الريــم
05-13-2023, 03:50 PM
Imag?nese el lector que se ve obligado a abandonar su ciudad, sus ra?ces y su familia para llegar a un pa?s extra?o. Fig?rese que la decisi?n de hacerlo ha de tomarla en apenas 20 d?as y que adem?s no lo hace libremente, sino que hay una raz?n bastante poderosa que le obliga a hacerlo: el miedo. Quiz?s su vida corra peligro o, tal vez, la de sus nietos. Vale. Pues ahora a??dale a todo esto que su hija fue asesinada por (https://www.levante-emv.com/sucesos/2023/01/01/asesino-serie-condena-ejemplar-80537583.html)un criminal en serie.
Dif?cil, ?verdad? Pues todo esto es por lo que han tenido que pasar Dora Gisela Gutiérrez y Fabio Antonio Barr?o, los padres de Lady Marcela Vargas, la segunda v?ctima mortal del asesino en serie Jorge Ignacio Palma Jacome, el mismo monstruo que seg? las vidas de la joven Marta Calvo, cuyo cad?ver sigue sin aparecer y el de Arliene Ramos, adem?s de intentarlo con otras 7 mujeres .
El ‘modus operandi’ del criminal fue especialmente cruento: el condenado introduc?a elevadas cantidades de coca?na en roca, de una gran pureza, por v?a vaginal o anal a sus v?ctimas sin que estas dieran su consentimiento. La absorci?n del estupefaciente a través de las mucosas provocaba una intoxicaci?n letal. Tanto es as? que en el caso de Lady Marcela, el forense del Instituto de Medicina Legal de Valencia que explic? en el juicio la autopsia de la joven lleg? a afirmar «no he visto nunca esa cantidad en un fallecido».
Lady Marcela solo quer?a buscar una vida digna para ella y su familia a la que enviaba dinero desde València y encontr? la muerte a manos de un s?dico.
«Un ?ngel en el camino»
Los padres de Lady Marcela, que la acogieron tras quedarse huérfana después de que su madre falleciera de c?ncer, se han visto obligados a salir de la ciudad colombiana de Cali, donde viv?an, con pr?cticamente nada en la maleta porque el miedo se hab?a instalado en sus vidas.
Aunque en Espa?a el caso del asesino de Marta Calvo, Lady Marcela Vargas y Arliene Ramos fue muy seguido por toda la sociedad, en Colombia la popularidad de este suceso no lleg? hasta el pasado mes de noviembre cuando el canal televisivo m?s importante del pa?s, Caracol Televisi?n, se hizo eco de lo que le hab?a ocurrido a su compatriota en València.
A partir de entonces el temor empez? a crecer. «Hemos huido de Colombia. Quién sabe qué contactos puede tener ese hombre en nuestro pa?s, tenemos miedo de ese asesino», se pregunta Fabio Barr?o. Cabe recordar que Palma Jacome también es colombiano y se dedicaba al narcotr?fico.
La decisi?n se tom? r?pidamente: hab?a que salir de un pa?s donde «no hay muchas opciones de futuro» para darles a los hijos de Lady Marcela, de 6 y 9 a?os, «unos estudios y tener una calidad de vida en un lugar tranquilo», explica la madre de cr?a de la joven asesinada. Toda la familia reuni? el dinero que ten?an disponible y que solo dio para comprar dos billetes a Madrid, donde ?nicamente pudieron permitirse una pensi?n en la que compartieron habitaci?n con toxic?manos. «En cuanto podamos, nos traeremos a nuestros nietos», aseguran.
Cuando Marisol Bur?n, madre de Marta Calvo, supo a través de un mensaje que Fabio y Dora dejaban lo poco que ten?an y se ven?an a Espa?a, se puso en marcha. «Saber que los padres de Lady Marcela iban a llegar en apenas unos d?as me hizo reaccionar r?pidamente», cuenta Bur?n. Los pasos a seguir estaban claros: conseguir una vivienda, trabajo y el empadronamiento que les permita acceder a los servicios y ayudas necesarias para poder comenzar de nuevo.
Buscar trabajo desesperadamente
«Marisol es un ?ngel que nos hemos encontrado en el camino», dice Barr?o acerca de la madre de Marta. «Estamos buscando empleo de cualquier cosa», se?ala la pareja. Aunque el padre de Lady Marcela cuenta con m?s de 20 a?os de experiencia como comercial, est? dispuesto a trabajar en lo que sea. También su mujer. Por el momento Marisol les ha pagado el billete de tren para llegar desde Madrid y les ha ayudado a encontrar alojamiento provisional en el centro de La Pur?sima en Alaquàs, pero ese refugio se terminar? en un mes.
«Hemos hecho decenas de llamadas a amigos, conocidos y contactos para ayudar a Fabio y a Dora Gisela a encontrar un trabajo. No es f?cil pero no perdemos la esperanza», expone Marisol. «Si alguien pudiera darles una oportunidad para comenzar de nuevo en este pa?s, ser?a maravilloso», expresa Bur?n.
Los padres de Lady Marcela, que ten?a 26 a?os cuando la mat? Jorge Ignacio Palma (quien cumple 159 a?os de c?rcel, aunque se ha recurrido la sentencia ante el Tribunal Supremo para que se le aplique la prisi?n permanente revisable), han visitado a su letrado en compa??a de la madre de Marta para que les asesore sobre los pasos a seguir para regularizar su situaci?n.
«Es mi deber. Debo acompa?arles y ayudarles en todo lo que pueda. Es el legado de mi hija. Ella estar?a muy orgullosa de m? porque Marta lo hubiera hecho igual», dice entre l?grimas Marisol Bur?n.
Ayudar a Fabio y a Dora a volver a vivir, si eso es posible cuando a uno le asesinan a una hija de una forma tan salvaje, es el objetivo. Y traer a sus nietos, cuyas palabras de despedida a sus abuelos de casa fueron: «No nos hagan como mami, que se fue y nunca m?s volvi?». Una frase demoledora.
Un trato despectivo en el Centro de Apoyo a la Inmigraci?n de València
Al llegar a València los padres de Lady Marcela visitaron el Centro de Apoyo a la Inmigraci?n para que les orientaran sobre posibles lugares en los que alojarse y, en definitiva, c?mo actuar para iniciar una vida en València. Sin embargo, lejos de sentirse comprendidos y acogidos, sufrieron una experiencia demoledora y un trato despectivo por parte de una trabajadora del centro.
Cuando la madre de Lady Marcela, Dora Gisela, le cont? a esta empleada cu?l era su situaci?n, el motivo de su salida de Colombia y la muerte de su hija, esta le espet?: «Eso es una excusa para quedaros aqu?» y, seg?n cuenta la propia Dora «pusieron en duda todo lo que les dijimos». De hecho, mientras la mujer relataba su dura experiencia no pudo reprimir las l?grimas y la ?nica respuesta que obtuvo fue «si no dejas de llorar, paramos el proceso». Marisol Bur?n, madre de Marta Calvo, se qued? «desolada cuando vio» salir a la pareja del centro desconsolada: «no hay derecho a que traten a alguien as?».
Ayudas para las v?ctimas de violencia sexual
Pendientes de la aprobaci?n del Real Decreto que permita iniciar los tr?mites para solicitar las ayudas, las v?ctimas de violencia sexual encontrar?n un soporte fundamental en los subsidios que contempla en sus art?culos 41 y 42 de la Ley Org?nica 10/2022, de Garant?a Integral de la Libertad Sexual. Las ayudas que recoge la norma ser?n de aportaci?n econ?mica y de facilidades para acceder a una vivienda p?blica u otra soluci?n habitacional.
El art?culo 41 contempla varias ayudas dependiendo de la situaci?n de las v?ctimas. En su apartado 3 es donde se detalla el procedimiento para acceder a ellas. Los tr?mites para solicitarlas estar?n regulados por este Real Decreto y en cuanto entre en vigor, las v?ctimas podr?n solicitarlas.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/hemos-huido-colombia-miedo-asesino-87305429)
Dif?cil, ?verdad? Pues todo esto es por lo que han tenido que pasar Dora Gisela Gutiérrez y Fabio Antonio Barr?o, los padres de Lady Marcela Vargas, la segunda v?ctima mortal del asesino en serie Jorge Ignacio Palma Jacome, el mismo monstruo que seg? las vidas de la joven Marta Calvo, cuyo cad?ver sigue sin aparecer y el de Arliene Ramos, adem?s de intentarlo con otras 7 mujeres .
El ‘modus operandi’ del criminal fue especialmente cruento: el condenado introduc?a elevadas cantidades de coca?na en roca, de una gran pureza, por v?a vaginal o anal a sus v?ctimas sin que estas dieran su consentimiento. La absorci?n del estupefaciente a través de las mucosas provocaba una intoxicaci?n letal. Tanto es as? que en el caso de Lady Marcela, el forense del Instituto de Medicina Legal de Valencia que explic? en el juicio la autopsia de la joven lleg? a afirmar «no he visto nunca esa cantidad en un fallecido».
Lady Marcela solo quer?a buscar una vida digna para ella y su familia a la que enviaba dinero desde València y encontr? la muerte a manos de un s?dico.
«Un ?ngel en el camino»
Los padres de Lady Marcela, que la acogieron tras quedarse huérfana después de que su madre falleciera de c?ncer, se han visto obligados a salir de la ciudad colombiana de Cali, donde viv?an, con pr?cticamente nada en la maleta porque el miedo se hab?a instalado en sus vidas.
Aunque en Espa?a el caso del asesino de Marta Calvo, Lady Marcela Vargas y Arliene Ramos fue muy seguido por toda la sociedad, en Colombia la popularidad de este suceso no lleg? hasta el pasado mes de noviembre cuando el canal televisivo m?s importante del pa?s, Caracol Televisi?n, se hizo eco de lo que le hab?a ocurrido a su compatriota en València.
A partir de entonces el temor empez? a crecer. «Hemos huido de Colombia. Quién sabe qué contactos puede tener ese hombre en nuestro pa?s, tenemos miedo de ese asesino», se pregunta Fabio Barr?o. Cabe recordar que Palma Jacome también es colombiano y se dedicaba al narcotr?fico.
La decisi?n se tom? r?pidamente: hab?a que salir de un pa?s donde «no hay muchas opciones de futuro» para darles a los hijos de Lady Marcela, de 6 y 9 a?os, «unos estudios y tener una calidad de vida en un lugar tranquilo», explica la madre de cr?a de la joven asesinada. Toda la familia reuni? el dinero que ten?an disponible y que solo dio para comprar dos billetes a Madrid, donde ?nicamente pudieron permitirse una pensi?n en la que compartieron habitaci?n con toxic?manos. «En cuanto podamos, nos traeremos a nuestros nietos», aseguran.
Cuando Marisol Bur?n, madre de Marta Calvo, supo a través de un mensaje que Fabio y Dora dejaban lo poco que ten?an y se ven?an a Espa?a, se puso en marcha. «Saber que los padres de Lady Marcela iban a llegar en apenas unos d?as me hizo reaccionar r?pidamente», cuenta Bur?n. Los pasos a seguir estaban claros: conseguir una vivienda, trabajo y el empadronamiento que les permita acceder a los servicios y ayudas necesarias para poder comenzar de nuevo.
Buscar trabajo desesperadamente
«Marisol es un ?ngel que nos hemos encontrado en el camino», dice Barr?o acerca de la madre de Marta. «Estamos buscando empleo de cualquier cosa», se?ala la pareja. Aunque el padre de Lady Marcela cuenta con m?s de 20 a?os de experiencia como comercial, est? dispuesto a trabajar en lo que sea. También su mujer. Por el momento Marisol les ha pagado el billete de tren para llegar desde Madrid y les ha ayudado a encontrar alojamiento provisional en el centro de La Pur?sima en Alaquàs, pero ese refugio se terminar? en un mes.
«Hemos hecho decenas de llamadas a amigos, conocidos y contactos para ayudar a Fabio y a Dora Gisela a encontrar un trabajo. No es f?cil pero no perdemos la esperanza», expone Marisol. «Si alguien pudiera darles una oportunidad para comenzar de nuevo en este pa?s, ser?a maravilloso», expresa Bur?n.
Los padres de Lady Marcela, que ten?a 26 a?os cuando la mat? Jorge Ignacio Palma (quien cumple 159 a?os de c?rcel, aunque se ha recurrido la sentencia ante el Tribunal Supremo para que se le aplique la prisi?n permanente revisable), han visitado a su letrado en compa??a de la madre de Marta para que les asesore sobre los pasos a seguir para regularizar su situaci?n.
«Es mi deber. Debo acompa?arles y ayudarles en todo lo que pueda. Es el legado de mi hija. Ella estar?a muy orgullosa de m? porque Marta lo hubiera hecho igual», dice entre l?grimas Marisol Bur?n.
Ayudar a Fabio y a Dora a volver a vivir, si eso es posible cuando a uno le asesinan a una hija de una forma tan salvaje, es el objetivo. Y traer a sus nietos, cuyas palabras de despedida a sus abuelos de casa fueron: «No nos hagan como mami, que se fue y nunca m?s volvi?». Una frase demoledora.
Un trato despectivo en el Centro de Apoyo a la Inmigraci?n de València
Al llegar a València los padres de Lady Marcela visitaron el Centro de Apoyo a la Inmigraci?n para que les orientaran sobre posibles lugares en los que alojarse y, en definitiva, c?mo actuar para iniciar una vida en València. Sin embargo, lejos de sentirse comprendidos y acogidos, sufrieron una experiencia demoledora y un trato despectivo por parte de una trabajadora del centro.
Cuando la madre de Lady Marcela, Dora Gisela, le cont? a esta empleada cu?l era su situaci?n, el motivo de su salida de Colombia y la muerte de su hija, esta le espet?: «Eso es una excusa para quedaros aqu?» y, seg?n cuenta la propia Dora «pusieron en duda todo lo que les dijimos». De hecho, mientras la mujer relataba su dura experiencia no pudo reprimir las l?grimas y la ?nica respuesta que obtuvo fue «si no dejas de llorar, paramos el proceso». Marisol Bur?n, madre de Marta Calvo, se qued? «desolada cuando vio» salir a la pareja del centro desconsolada: «no hay derecho a que traten a alguien as?».
Ayudas para las v?ctimas de violencia sexual
Pendientes de la aprobaci?n del Real Decreto que permita iniciar los tr?mites para solicitar las ayudas, las v?ctimas de violencia sexual encontrar?n un soporte fundamental en los subsidios que contempla en sus art?culos 41 y 42 de la Ley Org?nica 10/2022, de Garant?a Integral de la Libertad Sexual. Las ayudas que recoge la norma ser?n de aportaci?n econ?mica y de facilidades para acceder a una vivienda p?blica u otra soluci?n habitacional.
El art?culo 41 contempla varias ayudas dependiendo de la situaci?n de las v?ctimas. En su apartado 3 es donde se detalla el procedimiento para acceder a ellas. Los tr?mites para solicitarlas estar?n regulados por este Real Decreto y en cuanto entre en vigor, las v?ctimas podr?n solicitarlas.
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