الريــم
07-08-2023, 11:10 AM
Vox hace ostentaci?n en esta campa?a electoral de su desaf?o a la 'agenda verde' europea. Tras los movimientos negacionistas cada vez menos subterr?neos y m?s visibles en contra de las pol?ticas medioambientales y de la transici?n ecol?gica (https://www.epe.es/es/andalucia/20230708/brecha-cuela-vox-dispara-siete-89514567) en Espa?a, abanderados por el partido de Santiago Abascal, subyace una realidad sociol?gica: aumenta de forma veloz la percepci?n entre los espa?oles de que es una fuente de conflictos sociales, una amenaza m?s que una oportunidad, y de que las pol?ticas medioambientales se adoptan a espaldas de los ciudadanos y sin consensos previos.
Un escepticismo que crece en las zonas rurales y entre capas de poblaci?n de mayor edad, a partir de los 50 a?os. Es lo que arroja el informe “La percepci?n social sobre la transici?n ecol?gica en Espa?a, 2022-23” realizado por el Observatorio Transici?n Justa, de la consultora Red2Red con apoyo de la Fundaci?n Cepsa, con una diagn?stico que parte de 3.019 entrevistas.
Los datos son especialmente llamativos en el caso de Andaluc?a, donde la muestra de poblaci?n es mayor y un estudio previo permite establecer comparativas en un a?o, de 2021 a 2022. Hay resultados muy relevantes que pueden explicar en gran medida el avance de Vox en el mundo rural y los cambios de posici?n del PP respecto a su agenda ‘verde’. En un a?o, cae levemente el porcentaje de andaluces que cree con total seguridad que el cambio clim?tico existe, disminuye los que consideran que combatirlo debe ser una prioridad, sube el porcentaje de quienes opinan que la transici?n ecol?gica es una amenaza y se eleva el n?mero de andaluces que creen que detr?s hay un grave conflicto social. Una foto fija que, se?ala el Observatorio, deber?a encender alarmas rojas.
Retrocesos en la UE
La amenaza de un retroceso en las pol?ticas medioambientales y contra el cambio clim?tico se alimenta de las posiciones negacionistas de los partidos de la extrema derecha en Europa pero también arrastra a los conservadores m?s moderados a posiciones cada vez menos comprometidas. En el Parlamento europeo el rechazo a la ley de restauraci?n de la naturaleza ha exhibido la falta de consenso. En Espa?a las alianzas de PP y Vox en varias comunidades han situado al partido de Santiago Abascal, el ?nico abiertamente negacionista del cambio clim?tico en Espa?a, en las consejer?as de agricultura o gesti?n forestal, como ha ocurrido en Castilla y Le?n, la Comunidad Valenciana o Extremadura. La guerra por la tuberculosis bovina en Castilla y Le?n arroj? le?a a este fuego.
En Andaluc?a, la proposici?n de ley de Do?ana, que impulsan PP y Vox en el Parlamento andaluz, es otro ejemplo claro de un viraje de las posiciones m?s comprometidas de la derecha moderada con las pol?ticas de la agenda 2030 a los postulados negacionistas de la ultraderecha. En los conflictos de la ?ltima legislatura con el consumo de carne, el campo, la caza o la ley de bienestar animal se encuentran muchas respuestas a las tendencias que arroja esta encuesta y al auge de Vox en las zonas rurales.
La guerra del campo
La idea, alimentada con éxito por el partido deAbascal, de que la agricultura, la ganader?a y la pesca est?n amenazadas por las pol?ticas ‘verdes’ europeas, cimentando la idea de una guerra entre el campo y la ecolog?a, tiene un apoyo social relevante. En Espa?a, las preocupaciones medioambientales se relacionan de forma directa con el tama?o del municipio donde se reside. En aquellos menores de 20.000 habitantes las preocupaciones m?s relevantes pasan por la sequ?a, los incendios forestales o la suciedad y la falta de cuidados de los espacios naturales. En las ciudades mayores, la principal preocupaci?n es la contaminaci?n. Entre el pueblo y la gran ciudad, en el dato de preocupaci?n por la sequ?a se abre una brecha de diez puntos porcentuales. La falta de agua preocupa al 14% de quienes viven en grandes n?cleos urbanos pero afecta un 23% en los municipios de menor tama?o.
En Espa?a, la convicci?n de que el cambio clim?tico existe es muy elevada. El 85% asegura que creen que existe con total seguridad mientras que el porcentaje de negacionistas es muy bajo, del 6%. Sin embargo hay tendencias llamativas. Entre 2021 y 2022 se ha producido en la poblaci?n andaluza un peque?o descenso de 2,5 puntos de personas que aseguran la existencia del cambio clim?tico con total seguridad.
Una pol?tica conflictiva
Seg?n el Observatorio, la lucha contra el cambio clim?tico es una prioridad para la mayor?a de la poblaci?n (65%) aunque un notable 35% considera que son m?s importantes otras prioridades. En Andaluc?a se observa una reducci?n de 6 puntos porcentuales entre quienes consideran que es una pol?tica prioritaria. Es m?s importante para los m?s j?venes y baja a partir de los 50 a?os. Adem?s hay diferencias importantes seg?n las regiones de Espa?a. En la poblaci?n del Litoral Mediterr?neo se detecta la mayor proporci?n (cinco puntos por encima de la media) de personas que priorizan la lucha contra el cambio clim?tico (70%); Canarias y Baleares, Cornisa Cant?brica, Madrid y Andaluc?a se sit?a en torno a la media. Llama la atenci?n el hecho de que entre la poblaci?n del centro peninsular, donde engloban Castilla y Le?n, Extremadura y Castilla-La Mancha, la proporci?n de personas que dan prioridad a las pol?ticas de lucha contra el cambio clim?tico desciende al 57%. En este ?rea geogr?fica, un 42% considera que hay otras prioridades m?s importantes.
La transici?n energética es un concepto que m?s de la mitad de la poblaci?n desconoce, un 51% de la poblaci?n o bien no conoce o tiene un concepto muy vago de lo que significa. La encuesta refleja que ese desconocimiento aumenta en aquellas personas sin estudios, con una brecha de hasta 22 puntos respecto a quienes tienen estudios superiores. Los territorios donde menos se conoce qué significa la transici?n ecol?gica son Andaluc?a y de nuevo el centro peninsular (41% y 43%, respectivamente, siete y cinco puntos por debajo de la media).
Una visi?n negativa
En Andaluc?a se registra también un aumento en la proporci?n de personas que consideran que el proceso de transici?n ecol?gica y energética podr?a afectar de manera negativa o muy negativa en su entorno. Un dato que sube siete puntos porcentuales. El cambio genera emociones negativas como impotencia e indignaci?n en el mundo rural, mientras que en el mundo urbano hay sensaciones m?s positivas como esperanza, interés o confianza. Los resultados de la encuesta de 2022 revelan que en general lo que m?s crecen son las sensaciones negativas y especialmente en Andaluc?a se observa un significativo descenso en la proporci?n de quienes valoran el proceso de transici?n ecol?gica como una oportunidad, tanto a corto (cae siete puntos) como a largo plazo (baja nueve puntos). Por ejemplo, la proporci?n de andaluces que considera en el ?ltimo a?o que su empleo est? en peligro debido al proceso de transici?n ecol?gica ha crecido en dos puntos.
El trabajo de este Observatorio se?ala que la poblaci?n espa?ola est? muy dividida respecto a la posible conflictividad social que podr?a generar la transici?n ecol?gica. Un 40% cree que s? lo puede generar y otro 40% que piensa lo contrario. De manera comparada es algo mayor la creencia en la generaci?n de posible conflicto en Andaluc?a (el 42% de la poblaci?n as? lo manifiesta), frente al 34% en Madrid. También llama la atenci?n el notable aumento de quienes en la comunidad andaluza consideran que este proceso podr?a incrementar la conflictividad social de su entorno (10,5 puntos m?s en un a?o est?n de acuerdo con esta afirmaci?n).
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/brecha-cuela-vox-disparan-siete-89627850)
Un escepticismo que crece en las zonas rurales y entre capas de poblaci?n de mayor edad, a partir de los 50 a?os. Es lo que arroja el informe “La percepci?n social sobre la transici?n ecol?gica en Espa?a, 2022-23” realizado por el Observatorio Transici?n Justa, de la consultora Red2Red con apoyo de la Fundaci?n Cepsa, con una diagn?stico que parte de 3.019 entrevistas.
Los datos son especialmente llamativos en el caso de Andaluc?a, donde la muestra de poblaci?n es mayor y un estudio previo permite establecer comparativas en un a?o, de 2021 a 2022. Hay resultados muy relevantes que pueden explicar en gran medida el avance de Vox en el mundo rural y los cambios de posici?n del PP respecto a su agenda ‘verde’. En un a?o, cae levemente el porcentaje de andaluces que cree con total seguridad que el cambio clim?tico existe, disminuye los que consideran que combatirlo debe ser una prioridad, sube el porcentaje de quienes opinan que la transici?n ecol?gica es una amenaza y se eleva el n?mero de andaluces que creen que detr?s hay un grave conflicto social. Una foto fija que, se?ala el Observatorio, deber?a encender alarmas rojas.
Retrocesos en la UE
La amenaza de un retroceso en las pol?ticas medioambientales y contra el cambio clim?tico se alimenta de las posiciones negacionistas de los partidos de la extrema derecha en Europa pero también arrastra a los conservadores m?s moderados a posiciones cada vez menos comprometidas. En el Parlamento europeo el rechazo a la ley de restauraci?n de la naturaleza ha exhibido la falta de consenso. En Espa?a las alianzas de PP y Vox en varias comunidades han situado al partido de Santiago Abascal, el ?nico abiertamente negacionista del cambio clim?tico en Espa?a, en las consejer?as de agricultura o gesti?n forestal, como ha ocurrido en Castilla y Le?n, la Comunidad Valenciana o Extremadura. La guerra por la tuberculosis bovina en Castilla y Le?n arroj? le?a a este fuego.
En Andaluc?a, la proposici?n de ley de Do?ana, que impulsan PP y Vox en el Parlamento andaluz, es otro ejemplo claro de un viraje de las posiciones m?s comprometidas de la derecha moderada con las pol?ticas de la agenda 2030 a los postulados negacionistas de la ultraderecha. En los conflictos de la ?ltima legislatura con el consumo de carne, el campo, la caza o la ley de bienestar animal se encuentran muchas respuestas a las tendencias que arroja esta encuesta y al auge de Vox en las zonas rurales.
La guerra del campo
La idea, alimentada con éxito por el partido deAbascal, de que la agricultura, la ganader?a y la pesca est?n amenazadas por las pol?ticas ‘verdes’ europeas, cimentando la idea de una guerra entre el campo y la ecolog?a, tiene un apoyo social relevante. En Espa?a, las preocupaciones medioambientales se relacionan de forma directa con el tama?o del municipio donde se reside. En aquellos menores de 20.000 habitantes las preocupaciones m?s relevantes pasan por la sequ?a, los incendios forestales o la suciedad y la falta de cuidados de los espacios naturales. En las ciudades mayores, la principal preocupaci?n es la contaminaci?n. Entre el pueblo y la gran ciudad, en el dato de preocupaci?n por la sequ?a se abre una brecha de diez puntos porcentuales. La falta de agua preocupa al 14% de quienes viven en grandes n?cleos urbanos pero afecta un 23% en los municipios de menor tama?o.
En Espa?a, la convicci?n de que el cambio clim?tico existe es muy elevada. El 85% asegura que creen que existe con total seguridad mientras que el porcentaje de negacionistas es muy bajo, del 6%. Sin embargo hay tendencias llamativas. Entre 2021 y 2022 se ha producido en la poblaci?n andaluza un peque?o descenso de 2,5 puntos de personas que aseguran la existencia del cambio clim?tico con total seguridad.
Una pol?tica conflictiva
Seg?n el Observatorio, la lucha contra el cambio clim?tico es una prioridad para la mayor?a de la poblaci?n (65%) aunque un notable 35% considera que son m?s importantes otras prioridades. En Andaluc?a se observa una reducci?n de 6 puntos porcentuales entre quienes consideran que es una pol?tica prioritaria. Es m?s importante para los m?s j?venes y baja a partir de los 50 a?os. Adem?s hay diferencias importantes seg?n las regiones de Espa?a. En la poblaci?n del Litoral Mediterr?neo se detecta la mayor proporci?n (cinco puntos por encima de la media) de personas que priorizan la lucha contra el cambio clim?tico (70%); Canarias y Baleares, Cornisa Cant?brica, Madrid y Andaluc?a se sit?a en torno a la media. Llama la atenci?n el hecho de que entre la poblaci?n del centro peninsular, donde engloban Castilla y Le?n, Extremadura y Castilla-La Mancha, la proporci?n de personas que dan prioridad a las pol?ticas de lucha contra el cambio clim?tico desciende al 57%. En este ?rea geogr?fica, un 42% considera que hay otras prioridades m?s importantes.
La transici?n energética es un concepto que m?s de la mitad de la poblaci?n desconoce, un 51% de la poblaci?n o bien no conoce o tiene un concepto muy vago de lo que significa. La encuesta refleja que ese desconocimiento aumenta en aquellas personas sin estudios, con una brecha de hasta 22 puntos respecto a quienes tienen estudios superiores. Los territorios donde menos se conoce qué significa la transici?n ecol?gica son Andaluc?a y de nuevo el centro peninsular (41% y 43%, respectivamente, siete y cinco puntos por debajo de la media).
Una visi?n negativa
En Andaluc?a se registra también un aumento en la proporci?n de personas que consideran que el proceso de transici?n ecol?gica y energética podr?a afectar de manera negativa o muy negativa en su entorno. Un dato que sube siete puntos porcentuales. El cambio genera emociones negativas como impotencia e indignaci?n en el mundo rural, mientras que en el mundo urbano hay sensaciones m?s positivas como esperanza, interés o confianza. Los resultados de la encuesta de 2022 revelan que en general lo que m?s crecen son las sensaciones negativas y especialmente en Andaluc?a se observa un significativo descenso en la proporci?n de quienes valoran el proceso de transici?n ecol?gica como una oportunidad, tanto a corto (cae siete puntos) como a largo plazo (baja nueve puntos). Por ejemplo, la proporci?n de andaluces que considera en el ?ltimo a?o que su empleo est? en peligro debido al proceso de transici?n ecol?gica ha crecido en dos puntos.
El trabajo de este Observatorio se?ala que la poblaci?n espa?ola est? muy dividida respecto a la posible conflictividad social que podr?a generar la transici?n ecol?gica. Un 40% cree que s? lo puede generar y otro 40% que piensa lo contrario. De manera comparada es algo mayor la creencia en la generaci?n de posible conflicto en Andaluc?a (el 42% de la poblaci?n as? lo manifiesta), frente al 34% en Madrid. También llama la atenci?n el notable aumento de quienes en la comunidad andaluza consideran que este proceso podr?a incrementar la conflictividad social de su entorno (10,5 puntos m?s en un a?o est?n de acuerdo con esta afirmaci?n).
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/brecha-cuela-vox-disparan-siete-89627850)