الريــم
05-20-2023, 04:21 PM
Buen administrador del tiempo pol?tico, Pedro S?nchez aprovech? el fin de semana previo al 8 de marzo, D?a Internacional de la Mujer, para hacer un anuncio de impacto: el Gobierno, y m?s concretamente la parte del PSOE, ten?a a punto el anteproyecto de ley de paridad. La norma va m?s all? de la ley de igualdad de 2007 y, entre otras cosas, implanta las listas cremallera (la inclusi?n alternativa de un hombre y una mujer) en las candidaturas de cualquier proceso electoral –Congreso, Senado, autonom?as, ayuntamientos- y el equilibrio de género en el consejo de ministros y los consejos de administraci?n de las empresas cotizadas, y también de las grandes empresas no cotizadas. Todos esos ?mbitos, y otros como las direcciones de los colegios profesionales e incluso los jurados que otorguen premios p?blicos, deber?n contar con un m?nimo del 40% de hombres y mujeres a partir de los pr?ximos a?os.
“Este martes romperemos para siempre el techo de cristal”, dijo el presidente del Gobierno en la v?spera de la aprobaci?n del anteproyecto de ley. A nadie se le escapa que el anuncio de la nueva norma, que consolidar?a a Espa?a en la vanguardia de las pol?ticas de igualdad mundiales, llegaba a pocas semanas de unas elecciones decisivas, las del pr?ximo domingo. Y tampoco que ven?a a robustecer la apuesta feminista de los socialistas en un momento en que sus socios de Unidas Podemos en el Gobierno aparecen ante la opini?n p?blica como m?s incisivos en ese campo.
“El feminismo era un valor tradicional del PSOE, y de repente ven que tienen que competir con Podemos”, afirma S?lvia Claveria, profesora de la Universidad Carlos III de Madrid y autora del libro ‘El feminismo lo cambia todo’. “Vieron adem?s que se hab?an abierto muchas controversias relacionadas con la ley trans, o el 's?lo s? es s?'. Creo que se intentaron desmarcar proponiendo medidas que tienen que ver un poco m?s con la presencia del feminismo en las élites, que pueden ser mejor valoradas por sus votantes de centro, para marcar perfil y poner en valor su trayectoria”, a?ade.
El PSOE niega oportunismo
La diputada S?nia Guerra, portavoz socialista de Derechos Sociales en el Congreso, niega cualquier tipo de oportunismo o de competencia con Podemos en el despliegue de la nueva ley. “Para nada. Tenemos claro que hay que avanzar, y las listas cremallera forman parte de una reivindicaci?n hist?rica del feminismo y del PSOE”, asegura.
Guerra afirma que, pese a que Espa?a ya es un referente en pol?ticas de igualdad de género, son necesarios “nuevos instrumentos legales” que las mejoren. “Por ejemplo, la ley de igualdad de Zapatero no obliga a que los gobiernos sean paritarios. Con S?nchez los hemos tenido, pero si cambia el color pol?tico…”, dice. Tanto Claveria como otra experta en la materia, la profesora de Ciencia Pol?tica de la Universidad Aut?noma de Barcelona Margarita Le?n, coinciden en la pertinencia de una mayor regulaci?n legal. “Por supuesto que son medidas necesarias, en ning?n lugar la paridad en pol?tica se consigue sin ninguna acci?n legislativa”, resume Le?n.
Al margen de las bondades de la nueva norma, la duda est? en si podr? aprobarse definitivamente antes de que termine la legislatura. Las elecciones generales se celebrar?n a finales de a?o, y la oposici?n atribuye objetivos electoralistas al anuncio del PSOE. De hecho, el PP critica la “improvisaci?n” de S?nchez. “Nos pareci? que se trataba de una propuesta apresurada que se sac? de la manga para tener algo que presentar el 8-M”, asegura Marta Gonz?lez, portavoz adjunta del grupo popular en el Congreso. “Nosotros tenemos indicaciones del Ejecutivo, y en particular del presidente, de trabajar hasta el ?ltimo d?a con las nuevas leyes, y esta es una de las m?s importantes”, insiste Guerra por su parte.
La falta de concreciones de la nueva norma también preocupa a los populares, que en cualquier caso no se cierran a “trabajar” para mejorar una propuesta que de momento no ven “imprescindible”. “Si hubiese habido una propuesta trabajada posiblemente ya la conocer?amos, pero no est? en el Congreso”, denuncia Gonz?lez. En cuanto a los expertos, Claveria también se queja de que por el momento se desconozca c?mo se castigar? a los que infrinjan la ley: “Lo dif?cil no es poner cuotas a las empresas, sino decidir cu?l es la sanci?n, porque si no no sirven para nada”.
Efectiva con circunscripciones y partidos peque?os
?Por qué era necesario, desde un punto de vista de la paridad de género, superar la ley de igualdad actual, que ha propiciado entre otras cosas que el Congreso cuente con un 47,2% de diputadas? Porque en algunas circunscripciones peque?as, la actual cuota del 40% cada cinco posiciones en listas permite que solo salgan elegidos hombres, si los partidos los colocan en los primeros lugares de las candidaturas. Lo mismo pasa con los partidos peque?os: si, en unas elecciones generales, solo obtienen un representante en varias provincias, es f?cil que el n?mero final de diputados sea muy superior al de diputadas.
“Se vio cuando se dividi? la derecha”, afirma Claveria. Con la aparici?n de partidos como Ciudadanos o Vox, “todo se fragment?, y es un espacio pol?tico que tradicionalmente tiene a pocas mujeres en posiciones altas de las listas”. La polit?loga, en cualquier caso, echa de menos que se hable de otras medidas efectivas, como “las cuotas horizontales”: que, dentro de una misma comunidad aut?noma, se equilibrase el n?mero de hombres y mujeres que encabezasen las candidaturas de cada provincia.
La pregunta del mill?n: ?se nota la mano femenina en el Gobierno?
Las expertas en pol?tica y género consultadas para la elaboraci?n del reportaje coinciden en la dificultad de responder a una pregunta que sobrevuela cada proceso electoral, como el del 28-M: ?existen diferencias para los ciudadanos si los gobierna una mujer con respecto a si los gobierna un hombre? ?Se nota en algo que una ciudad o un pueblo tenga alcaldesa en vez de alcalde?
“Ha habido muchos intentos de responder a esta pregunta con estudios de casos emp?ricos pero no hay ninguna evidencia s?lida. Lo que parece relevante es efectivamente la ideolog?a de la l?der”, dice la profesora de la UAB Margarita Le?n. En resumen: que la pol?tica que despleg? la exprimera ministra brit?nica Margaret Thatcher, por poner un ejemplo paradigm?tico, ten?a mucho m?s que ver con su perfil conservador y liberal que con el hecho de que fuera mujer.
En cualquier caso, Le?n cree que “seguramente” existen diferencias en la impresi?n de los ciudadanos con respecto al ?mbito de gobierno que se vote en una elecci?n concreta. “Los estereotipos de género siguen teniendo peso en la percepci?n de c?mo mujeres y hombres est?n ‘preparados’ para ejercer el poder. El ?mbito municipal es el ?mbito de la gesti?n de los problemas cotidianos, un espacio menos contestado para mujeres que el del poder estatal”, afirma al respecto de que las principales ciudades espa?olas tengan o hayan tenido alcaldesas y, en cambio, no haya habido ninguna candidata a presidenta del Gobierno con opciones reales.
S?lvia Claveria, profesora de la Universidad Carlos III, también ve “muy complicado” contestar a la pregunta, y que “no hay una respuesta clara”. Sin embargo, s? cree que, en un rango inferior al de gobernante, pueden notarse las diferencias entre hombres y mujeres. “Si las mujeres llegan a diputadas s? se ve que les preocupan cosas que tradicionalmente han estado relacionadas con problemas de las mujeres, independientemente de su ideolog?a: el género, los cuidados, incluso el aborto”, asegura.
“Cuando Gallard?n quiso cambiar la ley del aborto, una parte importante de mujeres del PP se pusieron en contra, y eso contribuy? a que no saliera adelante”, recuerda Claveria. Pero a?ade que “a la hora de gobernar ya es m?s complicado captar esos efectos” porque al final “ser?a una persona frente a toda la administraci?n o todo su equipo y ah?, por las estructuras preexistentes, los efectos no se ven tanto”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/nueva-ley-paridad-oportuna-rodeada-87638793)
“Este martes romperemos para siempre el techo de cristal”, dijo el presidente del Gobierno en la v?spera de la aprobaci?n del anteproyecto de ley. A nadie se le escapa que el anuncio de la nueva norma, que consolidar?a a Espa?a en la vanguardia de las pol?ticas de igualdad mundiales, llegaba a pocas semanas de unas elecciones decisivas, las del pr?ximo domingo. Y tampoco que ven?a a robustecer la apuesta feminista de los socialistas en un momento en que sus socios de Unidas Podemos en el Gobierno aparecen ante la opini?n p?blica como m?s incisivos en ese campo.
“El feminismo era un valor tradicional del PSOE, y de repente ven que tienen que competir con Podemos”, afirma S?lvia Claveria, profesora de la Universidad Carlos III de Madrid y autora del libro ‘El feminismo lo cambia todo’. “Vieron adem?s que se hab?an abierto muchas controversias relacionadas con la ley trans, o el 's?lo s? es s?'. Creo que se intentaron desmarcar proponiendo medidas que tienen que ver un poco m?s con la presencia del feminismo en las élites, que pueden ser mejor valoradas por sus votantes de centro, para marcar perfil y poner en valor su trayectoria”, a?ade.
El PSOE niega oportunismo
La diputada S?nia Guerra, portavoz socialista de Derechos Sociales en el Congreso, niega cualquier tipo de oportunismo o de competencia con Podemos en el despliegue de la nueva ley. “Para nada. Tenemos claro que hay que avanzar, y las listas cremallera forman parte de una reivindicaci?n hist?rica del feminismo y del PSOE”, asegura.
Guerra afirma que, pese a que Espa?a ya es un referente en pol?ticas de igualdad de género, son necesarios “nuevos instrumentos legales” que las mejoren. “Por ejemplo, la ley de igualdad de Zapatero no obliga a que los gobiernos sean paritarios. Con S?nchez los hemos tenido, pero si cambia el color pol?tico…”, dice. Tanto Claveria como otra experta en la materia, la profesora de Ciencia Pol?tica de la Universidad Aut?noma de Barcelona Margarita Le?n, coinciden en la pertinencia de una mayor regulaci?n legal. “Por supuesto que son medidas necesarias, en ning?n lugar la paridad en pol?tica se consigue sin ninguna acci?n legislativa”, resume Le?n.
Al margen de las bondades de la nueva norma, la duda est? en si podr? aprobarse definitivamente antes de que termine la legislatura. Las elecciones generales se celebrar?n a finales de a?o, y la oposici?n atribuye objetivos electoralistas al anuncio del PSOE. De hecho, el PP critica la “improvisaci?n” de S?nchez. “Nos pareci? que se trataba de una propuesta apresurada que se sac? de la manga para tener algo que presentar el 8-M”, asegura Marta Gonz?lez, portavoz adjunta del grupo popular en el Congreso. “Nosotros tenemos indicaciones del Ejecutivo, y en particular del presidente, de trabajar hasta el ?ltimo d?a con las nuevas leyes, y esta es una de las m?s importantes”, insiste Guerra por su parte.
La falta de concreciones de la nueva norma también preocupa a los populares, que en cualquier caso no se cierran a “trabajar” para mejorar una propuesta que de momento no ven “imprescindible”. “Si hubiese habido una propuesta trabajada posiblemente ya la conocer?amos, pero no est? en el Congreso”, denuncia Gonz?lez. En cuanto a los expertos, Claveria también se queja de que por el momento se desconozca c?mo se castigar? a los que infrinjan la ley: “Lo dif?cil no es poner cuotas a las empresas, sino decidir cu?l es la sanci?n, porque si no no sirven para nada”.
Efectiva con circunscripciones y partidos peque?os
?Por qué era necesario, desde un punto de vista de la paridad de género, superar la ley de igualdad actual, que ha propiciado entre otras cosas que el Congreso cuente con un 47,2% de diputadas? Porque en algunas circunscripciones peque?as, la actual cuota del 40% cada cinco posiciones en listas permite que solo salgan elegidos hombres, si los partidos los colocan en los primeros lugares de las candidaturas. Lo mismo pasa con los partidos peque?os: si, en unas elecciones generales, solo obtienen un representante en varias provincias, es f?cil que el n?mero final de diputados sea muy superior al de diputadas.
“Se vio cuando se dividi? la derecha”, afirma Claveria. Con la aparici?n de partidos como Ciudadanos o Vox, “todo se fragment?, y es un espacio pol?tico que tradicionalmente tiene a pocas mujeres en posiciones altas de las listas”. La polit?loga, en cualquier caso, echa de menos que se hable de otras medidas efectivas, como “las cuotas horizontales”: que, dentro de una misma comunidad aut?noma, se equilibrase el n?mero de hombres y mujeres que encabezasen las candidaturas de cada provincia.
La pregunta del mill?n: ?se nota la mano femenina en el Gobierno?
Las expertas en pol?tica y género consultadas para la elaboraci?n del reportaje coinciden en la dificultad de responder a una pregunta que sobrevuela cada proceso electoral, como el del 28-M: ?existen diferencias para los ciudadanos si los gobierna una mujer con respecto a si los gobierna un hombre? ?Se nota en algo que una ciudad o un pueblo tenga alcaldesa en vez de alcalde?
“Ha habido muchos intentos de responder a esta pregunta con estudios de casos emp?ricos pero no hay ninguna evidencia s?lida. Lo que parece relevante es efectivamente la ideolog?a de la l?der”, dice la profesora de la UAB Margarita Le?n. En resumen: que la pol?tica que despleg? la exprimera ministra brit?nica Margaret Thatcher, por poner un ejemplo paradigm?tico, ten?a mucho m?s que ver con su perfil conservador y liberal que con el hecho de que fuera mujer.
En cualquier caso, Le?n cree que “seguramente” existen diferencias en la impresi?n de los ciudadanos con respecto al ?mbito de gobierno que se vote en una elecci?n concreta. “Los estereotipos de género siguen teniendo peso en la percepci?n de c?mo mujeres y hombres est?n ‘preparados’ para ejercer el poder. El ?mbito municipal es el ?mbito de la gesti?n de los problemas cotidianos, un espacio menos contestado para mujeres que el del poder estatal”, afirma al respecto de que las principales ciudades espa?olas tengan o hayan tenido alcaldesas y, en cambio, no haya habido ninguna candidata a presidenta del Gobierno con opciones reales.
S?lvia Claveria, profesora de la Universidad Carlos III, también ve “muy complicado” contestar a la pregunta, y que “no hay una respuesta clara”. Sin embargo, s? cree que, en un rango inferior al de gobernante, pueden notarse las diferencias entre hombres y mujeres. “Si las mujeres llegan a diputadas s? se ve que les preocupan cosas que tradicionalmente han estado relacionadas con problemas de las mujeres, independientemente de su ideolog?a: el género, los cuidados, incluso el aborto”, asegura.
“Cuando Gallard?n quiso cambiar la ley del aborto, una parte importante de mujeres del PP se pusieron en contra, y eso contribuy? a que no saliera adelante”, recuerda Claveria. Pero a?ade que “a la hora de gobernar ya es m?s complicado captar esos efectos” porque al final “ser?a una persona frente a toda la administraci?n o todo su equipo y ah?, por las estructuras preexistentes, los efectos no se ven tanto”.
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