الريــم
06-24-2023, 11:50 AM
La negociaci?n en el Ayuntamiento de Valladolid con Vox estaba pr?cticamente hecha, pero al PP le preocupaba el destino de los grandes eventos de la ciudad. Especialmente, la Semana Internacional de Cine (Seminci), convertida en uno de los iconos nacionales del cine en Espa?a y que forma parte del ADN cultural de la ciudad. Por eso, cost? cerrar el pacto. Hasta el ?ltimo momento los populares maniobraron para dar con la f?rmula que permitiera blindar el evento cinematogr?fico con la vista puesta también en los Premios Goya de 2024, que se van a celebrar en la capital castellana. El hecho de que pudieran estar bajo el control de Vox generaba much?sima inquietud dentro de las filas populares. “Hay que evitarlo como sea”, reflexionaban.
Seg?n ha podido saber este diario, se valoraron distintas opciones. La primera era que Vox no se hiciera con las riendas de la concejal?a de Cultura. Era un objetivo muy complicado porque el partido ultra, all? donde ha pactado con el PP (dos comunidades aut?nomas por ahora, entre ellas Castilla y Le?n desde hace un a?o y medio, y 135 ayuntamientos) ha exigido esa cartera.
Para Vox, el control de Cultura y ?reas como Agricultura o Ganader?a son clave porque las consideran v?as de entrada a la gesti?n a través de las grandes banderas pol?ticas de su programa. El pacto vallisoletano (en una de las cuatro capitales de provincia donde la fuerza m?s votada fue el PSOE) garantizaba el bast?n de mando al popular Jes?s Julio Carnero y la n?mero dos del consistorio ser?a, como se confirm?, Irene Carvajal.
La dirigente de Vox, bajo la batuta de la tenencia de alcald?a se quedaba también con Educaci?n y Cultura. El PP pas? entonces al plan B, trasladando las grandes citas culturales a la concejal?a de Turismo, Eventos y Marca Ciudad, que liderar? adem?s la portavoz, también del PP, Blanca Jiménez. Fuentes del PP de Castilla y Le?n aseguran que fue la manera de “garantizar total control” a los eventos que m?s se identifican con la ciudad, y a los que el PP pretende seguir dando el m?ximo protagonismo situ?ndolos junto a la portavoc?a.
Las fuertes cr?ticas de Vox hacia el cine espa?ol y la mala relaci?n de los ultra con el sector es lo que m?s preocupaba al PP, que ya gobiernan en coalici?n con Vox en la Junta de Castilla y Le?n, donde también ostentan la consejer?a de Cultura con Gonzalo Santonja al frente. Por la Seminci y, sobre todo, por la 38? edici?n de los Goya que tras pasar por M?laga y Valencia llegar?n el a?o que viene a Valladolid.
El proyecto qued? cerrado bajo el mando del socialista ?scar Puente e implica una inversi?n total que ronda los seis millones y medio de euros. Entre los casi tres millones que la Academia del Cine exige como canon y el resto de la organizaci?n. Al PP también le preocupaba este punto: si una ciudad rechaza, finalmente, organizar el evento no recupera lo empleado en el canon.
Blindar la Seminci
La Seminci tiene sus or?genes en la Semana de Cine Religioso, que comenz? a celebrarse en la ciudad en 1956, vinculada a su Semana Santa. A lo largo de los a?os 60 fue en algunos aspectos el primer festival de Espa?a, por delante incluso del de San Sebasti?n. Fue a mediados de los 70, con el fin de la dictadura, cuando el festival perdi? definitivamente su car?cter religioso para acoger todo tipo de propuestas, al tiempo que iba cediendo peso ante la pujanza del de San Sebastian. A?n as?, la Seminci continu? siendo el gran referente del cine de autor en Espa?a, un festival alejado del oropel que se convirti? en la puerta de entrada a nuestro pa?s de directores de la talla de Dreyer, Bresson o Bergman, y el que descubri? al p?blico espa?ol cinematograf?as hasta entonces casi desconocidas como la japonesa. Cineastas de prestigio como Robert Guédiguian, Ettore Scola o Goran Paskaljevic han sido algunos de los presidentes de su jurado.
Javier Angulo, que digiri? el festival desde 2008, anunci? el pasado diciembre que dejaba su cargo tras catorce a?os al frente. El nuevo director de la Seminci, José Luis Cienfuegos, tomaba posesi?n de su puesto a principios de mayo tras diez a?os capitaneando el Festival de Sevilla, que de su mano se ha convertido en uno de los m?s importantes de Espa?a. Una de sus tareas ser? relanzar un festival que en los ?ltimos a?os hab?a quedado relegado frente a otras citas como la de Sevilla, el Festival de M?laga o el de Gij?n.
Con la semilla de la Seminci, Valladolid ha procurado en los ?ltimos a?os explotar su veta cinematogr?fica para beneficiar a su industria local y conseguir ingresos por la v?a del turismo. Para ello, su ayuntamiento cre? en 2014 la Valladolid Film Comission, que tiene como objetivo atraer rodajes a la ciudad castellana y crear su propio tejido de profesionales vinculados con el cine y el audiovisual en general. El séptimo arte ha sido una de las mejores bazas a la hora de crear marca de la ciudad y la preocupaci?n del PP es, precisamente, que de la mano de Vox, esto pudiera decaer.
Negociaciones convulsas
Las conversaciones entre PP y Vox a nivel municipal ten?an que llegar a buen puerto forzosamente por el calendario: el d?a 17 de junio quedaban constituidos los ayuntamientos de toda Espa?a, y en consistorios donde el PSOE gan? las elecciones, la derecha estaba obligada a cerrar un acuerdo si quer?a evitar alcald?as socialistas. La directriz de Génova fue no perder poder municipal bajo ning?n concepto y Valladolid fue la ?ltima gran ciudad en cerrarse, sum?ndose a Toledo, Guadalajara y Burgos, adem?s de otros grandes municipios como Elche (Alicante) o Alcal? de Henares (Madrid).
En las autonom?as, las cosas van bastante m?s despacio. PP y Vox solo se han entendido para una coalici?n en la Comunidad Valenciana, donde el paso al lado de Carlos Flores (condenado por violencia machista en 2002) allan? el acuerdo. Pero, igual que en los ayuntamientos, los populares han buscado la manera de mermar la influencia de la formaci?n de Abascal en la gesti?n.
Como ya sucedi? en Castilla y Le?n, el pacto valenciano ha dejado en manos de Vox la consejer?a de Agricultura sin las competencias del agua, recurso clave en esa comunidad. El ?rea de Cultura no tendr? la direcci?n general de Patrimonio, y la consejer?a de Interior y Justicia estar? igualmente limitada. De hecho, Vox solo controlar? en torno al 5% del presupuesto total de la regi?n.
En el PP reconocen que los esfuerzos negociadores se han puesto en esa direcci?n que tampoco rechaza Vox. Los populares est?n convencidos de que el partido ultra busca “m?s efectismo que gesti?n” y que su principal objetivo entrando en los gobiernos es exclusivamente “imponer mensajes ideol?gicos” a través de ?reas en las que “no asuman grandes problemas” de la ciudadan?a.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/pp-crea-concejalia-eventos-valladolid-89086371)
Seg?n ha podido saber este diario, se valoraron distintas opciones. La primera era que Vox no se hiciera con las riendas de la concejal?a de Cultura. Era un objetivo muy complicado porque el partido ultra, all? donde ha pactado con el PP (dos comunidades aut?nomas por ahora, entre ellas Castilla y Le?n desde hace un a?o y medio, y 135 ayuntamientos) ha exigido esa cartera.
Para Vox, el control de Cultura y ?reas como Agricultura o Ganader?a son clave porque las consideran v?as de entrada a la gesti?n a través de las grandes banderas pol?ticas de su programa. El pacto vallisoletano (en una de las cuatro capitales de provincia donde la fuerza m?s votada fue el PSOE) garantizaba el bast?n de mando al popular Jes?s Julio Carnero y la n?mero dos del consistorio ser?a, como se confirm?, Irene Carvajal.
La dirigente de Vox, bajo la batuta de la tenencia de alcald?a se quedaba también con Educaci?n y Cultura. El PP pas? entonces al plan B, trasladando las grandes citas culturales a la concejal?a de Turismo, Eventos y Marca Ciudad, que liderar? adem?s la portavoz, también del PP, Blanca Jiménez. Fuentes del PP de Castilla y Le?n aseguran que fue la manera de “garantizar total control” a los eventos que m?s se identifican con la ciudad, y a los que el PP pretende seguir dando el m?ximo protagonismo situ?ndolos junto a la portavoc?a.
Las fuertes cr?ticas de Vox hacia el cine espa?ol y la mala relaci?n de los ultra con el sector es lo que m?s preocupaba al PP, que ya gobiernan en coalici?n con Vox en la Junta de Castilla y Le?n, donde también ostentan la consejer?a de Cultura con Gonzalo Santonja al frente. Por la Seminci y, sobre todo, por la 38? edici?n de los Goya que tras pasar por M?laga y Valencia llegar?n el a?o que viene a Valladolid.
El proyecto qued? cerrado bajo el mando del socialista ?scar Puente e implica una inversi?n total que ronda los seis millones y medio de euros. Entre los casi tres millones que la Academia del Cine exige como canon y el resto de la organizaci?n. Al PP también le preocupaba este punto: si una ciudad rechaza, finalmente, organizar el evento no recupera lo empleado en el canon.
Blindar la Seminci
La Seminci tiene sus or?genes en la Semana de Cine Religioso, que comenz? a celebrarse en la ciudad en 1956, vinculada a su Semana Santa. A lo largo de los a?os 60 fue en algunos aspectos el primer festival de Espa?a, por delante incluso del de San Sebasti?n. Fue a mediados de los 70, con el fin de la dictadura, cuando el festival perdi? definitivamente su car?cter religioso para acoger todo tipo de propuestas, al tiempo que iba cediendo peso ante la pujanza del de San Sebastian. A?n as?, la Seminci continu? siendo el gran referente del cine de autor en Espa?a, un festival alejado del oropel que se convirti? en la puerta de entrada a nuestro pa?s de directores de la talla de Dreyer, Bresson o Bergman, y el que descubri? al p?blico espa?ol cinematograf?as hasta entonces casi desconocidas como la japonesa. Cineastas de prestigio como Robert Guédiguian, Ettore Scola o Goran Paskaljevic han sido algunos de los presidentes de su jurado.
Javier Angulo, que digiri? el festival desde 2008, anunci? el pasado diciembre que dejaba su cargo tras catorce a?os al frente. El nuevo director de la Seminci, José Luis Cienfuegos, tomaba posesi?n de su puesto a principios de mayo tras diez a?os capitaneando el Festival de Sevilla, que de su mano se ha convertido en uno de los m?s importantes de Espa?a. Una de sus tareas ser? relanzar un festival que en los ?ltimos a?os hab?a quedado relegado frente a otras citas como la de Sevilla, el Festival de M?laga o el de Gij?n.
Con la semilla de la Seminci, Valladolid ha procurado en los ?ltimos a?os explotar su veta cinematogr?fica para beneficiar a su industria local y conseguir ingresos por la v?a del turismo. Para ello, su ayuntamiento cre? en 2014 la Valladolid Film Comission, que tiene como objetivo atraer rodajes a la ciudad castellana y crear su propio tejido de profesionales vinculados con el cine y el audiovisual en general. El séptimo arte ha sido una de las mejores bazas a la hora de crear marca de la ciudad y la preocupaci?n del PP es, precisamente, que de la mano de Vox, esto pudiera decaer.
Negociaciones convulsas
Las conversaciones entre PP y Vox a nivel municipal ten?an que llegar a buen puerto forzosamente por el calendario: el d?a 17 de junio quedaban constituidos los ayuntamientos de toda Espa?a, y en consistorios donde el PSOE gan? las elecciones, la derecha estaba obligada a cerrar un acuerdo si quer?a evitar alcald?as socialistas. La directriz de Génova fue no perder poder municipal bajo ning?n concepto y Valladolid fue la ?ltima gran ciudad en cerrarse, sum?ndose a Toledo, Guadalajara y Burgos, adem?s de otros grandes municipios como Elche (Alicante) o Alcal? de Henares (Madrid).
En las autonom?as, las cosas van bastante m?s despacio. PP y Vox solo se han entendido para una coalici?n en la Comunidad Valenciana, donde el paso al lado de Carlos Flores (condenado por violencia machista en 2002) allan? el acuerdo. Pero, igual que en los ayuntamientos, los populares han buscado la manera de mermar la influencia de la formaci?n de Abascal en la gesti?n.
Como ya sucedi? en Castilla y Le?n, el pacto valenciano ha dejado en manos de Vox la consejer?a de Agricultura sin las competencias del agua, recurso clave en esa comunidad. El ?rea de Cultura no tendr? la direcci?n general de Patrimonio, y la consejer?a de Interior y Justicia estar? igualmente limitada. De hecho, Vox solo controlar? en torno al 5% del presupuesto total de la regi?n.
En el PP reconocen que los esfuerzos negociadores se han puesto en esa direcci?n que tampoco rechaza Vox. Los populares est?n convencidos de que el partido ultra busca “m?s efectismo que gesti?n” y que su principal objetivo entrando en los gobiernos es exclusivamente “imponer mensajes ideol?gicos” a través de ?reas en las que “no asuman grandes problemas” de la ciudadan?a.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/pp-crea-concejalia-eventos-valladolid-89086371)