الريــم
08-06-2023, 03:50 AM
"Lo he pasado muy mal pero es lo que ten?a que hacer... salvar a mis cabras. Estuve solo ante el pelgro", cuenta Antonio Rodr?guez, el pastor que hace m?s de 20 a?os pastura un reba?o de 150 cabras en las monta?as de los alrededores de Portbou y Colera. Su caba?a est? a 400 metros de la zona cero del incendio forestal que ya ha quemado casi 600 hect?reas de bosque. La acci?n de sus cabras ha podido frenar buena parte de la expansi?n del fuego, han reconocido los Bombers de la Generalitat. Sin embargo, para salvar a su ganado, pas? la noche entre las llamas en medio de la monta?a. Esta es la historia del pastor de Portbou, el héroe del incendio que, sin embargo, quiere dejar de serlo.
Todo empez? a las 15.30 horas de la tarde del viernes en Portbou. Una zona que el pastor denomina 'Las Ramblas', cerca del pantano de Portbou, que cuando empieza a caer el sol se llena de paseantes. "A ver, no es la zona m?s sucia de la monta?a pero limpia no est?, hay pl?sticos y latas de aluminio", explica Rodr?guez. El fuego le sorprendi? pastoreando muy cerca, y empez? a llevar a su ganado en direcci?n norte, hacia una zona que ya quem? en abril. "Pero a medida que fui subiendo pensé, aqu? me puedo quedar solo y aislado por las llamas". Volvi? a bajar.
Entre idas y venidas, lleg? al corral de su ganado a las 19.30 horas de la tarde. "Yo pensaba que acabar?an r?pido y podr?a irme para casa", cuenta Rodr?guez. Pero no pas?. La Tramuntana, el viento del Empordà, empez? a soplar con rachas que superaron los 120 kil?metros por hora. "Hubo gente que me dijo que me quedara, otros que me fuera... yo pensé 'mejor me quedo aqu? con mis cabras porque si no se morir?n o me sentiré culpable toda la noche pensando en que las dejé morir'. Esto solo lo entiendo un pastor", sigue el hombre.
Solo ante el peligro
Durante la noche, las llamaradas de fuego le acecharon. "Lo peor fue ver como iban llegando camiones de los Bombers y nadie me ayudaba a remojar", se queja. El hombre, con el agua que conservava en el cerrado de los animales, iba remojando la zona. "Las llamas se me echaron encima, estaba solo ante el peligro", insiste. S? es cierto que los Bombers pasaron a remojar su corral a medianoche, pero su zona no era de alto riesgo y de madrugada hab?a otras prioridades, los pueblos costeros estaban acechados por las llamas. "Quiz? lo que hice fue una temeridad, no lo sé... pero no quise dejarlas morir, no me lo podr?a perdonar", reconoce el pastor.
A través del m?vil, Rodr?guez iba pidiendo ayuda para mover al ganado, sin éxito. Los v?deos que grab? son estremecedores. Se ve como las llamas quedan a escasos metros del ganado. A medianoche, reconoce que pens? en abandonar. "Pero me di cuenta que el fuego me hab?a reventado una rueda del coche. Intenté poner la de recambio pero con el calor también estaba desinchada. No pod?a salir... No sé como sobreviv?, pero lo hice", explica. A?n recuerda el humo, aupado por el mont?n de estiércol que también prendi?. Rodr?guez cuenta que se durmi? de madrugada mirando el fuego apoyando la cabeza en la rueda pinchada. "Estaba exhausto, dorm? tres horas, me despert? el calor de una llamarada".
Pastores contra el fuego
La fundaci?n Pau Costa, que lucha junto a pastores para prevenir el riesgo de incendio, colabora desde hace a?os con Rodr?guez en Portbou a través del proyecto Ramats de Foc. Hoy, su coordinador, Marc Arcarons, se ha desplazado hasta el incendio en el Alt Empordà para ayudar a su pastor. "A él lo hemos visto destrozado. Ha sido dur?simo... Ha estado en el infierno", relata Arcarons, que esta ma?ana, ha ido a visitarle y traerle alfalfa para que las cabras pudieran comer algo durante el d?a.
https://uc-4u.com/clip/8af036f9-5639-412b-858b-1a8ccaeb59eb_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Pastores en la zona del incendio de Portbou. | ELISENDA COLELL
"En diciembre dejo el ganado"
La realidad es que a Rodr?guez la pastura no le sale a cuenta. Necesita otro empleo. "Lo de hoy ha colmado el vaso, en diciembre dejo el ganado", explica. Arcarons ya est? busc?ndole sustituto. Esta zona de la Costa Brava es de alto riesgo de incendios y no se puede permitir la pérdida de un pastor como él. "Es imposible ganarte la vida con esto, estamos abandonados por todos y valorados por nadie", se queja Rodr?guez. "La ganader?a extensiva no es suficientemente productiva a nivel econ?mico, pero su funci?n en la extinci?n de incendios es de vital importancia para la seguridad ciudadana", incide Arcarons. El sector est? pendiente de una subvenci?n de la Generalitat para ayudar a los pastores que ayudan a la extinci?n de incendios. "Esperemos que lleguemos a tiempo", suspira Arcarons.
Arcarons lo explica desde Colera, el pueblo que desde la noche del viernes vive confinado. Este s?bado los bosques de alrededor del pueblo eran pura ceniza. Los vecinos, ya m?s tranquilos, ocupan las terrazas de los bares e incluso se ba?an en la playa. A las tres de la tarde, los Bombers pasan por la plaza y se retiran. Su labor, en los alrededores de Colera, es la de mantener el suelo hidratado para que no vuelva a reavivar el fuego. Los vecinos les aplauden. "Ellos han sido nuestro milagro, a las cuatro de la madrugada esto era el infierno, hoy ya vemos el cielo", dice Pilar, una vecina.
Estos efectivos vienen de Manresa, L'Hospitalet de l'Infant y Falset. "S?, hoy esto ya tiene m?s buena pinta. Si hay humor... es que es buena se?al", bromean mientras hacen un descanso para comer. A la misma hora, Rodr?guez cruza la carretera, rodeada por ?rboles quemados. El pastor va de Portbou, sin apenas dormir, hacia Roses, donde tiene el otro trabajo que le permite vivir para mantener la pastura del ganado. En su marcha, sin embargo, no hay aplausos ni agradecimientos.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/pastor-paso-noche-zona-cero-90698007)
Todo empez? a las 15.30 horas de la tarde del viernes en Portbou. Una zona que el pastor denomina 'Las Ramblas', cerca del pantano de Portbou, que cuando empieza a caer el sol se llena de paseantes. "A ver, no es la zona m?s sucia de la monta?a pero limpia no est?, hay pl?sticos y latas de aluminio", explica Rodr?guez. El fuego le sorprendi? pastoreando muy cerca, y empez? a llevar a su ganado en direcci?n norte, hacia una zona que ya quem? en abril. "Pero a medida que fui subiendo pensé, aqu? me puedo quedar solo y aislado por las llamas". Volvi? a bajar.
Entre idas y venidas, lleg? al corral de su ganado a las 19.30 horas de la tarde. "Yo pensaba que acabar?an r?pido y podr?a irme para casa", cuenta Rodr?guez. Pero no pas?. La Tramuntana, el viento del Empordà, empez? a soplar con rachas que superaron los 120 kil?metros por hora. "Hubo gente que me dijo que me quedara, otros que me fuera... yo pensé 'mejor me quedo aqu? con mis cabras porque si no se morir?n o me sentiré culpable toda la noche pensando en que las dejé morir'. Esto solo lo entiendo un pastor", sigue el hombre.
Solo ante el peligro
Durante la noche, las llamaradas de fuego le acecharon. "Lo peor fue ver como iban llegando camiones de los Bombers y nadie me ayudaba a remojar", se queja. El hombre, con el agua que conservava en el cerrado de los animales, iba remojando la zona. "Las llamas se me echaron encima, estaba solo ante el peligro", insiste. S? es cierto que los Bombers pasaron a remojar su corral a medianoche, pero su zona no era de alto riesgo y de madrugada hab?a otras prioridades, los pueblos costeros estaban acechados por las llamas. "Quiz? lo que hice fue una temeridad, no lo sé... pero no quise dejarlas morir, no me lo podr?a perdonar", reconoce el pastor.
A través del m?vil, Rodr?guez iba pidiendo ayuda para mover al ganado, sin éxito. Los v?deos que grab? son estremecedores. Se ve como las llamas quedan a escasos metros del ganado. A medianoche, reconoce que pens? en abandonar. "Pero me di cuenta que el fuego me hab?a reventado una rueda del coche. Intenté poner la de recambio pero con el calor también estaba desinchada. No pod?a salir... No sé como sobreviv?, pero lo hice", explica. A?n recuerda el humo, aupado por el mont?n de estiércol que también prendi?. Rodr?guez cuenta que se durmi? de madrugada mirando el fuego apoyando la cabeza en la rueda pinchada. "Estaba exhausto, dorm? tres horas, me despert? el calor de una llamarada".
Pastores contra el fuego
La fundaci?n Pau Costa, que lucha junto a pastores para prevenir el riesgo de incendio, colabora desde hace a?os con Rodr?guez en Portbou a través del proyecto Ramats de Foc. Hoy, su coordinador, Marc Arcarons, se ha desplazado hasta el incendio en el Alt Empordà para ayudar a su pastor. "A él lo hemos visto destrozado. Ha sido dur?simo... Ha estado en el infierno", relata Arcarons, que esta ma?ana, ha ido a visitarle y traerle alfalfa para que las cabras pudieran comer algo durante el d?a.
https://uc-4u.com/clip/8af036f9-5639-412b-858b-1a8ccaeb59eb_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Pastores en la zona del incendio de Portbou. | ELISENDA COLELL
"En diciembre dejo el ganado"
La realidad es que a Rodr?guez la pastura no le sale a cuenta. Necesita otro empleo. "Lo de hoy ha colmado el vaso, en diciembre dejo el ganado", explica. Arcarons ya est? busc?ndole sustituto. Esta zona de la Costa Brava es de alto riesgo de incendios y no se puede permitir la pérdida de un pastor como él. "Es imposible ganarte la vida con esto, estamos abandonados por todos y valorados por nadie", se queja Rodr?guez. "La ganader?a extensiva no es suficientemente productiva a nivel econ?mico, pero su funci?n en la extinci?n de incendios es de vital importancia para la seguridad ciudadana", incide Arcarons. El sector est? pendiente de una subvenci?n de la Generalitat para ayudar a los pastores que ayudan a la extinci?n de incendios. "Esperemos que lleguemos a tiempo", suspira Arcarons.
Arcarons lo explica desde Colera, el pueblo que desde la noche del viernes vive confinado. Este s?bado los bosques de alrededor del pueblo eran pura ceniza. Los vecinos, ya m?s tranquilos, ocupan las terrazas de los bares e incluso se ba?an en la playa. A las tres de la tarde, los Bombers pasan por la plaza y se retiran. Su labor, en los alrededores de Colera, es la de mantener el suelo hidratado para que no vuelva a reavivar el fuego. Los vecinos les aplauden. "Ellos han sido nuestro milagro, a las cuatro de la madrugada esto era el infierno, hoy ya vemos el cielo", dice Pilar, una vecina.
Estos efectivos vienen de Manresa, L'Hospitalet de l'Infant y Falset. "S?, hoy esto ya tiene m?s buena pinta. Si hay humor... es que es buena se?al", bromean mientras hacen un descanso para comer. A la misma hora, Rodr?guez cruza la carretera, rodeada por ?rboles quemados. El pastor va de Portbou, sin apenas dormir, hacia Roses, donde tiene el otro trabajo que le permite vivir para mantener la pastura del ganado. En su marcha, sin embargo, no hay aplausos ni agradecimientos.
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