الريــم
04-25-2023, 05:30 PM
La Fiscal?a Provincial de Barcelona acaba de presentar un escrito en el juzgado de instrucci?n 15 de Barcelona para oponerse al recurso presentado por la defensa de Dani Alves, que solicit? el fin de la prisi?n preventiva. La fiscal entiende que los motivos por los que se acord? su encierro provisional el 20 de enero no han variado: el riesgo de fuga persiste y, en consecuencia, el ministerio p?blico solicita que el exjugador del FC Barcelona contin?e en su celda de Brians 2.Crist?bal Martell, el abogado de Alves, razonaba en su ?ltimo recurso que Alves tiene argumentos para defenderse de la denuncia por violaci?n que present? contra él una joven de 23 a?os, que declar? que el exjugador la agredi? sexualmente en el ba?o de la discoteca Sutton de Barcelona durante la noche del 30 al 31 de diciembre. Martell remarcaba asimismo que Alves no huir?a a Brasil en caso de salir en libertad antes del juicio y ped?a que la prisi?n cautelar se substituyera por otras medidas como la retirada de su pasaporte. Martell present? el escrito para sacar a su cliente de la c?rcel poco después de que este declarara, a petici?n propia, por segunda vez en el juzgado de Barcelona.
En esta segunda declaraci?n, Alves ofreci? una cuarta versi?n de lo sucedido en el ba?o de Sutton en la que, por primera vez, admiti? que s? hubo penetraci?n –el ADN as? lo hab?a confirmado, tal como siempre hab?a mantenido la v?ctima– aunque subray? que esta fue consentida.
La fiscal, tras escuchar este segundo interrogatorio y leer el recurso presentado por Martell, considera que la situaci?n no ha cambiado. El riesgo de fuga prevalece y, para garantizar que Alves sea juzgado, resulta procedente mantener la prisi?n preventiva que orden? en su d?a la jueza y ratific?, semanas después, la Audiencia de Barcelona.
Las cuatro versiones
Alves ha dado cuatro versiones distintas sobre estos hechos. Las tres primeras han quedado desmentidas por la investigaci?n de los Mossos d'Esquadra. En la cuarta, ofrecida el pasado 17 de abril durante su segunda declaraci?n, el futbolista mantiene que, tras bailar con la v?ctima en una mesa VIP de Sutton, le propuso ir al ba?o a mantener relaciones sexuales, que ella acept? y que lo que sucedi? en el interior de ese espacio min?sculo y sin c?maras fue lo siguiente: él se sent? en el v?ter, ella se arrodill? frente a él y le practic? una felaci?n. Después, ella se sent? sobre él y él la penetr?.
La versi?n de la mujer
La joven, por su parte, relat? a los Mossos dos d?as después de los hechos y también en sede judicial, el 20 de enero, que lo que sucedi? esa noche fue que sigui? a Alves no porque este le hubiera propuesto mantener relaciones sexuales sino porque este –desde el interior del reservado y cuando ella todav?a se encontraba junto a sus amigas– comenz? a hacerle gestos insistentemente para que fuera donde él se encontraba. Finalmente ella accedi? a reunirse con Alves dentro de ese espacio sin c?maras. Entr? en el reservado y cruz?, siguiendo las indicaciones de Alves, a través de una puerta sin saber a d?nde conduc?a. La v?ctima declar? que, al descubrir que era un ba?o, quiso salir. Pero Alves se lo impidi?, cerrando la puerta.
Después, seg?n su denuncia, Alves se sent? en el retrete y a ella se la sent? encima por la fuerza. Ella le pidi? que parara y suplic? que la dejara marcharse. ?l se neg?. La tir? al suelo, la agarr? por el cuello, la abofete? e intent? que le hiciera una felaci?n con violencia -a lo que ella se neg?-. Después la levant?, la coloc? contra el lavamanos y, por ?ltimo, la puso contra el retrete y la penetr? hasta eyacular.
Los indicios
La versi?n de la v?ctima coincidi? posteriormente con los indicios recabados por los Mossos: con el semen de Alves en una muestra intravaginal, con el rasgu?o en la rodilla que consta en el parte médico y también con la ubicaci?n de las huellas dactilares que se hallaron en el ba?o. La polic?a cient?fica contabiliz? siete huellas de la v?ctima en el ba?o de Sutton y ninguna de Alves. Las huellas de la denunciante estaban en la pica, en la pared y en el v?ter, seg?n las fuentes jur?dicas consultadas por este diario.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/fiscalia-opone-peticion-libertad-dani-86474499)
En esta segunda declaraci?n, Alves ofreci? una cuarta versi?n de lo sucedido en el ba?o de Sutton en la que, por primera vez, admiti? que s? hubo penetraci?n –el ADN as? lo hab?a confirmado, tal como siempre hab?a mantenido la v?ctima– aunque subray? que esta fue consentida.
La fiscal, tras escuchar este segundo interrogatorio y leer el recurso presentado por Martell, considera que la situaci?n no ha cambiado. El riesgo de fuga prevalece y, para garantizar que Alves sea juzgado, resulta procedente mantener la prisi?n preventiva que orden? en su d?a la jueza y ratific?, semanas después, la Audiencia de Barcelona.
Las cuatro versiones
Alves ha dado cuatro versiones distintas sobre estos hechos. Las tres primeras han quedado desmentidas por la investigaci?n de los Mossos d'Esquadra. En la cuarta, ofrecida el pasado 17 de abril durante su segunda declaraci?n, el futbolista mantiene que, tras bailar con la v?ctima en una mesa VIP de Sutton, le propuso ir al ba?o a mantener relaciones sexuales, que ella acept? y que lo que sucedi? en el interior de ese espacio min?sculo y sin c?maras fue lo siguiente: él se sent? en el v?ter, ella se arrodill? frente a él y le practic? una felaci?n. Después, ella se sent? sobre él y él la penetr?.
La versi?n de la mujer
La joven, por su parte, relat? a los Mossos dos d?as después de los hechos y también en sede judicial, el 20 de enero, que lo que sucedi? esa noche fue que sigui? a Alves no porque este le hubiera propuesto mantener relaciones sexuales sino porque este –desde el interior del reservado y cuando ella todav?a se encontraba junto a sus amigas– comenz? a hacerle gestos insistentemente para que fuera donde él se encontraba. Finalmente ella accedi? a reunirse con Alves dentro de ese espacio sin c?maras. Entr? en el reservado y cruz?, siguiendo las indicaciones de Alves, a través de una puerta sin saber a d?nde conduc?a. La v?ctima declar? que, al descubrir que era un ba?o, quiso salir. Pero Alves se lo impidi?, cerrando la puerta.
Después, seg?n su denuncia, Alves se sent? en el retrete y a ella se la sent? encima por la fuerza. Ella le pidi? que parara y suplic? que la dejara marcharse. ?l se neg?. La tir? al suelo, la agarr? por el cuello, la abofete? e intent? que le hiciera una felaci?n con violencia -a lo que ella se neg?-. Después la levant?, la coloc? contra el lavamanos y, por ?ltimo, la puso contra el retrete y la penetr? hasta eyacular.
Los indicios
La versi?n de la v?ctima coincidi? posteriormente con los indicios recabados por los Mossos: con el semen de Alves en una muestra intravaginal, con el rasgu?o en la rodilla que consta en el parte médico y también con la ubicaci?n de las huellas dactilares que se hallaron en el ba?o. La polic?a cient?fica contabiliz? siete huellas de la v?ctima en el ba?o de Sutton y ninguna de Alves. Las huellas de la denunciante estaban en la pica, en la pared y en el v?ter, seg?n las fuentes jur?dicas consultadas por este diario.
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