الريــم
03-29-2023, 11:30 AM
Espa?a cierra la primera ventana de selecciones de 2023 con m?s dudas que certezas: una victoria ante Noruega (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/espana-golea-noruega-joselu-activa-85179416)(3-0) y una derrota en Escocia (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/inquietante-paso-espana-glasgow-85316410)(2-0) no sirven para consolidar el proyecto de Luis de la Fuente, que en sus primeros partidos como seleccionador ofreci? una imagen a?n demasiado err?tica.
Espa?a sigue a la b?squeda de un once m?s o menos consolidado. Tras la etapa de Luis Enrique, un entrenador absolutamente fiel a una idea -y poco permeable a flexibilizarla-, Luis de la Fuente asume el reto de recuperar la competitividad del equipo, puesta en duda durante el Mundial, pero para ello, tiene por delante un trabajo arduo y con varios frentes abiertos, entre ellos los siguientes:
A la busca de un once tipo
De la Fuente introdujo de golpe ocho cambios. De un partido a otro, cuatro d?as de diferencia y dos alineaciones pr?cticamente diferentes. Fue un cambio demasiado radical, y el equipo lo acus?.
De los once que salieron de inicio en Hampden Park (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/siete-historias-conocer-mejor-hampden-85201984), solo uno, Rodri, hab?a tenido minutos en el Mundial de Qatar. Otro, Yerémi Pino, hab?a estado en el torneo, pero sin minutos. El resto, ni siquiera hab?a formado parte de los convocados por Luis Enrique.
De la Fuente hab?a avisado en la previa de que har?a algunos retoques. "Lo hac?a en la selecci?n sub-21 y funcionaba, ?por qué no hacerlo aqu??", reflexion?. Pero la exigencia, la presi?n, el escenario y los rivales cambian enormemente de la sub-21 a la absoluta.
Espa?a no tiene el cuajo suficiente como para aguantar ocho cambios de golpe: en Glasgow, fue un equipo desnaturalizado, un puzzle sin armar, con jugadores debutantes -David Garc?a-, otros con escaso recorrido en la selecci?n -para Pedro Porro era su segundo partido como internacional- y sin un l?der claro sobre el terreno de juego. Morata (capit?n) no tuvo minutos y Aspas entr? en la segunda parte.
De la Fuente necesita encontrar un once tipo: o al menos, una columna vertebral a partir de la cual construir una alineaci?n m?s o menos reconocible. A partir de ah?, lograr? que Espa?a vuelva a ser una selecci?n con cara y ojos. En Glasgow no lo fue. En M?laga, solo a ratos.
Demasiados agujeros en defensa
El f?tbol actual castiga con crueldad los errores defensivos: conviene armar al equipo desde atr?s, cerrar bien la puerta antes de salir de casa; a menos que el potencial ofensivo sirva para compensar los errores atr?s. No es el caso de Espa?a.
Ante Noruega, el equipo evidenci? algunas carencias que los rivales no supieron aprovechar. Escocia, en cambio, sac? petr?leo. Dos acciones similares, en segunda jugada y con McTominay llegando desde atr?s, sirvieron para decantar el partido. Si en M?laga jugaron Laporte y Nacho como centrales, en Glasgow lo hicieron ??igo Mart?nez y David Garc?a. También los laterales cambiaron. Carvajal y Balde primero; Porro y Gayà después.
A Espa?a le falt? consistencia y seguridad. Dej? la sensaci?n de ser un equipo poco fiable en la retaguardia. El caso del lateral derecho fue el m?s preocupante, porque ni Carvajal ni Porro ofrecieron demasiadas garant?as.
El plan A, el plan B y el plan de juego
La prensa elogi? a De la Fuente por haber rescatado la figura del delantero centro cl?sico. "Lo advierto ya, para m? no existe eso de falso delantero", dijo el seleccionador en Escocia. Es el llamado plan B, que tanto se le reclam? a Luis Enrique: contar con un delantero puramente rematador como soluci?n de emergencia. Funcion? ante Noruega, pero no ante Escocia. Espa?a dio la sensaci?n de recurrir antes al plan B que al A: existen dudas sobre cu?l es la idea de juego que quiere implantar De la Fuente.
Aunque su sistema parece definido (4-2-3-1), el estilo de Espa?a est? por cuajar. A?n no se sabe con certeza si es un equipo de extremos o de interiores, si prefiere jugar por dentro o por fuera, si el delantero centro ser? puramente rematador o m?s asociativo.
Falta por definir el papel del media punta -Ceballos ha alternado minutos de calidad con otros m?s grises- y de los dos pivotes. Mikel Merino y Rodri fueron los ?nicos que repitieron titularidad (adem?s de Kepa), pero en Glasgow alimentaron el debate sobre su compatibilidad en el campo.
https://www.uc-4u.com/clip/86d6cb39-46d1-430f-83a2-20c20cc44d48_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Joselu se lamenta en un momento del Escocia-Espa?a. | EFE
La autocr?tica y el mensaje
Ante los periodistas, Luis de la Fuente tiene un trato exquisito. Es una persona extremadamente educada. Respeta la labor de la prensa, hasta el punto de admitir que lee y escucha "casi todo", mientras la mayor?a de sus colegas presume de no hacerlo.
Pero el nuevo seleccionador (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/fuente-equipo-hambre-importante-85252046) también debe ir adapt?ndose a las exigencias medi?ticas de su nuevo cargo: la presi?n es infinitamente mayor que en la sub-21 y probablemente su mensaje también deba ser otro.
Tras caer en Glasgow, dijo estar satisfecho con el juego de su equipo, unas palabras que la prensa desplazada a Hampden Park no supo procesar. Probablemente le falt? autocr?tica. Espa?a fue un equipo voluntarioso, pero falto de recursos y de car?cter; y el seleccionador no logr? explicar qué le falt? al equipo.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/lista-fuente-deberes-nuevo-seleccionador-85325659)
Espa?a sigue a la b?squeda de un once m?s o menos consolidado. Tras la etapa de Luis Enrique, un entrenador absolutamente fiel a una idea -y poco permeable a flexibilizarla-, Luis de la Fuente asume el reto de recuperar la competitividad del equipo, puesta en duda durante el Mundial, pero para ello, tiene por delante un trabajo arduo y con varios frentes abiertos, entre ellos los siguientes:
A la busca de un once tipo
De la Fuente introdujo de golpe ocho cambios. De un partido a otro, cuatro d?as de diferencia y dos alineaciones pr?cticamente diferentes. Fue un cambio demasiado radical, y el equipo lo acus?.
De los once que salieron de inicio en Hampden Park (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/siete-historias-conocer-mejor-hampden-85201984), solo uno, Rodri, hab?a tenido minutos en el Mundial de Qatar. Otro, Yerémi Pino, hab?a estado en el torneo, pero sin minutos. El resto, ni siquiera hab?a formado parte de los convocados por Luis Enrique.
De la Fuente hab?a avisado en la previa de que har?a algunos retoques. "Lo hac?a en la selecci?n sub-21 y funcionaba, ?por qué no hacerlo aqu??", reflexion?. Pero la exigencia, la presi?n, el escenario y los rivales cambian enormemente de la sub-21 a la absoluta.
Espa?a no tiene el cuajo suficiente como para aguantar ocho cambios de golpe: en Glasgow, fue un equipo desnaturalizado, un puzzle sin armar, con jugadores debutantes -David Garc?a-, otros con escaso recorrido en la selecci?n -para Pedro Porro era su segundo partido como internacional- y sin un l?der claro sobre el terreno de juego. Morata (capit?n) no tuvo minutos y Aspas entr? en la segunda parte.
De la Fuente necesita encontrar un once tipo: o al menos, una columna vertebral a partir de la cual construir una alineaci?n m?s o menos reconocible. A partir de ah?, lograr? que Espa?a vuelva a ser una selecci?n con cara y ojos. En Glasgow no lo fue. En M?laga, solo a ratos.
Demasiados agujeros en defensa
El f?tbol actual castiga con crueldad los errores defensivos: conviene armar al equipo desde atr?s, cerrar bien la puerta antes de salir de casa; a menos que el potencial ofensivo sirva para compensar los errores atr?s. No es el caso de Espa?a.
Ante Noruega, el equipo evidenci? algunas carencias que los rivales no supieron aprovechar. Escocia, en cambio, sac? petr?leo. Dos acciones similares, en segunda jugada y con McTominay llegando desde atr?s, sirvieron para decantar el partido. Si en M?laga jugaron Laporte y Nacho como centrales, en Glasgow lo hicieron ??igo Mart?nez y David Garc?a. También los laterales cambiaron. Carvajal y Balde primero; Porro y Gayà después.
A Espa?a le falt? consistencia y seguridad. Dej? la sensaci?n de ser un equipo poco fiable en la retaguardia. El caso del lateral derecho fue el m?s preocupante, porque ni Carvajal ni Porro ofrecieron demasiadas garant?as.
El plan A, el plan B y el plan de juego
La prensa elogi? a De la Fuente por haber rescatado la figura del delantero centro cl?sico. "Lo advierto ya, para m? no existe eso de falso delantero", dijo el seleccionador en Escocia. Es el llamado plan B, que tanto se le reclam? a Luis Enrique: contar con un delantero puramente rematador como soluci?n de emergencia. Funcion? ante Noruega, pero no ante Escocia. Espa?a dio la sensaci?n de recurrir antes al plan B que al A: existen dudas sobre cu?l es la idea de juego que quiere implantar De la Fuente.
Aunque su sistema parece definido (4-2-3-1), el estilo de Espa?a est? por cuajar. A?n no se sabe con certeza si es un equipo de extremos o de interiores, si prefiere jugar por dentro o por fuera, si el delantero centro ser? puramente rematador o m?s asociativo.
Falta por definir el papel del media punta -Ceballos ha alternado minutos de calidad con otros m?s grises- y de los dos pivotes. Mikel Merino y Rodri fueron los ?nicos que repitieron titularidad (adem?s de Kepa), pero en Glasgow alimentaron el debate sobre su compatibilidad en el campo.
https://www.uc-4u.com/clip/86d6cb39-46d1-430f-83a2-20c20cc44d48_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Joselu se lamenta en un momento del Escocia-Espa?a. | EFE
La autocr?tica y el mensaje
Ante los periodistas, Luis de la Fuente tiene un trato exquisito. Es una persona extremadamente educada. Respeta la labor de la prensa, hasta el punto de admitir que lee y escucha "casi todo", mientras la mayor?a de sus colegas presume de no hacerlo.
Pero el nuevo seleccionador (https://www.sport.es/es/noticias/seleccion/fuente-equipo-hambre-importante-85252046) también debe ir adapt?ndose a las exigencias medi?ticas de su nuevo cargo: la presi?n es infinitamente mayor que en la sub-21 y probablemente su mensaje también deba ser otro.
Tras caer en Glasgow, dijo estar satisfecho con el juego de su equipo, unas palabras que la prensa desplazada a Hampden Park no supo procesar. Probablemente le falt? autocr?tica. Espa?a fue un equipo voluntarioso, pero falto de recursos y de car?cter; y el seleccionador no logr? explicar qué le falt? al equipo.
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