donde actu?bamos y, en el momento de concluir y despedir el programa, aparecer él, con su inmensa personalidad, portando dos folios, maravillosamente escritos y recitar un poema en el que se resum?a todo lo que hab?amos comentado en el programa. Piénselo bien, eso es imposible de hacer, si no eras Pepe Domingo Casta?o.
Pepe, s?, pod?a ser todo eso y m?s. Y todo eso y m?s, le permiti? convertirse en un grande de la radio espa?ola, que no es poco porque todo el mundo cuenta que es una de las mejores radios del planeta. Todo eso y m?s le convirti? en un referente para todo, para todo lo bueno. Todo eso y m?s le permiti?, con raz?n, con derecho, ganar hasta cuatro Premios Ondas en 1975, 1996, 2002 y 2005, dijeron que “por su carrera period?stica y su aportaci?n al mundo de la comunicaci?n”. Todos los Ondas son merecidos, pero esos cuatro m?s que ninguno. Pocos nos parecen a los colegas de Pepe.
Pero les he relatado algunas de las cosas por las que Pepe jam?s desaparecer? de nuestros recuerdos para dejarme, al final, lo ?nico por lo que s? a?oraremos a Pepe, lo ?nico por lo que s? vali? la pena conocerlo, lo ?nico por lo que un cuarto de hora con él era media vida de placer para cualquiera: su grandeza como ser humano.
Pepe no era un tipo cualquiera. Si t? eras amigo o, incluso, tal vez, simplemente conocido de Pepe, ten?as en Pepe un ser que te acariciaba con las palabras y que te mostraba su afecto con hechos, con mimos, con regalos que solo Pepe pod?a hacerte. Pepe no provoc? ?jam?s! un malvivir en nadie, Pepe no tuvo jam?s un mal gesto para nadie, Pepe no le dio un disgusto nunca a nadie. Pepe viv?a para ayudar, para hacer feliz a los que ten?a a su alrededor, no importase d?nde fuese, para qué fuese y a la hora que fuese.
Un ser enternecedor
Pepe era lo que pap? denominaba “buena gente”. Ustedes lo saben, no es f?cil ser “buena gente”, no es f?cil. Pepe lo era a kilos, perd?n, a toneladas. Y Pepe era tan buena gente, tanto, que no acababa de creerse o pensaba que no merec?a el cari?o, la devoci?n, la admiraci?n, que el mundo de la radio, que sus amigos, que sus colegas, que la gente de la calle le profesaba. Era tan se?or, tanto, que no cre?a merecer tanto. Y s?, s?, lo merec?a.
Por eso, hace un par de a?os, cuando sufri? un infarto que nos atorment? a todos, LA RADIO empez? a temblar. Por eso, el d?a que regres? a la redacci?n, pues él jam?s se rend?a, sus compa?eros, Deportes de la COPE entero, lo recibi? con todos sus miembros subimos en las mesas, de pie, con una ovaci?n y v?tores interminables. Y all? estaba Pepe, el se?or Domingo Casta?o, pasmado, incrédulo, embobado, con esa cara de zagal que le distingu?a, de p?caro irrepetible, sorprendido de que la gente le tuviese tanto cari?o, semejante fervor. Era, simplemente, veneraci?n.
Pepe era un artista, por eso el aplauso le hac?a grande, inmenso. Dicen que LA RADIO ha perdido mucho con su desaparici?n. Puede ser, no sé tanto de radio como calibrar semejante pérdida. Yo sé de amistad, de cari?o, de tacto, de fidelidad, de complicidad, lo aprend? de ni?o, de joven, de gente como Antonio Franco, de mi hermano Carlos y todos los suyos y, en las ?ltimas décadas, he reforzado esa sensaci?n de sentirte querido, ?til, amigo con los locos de Deportes de la COPE, donde hay varios capitanes, pero solo un almirante: Pepe Domingo Casta?o. ?Se?or, s?, se?or!
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/comunicacion/almirante-pepe-domingo-castano-92197725)
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En este caso, en el caso del*monstruo Pepe Domingo Casta?o, también es una falacia eso de que*LA RADIO, s?, también con letras enormes, pues es el medio del instante, del momento, de la rapidez y la fluidez, de o?rla sin m?s, pierda a un gran profesional, a un genio, a uno de esos que salen dos cada 50 a?os.
Y es una falacia lamentarse por LA RADIO, porque las ondas sobrevivir?n de una u otra manera, lo que no est? claro es c?mo sobreviviremos los amigos de Pepe. Ese es el mayor problema que plantea, de pronto, la muerte de un amigo, pero de un amigo de verdad. Insisto, no sé lo que pierde la radio, ni siquiera sé lo que pierde la publicidad que se invent? Pepe, la manera de comunicar que ide? Pepe, lo que s? sé es lo que perdemos los amigos. Ese s? es un vac?o irremplazable.
Pepe puede ser visto como gallego, como gallego enorme, que chuleaba de ser gallego. ?Co?o! del mismo Padr?n, donde recientemente ?qué bien que pudo disfrutarlo! le pusieron una plaza. “No, no, yo no quiero una calle, si queréis ponerle nombre a algo, ponérselo a la plaza donde jugaba a f?tbol de ni?o”. Y se la pusieron. Ese era el Pepe gallego, ?nico.
El mejor cantante
Pepe puede ser recordado como cantante ?menudo cantante! Pepe fue Disco de Oro, en México, con la canci?n 'Motivos'. Pepe fue cantante, vocalista se dec?a en mi pueblo, de Los Ibéricos y de Blue Sky. Pepe fue ?ntimo amigo de Julio Iglesias, con eso casi lo digo todo. Pero un d?a Pepe descubri? la radio, m?s que el periodismo, y decidi? (1964) irse a Radio Galicia, de la Ser, y empezar la carrera que le convirti? en el n?mero 1 en todo, todo, lo que hizo. “Yo solo canto para los amigos”, dec?a cuando los que sab?an de m?sica, de canto, trataron de impedir que dejase de cantar.
Pepe puede ser, debe ser, recordado como el tipo, el pillo, el listo, el inteligent?simo autor que ide?, que invent?, una manera de hacer publicidad, de difundir la publicidad, de encantar con la publicidad, de lograr que la gente se enganchase a sus anuncios, los disfrutase, los cantase o, como poco, los tararease. Fue un puto genio en esa manera de venderte lo que otros ni siquiera sab?an c?mo vender.
Fue cantante y de los buenos, hasta gan? un Disco de Oro en México, con 'Motivos'
Pepe puede ser recordado como poeta, s?, s?, tal cual, porque lo era ?vaya si lo era! Miren, no es f?cil, hay que ser muy, muy, genio y tener una cabeza privilegiada, como la que ten?a nuestro Pepe, para, mientras los dem?s, el resto, los parlanchines, nos pas?bamos dos horas hablando frente al micr?fono, charlando de mil temas, mantenerse en un rinc?n, casi oculto, del estudio o del escenario donde actu?bamos y, en el momento de concluir y despedir el programa, aparecer él, con su inmensa personalidad, portando dos folios, maravillosamente escritos y recitar un poema en el que se resum?a todo lo que hab?amos comentado en el programa. Piénselo bien, eso es imposible de hacer, si no eras Pepe Domingo Casta?o.
Pepe, s?, pod?a ser todo eso y m?s. Y todo eso y m?s, le permiti? convertirse en un grande de la radio espa?ola, que no es poco porque todo el mundo cuenta que es una de las mejores radios del planeta. Todo eso y m?s le convirti? en un referente para todo, para todo lo bueno. Todo eso y m?s le permiti?, con raz?n, con derecho, ganar hasta cuatro Premios Ondas en 1975, 1996, 2002 y 2005, dijeron que “por su carrera period?stica y su aportaci?n al mundo de la comunicaci?n”. Todos los Ondas son merecidos, pero esos cuatro m?s que ninguno. Pocos nos parecen a los colegas de Pepe.
Pero les he relatado algunas de las cosas por las que Pepe jam?s desaparecer? de nuestros recuerdos para dejarme, al final, lo ?nico por lo que s? a?oraremos a Pepe, lo ?nico por lo que s? vali? la pena conocerlo, lo ?nico por lo que un cuarto de hora con él era media vida de placer para cualquiera: su grandeza como ser humano.
Pepe no era un tipo cualquiera. Si t? eras amigo o, incluso, tal vez, simplemente conocido de Pepe, ten?as en Pepe un ser que te acariciaba con las palabras y que te mostraba su afecto con hechos, con mimos, con regalos que solo Pepe pod?a hacerte. Pepe no provoc? ?jam?s! un malvivir en nadie, Pepe no tuvo jam?s un mal gesto para nadie, Pepe no le dio un disgusto nunca a nadie. Pepe viv?a para ayudar, para hacer feliz a los que ten?a a su alrededor, no importase d?nde fuese, para qué fuese y a la hora que fuese.
Un ser enternecedor
Pepe era lo que pap? denominaba “buena gente”. Ustedes lo saben, no es f?cil ser “buena gente”, no es f?cil. Pepe lo era a kilos, perd?n, a toneladas. Y Pepe era tan buena gente, tanto, que no acababa de creerse o pensaba que no merec?a el cari?o, la devoci?n, la admiraci?n, que el mundo de la radio, que sus amigos, que sus colegas, que la gente de la calle le profesaba. Era tan se?or, tanto, que no cre?a merecer tanto. Y s?, s?, lo merec?a.
Por eso, hace un par de a?os, cuando sufri? un infarto que nos atorment? a todos, LA RADIO empez? a temblar. Por eso, el d?a que regres? a la redacci?n, pues él jam?s se rend?a, sus compa?eros, Deportes de la COPE entero, lo recibi? con todos sus miembros subimos en las mesas, de pie, con una ovaci?n y v?tores interminables. Y all? estaba Pepe, el se?or Domingo Casta?o, pasmado, incrédulo, embobado, con esa cara de zagal que le distingu?a, de p?caro irrepetible, sorprendido de que la gente le tuviese tanto cari?o, semejante fervor. Era, simplemente, veneraci?n.
Pepe era un artista, por eso el aplauso le hac?a grande, inmenso. Dicen que LA RADIO ha perdido mucho con su desaparici?n. Puede ser, no sé tanto de radio como calibrar semejante pérdida. Yo sé de amistad, de cari?o, de tacto, de fidelidad, de complicidad, lo aprend? de ni?o, de joven, de gente como Antonio Franco, de mi hermano Carlos y todos los suyos y, en las ?ltimas décadas, he reforzado esa sensaci?n de sentirte querido, ?til, amigo con los locos de Deportes de la COPE, donde hay varios capitanes, pero solo un almirante: Pepe Domingo Casta?o. ?Se?or, s?, se?or!
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