الريــم
06-15-2023, 10:13 AM
“'Naru' es una palabra japonesa que significa algo as? como ‘llegar a ser’, ‘convertirse’... ‘alcanzar un determinado punto, una meta’... Va muy en la l?nea de nuestra labor, porque la inserci?n laboral es eso: conseguir un empleo, superarse, cambiar...”, resume Andrea Castromil, directora de la Fundaci?n Naru, entidad de ?mbito gallego, con sede en A Coru?a que, desde junio de 2021, “pretende ser un agente transformador” que “haga llegar a ese cambio” a colectivos “que tienen m?s dif?cil la empleabilidad”, entre ellos, “las personas que han pasado por enfermedades incapacitantes”.
Cuenta Castromil que la Fundaci?n Naru ech? a andar “con el objetivo de fomentar el incremento de las competencias personales y profesionales y la empleabilidad” de aquellos que “lo tienen m?s dif?cil”, ya sean “j?venes, mujeres, mayores de 45 a?os o personas que han pasado por enfermedades incapacitantes”. “Nuestra fundaci?n nace bajo el paraguas de una escuela de negocios [la European Business Factory] donde se imparte formaci?n de posgrado para j?venes. Uno de los objetivos era que esos j?venes tuviesen oportunidades que no fuesen, simplemente, unas pr?cticas sin remunerar, sino que ya pudiesen iniciarse en el mundo laboral como un trabajador m?s. A partir de ah?, se cre? la fundaci?n y se construy? un programa de becas laborales remuneradas, lo que sucede es que este tipo de ayudas a veces presentan unas limitaciones, puesto que otros colectivos que también lo tienen dif?cil, como los mayores de 45, se quedan fuera, salvo que se hayan titulado en los cuatro a?os previos”, explica la directora de la Fundaci?n Naru.
“Empezamos a pensar, entonces, en que hab?a mucha necesidad laboral por parte de muchos colectivos, no obstante, también existe una gran de cantidad de entidades, fundaciones, asociaciones… para la empleabilidad, as? que optamos por enfocarnos en una l?nea en concreto, donde hubiese un vac?o de oportunidades. Y, como por mi trayectoria vital, he visto situaciones en las que a afectados por procesos oncol?gicos (pacientes o cuidadores) la vuelta al trabajo les ha resultado muy dif?cil —parece que est?n marcados por el ‘no vaya a ser que vuelva a enfermar’; ‘no vaya a ser que tenga que cuidar’…—, decidimos tirar por ah?, pues detectamos un vac?o y un desamparo muy grandes”, prosigue.
Y es que, “al finalizar el proceso oncol?gico, cuando todo deber?a ser felicidad, empieza otra 'pelea”. Volver a entrar en el sistema, lo cual conlleva no solo la parte laboral, sino también la social, familiar… Gracias a los avances en investigaci?n, la supervivencia al c?ncer, en general, es cada vez mayor, sin embargo, esto requiere prestar atenci?n a esa otra etapa que sea abre cuando se dejan atr?s los tratamientos”, insiste la directora de la Fundaci?n Naru, donde a quienes se encuentran en esa situaci?n “se les da la oportunidad de juntarse con m?s personas” en el mismo punto, “de realizar talleres de autoconocimiento, empleabilidad, fortalezas…”.
“Después, cada usuario va eligiendo, también, su camino. Por ejemplo, hay quienes deciden intentar opositar; otros optan por dar un giro radical a su trayectoria, form?ndose en alguna actividad que quiz?s antes ve?an como una afici?n (porque después de haber pasado por el proceso oncol?gico, quieren disfrutar del trabajo de otra manera)...”, detalla Castromil. “En nuestra fundaci?n, les apoyamos, adem?s, en todo el tema de la pr?ctica deportiva, de hecho, un grupo de usuarias de Naru est? en un equipo de remo ('dragon boat'). Ya exist?a previamente, pero hemos montado una especie de delegaci?n aqu? para salir a navegar por el lago de las antiguas minas de As Pontes”, agrega.
Aunque la Fundaci?n Naru “se constituy? como tal en 2020”, la burocracia y el par?n obligado de la pandemia de covid pospuso el inicio de su actividad hasta “junio de 2021”. “A partir de ah?, nos empez? a contactar gente, interes?ndose por lo que hac?amos, a veces rebotados de otros sitios. Cierto es que lo vieron siempre como una puerta nueva, algo que no hab?a hasta entonces. Nosotros abrimos este camino, y hoy tenemos usuarios de A Coru?a, Santiago, Noia, Vigo... de toda Galicia”, destaca Castromil sobre la entidad que dirige, que cuenta con dos benefactores honor?ficos de excepci?n: la cantante gallega Luz Casal y el actor Antonio Resines.
Nuestras puertas est?n abiertas para todo aquel que nos necesite, y también para quienes deseen ofrecernos su ayuda, de la manera que se les ocurra. Tenemos por delante muchas cosas pendientes, y cualquier apoyo es siempre bienvenido”, resalta Castromil, y especifica: “En Naru no hay socios, porque sabemos que las personas que acuden a nosotros lo que quieren es trabajar para sentirse ?tiles, de modo que lo ?ltimo que vamos a hacer es cobrarles nada a ellos. No obstante, es probable que, después del verano, empecemos a tener socios externos, siempre con libertad para aportar lo que cada uno pueda, cuando pueda y sin involucrar, en ning?n acaso, a los usuarios. Queremos que todos nuestros servicios sean gratuitos para ellos, por eso necesitamos el respaldo de personas que se ofrezcan a echarnos una mano voluntariamente”, concluye.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/finalizar-proceso-oncologico-pelea-entrar-sistema-88716607)
Cuenta Castromil que la Fundaci?n Naru ech? a andar “con el objetivo de fomentar el incremento de las competencias personales y profesionales y la empleabilidad” de aquellos que “lo tienen m?s dif?cil”, ya sean “j?venes, mujeres, mayores de 45 a?os o personas que han pasado por enfermedades incapacitantes”. “Nuestra fundaci?n nace bajo el paraguas de una escuela de negocios [la European Business Factory] donde se imparte formaci?n de posgrado para j?venes. Uno de los objetivos era que esos j?venes tuviesen oportunidades que no fuesen, simplemente, unas pr?cticas sin remunerar, sino que ya pudiesen iniciarse en el mundo laboral como un trabajador m?s. A partir de ah?, se cre? la fundaci?n y se construy? un programa de becas laborales remuneradas, lo que sucede es que este tipo de ayudas a veces presentan unas limitaciones, puesto que otros colectivos que también lo tienen dif?cil, como los mayores de 45, se quedan fuera, salvo que se hayan titulado en los cuatro a?os previos”, explica la directora de la Fundaci?n Naru.
“Empezamos a pensar, entonces, en que hab?a mucha necesidad laboral por parte de muchos colectivos, no obstante, también existe una gran de cantidad de entidades, fundaciones, asociaciones… para la empleabilidad, as? que optamos por enfocarnos en una l?nea en concreto, donde hubiese un vac?o de oportunidades. Y, como por mi trayectoria vital, he visto situaciones en las que a afectados por procesos oncol?gicos (pacientes o cuidadores) la vuelta al trabajo les ha resultado muy dif?cil —parece que est?n marcados por el ‘no vaya a ser que vuelva a enfermar’; ‘no vaya a ser que tenga que cuidar’…—, decidimos tirar por ah?, pues detectamos un vac?o y un desamparo muy grandes”, prosigue.
Y es que, “al finalizar el proceso oncol?gico, cuando todo deber?a ser felicidad, empieza otra 'pelea”. Volver a entrar en el sistema, lo cual conlleva no solo la parte laboral, sino también la social, familiar… Gracias a los avances en investigaci?n, la supervivencia al c?ncer, en general, es cada vez mayor, sin embargo, esto requiere prestar atenci?n a esa otra etapa que sea abre cuando se dejan atr?s los tratamientos”, insiste la directora de la Fundaci?n Naru, donde a quienes se encuentran en esa situaci?n “se les da la oportunidad de juntarse con m?s personas” en el mismo punto, “de realizar talleres de autoconocimiento, empleabilidad, fortalezas…”.
“Después, cada usuario va eligiendo, también, su camino. Por ejemplo, hay quienes deciden intentar opositar; otros optan por dar un giro radical a su trayectoria, form?ndose en alguna actividad que quiz?s antes ve?an como una afici?n (porque después de haber pasado por el proceso oncol?gico, quieren disfrutar del trabajo de otra manera)...”, detalla Castromil. “En nuestra fundaci?n, les apoyamos, adem?s, en todo el tema de la pr?ctica deportiva, de hecho, un grupo de usuarias de Naru est? en un equipo de remo ('dragon boat'). Ya exist?a previamente, pero hemos montado una especie de delegaci?n aqu? para salir a navegar por el lago de las antiguas minas de As Pontes”, agrega.
Aunque la Fundaci?n Naru “se constituy? como tal en 2020”, la burocracia y el par?n obligado de la pandemia de covid pospuso el inicio de su actividad hasta “junio de 2021”. “A partir de ah?, nos empez? a contactar gente, interes?ndose por lo que hac?amos, a veces rebotados de otros sitios. Cierto es que lo vieron siempre como una puerta nueva, algo que no hab?a hasta entonces. Nosotros abrimos este camino, y hoy tenemos usuarios de A Coru?a, Santiago, Noia, Vigo... de toda Galicia”, destaca Castromil sobre la entidad que dirige, que cuenta con dos benefactores honor?ficos de excepci?n: la cantante gallega Luz Casal y el actor Antonio Resines.
Nuestras puertas est?n abiertas para todo aquel que nos necesite, y también para quienes deseen ofrecernos su ayuda, de la manera que se les ocurra. Tenemos por delante muchas cosas pendientes, y cualquier apoyo es siempre bienvenido”, resalta Castromil, y especifica: “En Naru no hay socios, porque sabemos que las personas que acuden a nosotros lo que quieren es trabajar para sentirse ?tiles, de modo que lo ?ltimo que vamos a hacer es cobrarles nada a ellos. No obstante, es probable que, después del verano, empecemos a tener socios externos, siempre con libertad para aportar lo que cada uno pueda, cuando pueda y sin involucrar, en ning?n acaso, a los usuarios. Queremos que todos nuestros servicios sean gratuitos para ellos, por eso necesitamos el respaldo de personas que se ofrezcan a echarnos una mano voluntariamente”, concluye.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/finalizar-proceso-oncologico-pelea-entrar-sistema-88716607)