الريــم
04-27-2023, 08:00 AM
El Barça anunci? las nuevas condiciones para asistir a los partidos en Montjuic la temporada que viene, y ha sembrado la inquietud en el socio del Barça. Porque es sano y defendible que el acceso de los abonados a las entradas se haga por estricto sorteo. Es c?vico y ejemplar que en esta nueva etapa el club promueva el uso del transporte p?blico. Y es muy l?gico que en este traslado el socio tenga que asumir sacrificios.
Ahora bien: lo que es indefendible es que el porcentaje de abonados pase del 80% del total en el Camp Nou a poco m?s de la mitad en el Estadi Llu?s Companys, como es injustificable subir los precios de los abonos entre un 30% y un 40% cuando las condiciones generales de visi?n y accesibilidad no solo no mejoran sino que empeoran ostensiblemente. A la pregunta de por qué se encarec?an las entradas, la vicepresidenta Elena Fort neg? la mayor y se justific? diciendo que en realidad “se trata de otro producto”. No cuela.
Por muchos malabares lingü?sticos que se hagan, lo que de verdad quiere el Barça, pero no puede confesar, es destinar m?s butacas para los turistas y aumentar la rentabilidad de las entradas, as? como mejorar sensiblemente el margen que obtiene de los abonos. El club sabe desde hace mucho tiempo que quien da m?s beneficios es el turista, no el socio, porque est? dispuesto a pagar el triple por cada entrada y adem?s es consciente que el Barça es uno de los grandes clubes que tiene los abonos m?s baratos de Europa.
Hasta ahora, los bajos precios para los socios del Barça ten?an una justificaci?n social: se trataba de promover un club m?s democr?tico e inclusivo, donde se premiara la fidelidad y no todo fueran intereses econ?micos inmediatos. El anuncio de las nuevas condiciones para los abonados en Montjuic supone a la pr?ctica una clara ruptura con esta filosof?a. Consciente de ello, la junta actual, que hace lo mismo que hubiera hecho la anterior, opta por el negacionismo: sube los precios, pero niega que los suba porque sabe que, de admitirlo, estar?a de hecho traicionando la promesa electoral de no subir los precios.
Sin embargo, queda en el aire una sospecha muy fundada, que evidentemente también ser? negada: es posible que no estemos ante una medida coyuntural sino ante un cambio estructural. Montjuic puede anticipar, de hecho, un nuevo Camp Nou donde ir al f?tbol ser? cosa solamente de ricos, de turistas y de multimillonarios saud?es. De eso iba, en realidad, el Espai Barça
M?S QUE UN CLUB, El silencio que delata a Messi y el Barça
Una lenta, constante e inteligente estrategia est? acercando Messi al Barça. Esta vez, lo que delata el acercamiento no son las palabras sino precisamente el silencio. El hecho de que ninguna de las dos partes haga manifestaciones en p?blico es un indicio de que algo muy esperanzador se est? cociendo por debajo de la mesa. Sabemos que hay un claro acercamiento después de dos a?os de distancia, pero también sabemos que queda un largo trecho hasta llegar al ansiado acuerdo. Queda lo m?s importante: una oferta oficial del club, que lo convenza definitivamente. Eso s?, nunca el silencio explic? tantas cosas.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/opinion/barca-ricos-86530668)
Ahora bien: lo que es indefendible es que el porcentaje de abonados pase del 80% del total en el Camp Nou a poco m?s de la mitad en el Estadi Llu?s Companys, como es injustificable subir los precios de los abonos entre un 30% y un 40% cuando las condiciones generales de visi?n y accesibilidad no solo no mejoran sino que empeoran ostensiblemente. A la pregunta de por qué se encarec?an las entradas, la vicepresidenta Elena Fort neg? la mayor y se justific? diciendo que en realidad “se trata de otro producto”. No cuela.
Por muchos malabares lingü?sticos que se hagan, lo que de verdad quiere el Barça, pero no puede confesar, es destinar m?s butacas para los turistas y aumentar la rentabilidad de las entradas, as? como mejorar sensiblemente el margen que obtiene de los abonos. El club sabe desde hace mucho tiempo que quien da m?s beneficios es el turista, no el socio, porque est? dispuesto a pagar el triple por cada entrada y adem?s es consciente que el Barça es uno de los grandes clubes que tiene los abonos m?s baratos de Europa.
Hasta ahora, los bajos precios para los socios del Barça ten?an una justificaci?n social: se trataba de promover un club m?s democr?tico e inclusivo, donde se premiara la fidelidad y no todo fueran intereses econ?micos inmediatos. El anuncio de las nuevas condiciones para los abonados en Montjuic supone a la pr?ctica una clara ruptura con esta filosof?a. Consciente de ello, la junta actual, que hace lo mismo que hubiera hecho la anterior, opta por el negacionismo: sube los precios, pero niega que los suba porque sabe que, de admitirlo, estar?a de hecho traicionando la promesa electoral de no subir los precios.
Sin embargo, queda en el aire una sospecha muy fundada, que evidentemente también ser? negada: es posible que no estemos ante una medida coyuntural sino ante un cambio estructural. Montjuic puede anticipar, de hecho, un nuevo Camp Nou donde ir al f?tbol ser? cosa solamente de ricos, de turistas y de multimillonarios saud?es. De eso iba, en realidad, el Espai Barça
M?S QUE UN CLUB, El silencio que delata a Messi y el Barça
Una lenta, constante e inteligente estrategia est? acercando Messi al Barça. Esta vez, lo que delata el acercamiento no son las palabras sino precisamente el silencio. El hecho de que ninguna de las dos partes haga manifestaciones en p?blico es un indicio de que algo muy esperanzador se est? cociendo por debajo de la mesa. Sabemos que hay un claro acercamiento después de dos a?os de distancia, pero también sabemos que queda un largo trecho hasta llegar al ansiado acuerdo. Queda lo m?s importante: una oferta oficial del club, que lo convenza definitivamente. Eso s?, nunca el silencio explic? tantas cosas.
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