الريــم
01-17-2023, 03:05 AM
El modelo de Gobierno de China (mano dura con pol?ticas de mercado) es popular entre algunos de los pa?ses en v?as de desarrollo, desde ?frica a Asia, pasando por América Latina. El paradigma europeo pierde pie en muchos pa?ses del Sur Global,*y ello a pesar de las ingentes cantidades de dinero que el Viejo Continente destina a ayuda al desarrollo. Y mientras el mundo se enfrenta a una gran crisis (pandemia, guerra en Ucrania y auge de los populismos), Bruselas parece haber tomado la decisi?n de rescatar del olvido diplom?tico y pol?tico a América Latina. No sobran los aliados en un mundo tan incierto.*
Si se le a?ade a ese contexto geopol?tico los recientes intentos de golpe de Estado en Per? o Brasil, o el proceso de negociaci?n pol?tica de futuro incierto en el que se encuentra inmersa Venezuela, por poner s?lo unos ejemplos, se comprende perfectamente por qué, esta vez s?, parece que la Uni?n Europea ha pisado el acelerador y va a tratar de aproximarse de verdad, y de una vez por todas, a la regi?n de América Latina y Caribe.
Ese acercamiento tomar? la forma de una super-cumbre de jefes de Estado y de Gobierno el pr?ximo mes de julio, la cumbre UE-CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe?os), una organizaci?n pol?tica de 33 pa?ses en la que destacan las principales econom?as de la regi?n (de Brasil a Chile, Argentina, Colombia o Per?), y otros controvertidos como Cuba. Un di?logo que*llevaba ocho a?os sin producirse.*
El m?ximo responsable de la pol?tica exterior europea, Josep Borrell, y el de la espa?ola, José Manuel Albares, no pierden ocasi?n para proclamar la importancia de ese encuentro, que se va a producir*durante la presidencia rotatoria del Consejo Europeo del presidente del Ejecutivo, Pedro S?nchez.*
Borrell ha prometido este lunes mimar esa “otra relaci?n trasatl?ntica”, porque los intereses europeos no acaban con Estados Unidos ni cuando empiezan el Caribe o el ecuador. “No nos podemos acercar a América Latina y Caribe*solo cuando necesitamos sus votos en Naciones Unidas”, ha dicho Borrell a los asistentes a un foro sobre el futuro de la regi?n en Madrid, organizado por Casa América.
Ha llegado mucho m?s all?: “Si queremos promover la paz y la democracia, hay que aceptar que el orden multilateral actual debe ser reformado para adaptarlo al nuevo contexto geopol?tico y la nueva distribuci?n del poder y la riqueza, que hoy es radicalmente distinta a la que en 1945 alumbr? el funcionamiento de las principales instituciones internacionales”.
Apuntaba Borrell en su discurso en v?deo desde Bruselas a una posible reforma de las instituciones de Naciones Unidas, que forma parte del runr?n diplom?tico desde que Rusia, miembro del Consejo de Seguridad, invadiera Ucrania el pasado 24 de febrero. Y pon?a a América Latina en el*centro de un pulso global contra el auge de los populismos. “La pandemia, las tensiones geopol?ticas, la guerra contra Ucrania, que no estaban en el programa, refuerzan la necesidad de dar un salto cualitativo a nuestra relaci?n, con nuevas ideas y con propuestas concretas”.
Ha recordado también las crisis a las que se ha enfrentado recientemente la regi?n: en Brasil, con un*asalto a los poderes del estado de una turba de seguidores de Jair Bolsonaro, el l?der ultraderechista que ha perdido la presidencia del pa?s en favor de Luiz In?cio Lula da Silva, que ha vuelto a meter al pa?s en la CELAC; Per?, donde el presidente, Pedro Castillo, intent? dar un autogolpe de Estado para frenar las intenciones del Congreso de deponerlo; en Bolivia, donde se ha detenido hace unas semanas al l?der opositor Luis Fernando Camacho por su presunta participaci?n en una supuesta conspiraci?n que oblig? en 2019 al entonces presidente Evo Morales a dimitir…
Las cumbres entre la UE y CELAC sol?an celebrarse cada dos o tres a?os desde que se inauguraron en 1999 las cumbres bilaterales en R?o de Janeiro.*Luego vendr?an Madrid en 2002, Guadalajara (México) en 2004, Viena en 2006… Todo se interrumpi? repentinamente en 2015. “La responsabilidad es compartida: desde la UE ha habido una cierta complacencia con una relaci?n relativamente c?moda, un socio América Latina que de alguna manera siempre est? ah?; quiz? ha habido un cierto abandono a la relaci?n con Latinoamérica y Caribe”, ha reconocido Javier Ni?o, director para las Américas del Servicio Europeo de Acci?n Exterior. “Pero en estos a?os tampoco hemos visto un impulso muy fuerte desde América Latina y Caribe, en parte por la falta de un interlocutor clave hasta que se funda la CELAC en 2013”.*
Intereses econ?micos de la UE
Los responsables de la Uni?n Europea ponen el foco en la alianza pol?tica y de defensa de la democracia, pero la realidad es que los retos en ese sentido en la zona son inacabables. El caso de Venezuela es palmario. Gracias a la mediaci?n de Dinamarca,*la oposici?n y el Gobierno de Nicol?s Maduro han empezado a dialogar, y han llegado a acuerdos que permiten mitigar la crisis humanitaria que sufre el pa?s. Pero tanto Uni?n Europea y como Espa?a tienen un problema de credibilidad en torno al proceso: primero, reconocieron el Gobierno alternativo de Juan Guaid?, hace cuatro a?os; ahora, sin des-reconocerlo,*parecen aproximarse a Nicol?s Maduro, elevando las relaciones diplom?ticas*a la categor?a de embajada, como ha sido el caso de Espa?a o Francia. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodr?guez Zapatero, realiza visitas peri?dicas a Maduro, y ha sido declarado persona non-grata por la oposici?n.
Los intereses econ?micos y geoestratégicos tienen, quiz?, un recorrido m?s claro y directo.*La Uni?n Europea pretende firmar por fin este a?o, aprovechando el impulso de la presidencia espa?ola, el acuerdo de libre comercio UE-Mercosur, uno de los mayores tratados comerciales por firmar.*Supondr?a para los pa?ses de la Uni?n un ahorro en el pago de aranceles de m?s de 4.000 millones de euros, seg?n las estimaciones oficiales. Esto es cuatro veces m?s que lo derivado del acuerdo equivalente firmado con Jap?n.
Con Jair Bolsonaro al frente de Brasil era casi imposible avanzar, entre otras cosas por sus pol?ticas impenitentes hacia el Amazonas. S?lo unas horas después de que Lula se proclamara vencedor de la segunda ronda de las presidenciales, y antes incluso de que el propio Bolsonaro reconociera su derrota,*la UE ya apret? para avanzar en el acuerdo. "Estamos listos para comprometernos con el nuevo Gobierno una vez haya tomado posesi?n para discutir la forma de avanzar con Mercosur", dijo el vicepresidente de la Comisi?n Europea y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis. Adem?s, Bruselas pisa el acelerador para aprovechar los recursos de América Latina en su*carrera por la independencia estratégica,*por ejemplo, con un acuerdo de suministro de litio, clave para la revoluci?n verde.
En 1999, cuando se produjo la primera cumbre UE con Latinoamérica y Caribe, el mundo era un lugar muy diferente al de hoy: m?s estable, m?s esperanzador. En Estados Unidos estaba Bill Clinton, un l?der con mucho poder?o pol?tico internacional.*Rusia la gobernaba un Boris Yeltsin “con el que se pod?a hablar”, ha recordado este lunes Javier Ni?o. Se cre?a que China, que tramitaba su adhesi?n a la Organizaci?n Mundial del Comercio, tender?a a democratizarse, y desde luego no era la amenaza econ?mica y pol?tica que supone a d?a de hoy. En este tiempo, el mundo ha cambiado mucho, y se enfrenta ahora a una “policrisis”, contra la que los responsables de la diplomacia europea consideran imprescindible sumar aliados.
La UE ya solo supone un 5% de la poblaci?n global, una proporci?n que no para de caer por la bomba demogr?fica de los pa?ses en v?as de desarrollo. “Por eso hay que buscar alianzas que nos permitan defender nuestro modelo de sociedad”, ha concluido Ni?o. “Y, cuando uno examina el mundo y, en particular, el Sur Global, un candidato natural y l?gico es América Latina y Caribe”.*
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/europa-busca-aliarse-latinoamerica-asalto-81272329)
Si se le a?ade a ese contexto geopol?tico los recientes intentos de golpe de Estado en Per? o Brasil, o el proceso de negociaci?n pol?tica de futuro incierto en el que se encuentra inmersa Venezuela, por poner s?lo unos ejemplos, se comprende perfectamente por qué, esta vez s?, parece que la Uni?n Europea ha pisado el acelerador y va a tratar de aproximarse de verdad, y de una vez por todas, a la regi?n de América Latina y Caribe.
Ese acercamiento tomar? la forma de una super-cumbre de jefes de Estado y de Gobierno el pr?ximo mes de julio, la cumbre UE-CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe?os), una organizaci?n pol?tica de 33 pa?ses en la que destacan las principales econom?as de la regi?n (de Brasil a Chile, Argentina, Colombia o Per?), y otros controvertidos como Cuba. Un di?logo que*llevaba ocho a?os sin producirse.*
El m?ximo responsable de la pol?tica exterior europea, Josep Borrell, y el de la espa?ola, José Manuel Albares, no pierden ocasi?n para proclamar la importancia de ese encuentro, que se va a producir*durante la presidencia rotatoria del Consejo Europeo del presidente del Ejecutivo, Pedro S?nchez.*
Borrell ha prometido este lunes mimar esa “otra relaci?n trasatl?ntica”, porque los intereses europeos no acaban con Estados Unidos ni cuando empiezan el Caribe o el ecuador. “No nos podemos acercar a América Latina y Caribe*solo cuando necesitamos sus votos en Naciones Unidas”, ha dicho Borrell a los asistentes a un foro sobre el futuro de la regi?n en Madrid, organizado por Casa América.
Ha llegado mucho m?s all?: “Si queremos promover la paz y la democracia, hay que aceptar que el orden multilateral actual debe ser reformado para adaptarlo al nuevo contexto geopol?tico y la nueva distribuci?n del poder y la riqueza, que hoy es radicalmente distinta a la que en 1945 alumbr? el funcionamiento de las principales instituciones internacionales”.
Apuntaba Borrell en su discurso en v?deo desde Bruselas a una posible reforma de las instituciones de Naciones Unidas, que forma parte del runr?n diplom?tico desde que Rusia, miembro del Consejo de Seguridad, invadiera Ucrania el pasado 24 de febrero. Y pon?a a América Latina en el*centro de un pulso global contra el auge de los populismos. “La pandemia, las tensiones geopol?ticas, la guerra contra Ucrania, que no estaban en el programa, refuerzan la necesidad de dar un salto cualitativo a nuestra relaci?n, con nuevas ideas y con propuestas concretas”.
Ha recordado también las crisis a las que se ha enfrentado recientemente la regi?n: en Brasil, con un*asalto a los poderes del estado de una turba de seguidores de Jair Bolsonaro, el l?der ultraderechista que ha perdido la presidencia del pa?s en favor de Luiz In?cio Lula da Silva, que ha vuelto a meter al pa?s en la CELAC; Per?, donde el presidente, Pedro Castillo, intent? dar un autogolpe de Estado para frenar las intenciones del Congreso de deponerlo; en Bolivia, donde se ha detenido hace unas semanas al l?der opositor Luis Fernando Camacho por su presunta participaci?n en una supuesta conspiraci?n que oblig? en 2019 al entonces presidente Evo Morales a dimitir…
Las cumbres entre la UE y CELAC sol?an celebrarse cada dos o tres a?os desde que se inauguraron en 1999 las cumbres bilaterales en R?o de Janeiro.*Luego vendr?an Madrid en 2002, Guadalajara (México) en 2004, Viena en 2006… Todo se interrumpi? repentinamente en 2015. “La responsabilidad es compartida: desde la UE ha habido una cierta complacencia con una relaci?n relativamente c?moda, un socio América Latina que de alguna manera siempre est? ah?; quiz? ha habido un cierto abandono a la relaci?n con Latinoamérica y Caribe”, ha reconocido Javier Ni?o, director para las Américas del Servicio Europeo de Acci?n Exterior. “Pero en estos a?os tampoco hemos visto un impulso muy fuerte desde América Latina y Caribe, en parte por la falta de un interlocutor clave hasta que se funda la CELAC en 2013”.*
Intereses econ?micos de la UE
Los responsables de la Uni?n Europea ponen el foco en la alianza pol?tica y de defensa de la democracia, pero la realidad es que los retos en ese sentido en la zona son inacabables. El caso de Venezuela es palmario. Gracias a la mediaci?n de Dinamarca,*la oposici?n y el Gobierno de Nicol?s Maduro han empezado a dialogar, y han llegado a acuerdos que permiten mitigar la crisis humanitaria que sufre el pa?s. Pero tanto Uni?n Europea y como Espa?a tienen un problema de credibilidad en torno al proceso: primero, reconocieron el Gobierno alternativo de Juan Guaid?, hace cuatro a?os; ahora, sin des-reconocerlo,*parecen aproximarse a Nicol?s Maduro, elevando las relaciones diplom?ticas*a la categor?a de embajada, como ha sido el caso de Espa?a o Francia. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodr?guez Zapatero, realiza visitas peri?dicas a Maduro, y ha sido declarado persona non-grata por la oposici?n.
Los intereses econ?micos y geoestratégicos tienen, quiz?, un recorrido m?s claro y directo.*La Uni?n Europea pretende firmar por fin este a?o, aprovechando el impulso de la presidencia espa?ola, el acuerdo de libre comercio UE-Mercosur, uno de los mayores tratados comerciales por firmar.*Supondr?a para los pa?ses de la Uni?n un ahorro en el pago de aranceles de m?s de 4.000 millones de euros, seg?n las estimaciones oficiales. Esto es cuatro veces m?s que lo derivado del acuerdo equivalente firmado con Jap?n.
Con Jair Bolsonaro al frente de Brasil era casi imposible avanzar, entre otras cosas por sus pol?ticas impenitentes hacia el Amazonas. S?lo unas horas después de que Lula se proclamara vencedor de la segunda ronda de las presidenciales, y antes incluso de que el propio Bolsonaro reconociera su derrota,*la UE ya apret? para avanzar en el acuerdo. "Estamos listos para comprometernos con el nuevo Gobierno una vez haya tomado posesi?n para discutir la forma de avanzar con Mercosur", dijo el vicepresidente de la Comisi?n Europea y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis. Adem?s, Bruselas pisa el acelerador para aprovechar los recursos de América Latina en su*carrera por la independencia estratégica,*por ejemplo, con un acuerdo de suministro de litio, clave para la revoluci?n verde.
En 1999, cuando se produjo la primera cumbre UE con Latinoamérica y Caribe, el mundo era un lugar muy diferente al de hoy: m?s estable, m?s esperanzador. En Estados Unidos estaba Bill Clinton, un l?der con mucho poder?o pol?tico internacional.*Rusia la gobernaba un Boris Yeltsin “con el que se pod?a hablar”, ha recordado este lunes Javier Ni?o. Se cre?a que China, que tramitaba su adhesi?n a la Organizaci?n Mundial del Comercio, tender?a a democratizarse, y desde luego no era la amenaza econ?mica y pol?tica que supone a d?a de hoy. En este tiempo, el mundo ha cambiado mucho, y se enfrenta ahora a una “policrisis”, contra la que los responsables de la diplomacia europea consideran imprescindible sumar aliados.
La UE ya solo supone un 5% de la poblaci?n global, una proporci?n que no para de caer por la bomba demogr?fica de los pa?ses en v?as de desarrollo. “Por eso hay que buscar alianzas que nos permitan defender nuestro modelo de sociedad”, ha concluido Ni?o. “Y, cuando uno examina el mundo y, en particular, el Sur Global, un candidato natural y l?gico es América Latina y Caribe”.*
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