الريــم
01-31-2023, 11:33 AM
Espa?a aborda esta semana una cita definitiva en Rabat para encauzar una nueva relaci?n con Marruecos con la celebraci?n de una Reuni?n de Alto Nivel (https://www.epe.es/es/politica/20230131/espana-otorga-nuevo-estatus-bilateral-82219580) (RAN) el 1 y 2 de febrero, que sella la buena comunicaci?n existente entre los dos pa?ses tras el giro del Gobierno en su postura sobre el S?hara. El apoyo expl?cito al plan autonomista marroqu? desencall? una larga y profunda crisis bilateral y permiti? una nueva sinton?a con el vecino africano, amasada en varios pasos, que culmina con esta cumbre.
A partir de ahora el Ejecutivo aspira a dejar atr?s el desequilibrio en la comunicaci?n con el reino alau?, que ha combinado etapas de entendimiento con otras de mucha fricci?n, para evitar "crisis peri?dicas". En definitiva dotar a la relaci?n bilateral de normalidad. Espa?a pasa as? de ver Marruecos como un pa?s con el que est? condenado a entenderse a un "socio estratégico", a quien le reconoce sin medias tintas esta consideraci?n. Para todos los presidentes del Gobierno ha sido una prioridad pero ahora la intenci?n es reconocer esa jerarqu?a en el d?a a d?a.
No es casualidad que Felipe VI, la semana pasada, en la recepci?n al cuerpo diplom?tico, aludiera a la RAN como la cita que "permitir? profundizar nuestras amplias relaciones bilaterales para trabajar juntos sobre bases m?s s?lidas", destac?. Ni que este lunes Mohamed VI felicitara al rey espa?ol por su cumplea?os e incluyera una menci?n a intensificar la cooperaci?n de "dos pueblos amigos". Estas referencias p?blicas dan fe, tanto de lo lejos que ha llegado el Ejecutivo al implicar al Rey en la soluci?n de la crisis, como de la trascendencia que el monarca alau? otorga a sus lazos con Espa?a.
Aunque la cumbre es entre Gobiernos, no se descarta que Mohamed VI reciba en audiencia a Pedro S?nchez. De la parte espa?ola acudir?n una docena de ministros, ninguno de Unidas Podemos, que rechaza la nueva posici?n sobre el S?hara, y alguno m?s, probablemente, de la parte marroqu?. Junto al jefe del Ejecutivo estar? la vicepresidenta primera y tercera, Nadia Calvi?o y Teresa Ribera, respectivamente, y los ministros de Asuntos Exteriores, Interior, Justicia, Industria, Transportes, Inclusi?n Social, Agricultura, Educaci?n, Cultura y Ciencia. Y se firmar? adem?s, una declaraci?n conjunta con una profundidad y calado que no tiene precedentes, seg?n estiman en Moncloa. Todo para impulsar el encaje definitivo de un entendimiento duradero que, seg?n la visi?n espa?ola, beneficia a nuestro pa?s, a Marruecos y también a la UE.
Con la superaci?n de la ?ltima crisis -alimentada, precisamente, porque el Gobierno no apoyaba el plan marroqu? para el S?hara-, Espa?a ha obtenido ya beneficios inmediatos. Las llegadas de inmigrantes procedentes de Marruecos, tanto por la ruta mediterr?nea como por la atl?ntica, se han reducido un 31%. A este control se suma la ayuda que los marroqu?es prestan en la persecuci?n de grupos terroristas. En este aspecto la cooperaci?n es clave como demuestran las 279 operaciones conjuntas y la detenci?n de 497 personas susceptibles de cometer atentados en la ?ltima década.
Relaci?n comercial
Pero la relaci?n con el reino de Mohamed VI tiene también un flanco no menor que es el econ?mico. En 2021 los intercambios comerciales alcanzaron los 17.000 millones de euros, 9.500 de exportaciones y 7.300 de importaci?n. Es uno de los principales mercados de las empresas espa?olas, muy por encima de pa?ses latinoamericanos que se presumen m?s accesibles para nuestro pa?s. Seg?n la Moncloa los empresarios tienen "enorme interés en participar en proyectos de infraestructuras" y por eso se ha organizado también un foro entre la patronal espa?ola y la marroqu? y se va a firmar un nuevo protocolo del fondo financiero creado en 2008 con un importe de 800 millones de euros. Se trata de l?neas financieras para proyectos en Marruecos.
No se llega a la RAN con todo resuelto ya que queda a?n pendiente la instauraci?n de aduanas en Ceuta (donde nunca ha existido) y en Melilla (cerrada hace cinco a?os), que servir? a ambos pa?ses para acabar con el denominado comercio at?pico y que Espa?a considera una demostraci?n de respeto a su integridad territorial porque "s?lo se tienen acuerdos comerciales con terceros pa?ses", en referencia a la espa?olidad de dos ciudades aut?nomas. Muchos expertos en seguridad y pol?ticos con recorrido internacional o conocimiento de Marruecos dan por seguro que Mohamed VI no renunciar? a considerar Ceuta y Melilla como una parte m?s de su pa?s. El Gobierno es consciente pero cree que, con su giro en el S?hara, ha logrado neutralizar estas demandas.
De esto trata también la apertura de esta nueva etapa, en la que Marruecos se reivindica como un pa?s capaz de tratar de igual a igual a sus socios europeos, que ha utilizado la pol?tica exterior como arma de presi?n y que, pese a su falta de desarrollo y de un sistema democr?tico, est? inmerso en una fase de empoderamiento impulsado por Mohamed VI, que ha permeado en una parte importante de su poblaci?n. Espa?a parece ser consciente de todos estos cambios y otorga a Marruecos un nuevo estatus bilateral. Esto explica tanto el giro sobre el S?hara como el hecho de que el presidente ordenara recientemente a sus eurodiputados no votar en contra de la reprobaci?n al reino alau? en el Parlamento europeo. Llegar a este punto no ha salido gratis. Ahora falta saber si lo que hay delante es una l?nea recta.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/espana-otorga-nuevo-estatus-bilateral-82233995)
A partir de ahora el Ejecutivo aspira a dejar atr?s el desequilibrio en la comunicaci?n con el reino alau?, que ha combinado etapas de entendimiento con otras de mucha fricci?n, para evitar "crisis peri?dicas". En definitiva dotar a la relaci?n bilateral de normalidad. Espa?a pasa as? de ver Marruecos como un pa?s con el que est? condenado a entenderse a un "socio estratégico", a quien le reconoce sin medias tintas esta consideraci?n. Para todos los presidentes del Gobierno ha sido una prioridad pero ahora la intenci?n es reconocer esa jerarqu?a en el d?a a d?a.
No es casualidad que Felipe VI, la semana pasada, en la recepci?n al cuerpo diplom?tico, aludiera a la RAN como la cita que "permitir? profundizar nuestras amplias relaciones bilaterales para trabajar juntos sobre bases m?s s?lidas", destac?. Ni que este lunes Mohamed VI felicitara al rey espa?ol por su cumplea?os e incluyera una menci?n a intensificar la cooperaci?n de "dos pueblos amigos". Estas referencias p?blicas dan fe, tanto de lo lejos que ha llegado el Ejecutivo al implicar al Rey en la soluci?n de la crisis, como de la trascendencia que el monarca alau? otorga a sus lazos con Espa?a.
Aunque la cumbre es entre Gobiernos, no se descarta que Mohamed VI reciba en audiencia a Pedro S?nchez. De la parte espa?ola acudir?n una docena de ministros, ninguno de Unidas Podemos, que rechaza la nueva posici?n sobre el S?hara, y alguno m?s, probablemente, de la parte marroqu?. Junto al jefe del Ejecutivo estar? la vicepresidenta primera y tercera, Nadia Calvi?o y Teresa Ribera, respectivamente, y los ministros de Asuntos Exteriores, Interior, Justicia, Industria, Transportes, Inclusi?n Social, Agricultura, Educaci?n, Cultura y Ciencia. Y se firmar? adem?s, una declaraci?n conjunta con una profundidad y calado que no tiene precedentes, seg?n estiman en Moncloa. Todo para impulsar el encaje definitivo de un entendimiento duradero que, seg?n la visi?n espa?ola, beneficia a nuestro pa?s, a Marruecos y también a la UE.
Con la superaci?n de la ?ltima crisis -alimentada, precisamente, porque el Gobierno no apoyaba el plan marroqu? para el S?hara-, Espa?a ha obtenido ya beneficios inmediatos. Las llegadas de inmigrantes procedentes de Marruecos, tanto por la ruta mediterr?nea como por la atl?ntica, se han reducido un 31%. A este control se suma la ayuda que los marroqu?es prestan en la persecuci?n de grupos terroristas. En este aspecto la cooperaci?n es clave como demuestran las 279 operaciones conjuntas y la detenci?n de 497 personas susceptibles de cometer atentados en la ?ltima década.
Relaci?n comercial
Pero la relaci?n con el reino de Mohamed VI tiene también un flanco no menor que es el econ?mico. En 2021 los intercambios comerciales alcanzaron los 17.000 millones de euros, 9.500 de exportaciones y 7.300 de importaci?n. Es uno de los principales mercados de las empresas espa?olas, muy por encima de pa?ses latinoamericanos que se presumen m?s accesibles para nuestro pa?s. Seg?n la Moncloa los empresarios tienen "enorme interés en participar en proyectos de infraestructuras" y por eso se ha organizado también un foro entre la patronal espa?ola y la marroqu? y se va a firmar un nuevo protocolo del fondo financiero creado en 2008 con un importe de 800 millones de euros. Se trata de l?neas financieras para proyectos en Marruecos.
No se llega a la RAN con todo resuelto ya que queda a?n pendiente la instauraci?n de aduanas en Ceuta (donde nunca ha existido) y en Melilla (cerrada hace cinco a?os), que servir? a ambos pa?ses para acabar con el denominado comercio at?pico y que Espa?a considera una demostraci?n de respeto a su integridad territorial porque "s?lo se tienen acuerdos comerciales con terceros pa?ses", en referencia a la espa?olidad de dos ciudades aut?nomas. Muchos expertos en seguridad y pol?ticos con recorrido internacional o conocimiento de Marruecos dan por seguro que Mohamed VI no renunciar? a considerar Ceuta y Melilla como una parte m?s de su pa?s. El Gobierno es consciente pero cree que, con su giro en el S?hara, ha logrado neutralizar estas demandas.
De esto trata también la apertura de esta nueva etapa, en la que Marruecos se reivindica como un pa?s capaz de tratar de igual a igual a sus socios europeos, que ha utilizado la pol?tica exterior como arma de presi?n y que, pese a su falta de desarrollo y de un sistema democr?tico, est? inmerso en una fase de empoderamiento impulsado por Mohamed VI, que ha permeado en una parte importante de su poblaci?n. Espa?a parece ser consciente de todos estos cambios y otorga a Marruecos un nuevo estatus bilateral. Esto explica tanto el giro sobre el S?hara como el hecho de que el presidente ordenara recientemente a sus eurodiputados no votar en contra de la reprobaci?n al reino alau? en el Parlamento europeo. Llegar a este punto no ha salido gratis. Ahora falta saber si lo que hay delante es una l?nea recta.
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